A pocos días de su pelea decisiva contra el filipino Manny Pacquiao, Juan Manuel Márquez se siente listo para enfrentarse con este rival por tercera ocasión. Las dos primeras batallas fueron épicas y los aficionados al boxeo las consideran entre los mejores duelos en la historia de ese deporte.

A la primera cita, el 8 de mayo de 2004, Márquez llegó como doble Campeón del Mundo al MGM Grand de Las Vegas; tenía entonces 30 años y Pacquio 25, el de General Santos, Filipinas, comenzaba a despuntar en su carrera. Fue un duelo de alarido, Manny sorprendió al Juanma y lo mandó tres veces a la lona. Pero el boxeador del Distrito Federal se engalló y de ahí en adelante el pleito fue parejo, tanto así que al final las tarjetas de los jueces dictaron el empate: 115-110 de John Stewart para Pacquiao, 115-110 para Márquez de Guy Jutras y 113-113 de Burt Clements. La pelea de la revancha había quedado pactada.

 

Se verían las caras cuatro años después, el 15 de marzo de 2008, en el Centro de Eventos del Mandalay Bay. Aunque Márquez llegó al ring como Campeón Superpluma del Consejo Mundial de Boxeo, el “Pacman” era ya toda una estrella a nivel mundial. En el segundo episodio, el mexicano estuvo a punto de mandar a la lona al filipino y, luego, en el tercer round, el capitalino probó la lona. Los siguientes asaltos preveían su derrota; pero no, recuperó fuerzas y no sólo tundió a Pacquio –es el único contrincante del filipino que le ha lastimado fuertemente el rostro–, sino que dio una cátedra de boxeo. De nuevo, la decisión quedó en manos de los jueces: Duane Ford dio 115-112 para el tagalo, Jerry Roth calificó 112-115 a favor del mexicano y Tom Miller favoreció a Manny por 114-113. Ese resultado no dejó a nadie conforme, la mayoría vio ganar al de Iztapalapa y la polémica se encendió pues la decisión fue considerada “un robo”.

 

Ahora, el 12 de noviembre, el púgil mexicano desea cambiar esa balanza a su favor y al fin conseguir la victoria que, según los conocedores, los jueces le han arrebatado.

Márquez llegará al ring del MGM Grand de Las Vegas con un récord de 53 victorias, cinco empates y una derrota; 39 de esas victorias por KO. Mientras que el “Pacman” se presentará con 53 peleas ganadas, tres empatadas y dos derrotas.

En entrevista con SinEmbargo.mx, Juan Manuel confiesa que quiere “el triunfo para México, para mi familia y para todos los latinos que ansían que se le gane al filipino”, aunque también, y en exclusiva, nos dice que “pase lo que pase ya esté firmada una siguiente revancha”.

Con 38 años, el “Dinamita” es actualmente Campeón de Pesos Ligeros en la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y en la Organización Mundial de Boxeo (OMB); es también el cuarto boxeador mexicano en obtener títulos mundiales en tres categorías distintas.

 

La gran revancha

Después de un empate y una derrota, Juan Manuel Márquez está dispuesto a demostrar que merece la ansiada victoria ante el filipino, aunque los expertos observan que esta vez las posibilidades del “Dinamita” Márquez son menores a las de “Pacman”, quien cuenta con una línea de apuestas de 9-1, pero nada se definirá hasta el sábado en el MGM Grand de Las Vegas, cuando el púgil de Iztapalapa entregue todo en el ring.

 

–¿Qué significa para ti este encuentro con Manny Pacquiao?

–Es una pelea importante, una buena pelea; es la tercera y es muy importante para mí. He entrenado con todo para ganar y yo creo que después de las dos peleas que hemos tenido es muy importante para mí demostrar mi triunfo.

 

–¿Qué esperas de la contienda?

–Bueno, lo que queremos hacer es una buena pelea, una pelea en la que quede clara mi victoria y los jueces no me la roben otra vez; yo creo que tenemos la posibilidad y vamos a llegar muy bien preparados para que en esa pelea se venga el triunfo para México, para mi familia, y para todos los latinos que quieren que se le gane al filipino.

 

–Después de la pelea con Pacman, ¿cuáles son tus proyectos?

–Bueno, primero hay que pasar lo primero, y lo primero es la pelea, ya dependiendo del resultado, que vamos a buscar el triunfo a cómo de lugar, veremos. Primero Dios, si llega el triunfo hay una revancha ya firmada. No me visualizó después de esa pelea, sino simplemente en el presente, en lo que estoy haciendo ahorita y en noviembre 12, nada más, ya después de ahí no hay futuro, primero hay que hacer el presente y el futuro viene después de lo que tienes que hacer.

