Los pozos artesianos de la zona de Omealca, en estado de Veracruz, que eran empleados para uso agrícola, la delincuencia los tomó y llenó de ejecutados. Grupos del crimen organizado lanzaban a sus víctimas al fondo y posteriormente lo “sellaban” con piedras, palos basura y llantas.
El Colectivo Solecito de zona centro ha localizado, hasta ahora, tres pozos donde se han rescatado 12 cráneos humanos y docenas de restos óseos.
Por Ignacio Carvajal
Veracruz/Ciudad de México, 30 de mayo (BlogExpediente/SinEmbargo).– Madres del Colectivo Solecito-Córdoba han localizado unos 12 cráneos humanos en el interior de pozos artesianos en diversos puntos de la región agrícola de Omealca.
Las madres, que hablaron con el reportero bajo anonimato, por el temor que priva en la zona, expresaron que dichos cráneos datan de hace unos seis a ocho años, cuando la zona estaba bajo el control de Los Zetas.
Los pozos fueron localizados gracias a denuncias anónimas, «cuando comenzamos a trabajar, y que nos veían con la brigada en los predios, los mismos dueños se acercaban para darnos a conocer que en sus terrenos, sus pozos habían sido usados por la delincuencia», contó una de las madres entrevistadas.
A diferencia de Colinas de Santa Fe, donde Solecito realizó la búsqueda de restos humanos en fosas, en medio de arenales, en Omealca ha resultado un reto, dado el grado de dificultad, al tener que descender a profundidades a buscar lo escondido por los malosos.
«Te tienes que poner un equipo especial, arnés, y comenzar a bajar al fondo, para hacer la limpieza del lecho, y de ahí llegar a los cuerpos» relató la misma fuente.
Las madres relataron que hasta el momento han trabajado tres pozos de un total de ocho que serán investigado, para lo que se cuenta con todo el apoyo de la Fiscal regional de la zona centro del estado, Martha Lidia Pérez Gumecindo, quien ha dotado las facilidades.
La entrevistada relató que es altamente probable que los pozos hubieran sido empleados años atrás por la delincuencia organizada para desaparecer personas.
En algunos casos, los pozos tienen unos 20 metros de profundidad, a la que deben bajar los voluntarios para efectuar la búsqueda.
Primero, relataron, se baja a inspeccionar si hay indicios. Una vez que se logra, se comienza a sacar piedras, llantas, palos, basura en general que hay en el lecho.
En otros, se ha empleado equipo especial en el caso de los que contienen agua.
Es lamentable, indicaron, la insensibilidad de los que perpetraron estos delitos, pues en base a la evidencia localizada, se puede suponer que a la gente la mataban y lanzaban al pozo, para posteriormente «sellarlo» con llantas, piedras y basura.
Todas esas capas de basura, es a lo que se enfrenta la brigada de buscadores de la zona centro, «tenemos que bajar ahí, comenzar a sacar todo eso, y después meter unas palas chiquitas, como de jardinería, para buscar», relató la persona entrevistada.
Y si rascar el suelo en Colinas era complicado, pues en algunos casos, los cadáveres eran puestos a más de dos metros de profundidad, en los pozos de Omealca el grado es mucho más complejo, pues todo está en contra.
La profundidad de los pozos, que puede ser hasta de 20 metros, la falta de aire abajo, la existencia de alimañas y lo reducido del espacio.
Las personas que están realizando esta búsqueda, cuentan con capacitación en varios campos para la localización de fosas.
Es algo «cansado, laborioso y riesgoso», resume la fuente entrevistada.
Por ahora, se han hecho trabajos en tres de los ocho pozos que serán investigados por colectivo y Fiscalía, y en todos localizaron restos humanos en sus fondos.
Todo lo que ha sido localizado, en materia de cuerpos humanos, está bajo el resguardo de Periciales de la Fiscalía General del estado.
Incluso, en uno de los agujeros, se encontró la credencial de una persona que, al acudir la brigada a la dirección marcada en el documento, se confirmó que había sido desaparecido hace varios años mediante la violencia, por lo cual no pusieron denuncia penal, ante el temor.
Omealca es un municipio con una dinámica económica impulsada por la industria de la caña de azúcar. En su territorio, hay cientos de hectáreas de ese cultivo que es procesado en los ingenios vecinos, por lo que también se han gestado diversos brotes de violencia entre líderes de las centrales productoras.
La referencia inmediata sobre pozos, muertos y Omealca, remite a la década de los 90´s con la muerte del cacique de Tezonapa y Omealca, Toribio Gargallo, a quien se incautaron varios pozos en cuyo interior localizaron armas, droga y esqueletos humanos.
Las notas que hablan de esos días, indican que a lo largo de su vida, Gargallo habría desaparecido a unas 90 personas en la zona centro del estado.
Sin embargo, los esqueletos encontrados por Solecito en Omealca, son de la historia reciente, posiblemente relacionados con actividades cometidas por el violento cártel de Los Zetas, que sentó sus reales durante años en el campo cañero.
Se consultó la información aportada por las madres con la Fiscalía General del Estado, sin embargo, no hubo respuesta.