Posts Tagged ‘Francisco Goldman’

El dinero sin control enferma la relación prensa-Estado y daña la democracia, dicen observadores

miércoles, diciembre 27th, 2017

El tema de la publicidad oficial está, otra vez, sobre la mesa. Desde años, algunos medios nacionales han dado cobertura a la práctica discrecional y parcial que se ha repetido en los gobiernos federales y estatales. El dispendio en ese rubro crece y los lineamientos a la publicidad oficial que rigen a todas las administraciones públicas –a cargo de la Segob y que podrían tirar buena parte de los anuncios oficiales por los que se pagan millones cada día– son ignorados.

El problema, insisten periodistas, expertos y activistas en defensa de la libertad de expresión, no es la publicidad oficial per se, sino su uso como propaganda política con cargo al erario público y que se vuelve autoritario con la prensa. El reportaje del diario The New York Times, señalaron, impulsó otra vez el debate sobre el uso de esos millones de los mexicanos que son entregados a privados, y el Gobierno mexicano, hasta el momento, permanece mudo.

“La Secretaría de Gobernación mantiene el silencio porque sabe que es una discusión perdida. Dicha dependencia ya no debería controlar los recursos de la publicidad gubernamental ni mucho menos vigilar los contenidos en medios impresos y electrónicos. Es indispensable hacer una reforma de las atribuciones gubernamentales en este ámbito”, planteó Gabriel Sosa Plata, experto y académico.

Ciudad de México, 27 de diciembre (SinEmbargo).– En septiembre de 2016, la Secretaría de Gobernación (Segob) difundía un comercial que era acompañado por un logotipo con las iniciales del nombre de su titular Miguel Ángel Osorio Chong, y que giraba en torno a su imagen y sus labores públicas.

Mediante una solicitud de información, SinEmbargo pidió a la Segob el monto y el objetivo de la campaña que se desplegó. La respuesta oficial fue que esa campaña no había significado algún gasto extra, ya que formó parte del plan anual de comunicación social.

El video podría ser uno más de los tantos en los que se resalta la imagen de un funcionario con dinero público, pero en este caso la Segob es la dependencia a la que le corresponde formular, regular y conducir la política de comunicación social del Gobierno federal y las relaciones con los medios masivos de información, así como orientar, autorizar, coordinar, supervisar y evaluar los programas de comunicación social de las dependencias del Sector Público Federal.

Además, es también la institución que debe autorizar los recursos destinados a comunicación social.

Hoy el tema del uso de los millones de pesos empleados en publicidad por parte de los gobiernos está, de nuevo, en la mesa luego de la publicación del reportaje “Using Billions in Government Cash, Mexico Controls News Media” en The New York Times. La reacción inmediata vino de los medios ahí señalados, pero hasta el momento, la Segob no se ha pronunciado al respecto.

Para periodistas, académicos y activistas, el trabajo periodístico exhibió a una clase política mexicana que no ha entendido muy bien la manera en cómo funciona la democracia y evidencia un retroceso político que tiende al autoritarismo.

Aunque por otro lado, señalaron, luce una victoria que beneficia a esa misma clase, pues puso de relieve que hay un Estado que ha logrado mantener quieta a la figura que debería cuestionarle todos sus movimientos: los medios de comunicación.

La libertad de expresión, apuntaron, es la más afectada; las opciones de información se reducen y la elección presidencial del siguiente año tampoco da mucha esperanza de encontrar una solución al problema, comentaron.

Una parte de esas esperanza en el corto plazo, recordaron, está en la orden que dictó la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) al Congreso de la Unión para elaborar una ley que regule la publicidad.

La relación prensa-gobierno en México es una muestra de autoritarismo, dicen especialistas en medios de comunicación. Foto: Cuartoscuro

GOBIERNO Y PRENSA VISTOS DESDE FUERA

Para el periodista Francisco Goldman, un veterano con amplia experiencia y muy respetado en el medio –que publica tanto en The New Yorker como en The New York Times–, esa relación Estado-medios de comunicación resulta impresionante y planteó que es una muestra de que tanto en México, como a nivel mundial, se observe una nueva ola de autoritarismo.

“Los gobiernos no tienen mucho respeto por lo que es la democracia realmente, están haciendo de la prensa el enemigo número uno y eso sucede en los Estados Unidos, en México, China, Cuba. Todos los poderes están en contra de la libertad de prensa. Tienen mucho miedo y han encontrado las maneras de silenciarla. Pero la esperanza es que la presa sigue batallando. Hay gente con mucho valor en todo el mundo que sabe la importancia de una prensa que puede contestar al poder y vamos a estar viviendo esta batalla que podrá definir el futuro, no solo de México, sino de todos los países”, dijo en entrevista con SinEmbargo.

