Posts Tagged ‘huérfanos’

La COVID habría dejado huérfanos a más de 118 mil menores en México, estima el DIF

viernes, septiembre 24th, 2021

De manera preliminar, con más de un millón de cédulas recibidas y 810 mil procesadas, 86 mil 188 niñas, niños y adolescentes habrían perdido a su padre; 32 mil 050, a su madre, y 124 a ambos. Faltan por revisar 102 mil cédulas.

Ciudad de México, 24 de septiembre (SinEmbargo).– Más de 118 mil niñas, niños y adolescentes en México quedarían en situación de orfandad a consecuencia de la pandemia de COVID-19, de acuerdo con una investigación que lleva a cabo el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF)

La investigación, basada en la aplicación de 1.5 millones de cédulas de evaluación en los 32 estados del país, principalmente en hogares beneficiarios de programas alimentarios que coordina el DIF Nacional, proyecta de manera preliminar, con más de un millón de cédulas recibidas y 810 mil procesadas, que 86 mil 188 niñas, niños y adolescentes habrían perdido a su padre; 32 mil 050, a su madre, y 124 a ambos, para hacer un total de 118 mil 362.

El estudio fue realizado con la colaboración con los Sistemas Estatales y Municipales, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Niños juegan videojuegos en el mercado Abelardo Rodríguez. Foto: Moisés Pablo, Cuartoscuro.

Durante la reunión de trabajo en la que se presentó el avance de resultados preliminares del estudio sobre el impacto de la pandemia por SARS-CoV-2 en la salud nutricional infantil, la Titular del DIF Nacional, María del Rocío García Pérez, destacó que de acuerdo con estas proyecciones la mayoría de las niñas, niños y adolescentes en situación de orfandad, sí contarían con cuidados parentales.

La información obtenida, dijo, es valiosa porque constituye un punto de partida para implementar acciones directas de atención hacia este sector vulnerable y atenuar así los efectos de la pandemia. Por ello, anunció la instalación de una Mesa Interinstitucional de Atención Integral a Niñas, Niños y Adolescentes en Situación de Orfandad por COVID-19, a fin de fortalecer el trabajo desplegado por el gobierno federal, unificar esfuerzos y orientar, de mejor manera, las políticas públicas a su favor.

En su oportunidad, el Coordinador General del Centro de Investigación en Políticas, Población y Salud (CIPPS) de la UNAM, Gustavo Olaiz Fernández, precisó que hasta el momento se han recibido más de un millón de cédulas con respuestas proporcionadas por la comunidad escolar, de las cuales 923 mil ya fueron revisadas y 102 mil están pendientes de analizar.

Dijo que, con la cantidad y la calidad de la información obtenida, es posible fortalecer las políticas públicas que aplica el gobierno federal para atender a grupos vulnerables como niñas, niños y adolescentes en situación de orfandad.

Debido a que la pandemia aún continúa y la revisión de cédulas no ha concluido, pueden existir variaciones en las estimaciones presentadas.

Para el DIF Nacional, los beneficios que tendrá la instalación de la Mesa Interinstitucional radican en que si bien ya existe una amplia gama de programas y servicios que se ofertan para niñas, niños y adolescentes en situación de orfandad, hace falta incorporarlos en una sola estrategia para fortalecer las acciones en su beneficio.

De acuerdo con un estudio de The Lancet, México es el país con más menores de edad huérfanos por COVID. Foto: Cortesía The Lancet

El Sistema Nacional DIF cuenta con diferentes programas y acciones, en los que participan los Sistemas Estatales y Municipales, como es el caso de los Desayunos Escolares, cuya entrega no se ha detenido en ningún momento, a pesar de la pandemia. De acuerdo con la investigación, poco más de seis mil niñas, niños y adolescentes que son atendidos a través de dicho programa, perdieron a su madre, padre o ambos, por la enfermedad de COVID-19

El cálculo es parecido al estimado obtenido por un estudio de la publicación científica The Lancet, que indicó  finales de julio que en México, 131 mil 325 niños y niñas se quedaron sin su principal cuidador a causa de la COVID-19, lo cual coloca al país como el primer lugar en orfandad a raíz de la pandemia, según sus propios cálculos.

La cifra se obtiene al calcular, por medio de un modelo matemático basado en los datos de mortalidad de 21 países, los padres y madres que han fallecido durante la emergencia sanitaria. Sin embargo, al sumar aquellas infancias cuyas principales cuidadores eran abuelos o adultos mayores que vivían con ellos, la cifra aumenta a 141 mil 132 huérfanos mexicanos.

The Lancet: México es el país con más huérfanos por la COVID con 131 mil 325

miércoles, julio 21st, 2021

México se convirtió en el país con el mayor número de huérfanos a causa de la pandemia de COVID-19, con 131 mil niños y niñas que perdieron a al menos uno de sus padres. A nivel mundial, 1.5 millones de infancias se quedaron sin su principal cuidador.