 

Juan Manuel Márquez y Manny “Pacman” Pacquiao realizaron una gira internacional para promocionar la batalla. El 8 de septiembre se presentaron en el Monumento a la Revolución de la Ciudad de México, después de haber comenzado el tour en Manila, Filipinas, el 2 de septiembre pasado, y de haber hecho  paradas en Nueva York y Beverly Hills. La respuesta de los mexicanos fue extraordinaria; miles se congregaron para ver a estos dos ídolos del boxeo.

 

La preparación para el tercer episodio

A unos meses del encuentro, Márquez dijo estar listo mentalmente para enfrentar a Pacquiao, pero que le faltaba la preparación física y que estaba en ese proceso.

Pero eso cambió de tajo, en las últimas semanas un día normal para Márquez consiste en levantarse a las 4 de la mañana y correr entre 45 minutos y una hora, dependiendo del entrenamiento que tenga preparado para la jornada. Luego ir al gimnasio para ejercitarse durante aproximadamente tres horas, continuar en la cama hiperbárica una hora y media y, finalmente, llegar a descansar a su casa como a las 8 de la noche, después de entrenar 16 horas diarias.

Entre sus peleas de preparación para enfrentarse a Manny Pacquiao estuvo el encuentro que tuvo con Likar Ramos, el 16 de julio de este año en Cancún, Quintana Roo. Márquez regresó a pelear al país después de 17 años.

De acuerdo con el boxeador mexicano, la pelea no le sirvió mucho, pues entrenó cerca de dos meses y medio para que el encuentro terminara en un round de un minuto 47 segundos. “Pero lo importante es que ganamos y que estamos activos”, afirmó.

 

–¿Cómo te sentiste al volver a pelear en México?

–Estoy muy contento de regresar a pelear aquí, me hubiese gustado que hubiera sido en el Distrito Federal, pero a final de cuentas no se pudo. Lo importante es que estuvimos activos y peleando y que fue aquí en la República Mexicana.

 

¿Quién es “El Dinamita” Márquez?

Juan Manuel nació el 23 de agosto de 1973 en la Ciudad de México. A los 19 años hizo se debut en el boxeo profesional con un récord amateur de 35-1. Su primer encuentro, contra Javier Durán, lo perdió por descalificación. A partir de ahí, Márquez se mantuvo invicto durante seis años.

En 1997, ganó el título de peso pluma NABO (North American Boxing Organization), que defendió en siete ocasiones. Durante este tiempo, se le conocía como el mejor boxeador “sin un título mundial”. En 2000 derrotó al campeón Robbie Peden  y consiguió su primer campeonato mundial de Peso Pluma de la NABF (North American Boxing Federation).

“Dinamita” es  actualmente Campeón Mundial de los Pesos Ligeros de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y la Organización Mundial de Boxeo (OMB), así como actual campeón en la misma categoría de The Ring y el cuarto libra por libra.

Ha ocupado los títulos de peso pluma de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), AMB y OMB, así como el título peso superpluma del Consejo Mundial de Boxeo (CMB). Y, es, también, el cuarto boxeador mexicano en convertirse en campeón del mundo en tres categorías de peso, junto con Fernando Montiel, Marco Antonio Barrera, Erik  “El Terrible”Morales y el legendario Julio César Chávez. Márquez es agente libre, ya que su contrato con el promotor y ex boxeador Oscar de la Hoya expiró a inicios de 2011, ahora es dueño de su propia promotora: Marquez Boxing Promotions.

Aunque él se sigue considerando una persona normal, dedicada al deporte, a entrenar, a su trabajo y a su familia, afirma que la diferencia es que él siempre se muere arriba del ring, le gusta dejar todo ahí: cuerpo, alma y corazón.

Juan Manuel asegura que es una persona común y corriente abajo del ring y en el gimnasio, y cuando está en una pelea se transforma, pues “ahí hay que sacar la preparación, la inteligencia y la dedicación”.

Está consciente del sacrificio que le ha costado ser considerado el número uno entre los mexicanos y agradece enormemente el apoyo que la afición le brinda constantemente, incluyendo el sobrenombre que le escogieron: “Dinamita”.

“Yo no me puse el sobrenombre, me lo puso la gente, la afición fue la que escogió ‘Dinamita’; no sé por qué –se sonríe–, yo creo por la pegada o la contundencia”.

Juan Manuel Márquez trata siempre de hacer el mejor trabajo arriba del ring con una variedad de diversos golpes; pero es justo cuando saca la dinamita que todo explota. Ese el “punch” que los mexicanos esperan le dé la victoria el próximo sábado, cuando por tercera ocasión en su carrera tenga enfrente al filipino Manny Pacquio, considerado ahora como el mejor boxeador “libra por libra” y ya uno de los mejores de la historia de ese deporte. Pero el de Iztapalapa no se amilana: “Lo que quiero es obtener la victoria y que sea clara, para que esta vez nadie me robe”.