Con el periodista coincidió el académico y experto en telecomunicaciones Gabriel Sosa Plata.

“México queda como un país cuyo gobierno está poco comprometido con la democracia y los derechos humanos […]. A quienes toman la decisión de asignar estos recursos, por supuesto no les importan dichos derechos. Su lógica es coyuntural y de alcance reducido. A la larga es dinero que en muchos casos se tira a la basura porque ahora hay otros medios, como Internet, que contrastan la ficticia construcción de una imagen que se aprecia en medios como los que menciona el diario estadounidense”, dijo en entrevista con este diario digital.

Pero esta ha sido una práctica que se ha ido perfeccionando.

Como lo menciona Goldman, este tipo de campañas se han visto por años y años, “está el caso de Ricardo Anaya o el odio que tienen contra Andrés Manuel López Obrador. Se puede estar en contra de él, pero compararlo con Hugo Chávez es incluso ignorante; entonces, ¿por qué lo hacen? Esa es una campaña propagandista de los medios completamente corrompidos por el dinero […]. La Jornada dejó de ser un referente poco a poco. No me di cuenta que dejé de leerlo y quizá sea esa la razón, que ya no encontré cosas fuertes. La televisión, no la veo. Entonces las opciones de información comienzan a reducirse. No sé cuál es la solución. ¿Cómo le haces en un país en el que no hay Fiscal General, en el que la prensa no tiene protección?”.

Al respecto, Leopoldo Maldonado Gutiérrez, oficial del Programa de Protección y Defensa de la organización Artículo 19, consideró que el dinero pagado a medios de comunicación revela un proyecto de gobernabilidad autoritaria que persiste en México y da cuenta de un proceso regresivo en términos de libertades democráticas. Y ahora, el reflector internacional muestra que el país tiene una diplomacia muy ágil y astuta que vende a un país que no es, en donde nadie vive.

“Ahí está la Ley de Seguridad Interior que también volteó reflectores y muestra este sistema de gobernabilidad autoritaria que pretende arraigarse y quedarse por muchos años. En materia de libertad de expresión, se cierra el círculo de las diferentes violencias que vive la prensa: la violencia física, el uso de la publicidad oficial para censurar a los medios de comunicación (violencia económica)”, comentó Maldonado.

EL SILENCIO DE SEGOB

Aunque en el quehacer político la tarea de legislar la publicidad oficial ha recaído en el Congreso, la Secretaría de Gobernación no ha respetado los lineamientos que dictan lo que debe ser la comunicación social, ya que eso no es el problema, sino una herramienta informativa del Estado con la población.

De acuerdo con ese documento, “es facultad del Secretario de Gobernación conducir a la política de comunicación social del Gobierno federal y las relaciones con los medios masivos de información”.

De acuerdo con las Cuentas Públicas anuales del gobierno federal, los gastos de publicidad y comunicación social aumentaron 80 por ciento de 2013 a 2016 y en total se han gastado en ese rubro 25 mil 649 millones 236 mil 567 pesos, sin contar 2017.

Tan solo en 2016, el gasto de comunicación social ascendió a 8 mil 589 millones 734 mil 606 pesos. Del total del dinero, fueron ocho medios los que acapararon el 37 por ciento, es decir, 3 mil 187 millones 427 mil 841 pesos.

“La Secretaría de Gobernación mantiene el silencio porque sabe que es una discusión perdida. Dicha dependencia ya no debería controlar los recursos de la publicidad gubernamental ni mucho menos vigilar los contenidos en medios impresos y electrónicos. Es indispensable hacer una reforma de las atribuciones gubernamentales en este ámbito, además de crear al órgano ciudadanizado que supervise y haga valer con criterios democráticos este gasto”, comentó Sosa Plata.

Publicidad oficial: propaganda y sometimiento de medios en México. Foto: Cuartoscuro

Según la misma Segob, una campaña de comunicación social es aquella en la que se difunden el quehacer gubernamental, acciones o logros del Gobierno o estimulan acciones de la ciudadanía para acceder a algún beneficio o servicio público y los medios deben ser seleccionados conforme a criterios objetivos, por lo que deben tomar en consideración las características, tarifas, destinatarios, cobertura y especialidades que cada uno presenta.

Además se sostiene que las erogaciones de dichos recursos y las contrataciones respectivas “deberán sujetarse a los criterios de austeridad y racionalidad del gasto contenidas en la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria y el Presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2017”.