MADRID, 21 de julio (Europa Press).- En México, 131 mil 325 niños y niñas se quedaron sin su principal cuidador a causa de COVID-19, lo cual coloca al país como el primer lugar en orfandad a raíz de la pandemia, según un estudio de la publicación científica The Lancet.

La cifra se obtiene al calcular, por medio de un modelo matemático basado en los datos de mortalidad de 21 países, los padres y madres que han fallecido durante la emergencia sanitaria. Sin embargo, al sumar aquellas infancias cuyas principales cuidadores eran abuelos o adultos mayores que vivían con ellos, la cifra aumenta a 141 mil 132 huérfanos mexicanos.

Tabla elaborada por The Lancet.

Entre el 1 de marzo de 2020 y el 30 de abril de 2021, se estima que 33 mil 342 niños y niñas se quedaron sin madre, 97 mil 951 sin padre, y 32 sin ambos padres. Además, cuatro mil 429 niños y niñas perdieron a su abuela, cinco mil 342 a su abuelo, y 36 a ambos abuelos.

A nivel mundial, más de 1.5 millones de infancias han sufrido la muerte de algún pariente cuidador como consecuencia de la COVID-19. De ellos, más de un millón de niños experimentaron la muerte de uno o ambos padres durante los primeros 14 meses de la pandemia, y otro medio millón experimentó la muerte de un abuelo cuidador que vivía en su propia casa.

Los niños y niñas que han perdido a uno de sus padres o a un cuidador corren el riesgo de sufrir profundos efectos adversos a corto y largo plazo en su salud, seguridad y bienestar, como el aumento del riesgo de enfermedad, abusos, violencia sexual y embarazo en la adolescencia. En consecuencia, estos investigadores piden que se tomen “medidas urgentes” para abordar el impacto de las muertes de los cuidadores en los niños y niñas en los planes de respuesta frente a la COVID-19.

“Por cada dos muertes por COVID-19 en el mundo, un niño se queda atrás para enfrentarse a la muerte de un padre o cuidador. (…) Nuestros hallazgos ponen de manifiesto la urgente necesidad de dar prioridad a estos niños e invertir en programas y servicios basados en la evidencia para protegerlos y apoyarlos ahora mismo y seguir apoyándolos durante muchos años en el futuro, porque la orfandad no desaparece”, resaltó la doctora Susan Hillis, una de las autoras principales del estudio, del Equipo de Respuesta frente a la COVID-19 de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés).

Antes de la pandemia, se calcula que había 140 millones de niños huérfanos en todo el mundo.

Estos niños tienen un mayor riesgo de sufrir problemas de salud mental, pobreza familiar y violencia física, emocional y sexual. También tienen más probabilidades de morir por suicidio o de desarrollar una enfermedad crónica, como una cardiopatía, una diabetes, un cáncer o un derrame cerebral.

Antes de este informe, no había cifras globales para cuantificar cuántos niños se han visto afectados por la pérdida de un cuidador durante la pandemia de COVID-19, ya sea directamente (debido al virus) o indirectamente (debido a otra condición que se agravó debido a la pandemia).

Los investigadores del estudio desarrollaron modelos matemáticos utilizando los mejores datos disponibles como un intento inicial de estimar la magnitud de este impacto oculto de la pandemia en los niños. Aplicando métodos similares a los utilizados por el Grupo de Referencia de ONUSIDA sobre Estimaciones, Modelos y Proyecciones para estimar el número de niños huérfanos a causa del sida, los autores basaron las estimaciones de orfandad de COVID-19 en los datos de mortalidad de 21 países que representan el 77 por ciento de las muertes de COVID-19 a nivel mundial.

El análisis incluyó tanto las muertes por COVID-19 notificadas entre el 1 de marzo de 2020 y el 30 de abril de 2021 como el número de muertes en exceso (cuando se disponía de esos datos), durante el mismo periodo de tiempo, para tener en cuenta las variaciones en los sistemas de notificación específicos de cada país.

Los investigadores relacionaron las tasas de mortalidad por COVID-19 con los datos de fertilidad de hombres y mujeres de esos 21 países para estimar el número de niños que habían perdido a uno de sus padres como consecuencia del COVID-19. La pérdida de ambos progenitores se contabilizó para que los niños no se contaran dos veces.

Los investigadores ampliaron su análisis para incluir las muertes de abuelos u otros adultos mayores de entre 60 y 84 años que vivían en el mismo hogar que los niños, basándose en las estadísticas de la División de Población de las Naciones Unidas sobre la composición de los hogares. Estas cifras tienen en cuenta a los abuelos custodios (que viven con los nietos en ausencia de los padres), que son los principales responsables del cuidado de sus nietos, así como a los abuelos y otros miembros mayores de la familia que viven en el mismo hogar (con los nietos y los padres) y tienen responsabilidades secundarias, pero no primarias, de cuidado.