Otra de las acciones que están prohibidas son los pagos por concepto de notas, entrevistas o imágenes con fines periodísticos.

Y se contempla que en caso de incremento de recursos al Programa anual, será necesario presentar una justificación detallada de la causa. En consecuencia, la Segob tendría que tener información de los últimos cinco años en que se ha registrado un sobrecosto.

“El silencio del Gobierno federal, da cuenta de que es un tema incómodo y que ha sido una herramienta sumamente útil para mantener el poder y mantener una narrativa totalmente plegada a los intereses de los gobernantes en turno. Ya merece una respuesta, es urgente una respuesta en este contexto actual. El Congreso se tiene que abocar a legislar y evidentemente se requiere de la participación del gobierno federal en esta discusión para que aporte elementos técnicos y políticos que permitan avanzar. Sobre todo de voluntad política, para que esto avance y luego, se revierta”, concluyó Maldonado Gutiérrez.

Francisco Goldman presenta “Marinero raso”, con traducción de Fernanda Melchor

sábado, septiembre 2nd, 2017

Fue una novela que escribió cuando apenas empezaba a escribir, fruto de una historia que leyó en el diario y que tenía que ver con un barco abandonado, que termina por quedarse atracada en un puerto de Brooklyn.

Ciudad de México, 2 de septiembre (SinEmbargo).-Es una reedición muy inesperada y la traducción de Fernanda Melchor ha sido una grata sorpresa. La edición fue una iniciativa de Martín Solares, ex director de Océano y tanto él como el autor de Marinero raso, Francisco Goldman, jamás estuvieron de acuerdo con la traducción de Anagrama.

“La mayoría de los personajes en esta novela es centroamericana. El inglés es como un coro de voces atrapada en un barco. Creo que lo que más llama la atención es eso y en Anagrama teníamos a un montón de gente hablando igual, como si hubieran nacido en Madrid. Una de las cosas que me molestó es haber traducido mal “white boy”, que tiene una carga racista pero que lo usé diciendo que había muchos chavos fresa en una cantina y el traductor lo usó poniendo “collar blanco”, que son en realidad trabajadores de oficina”, cuenta Francisco Goldman, dándose un espacio para poder hablar de esta novela, ahora traducida por Fernanda Melchor y vuelta a presentar a cargo de Océano México.

“Para mí lo que pasa es lo que pasa con un libro en inglés, las traducciones están fuera de mi control, pero ahora con Fernanda Melchor, que además de traductora es una estilista, me encantó. No la he leído toda, porque en estos días estoy un poco loco ahora, en el último mes de la novela, pero me tiene muy contento”, dice Goldman.

–Por empezar es una novela de aventuras…

–Es una novela de aventuras y de anti-aventuras. Yo me topé con esta historia. En 1981, yo era súper jovencito, recién salido de la universidad, cuando había vendido mi primer cuento corto, que me abrió la puerta a una carrera incipiente. Leí en el diario que habían encontrado un barco fantasma en Brooklyn, con la mayor parte de la tripulación esclavizada. Era un puerto terrible, con miles de escombros, colapsados, ya no existe, ya está todo renovado. La memoria de haber explorado ese paisaje que ya no está. Ahí estaban todas las pandillas que controlaban toda la venta de crack y había unos legendarios gángster, cada vez que intentaban salir del barco, los tripulantes eran asaltados. Estuvieron seis meses allí. El dueño era un criminal.

–Los dueños pueden esconder tus identidades

–Sí, bajo eso que se llama “bandera de conveniencia”. El dueño quería vender el barco, no pagarle a la tripulación e huir. Como no pudo vender el barco, los dejó atrapados en la nave. Yo me enamoré de todo eso. Me obsesionó el tema y siempre supe que lo iba a convertir en una novela. Entramos en el barco, fui con unos amigos, fue una de las cosas más increíbles que haya visto en mi vida. Subimos al barco, encontramos al dueño, encontramos a los tripulantes y logré hablar con ellos. Todos eran jovencitos, había un mesero nicaragüense, que era viejito y me contó toda su historia.

Francisco Goldman termina su nueva novela. Foto: SinEmbargo

­–Encontraste también a Esteban…

–El primer borrador que hice en donde imité a un viejo como Conrad, tratando de contar lo que había visto en el barco. Obviamente no funcionó. Seguí trabajando mi primera novela, publiqué cuentos en Squire e hice mis primeros artículos para esa revista y encontré a Esteban en un soldado nicaragüense decepcionado por la Revolución Sandinista. Varias cosas que yo vi en esa Guerra se metieron en mi memoria y también están en Marinero raso.

–También hay muchos sentimientos en Esteban que corresponden contigo: “encontraré a una mujer que me ame, etcétera”.

–Es muy importante lo que dices, porque todas esas cosas se unieron. Un barco que nunca se mueve, la decepción, sentirse estancado, las cosas personales, un libro que es la trama, que es la metáfora dominante, se une con los sentimientos personales, con lo que yo también quería contar. Llegué al año 1995, me había separado de una chava con la que había estado siete años, llegué a México, no sabía que iba a pasar con mi vida, me sentía estancado y se unió con la historia.

–También hay muchas historias de migración

–Siempre pensé eso, también. No podían ser más explotados esos indocumentados. Esta novela tiene que funcionar a todos los niveles metafóricos y el de la migración es uno de ellos.

–¿Cómo ves Centroamérica hoy?

–Son mi gente. Estoy escribiendo mucho sobre eso ahora en mi próxima novela. Centroamérica me formó como escritor. Uno no puede vivir Guatemala en los ’80 y luego dejarlo atrás. El racismo que viene de la Conquista y cómo arrasaron a Centroamérica en los ’80, una corrupción increíble; cuando Guatemala quiso salir de eso, cuando Nicaragua quiso salir de eso, los Estados Unidos las han aplastado. Para mí es una sociedad de pos-guerra, destruida por Bush y Reagan…lo único que ha ayudado en Guatemala es la migración. Todo es por el dinero que han mandado los migrantes a su país.

–¿Qué me puedes decir más de Marinero raso?

–La historia con Álvaro Mutis. Tuve la gran suerte de que a él le gustara mucho mi primera novela y la presentó en México. Logré ser su amigo, lo entrevisté para una revista y me había firmado un libro muy bonito. Una noche yo estaba en un restaurante, cenando solo y leyendo el libro de Mutis, al lado había un chavo, en una cena con una mujer, que no le está saliendo bien. ¿Me lo prestas?, me lo pidió. Él me dijo si conocía a Mutis y después me contó que su primo hermano lo tenía a Mutis endiosado. Y ahí hicimos el cambio. Yo necesitaba viajar en un carguero y él quería conocer a Mutis. Así que un día viaje en un carguero de Veracruz a Europa. Fueron como tres semanas. Eso cambió toda mi novela, convivir con los marineros mexicanos, esa experiencia fue definitiva y se lo debo al maestro Mutis.

[youtube NW5G2XMAwic]

Los mexicanos pudieron evitar el desastre con EPN, pero no oyeron a Atenco, escribe Goldman en NYT

jueves, junio 29th, 2017

Los mexicanos, y tampoco los extranjeros, supieron escuchar “la advertencia de Atenco”, dice Francisco Goldman, periodista y novelista estadounidense, en un artículo publicado este jueves en las páginas de opinión de The New York Times.

El autor rememora el 11 de mayo de 2011, cuando Enrique Peña Nieto, entonces candidato del PRI a la Presidencia, fue echado de la Universidad Iberoamericana por sus alumnos, en reclamo de justicia para las víctimas de San Salvador Atenco, luego de una represión contra los pobladores, ordenada por Peña, cuando fungía como Gobernador del Estado de México.

Ni México ni el mundo escucharon, destaca Goldman, y hoy la Presidencia de Peña está marcada por actos expuestos de corrupción, incompetencia y negligencia; el país ha sido golpeado por crímenes impactantes que siguen sin resolverse, y “el líder del nuevo PRI” –como lo llama– ha sido calificado por el propio NYT como “un político corrupto, fuera de contacto, con calificaciones abismales de aprobación’”.

Ciudad de México, 29 de junio (SinEmbargo).– ¿Puede el crimen organizado y el Gobierno, a veces, ser considerados parte de lo mismo? Para muchos mexicanos exasperados y ahora asustados, la línea entre ambos se ha vuelto hoy cada vez más borrosa con la Presidencia de Enrique Peña Nieto, pero hace cinco años fueron advertidos y, sin embargo, no supieron escuchar, plantea el periodista y escritor Francisco Goldman en un artículo publicado este miércoles en The New York Times.

El 11 de mayo de 2011, Peña Nieto, entonces candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), a la Presidencia de la República fue echado de la Universidad Iberoamericana por los alumnos, con reclamos y gritos de justicia para las víctimas de Atenco; muchos mexicanos, e incluso en el extranjero, deben estar arrepentidos de no haber escuchado esa advertencia, expone el periodista y novelista.