Se utilizó un modelo matemático para extrapolar los resultados de estos 21 países al resto del mundo, utilizando datos a nivel de país sobre las muertes y las tasas de fertilidad de COVID-19. El modelo mostró una alta correlación entre la tasa de fecundidad femenina y la relación entre huérfanos y muertes.

Los resultados sugieren que al menos un millón 134 mil niños sufrieron la muerte de su madre, padre o abuelos custodios, como consecuencia de la COVID-19. De ellos, se estima que un millón 042 mil perdieron a su madre o a su padre, o a ambos. En total, se estima que un millón 562 mil niños han sufrido la muerte de al menos uno de sus padres o de un abuelo custodio u otro cohabitante (u otro pariente mayor).

Los países con las tasas más altas de niños que pierden a su cuidador principal (padre o abuelo custodio) son Perú (un niño por cada 100, con un total de 98 mil 975 niños), Sudáfrica (cinco niños por cada mil, con un total de 94 mil 625 niños), México (tres niños por cada mil, con un total de 141 mil 132 niños), Brasil (dos niños por cada mil, con un total de 130 mil 363 niños), Colombia (dos niños por cada mil, con un total de 33 mil 293 niños), Irán (más de un niño por cada mil, con un total de 40 mil 996 niños), Estados Unidos (más de un niño por cada mil, con un total de 113 mil 708 niños) y Rusia (un niño por cada mil, con un total de 29 mil 724 niños).

En abril de 2021, en la India, los investigadores estiman que el número de niños huérfanos se multiplicará por 8.5 (43 mil 139) en comparación con marzo de 2021 (cinco mil 091).

En casi todos los países, las muertes fueron mayores en los hombres que en las mujeres, sobre todo en las edades medias y avanzadas. En general, hasta cinco veces más niños perdieron a sus padres que a sus madres.

Los investigadores afirman, no obstante, que sus resultados están “probablemente subestimados” porque las cifras de varios países incluidos en el estudio se basaban únicamente en la mortalidad por COVID-19 y no se disponía de datos sobre el exceso de muertes.

45 mil menores perdieron a sus padres en Brasil. Sí, por la COVID

martes, mayo 25th, 2021

Los números siguen creciendo. Todos los días mueren unas 2 mil personas por la enfermedad. Ya son 450 mil en total. Quince meses después del primer contagio, el Congreso ha empezado a discutir un proyecto para otorgar una pensión a los huérfanos de la COVID-19, como hizo Perú.

Por Carlos Meneses Sánchez

Jundiaí, Brasil, 25 de mayo (EFE).- “En dos semanas perdí a mi padre, mi madre y mi abuelo”. La misma historia se repite a lo largo y ancho de Brasil. Miles de hijos sin padres por culpa de la COVID-19. Son los huérfanos de la pandemia, víctimas de una tragedia invisible aún sin respuesta por parte de los organismos públicos.

Al menos 45 mil niños y adolescentes se han quedado sin sus dos progenitores durante la pandemia, según cálculos preliminares del Instituto de Pesquisa Económica Aplicada de Brasil.

Julia, Valentina y Heloísa están ahora al cuidado de sus abuelos en la localidad de Jundiaí, en el interior del estado de Sao Paulo. Tienen seis, tres y un año edad.

Su madre murió en marzo con 26 años por la COVID-19. No tenía problemas de salud previos. Su padre las abandonó a los pocos días del fatal desenlace al marcharse al estado de Maranhao, a 3 mil kilómetros de distancia. Desde entonces, ningún mensaje, ninguna llamada. Nada.

Miles han muerto en Brasil por la COVID. Foto: EFE.

Los abuelos pasaron entonces a hacerse cargo de sus tres nietas con lo justo en el bolsillo. De la noche a la mañana pasaron de ser cuatro a siete en casa.

“Tuve simplemente que aparecer con una sonrisa al día siguiente y decirles a mis nietas que está todo bien, que la abuelita está aquí”, explicó a Efe Adriana del Rio con un nudo en la garganta.

El impacto emocional y económico ha sido enorme. Tuvieron que mudarse para poder acoger a todos. Las nietas sufren “momentos de crisis” con frecuencia. Sus nuevos tutores, también.

Heloísa, la benjamina, sonríe al ver una foto de su madre en el celular. La abuela se desmorona al ver la reacción de la pequeña, todavía sin conciencia de lo ocurrido.

“Es un dolor que nunca va a pasar. Solo Dios me enseñará a convivir con él”, lamentó.

UN PROYECTO DE MADRES PARA SALVAR A LOS HUÉRFANOS

Del Rio encontró el apoyo para salir adelante a través de un proyecto impulsado por tres madres de Jundiaí al que se han sumado cientos de personas. La iniciativa, “Madres que acogen”, ya ha dado amparo a 25 menores. Y no dan abasto.

“Esta última semana fue terrible porque llegaron 19 menores de cinco madres que fallecieron”, afirmó a Efe la abogada Renata Paschoalini, una de las fundadoras del proyecto, desde el cual dan asistencia económica y psicológica a los huérfanos por medio de donaciones y voluntarios.