La denuncia de los jóvenes en la Ibero, durante la campaña. Foto: Cuartoscuro

¿Por qué? Porque en ese evento en la Ibero, una universidad jesuita de elite, jamás se pensó que quien se decía representante del “nuevo PRI” fuera cuestionado, mucho menos arrinconado, por el tema de la violenta represión de su Gobierno en el Estado de México contra pobladores de San Salvador Atenco, que dejó el asesinato de dos personas, la detención de 207 –entre ellas 10 menores de edad–, 146 detenciones arbitrarias, la expulsión de cinco extranjeros y quejas contra elementos policiacos por presuntas vejaciones y violaciones sexuales a 26 mujeres.

Esa misma noche los portavoces de Peña Nieto afirmaron en la televisión que los manifestantes no eran estudiantes sino agitadores profesionales que trabajaban para el candidato de izquierda, Andrés Manuel López Obrador, recuerda Goldman en el artículo titulado “La advertencia de Atenco”.

En respuesta, un estudiante hizo un video en el que 131 estudiantes de la Ibero mostraron sus identificaciones universitarias y dijeron que habían participado con toda libertad en la protesta contra Peña. El video se volvió viral, y el movimiento se extendió rápidamente a las universidades de todo México, con la etiqueta #YoSoy132.

[youtube MdE6aaI0SN4]

Al final, destaca el también colaborador de la prestigiada revista New Yorker, el movimiento no logró persuadir a México y al mundo que una Presidencia con Peña “sería un desastre para el país y su vulnerable democracia”, pero la polémica quedó sembrada.

“Desde entonces, la Presidencia del señor Peña Nieto ha estado marcada por actos expuestos de corrupción, incompetencia y negligencia; el país ha sido golpeado por crímenes impactantes que siguen sin resolverse, incluyendo la desaparición de 43 estudiantes universitarios en Iguala [Guerrero], y el asesinato impune de un periodista tras otro. El líder del nuevo PRI, de acuerdo con un artículo publicado recientemente en The New York Times, ha sido ‘refundido como un político corrupto, fuera de contacto, con calificaciones abismales de aprobación’”, afirma el autor de “El Circuito Interior: Una Crónica de la Ciudad de México”, su más reciente libro.

Peña Nieto, plantea el autor, “prometió elevar a México a su justo lugar en la escena mundial” y ofrecer “esperanza de que la democracia de la nación llegue a su propia cuenta”. En el centro de esa promesa, destaca, se propusieron reformas somo privatizar la industria petrolera nacional, por ejemplo, y abrir la industria de las telecomunicaciones a la competencia. “En gran parte de los medios de comunicación estadounidenses, el entusiasmo por esas reformas se tradujo en entusiasmo por Peña Nieto y el nuevo PRI. En la portada de la revista Time, Peña Nieto fue aclamado como el ‘Salvador de México’”.

Ni escuchamos a los muchachos, ni a los ejidatarios. Foto: Cuartoscuro

“Una pregunta que me persigue y que me parece pertinente plantear no sólo con respecto a México, sino en general, es: ¿por qué tales reformas pro-empresariales son interpretadas por muchos como valores democráticos modernos y prometedores, y basados en el respeto del Estado de derecho? ¿Por qué, en cambio, el historial de falta de respeto a los derechos humanos, la seguridad personal y la dignidad de un candidato, especialmente en lo que respecta a las mujeres, no se interpreta como una advertencia de valores retrógrados y antidemocráticos y de desprecio por el Estado de derecho, y también puede ser “malo para el negocio”?, cuestiona el autor.

Los estudiantes de la Ibero, destaca Francisco Goldman, no necesitaban pronósticos de inversionistas para entender lo que Atenco reveló sobre el nuevo PRI. “Ahora, como se informó ampliamente en septiembre pasado, la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha tomado los casos de 11 mujeres que fueron torturadas sexualmente y violadas por la policía después de su detención en Atenco; el tribunal está investigando la cadena de mando del crimen hasta el señor Peña Nieto”.

Además, plantea, recientemente se ha informado de que el Gobierno de México compró el software espía Pegasus para móviles, autorizado únicamente por su fabricante para infiltrarse en organizaciones terroristas y criminales, que se ha utilizado contra periodistas, activistas de derechos humanos y abogados, incluso contra un hombre que redactó la legislación anticorrupción. Luis Fernando García, jefe de un grupo de derechos digitales, fue citado en el artículo del Times diciendo que “el hecho de que el gobierno esté utilizando la vigilancia de alta tecnología contra defensores de derechos humanos y periodistas que denuncian la corrupción, en lugar de usarlo contra los responsables de esos abusos” dice mucho sobre para quién trabaja el gobierno”.

Y Goldman insiste: “¿Para quién trabaja el gobierno?”.

En el caso de los 43 estudiantes desaparecidos, afirma, el Gobierno federal se esforzó por encubrir la colusión entre una pandilla de narcotraficantes y el Estado, incluso desestimando lo que un panel internacional de expertos investigó sobre el crimen, y presentó como una evidencia falsa, filmada incluso por el principal investigador del caso por parte del Gobierno mexicano.

La última prueba, refiere, es el asesinato de Javier Valdez, uno de los periodistas más admirados de México. “Esta pregunta también me persigue: ¿Pegaso podría ser utilizado para rastrear a los periodistas hasta los lugares donde son asesinados? Y, si es así, ¿por quién, exactamente?”.

Ahora, resume, aunque Peña Nieto niega que el Gobierno mexicano espié a ciudadanos, y ha preguntado una investigación a fondo del asunto, nadie le cree.

¿Cuánta confianza pueden tener en esa investigación los padres de los 43, cuando han denunciado que eran blancos del spyeware y nadie hizo nada?, cuestiona Goldman. ¿Quién va a tener confianza? “Pregunte a las mujeres de Atenco”, remata.

Anuncian convocatoria para el Premio Aura Estrada

sábado, junio 24th, 2017

Últimos días para aplicar al Premio Internacional de Literatura Aura Estrada, hecho en conmemoración de la escritora fallecida en 2007, a la edad de 30 años. Su esposo, el escritor Francisco Goldman es el gran motor de este galardón que recuerda a la mujer con la que estuvo casado dos años.

Ciudad de México, 24 de junio (SinEmbargo).- El próximo 2 de julio cerrará la convocatoria del Premio Internacional de Literatura Aura Estrada, otorgado de manera bianual a escritoras de hasta 35 años de edad, que escriban narrativa en español y residentes en México, Estados Unidos o Canadá.

Dicho premio consta de un estipendio de 10 mil dólares, la oportunidad de publicar su trabajo en la revista Granta en español y residencias en Estados Unidos, Italia y México. La premiación se realizará en el marco de la 37 Feria Internacional del Libro de Oaxaca, en noviembre de 2017.

Invitamos a todas las escritoras interesadas a enviar sus trabajos antes del día 2 de julio y aprovechar la oportunidad de dar a conocer su trabajo en esta plataforma de reconocimiento internacional.

No hay de qué hablar, quiero decir escribir. Foto: Facebook

PREGUNTAS FRECUENTES

–¿En qué consiste el Premio Internacional de Literatura Aura Estrada?

–Consiste en un estipendio de 10 mil dólares, más la oportunidad de alojarse durante periodos de hasta dos meses en cada una de las siguientes residencias para escritores: Ucross, en Wyoming, Ledig House, en Nueva York, Santa Maddalena en la Toscana, Italia, y ExHacienda Guadalupe, en Oaxaca, México. Además, la revista Granta en español publicará una colaboración de la ganadora.

–¿Quién puede aplicar a la convocatoria?

–Podrán aplicar todas las narradoras que tengan hasta 35 años de edad al momento de la publicación de la convocatoria (19 de noviembre de 2016), que escriban en español y radiquen en México, Estado Unidos o Canadá.

–¿Con qué material se debe aplicar a la convocatoria?

–Se deberá enviar una selección de entre 25 y 40 páginas de sus textos inéditos, los cuales deberán formar parte del proyecto a desarrollar en caso de resultar ganadora. Asimismo, deberá enviarse una breve descripción, de no más de 300 palabras, sobre el proyecto literario que desea desarrollar en caso de obtener este premio.

–Asimismo, las escritoras (con su seudónimo) deberán anexar un apartado que contenga los siguientes documentos:

–Copia de su acta de nacimiento.  Copia de un comprobante de domicilio reciente, que demuestre su residencia en México, Estados Unidos o Canadá. Un folio con los siguientes datos que permitan su localización: nombre completo, domicilio, teléfono, celular y una dirección de correo electrónico.

–¿Cuáles son los géneros literarios que participan?

–Las participantes podrán enviar fragmentos de novelas en proceso, cuentos, ensayos, crónicas o cualquiera de las manifestaciones de la prosa literaria, escritas en español. No se aceptarán proyectos de literatura infantil ni teatro.