La idea nació al conocer el caso de Ryan Lucatto, de 20 años y su hermano, de 10. En apenas dos semanas perdieron a su padre, su madre y su abuelo, todos víctimas de la COVID-19.

Su padre, repartidor, fue el primero en ingresar en el hospital. Poco después lo hizo su madre, quien trabajaba como empleada doméstica. Ninguno de los dos superaba los 45 años. Ninguno pudo parar de trabajar. Ninguno sobrevivió. Entre medias murió su abuelo.

“La primera pregunta que me hizo mi hermano fue, ¿papá y mamá sufrieron? Le dije que, por lo que sabía y conocía, no porque los dos estaban intubados. Y ahí me preguntó, ¿los encontraremos algún día en el cielo? Creo que sí, le dije. Esas son las dos únicas preguntas que me hizo”, recordó.

Lucatto confesó que al principio no se tomó muy en serio el virus. Pensó que era una “gripecita”, término que generalizó el Presidente Jair Bolsonaro, un ferviente negacionista de la pandemia.

SIN RESPUESTA DEL GOBIERNO

Mientras, los números siguen creciendo. Todos los días mueren unas 2 mil personas por la enfermedad. Ya son 450 mil en total. Quince meses después del primer contagio, el Congreso ha empezado a discutir un proyecto para otorgar una pensión a los huérfanos de la COVID-19, como hizo Perú.

La medida es de vital importancia, pues muchos de los padres de esos menores trabajaban en la informalidad, por lo que, a priori, no tienen acceso a las pensiones de orfandad vigentes.

En esas discusiones participa Glauce Galúcio, directora del Instituto de Pesquisa y Enseñanza para el Desarrollo Sostenible, en Amazonas, uno de los estados brasileños más afectados por el virus.

Ella también puso en marcha una campaña solidaria parecida a la de Jundiaí, “Amo a mi prójimo”. Desde enero, han auxiliado a 160 huérfanos, que afrontan el trauma de formas diferentes.

Algunos entran en estado de shock, otros se encierran en sus cuartos y no quieren hablar con nadie. También los hay que expresan su tristeza con agresividad o entre lágrimas, según la educadora.

“Los huérfanos no van a dejar de existir. La falta de camas se soluciona construyendo un hospital de campaña, pero los huérfanos de la covid es un problema endémico. Cabe a nosotros, como sociedad, hacer algo en pro de esos niños”, sentenció.

Estudio calcula que hasta 43 mil niños se han quedado sin alguno de sus padres en EU, por la COVID

lunes, abril 5th, 2021

La pandemia ha dejado, en un año, entre un 18 por ciento y un 20 por ciento más de huérfanos que lo que suele ser habitual en EU, según el estudio de la Universidad de Stony Brook.

Nueva York, 5 de abril (EFE).- La pandemia de la COVID-19, que en Estados Unidos ha causado ya más de medio millón de muertes, dejó hasta febrero a entre 37 mil 300 y 43 mil niños sin al menos uno de sus dos padres, según estimaciones de una investigadora de la Universidad de Stony Brook, publicada en la revista JMA de pediatría.

El estudio, dirigido por Rachel Kidman, advierte de que “los niños que pierden a uno de sus padres corren un riesgo elevado de sufrir un duelo traumático, depresión, malos resultados educativos, muerte involuntaria y suicidio”, consecuencias “que pueden persistir hasta la edad adulta”.

Los autores comparan esta situación con los atentados terroristas contra las Torres Gemelas en 2001, asegurando que dicho siniestro dejó a 3 mil niños sin uno de sus dos familiares.

Advierten además de que estas pérdidas debidas a la pandemia tienen lugar en un momento de aislamiento social, dificultades de funcionamiento en las instituciones y problemas económicos “que pueden dejar a los niños en duelo sin el apoyo que necesitan”.

Una mujer con dos niños en Atlanta, Georgia. Foto: EFE

El estudio combina datos sobre la mortalidad durante la COVID-19 con información sobre las redes de parentesco para cuantificar cuántos niños entre 0 y 17 años en Estados Unidos han perdido a uno de sus padres.

De este modo, concluyen que la pandemia ha dejado, en un año, entre un 18 por ciento y un 20 por ciento más de huérfanos que lo que suele ser habitual.

El informe también sostiene que los niños negros son los que más se han visto afectados y detalla que si bien los menores afroamericanos representan el 14 por ciento de la población, un 20 por ciento de estos niños ha perdido a al menos uno de sus dos padres.

En un comunicado de la Universidad de Stony Brook, la doctora Kidman advirtió de las consecuencias adversas de la pandemia en los menores de edad.

“Las consecuencias de la pandemia de COVID-19 en los niños, desde el aumento de la violencia física hasta la inseguridad alimentaria, dejarán una huella en esta generación. Mostramos que los niños también están experimentando cada vez más la muerte de los padres, lo que puede tener consecuencias graves y duraderas”, apuntó Kidman.

Por eso, en la presentación del estudio se subraya que “se necesitan reformas nacionales radicales para abordar las consecuencias sanitarias, educativas y económicas que afectan a los niños (…), particularmente durante este período de mayor aislamiento social”.

Papá y mamá se mataron comiendo chiles envenenados. Dejaron a 3 huérfanos. Ocurrió en Puebla

sábado, septiembre 7th, 2019

El reporte fue dado a conocer por la noche del jueves 5 de septiembre por vecinos de la zona, quienes dieron aviso a las autoridades para realizar el levantamiento de los cuerpos.

Puebla, 7 de septiembre (PeriódicoCentral).- Una pareja fue encontrada sin vida al interior de su casa, en el municipio de San Matías Tlalancaleca, esto después de que, según sus hijos, “comieron chiles con polvo blanco”. Los tres hijos de la pareja fueron entregados al DIF Municipal, entre ellos un bebé de tres años.

El reporte fue dado a conocer por la noche del jueves 5 de septiembre por vecinos de la zona, quienes dieron aviso a las autoridades para realizar el levantamiento de los cuerpos.

Según las versiones de los niños, su mamá y su papá se sentaron a cenar chiles y les pusieron un polvo blanco que presumiblemente pudo haber sido algún pesticida o veneno para ratas, y después se fueron a dormir. Después, cuando intentaron despertarlos, sin conseguirlo, buscaron a los vecinos.

Hasta el momento, según la declaración de los niños, se trató de un doble suicidio aunque se mantienen las investigaciones de la Fiscalía General del Estado para conocer qué situación habría llevado a la pareja a tomar la decisión de quitarse la vida y dejar huérfanos a su sus hijos.

El DIF de San Matías Tlalancaleca cuidará de los tres menores de edad, entre ellos un bebé de tres años, mientras sus familiares los reclaman.

ESTE CONTENIDO ES PUBLICADO POR SINEMBARGO CON AUTORIZACIÓN EXPRESA DE PERIÓDICO CENTRAL. VER ORIGINAL AQUÍ. PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN. 

Ahora fue Anayeli, 19 años. Vendía tortas para estudiar enfermería. También la mataron en Veracruz

jueves, junio 14th, 2018

Anayeli quería ser enfermera, ganar buen dinero para apoyar a sus padres y que superarán su condición de pobreza. Pero se lo truncaron. Hoy sus seres amados no saben por qué o quién fue la persona que le privó la vida.

Quiso estudiar medicina, pero sus padres la convencieron de que optara por enfermería ante la precaria situación en la que viven. Hasta antes de ser asesinada, buscaba ingresar a una escuela en el estado de Puebla para contar con una especialidad.

“Lleva en las venas el ánimo por el trabajo y superarse”, recuerda su familia.

Por Ignacio Carvajal 

Coscomatepec, Veracruz, 14 de junio (SinEmbargo/BlogExpediente).– Anayeli Torres Morales, de 19 años de edad, pagaba sus estudios con el dinero que obtenía de la venta de tortas y antojitos que metía a escondidas al salón de clases donde cursaba el segundo semestre de Enfermería.

En su pueblo era conocida por el espíritu de superación que exaltaba en su vida diaria. Provenía de una familia de escasos recursos, pero hacía lo posible para no abandonar los estudios y ayudar con el gasto en su hogar.

Anayeli Torres se sumó el pasado viernes a la estadística de mujeres asesinadas en México. Originaria de Coscomatepec se convirtió en la víctima número cuatro de la semana pasada, las más negativa en el tema de la seguridad para las mujeres durante el Gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares.

Esa misma semana, tres chicas de Tlapacoyan aparecieron sin vida. Dos con el tiro de gracia y una semisepultada. Entre las tres dejaron seis huérfanos.

Desde su hogar, los padres y tíos de la joven recuerdan que Anayeli estuvo desaparecida durante tres días. Al final, le encontraron en el fondo de una barranca de 85 metros de profundidad.

Su cadáver no presentaba señales de violencia sexual o golpes. Únicamente hematomas en los brazos.

El cuerpo de Anayeli fue hallado el pasado viernes, luego de tres días que estuvo desaparecida. Foto: Ignacio Carvajal, BlogExpediente

Los padres de Anayeli Torres, poco en poco, van hilando su historia.

“Siempre se levantaba a las 5:30 de la mañana. Se ponía a hacer sus tortas para llevarlas a la escuela y venderlas, aunque el prefecto le había advertido que no vendiera, pues afectaba a las cooperativas escolares, ella se las ideaba para meterlas de contrabando en su mochila; sus amigas y compañeros le pedían de siete a 30”, recuerda su mamá.

Y añade: “Siempre las terminaba, a veces llevaba unos antojitos que también escondía en una bolsita y en unos trastecitos; cuando no le alcanzaba para las tortas vendía gelatinas o dulces, y si no, organizaba tandas entre sus compañeros, familiares y vecinos. Su idea era siempre contar con efectivo para sus gastos”.