–¿Qué formato debe tener el proyecto?

–Toda la documentación deberá enviarse en formato .doc. (archivo de Word), fuente Arial o Times New Roman a 12 puntos, margen normal y con interlineado a 1.5.

–¿Puedo aplicar con más de un proyecto?

–No, sólo se aceptará un proyecto por aspirante.

–¿Puedo aplicar con un proyecto previamente publicado?

–No. Este premio se dirige exclusivamente a proyectos inéditos.

–¿Cómo envío mi aplicación?

–La selección de textos deberá enviarse al correo: [email protected]. La entrega de los textos y la documentación requerida deberá hacerse únicamente por este medio.

–¿Cuál es la fecha límite para aplicar?

–La fecha límite para recibir los proyectos es domingo 2 de julio de 2017.

–¿Cómo y cuándo se anunciará a la ganadora?

–Se otorgará el premio en el marco de la 37 Feria Internacional del Libro de Oaxaca (noviembre 2017), previo al inicio de la Cátedra Aura Estrada.

The Economist: “Si la ira crece, el Gobierno no tendrá opción y deberá explicar por qué espió”

jueves, junio 22nd, 2017

El escándalo por el espionaje del que fueron víctimas periodistas y activistas sigue bajo la lupa internacional. La organizaciones defensoras de la libertad de expresión exigieron una investigación “expedita” y la ONU consideró “grave” el hecho. A su vez, el semanario The Economist hizo hincapié en “si la ira crece, [el Gobierno de México] puede no tener más opción” y tendrá que explicar por qué se espía. Hizo hincapié en que “el espionaje de los periodistas victimiza a una profesión ya bajo el asalto de bandas criminales”.

Mientras, el periodista Francisco Goldman resaltó, en un artículo escrito para The New York Times, las acusaciones de violaciones a los derechos humanos que ya pesaban sobre Enrique Peña Nieto antes de ser Presidente. Y cuestionó: “¿Acaso en México el crimen organizado y el gobierno son uno mismo, o por lo menos en muchos casos?”

Ciudad de México, 22 de junio (SinEmbargo).– La condenas por el espionaje del que fueron blanco periodistas y activistas de México crece, ahora nivel internacional. Dos de los medios más importantes del mundo han retomado de distintas maneras el caso, pero siempre cuestionando a la administración de Enrique Peña Nieto.

El Gobierno federal ha intentado desmarcarse en los últimos días de la información dada a conocer el lunes por el diario estadounidense The New York Times. Apenas ayer, Miguel Ángel Osorio Chong, titular de la Secretaría de Gobernación, rechazó “que se esté haciendo algún tipo de espionaje o investigación respecto a periodistas, a algún defensor de los derechos humanos o de ONGs”. Y hoy, el mismo Peña Nieto aseguró que son falsas las acusaciones: “Resulta muy fácil señalar y apuntar, convocar para que se señale al Gobierno como una entidad que espía, nada más falso que eso. Ninguna de las personas que se sienta agravada puede demostrar que su vida haya sido lastimada por supuestas intervenciones”, dijo.

Aseguró que ya solicitó a la Procuraduría General de la República (PGR) que realice una investigación, pero de inmediato tuvo una respuesta crítica de las organizaciones civiles.

El caso pone en entredicho al Gobierno federal. Pegasus, el sistema de espionaje usado y creado por NSO Group, es vendido únicamente a los gobiernos para que enfrenten a los delincuentes y terroristas. Organizaciones civiles a las que pertenecen varios de los blancos del espionaje acusaron al Presidente de exonerar al Estado de la culpa y de amenazar a las víctimas, periodistas y defensores de derechos humanos.

“Al condenar al fracaso las investigaciones, al normalizar el impacto de los intentos de espionaje en la vida de las personas, al restar importancia a las intervenciones y, sobre todo, al proferir una preocupante amenaza a las y los denunciantes, el Presidente Peña Nieto ha mostrado que no será capaz de investigarse a sí mismo”, dijeron las organizaciones en un comunicado conjunto que dio respuesta a los comentarios de Peña Nieto.

Hoy, el semanario The Economist aseguró que si la ira crece en México, el Gobierno federal se verá forzado a dar explicaciones sobre la vigilancia ilegal contra personas “respetuosas de la ley”. A su vez, el periodista Francisco Goldman resaltó las acusaciones de violaciones a los derechos humanos que ya pesaban sobre Enrique Peña Nieto antes de ser Presidente de la República.