La clave de su éxito, la disciplina y la honradez, dicen sus tíos: “Lleva en las venas el ánimo por el trabajo y superarse”.

Después de regresar de la escuela de Enfermería no descansaba. Sus familiares recuerdan que no ocupaba su tiempo viendo tele o revisando sus redes sociales.

Lo que sí la veían hacer regularmente era tomar su toalla y agua para irse una o dos horas al gimnasio. La recuerdan con figura atlética, largas y fuertes piernas. Era conocida por el contraste de su belleza y su sencillez de su persona.

De tres hermanos, ella era la de en medio.

Su familia sostiene que nada podía evitar que a diario abandonara la cama a las cinco de la mañana para cocinar, ir a la escuela, estudiar, trabajar y ejercitar el cuerpo.

POBREZA Y SUPERACIÓN

Su madre es ama de casa y los fines de semana monta un puesto de antojitos en la carretera y su padre es empleado.

“Actualmente gano mil 300 pesos a la semana con una empresa que le trabaja a la SCT en una carretera, pero cuando eso se acabe no habrá trabajo”, relata el hombre quien también prefiere omitiur su nombre.

El municipio de Coscomatepec tiene 15 mil 252 habitantes y es considerado por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) como uno de los municipios de más alta marginación en Veracruz y concentra altos niveles de migración.

Enclavado en la región montañosa del distrito de Córdoba, es cuna de la artesanía en cuero y fue nombrado Pueblo Mágico desde el 2015, pero hay numerosas comunidades donde sus habitantes carecen de lo elemental, en este caso, el pueblo demanda justicia.

Anayeli Torres Morales tenía 19 años cuando fue asesinada. Foto: Ignacio Carvajal, BlogExpediente

A las pocas horas de la noticia de la muerte de Anayeli, docenas de personas salieron a marchar, especialmente mujeres, lanzando consignas contra los tres niveles de gobierno.

Hasta el cierre de esta nota no se contaba con noticias sobre presunto o presuntos culpables. Y el Fiscal General del Estado, Jorge Wínckler Ortiz, no había dedicado ni un sólo comunicado a los cuatro probables feminicidios acontecidos la semana anterior.

A la casa de los papás de la difunta, cuenta la familia, arribó una alta funcionaria de la Fiscalía en Xalapa, lanzó unas cuantas promesas, se marchó y no se sabe de avances.

Cada año, desde hace cinco, marchaba con su hermano mayor en una peregrinación al municipio de Tlacotepec, en Puebla, a dar las gracias al Cristo Negro.

Durante tres días y dos noches caminaban desde Coscomatepec hasta puebla poco más de 100 kilómetros, entre cerros y laderas con el objetivo de venerar la imagen.

“Dormíamos donde nos tomara la noche, sin casas de campaña o hoteles, sólo con unas cobijas o unos plásticos para taparnos de la lluvia, a descansar un poco y después seguir la peregrinación. De día y de noche, iba por su quinto año, íbamos ir pronto pues ella quería dar gracias por sus estudios”, recuerda el hermano.

Antes de ir por la carrera de Enfermería, pensó en Medicina, y sus padres le pidieron no tomarla, pues resultaría muy costosa y estaba muy chica para marchar a otra ciudad para poder cursarla.

Entonces hizo un curso como fisioterapeuta. No le gustó y se decidió por la enfermería.

Hasta antes de ser asesinada, buscaba ingresar a una escuela en el estado de Puebla para contar con una especialidad.

Su gran sueño, recuerdan, era ser enfermera, ganar buen dinero para apoyar a sus padres y sacarlos de la pobreza, pero se lo truncaron. Hoy sus seres amados por qué o quién fue la persona persona que privó de la vida a la joven.

ESTE CONTENIDO ES PUBLICADO POR SINEMBARGO CON AUTORIZACIÓN EXPRESA DE BLOGEXPEDIENTE. Ver ORIGINAL aquí. Prohibida su reproducción.  

Drogas, crimen y abandono en California obligan a los abuelos latinos a ser padres… una vez más

miércoles, marzo 1st, 2017

En Estados Unidos aproximadamente 2.9 millones de niños viven con parientes sin que estén presentes los padres, según las autoridades. El estudio “Grandfacts” de AARP indica que en California, 287 mil 996 niños viven en hogares donde los abuelos son responsables de ellos (27 mil 250 en el condado de Los Ángeles). De esos abuelos, 31 por ciento son blancos, 10 por ciento son afroamericanos, 9 por ciento son asiáticos, 2 por ciento son indios americanos y nativos de Alaska y 47 por ciento son latinos.

Por Francisco Castro

Ciudad de México, q de marzo (SinEmbargo/LaOpinión).– Cuando se preparaba para jubilarse, María Isabel García se volvió madre, otra vez. Después de criar a sus cuatro hijos, tuvo que empezar a criar tres más, uno de los cuales era sólo un bebé.