Francisco Goldman, un reconocido periodista y novelista estadounidense, escribió un amplio artículo dedicado al tema bajo el título de “Peña Nieto y Pagasus”, en el resaltó el pasado del mexiquense y las acusaciones que ya pesaban sobre él antes de ser Presidente de la República.

“[…] La pregunta que me persigue y que me parece pertinente plantear no solo con respecto a México, sino en general, es: ¿por qué las reformas proempresariales —como la privatización del petróleo o la promulgación de lo que resultó ser una modesta reforma a la industria de las telecomunicaciones— son interpretadas por tantas personas como algo que promete valores democráticos modernos y el respeto por el Estado de derecho? ¿Por qué, en contraste, el historial de un candidato que había violado los derechos humanos así como la seguridad y la dignidad individuales, sobre todo en cuanto a las mujeres, no se interpreta como una advertencia de valores antidemocráticos y un incumplimiento del Estado de derecho?”, escribió.

Y agregó: “Desde luego, #YoSoy132 gritó esa advertencia al mundo. No necesitaron el programa espía Pegasus para ver la relevancia de Atenco. Ahora, este se ha convertido en un tema de interés para la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que ha tomado el caso de 11 de las mujeres que fueron torturadas sexualmente y violadas por la policía después de sus arrestos en Atenco y ha ordenado una investigación en torno a los crímenes en la cadena de mando hasta llegar a los principales responsables, es decir, el Presidente Enrique Peña Nieto”.

Consideró que las revelaciones acerca de que el gobierno utiliza el programa espía Pegasus para infiltrar celulares “no fueron sorprendentes”, pues señaló que “en uno de los lugares más peligrosos del mundo […] tanto periodistas mexicanos como extranjeros suponen desde hace tiempo que sus comunicaciones en celulares, correo electrónico y redes sociales no son seguras”.

En su artículo de opinión, Goldman puso especial énfasis en la frase escrita en el texto de The New York Times hecha por Luis Fernando García, Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D), quien dijo que: “El hecho de que el gobierno esté usando vigilancia de alta tecnología en contra de defensores de derechos humanos y periodistas que exponen la corrupción, en lugar de contra los responsables de estos abusos, dice mucho de para quién trabaja el gobierno”.

Goldman cuestionó: “¿Para quién trabaja el gobierno? En el caso de los 43 estudiantes desaparecidos, México ha sido testigo de todo lo que el gobierno está dispuesto a hacer para cubrir la relación entre un cartel de la droga y el Estado, incluso al ignorar evidencia en video, que fue presentada al mundo por el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes, de su principal investigador plantando evidencia falsa”.

“¿Acaso en México el crimen organizado y el gobierno son uno mismo, o por lo menos en muchos casos? ¿Cómo puede ser que en México, como dijo el periodista John Gibler hace poco, ‘sea infinitamente más peligroso informar sobre un asesinato que cometerlo’? La prueba más reciente de eso fue el asesinato de Javier Valdez, uno de los periodistas más admirados de México, mentor y amigo de otros más jóvenes como Gibler. Esa es otra pregunta que me acecha, ¿acaso pudieron utilizar Pegasus para rastrear a Valdez hasta el lugar donde lo asesinaron? ¿Podría utilizarse de la misma manera para acabar con otro periodista? Y, de ser así, ¿quién lo haría, exactamente, y quién lo investigaría?”.

ADEMÁS

A su vez, la revista británica The Economist destacó que las revelaciones de espionaje no sorprenden a los mexicanos, quienes “no confían en su gobierno”.

“Los mexicanos no confían en su gobierno. Sólo el 29 por ciento tiene algo de confianza en la institución, de acuerdo con Latinobarómetro, una firma de encuestas”, indicó en un artículo publicado hoy.

Recalcó que “nadie sabe quién autorizó la vigilancia de periodistas y activistas. El Ejército mexicano, la oficina del Procurador General y los servicios de inteligencia han comprado el software. Para fisgonear legalmente, cualquier agencia gubernamental necesitaría órdenes de un tribunal. No hay evidencia de que se hayan emitido”.

Recordó que el gobierno negó espiar a los denunciantes y que señaló que el trabajo de The New York Times no apuntó a ningún responsable en concreto por la vigilancia ilegal. Pero aclaró que “esto no disminuirá la indignación” y que “el espionaje de los periodistas victimiza a una profesión ya bajo el asalto de bandas criminales”.

El influyente semanario inglés hizo hincapié en “si la ira crece, [el Gobierno de México] puede no tener opción” y tendrá que explicar “por qué fueron espiados los activistas y periodistas respetuosos de la ley”.