Una de sus hijas se involucró en un ciclo de drogas, relaciones abusivas y todo tipo de problemas que la dejaron incapacitada para cuidar a sus pequeños hijos.

García, oriunda de Jalisco, México, salía al quite. Al principio, durante períodos cortos donde cuidaba de ellos mientras enderezaba su vida y recuperaba temporalmente la custodia de sus hijos. Pero hace cuatro años, una trabajadora social la llamó de nuevo y le dijo, sin mucho preámbulo, “tienes que venir a buscar a los niños o van a ir a un hogar de crianza“.

Ella no vaciló.

Unas horas más tarde, tres niños, en ese entonces de ocho y cuatro años, así como uno más de cuatro meses de edad se presentaron en su puerta.

La trabajadora social no aprobó su casa inicialmente. García no tenía lo que un bebé necesitaba.

“¿Cómo iba a tener una cuna, si no tenía ningún bebé?”, relata García sobre uno de los problemas que planteó la trabajadora social.

Aún así, los tomó y se las arregló lo mejor que pudo.

“Fue difícil”, admite de ese período en su vida. Ella todavía trabajaba y tuvo que adaptarse a ser una nueva mamá.

“La niña se ponía a llorar y llorar y no sabía qué hacer”, relata.

Cuatro años más tarde, estos son sus hijos. Los adoptó dos años más tarde. Su madre está completamente fuera de su vida. A los 60 años, García es madre soltera. Su única ayuda viene de su propia madre, que con 92 años trata de ayudarle en lo que puede.

Foto: LaOpinión

“Mi mamá me ayuda mucho, no podría hacerlo sin ella”, dice García.

A “Mamá Chole”, como los niños llaman a su bisabuela, ya se le olvidan las cosas de vez en cuando y no oye del todo bien, pero lava y dobla la ropa de los pequeños, hace pequeñas tareas y cuida de los tres chicos (tanto como los niños cuidan de ella) cuando García tiene que ir al médico o tiene que ir a hacer sola.

García no se arrepiente. Incluso después de gastar en ellos gran parte del dinero de jubilación que recibió. Ella dice que no obtuvo mucha ayuda del gobierno para los niños hasta casi un año después de que llegaron a quedarse con ella permanentemente.

“Los hijos no traen un manual donde ver qué hacer; con los nietos uno vio las faltas que tuvo y las quiere remediar con ellos”, dice García.

“Mucha energía ya no la tengo, pero tengo más paciencia”, añade.

SUR DE LOS ÁNGELES, EPICENTRO DE ABUELOS COMO PADRES

García comparte su historia con los abuelos latinos en la misma situación que ella reunidos en Community Coalition. El grupo se reúne dos veces al mes en la organización con sede en el sur de Los Ángeles, epicentro de este problema en la ciudad.

“El 60 por ciento de los niños que están con sus abuelos en la ciudad de Los Ángeles están en Sur Centro“, dice Aaron González, un organizador comunitario con la organización que ayuda a estos nuevos padres, muchos de los cuales conoce durante sus visitas regulares a la Corte.

En todo el país, aproximadamente 2.9 millones de niños viven con parientes sin que estén presentes los padres, según el censo de Estados Unidos.

El estudio “Grandfacts” de AARP indica que en California, 287 mil 996 niños viven en hogares donde los abuelos son responsables de ellos (27 mil 250 en el condado de Los Ángeles). De esos abuelos, 31 por ciento son blancos, 10 por ciento son afroamericanos, 9 por ciento son asiáticos, 2 por ciento son indios americanos y nativos de Alaska y 47 por ciento son latinos.

Y en el caso de los abuelos, dice González –muchos de los cuales sólo hablan español y algunos de ellos son indocumentados – viven en una situación precaria.

Ellos no saben cómo navegar los enredos legales de su nuevo estatus, tal vez temen tratar con las autoridades debido a su estatus migratorio y/o no saben cómo acceder a los pocos recursos disponibles para ellos.

RECURSOS

“Para ellos, todo es nuevo”, señala González. “Muchos de estos abuelos están jubilados y son de bajos ingresos y no saben cómo van a pagar por estos niños“.

Mientras que los padres de crianza temporal pueden obtener 625 dólares al mes por cuidar a un niño de 0-3 años de edad, y más de $825 al mes por un adolescente, dice González, los “guardianes cuidadores” sólo reciben alrededor de 300 dólares al mes del Welfare– a menudo la única ayuda que pueden obtener. Si adoptan a los niños, casi no pueden recibir ninguna ayuda financiera en absoluto.

Foto: LaOpinión

De acuerdo con AARP “Grandfacts”, el 15 por ciento de los abuelos que crían a nietos como sus propios hijos viven en la pobreza.

Parte del problema, señala “Grandfacts” es que “estos abuelos… A menudo están aislados, carecen de información sobre la gama de servicios de apoyo, recursos, programas, beneficios, leyes y políticas disponibles para ayudarles a cumplir con éxito su papel de guardián“.

Esto obliga a muchos abuelos a tomar de sus ahorros, ya que ponen las necesidades de los niños en primer lugar.

Ser padre no sólo es un compromiso financiero para estos abuelos, sino también emocional y físico.

González sabe de abuelos que faltan a citas médicas, dejan de asistir a funciones sociales e incluso se separan de sus cónyuges o parejas por cuidar a los niños.

“A veces se descuidan ellos físicamente para cuidar a los niños”, dice González.

Esto puede hacer que se sientan indefensos y deprimidos.

Según el estudio “Características de la salud de los abuelos cuidadores solos y padres solteros: un perfil comparativo usando la encuesta de vigilancia del factor de riesgo de comportamiento”, presentado en la conferencia anual de la Sociedad Gerontológica de América en Nueva Orleans en noviembre, “tomar un papel de padre a largo plazo tiene un costo físico y emocional en los abuelos, especialmente al realizar sus responsabilidades sin la ayuda de un cónyuge o de otra persona significativa“.

En comparación con los padres solteros, los abuelos tienen una mayor prevalencia de problemas de salud física (por ejemplo, la artritis). Ambos grupos de padres tienen una alta prevalencia de la depresión durante toda la vida.

Una mayor proporción de abuelos fuman activamente y no hicieron ejercicio físico recreativo en el último mes, indicó el estudio realizado por Deborah M. Whitley, de la Escuela de Trabajo Social del Colegio Andrew Young de Estudios Políticos de la Universidad Estatal de Georgia y sus colegas Esme Fuller-Thomson y Sarah Brennenstuhl.

BENEFICIOS PARA LOS NIÑOS

Pero la recompensa, en términos de bienestar para los niños, es notable.

De acuerdo con el análisis Children’s Thrive de Generations United publicado en julio de 2016, en comparación con los niños bajo cuidado de personas que no son sus familiares, los niños que están bajo el cuidado de sus familiares experimentan: mayor estabilidad, menos probabilidad de volver a ingresar al sistema de casas de crianza después de regresar con sus padres biológicos, mayor seguridad, mejores resultados de comportamiento y de salud mental, menos probabilidades de intentar huir y más probabilidades de reportar que “siempre se sintieron amados”.

Y el amor entre García y sus tres nuevos hijos es palpable.

Después que termina la reunión entre todos estos abuelos latinos en Community Coalition, Pablo, de 8 años, y Soledad, de 4 años, se encuentran con su “mamá” en la puerta y la abrazan y la besan. Ella les sonríe cariñosamente.

Ella sabe que están a salvo.

“Se siente uno a gusto que los niños no van a parar a un lugar, ¿quién sabe dónde?”, dice.

Francisco Castro es editor de ciudad del periódico La Opinión en Los Ángeles. Este artículo es el segundo de una serie que ha desarrollado con el apoyo de las becas de Periodistas en Envejecimiento, un programa de New America Media y la Sociedad Gerontológica de América, patrocinado por la Fundación Silver Century.

ESTE CONTENIDO ES PUBLICADO POR SINEMBARGO CON AUTORIZACIÓN EXPRESA DE LaOpinión. Ver ORIGINAL aquí. Prohibida su reproducción.

Niña de 5 años en Brasil camina 1 km en busca de ayuda tras accidente que mató a sus padres

sábado, enero 14th, 2017

La menor salió ilesa del automóvil de su familia después de que éste se volcó y chocó con un árbol en un camino cerca de la localidad de Campo Grande, en el centro-oeste del país, según el canal de noticias Globo.

El auto familiar impactó en un árbol dejando muertos a los dos padres de Talya. Foto. Archivo Cuartoscuro.

El auto familiar impactó en un árbol dejando muertos a los dos padres de Talya. Foto. Archivo Cuartoscuro.

RIO DE JANEIRO (AP) — Una niña de 5 años caminó sola aproximadamente un kilómetro en busca de ayuda tras la muerte de sus padres en un accidente vial, informó el sábado un canal de la televisión en Brasil.

La menor salió ilesa del automóvil de su familia después de que éste se volcó y chocó con un árbol en un camino cerca de la localidad de Campo Grande, en el centro-oeste del país, según el canal de noticias Globo.

Antes de que falleciera, Madilene Godoi, de 34 años, le dijo a su hija que buscara ayuda. También perdió la vida el padre de la menor, Reinaldo Dos Santos, de 52 años.

La prima de la niña, Talya Ramires, dijo que la pequeña salió por una ventanilla del vehículo.

Después del accidente del viernes, la niña siguió de regreso el trayecto recorrido con sus padres hasta que encontró a un hombre que cortaba pasto en una granja. El dueño de la finca llamó a las autoridades.

El trabajador agrícola dijo a Globo que la niña lo había mirado desde el automóvil cuando la familia pasó por el lugar horas antes.