Las víctimas permanecieron incomunicadas por varias horas, situación que fue aprovechada por los delincuentes, quienes contactaron a las familias de la boxeadora y el entrenador, y les exigieron el pago de 300 mil pesos para no hacerles daño y dejarlos libres.
Ciudad de México, 6 de febrero (SinEmbargo).- La boxeadora mexicana Alma Ibarra y su entrenador Carlos Medellín fueron secuestrados y liberados horas después, previo a su participación en el torneo selectivo para confirmar a la selección mexicana de boxeo que acudirá al clasificatorio a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, el cual se realizará a finales de marzo en Buenos Aires, Argentina. La Conade confirmó que ambos se encuentran “bien y estables”.
De acuerdo con un reporte de Reforma, la ex seleccionada nacional y ahora boxeadora profesional, un grupo armado la sacó de su cuarto en el hotel Ramada de este municipio, en la madrugada de este jueves, así como a su entrenador Carlos Medellín.
“Anoche literalmente me sacaron del cuarto junto con mi entrenador. Se metieron y con armas nos forzaron a salir del hotel sin que nadie hiciera nada”, dijo la peleadora mexicana al periódico previamente citado.
"Hemos recibido hace pocas horas la noticia sobre el secuestro virtual de la atleta Alma Nora Ibarra Vázquez y su entrenador Carlos Medellín. Nos hemos comunicado con ellos, se encuentran bien y estables."
Las víctimas permanecieron incomunicadas por varias horas, situación que fue aprovechada por los delincuentes quienes contactaron a las familias de la boxeadora y el entrenador y les exigieron el pago de 300 mil pesos para no hacerles daño y dejarlos libres.
"Agradecemos a la policía municipal y ministerial y reiteramos todo nuestro apoyo a los deportistas mexicanos." Alma y Carlos ¡estamos con ustedes!
Las autoridades municipales iniciaron un operativo de búsqueda luego de que la pareja no llegara a la ceremonia de pesaje previo al inicio de la competencia. Gracias a la ayuda de las cámaras de video vigilancia del hotel, que captaron el número de placas del taxi que abordó la pareja a su salida, los agentes lograron dar con el paradero de las víctimas.
Tras los hechos, Ana Gabriela Guevara, titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte en México (Conade) indicó que tanto Alma Nora Vázquez y Carlos Medellín se encuentran bien y estables.
“Agradecemos a la policía municipal y ministerial y reiteramos todo nuestro apoyo a los deportistas mexicanos. Alma y Carlos ¡estamos con ustedes!”, indicó el organismo en Twitter.
Kevin Auces fue secuestrado en Jáltipan y apareció sin vida diez días después. Su cadáver fue lanzado a un río. Sus secuestradores pidieron un pago millonario, que cobraron pero no respetaron su vida. El sueño de Kevin era convertirse en un gran cantante con su ukulele y recorrer el mundo llevando su música.
Kevin Joshua Pérez se convirtió en la víctima 510 de la lista de homicidios dolosos que se acumulan en Veracruz desde el primero de diciembre de 2018 a la fecha. El último reporte sobre secuestros dice que en ese mismo periodo de han cometido más de 150, por lo cual Veracruz actualmente ocupa el primer lugar por ese delito a nivel nacional.
Por Ignacio Carvajal
Veracruz, 27 de marzo (BlogExpediente/SinEmbargo).- “Las pequeñas cosas te llevan a las grandes”, se lee en el muro de Facebook del joven Kevin Auces. La frase acompaña la foto de dos instrumentos musicales que reposan sobre un sillón, una guitarra y un ukulele con los cuales Kevin cantaba sobre la vida, el amor, los besos cálidos, la ausencia del ser amado y los cambios constantes en la vida.
Sus letras hablan de temas juveniles, llenas de energía y amor por vivir. Las cuales han quedado para la posterioridad, pues esta semana se sumó a la lista de víctimas mortales en el estado de Veracruz. Kevin también estudió la carretera de Ciencias de la Comunicación de la Universidad de Sotavento.
El cadáver de Kevin Joshua Pérez Auces apareció el lunes en aguas del río Chiquito, en el poblado Paso Zopilote, Cosoleacaque. El cuerpo flotaba en el caudal y sobre él una parvada de zopilotes que buscaban hacer fiesta de sus restos cuando fue localizado por pobladores que rápidamente dieron aviso a las autoridades.
Presentaba avanzado estado de putrefacción y señales de que posiblemente había sido lanzado al río con vida, para que muriera ahogado: sus manos estaban amarradas con cuerda y también mostraba un gran pedazo de alambre de púas bien sujeto y apretado alrededor del cuello. Su rostro y su boca no dejaban lugar a dudas de que había muerto presenciando el terror.
El cadáver no presentó más lesiones. Había muerto por quedarse sin aire. El alambre atado en el cuello, con las púas, encarnadas, apagaron la armoniosa voz de Kevin Auces.
Al ser rescatado del río, el rostro del joven quedó con una imagen que resume el horror de los últimos momentos de vida.
EL SECUESTRO
El drama de la familia del joven comenzó hace unos doce días cuando fue secuestrado en su natal Jáltipan. Sujetos fuertemente armados se lo llevaron por la fuerza cuando llegaba a su casa, en una colonia popular de ese municipio, y horas después vino la petición económica a cambio de la libertad.
La familia, que rechazó el apoyo de las autoridades para gestionar la liberación, se enfrentaba a un rescate millonario. Versiones salidas del seno familiar indican que se pagó una parte del rescate, pero aún así los secuestradores lo asesinaron.
La muerte de Kevin ha generado indignación entre los jóvenes del sur de Veracruz, pues era muy estimado en los círculos artísticos, también entre los estudiantes de Ciencias de la Comunicación.
El pasado martes fue sepultado en una ceremonia muy íntima con su familia y seres queridos en donde se le recordó como una gran persona emprendedora y soñadora. En el funeral estuvieron presentes sus amigos del pueblo, alumnos de la facultad de ciencias de la Comunicación de la Universidad de Sotavento, quienes no daban crédito a lo que pasaba.
Auces buscaba un sueño, quería ser cantante y triunfar en el mundo con sus letras e interpretaciones. Su familia ya amigos lo recuerdan como un joven melancólico, pero muy alegre que sorprendía a las personas con las cuerdas de sus instrumentos y voz, y si veía a alguien afligido le dedicaba una canción para levantarle el ánimo.
Kevin era de Jáltipan, la tierra de numerosas personas destacadas en el ámbito de la música y en donde la jarana es un instrumento con el que casi se nace, pero él había optado por el ukulele, algo poco común en el sureste mexicano, y sacaba armoniosas tonadas que no dudaba en interpretar en ocasiones especiales.
En las redes sociales queda constancia de sus destellos artísticos pues se quería sumar a ese círculo de iluminados de su pueblo y que hoy dan de que hablar incluso en otros países, como Los Cojolites, David Haro, los hermanos Ernesto y Antonio García de León, Zenén Zeferino, etcétera.
Hoy toda la familia y sus amigos lloran por la crueldad de los secuestradores, pues mataron a un joven destacado que luchaba a diario por ser una mejor versión de si y construir su camino a la fama.
Kevin Joshua Pérez se convirtió en la víctima 510 de la lista de homicidios dolosos que se acumulan en Veracruz desde el primero de diciembre de 2018 a la fecha. El último reporte sobre secuestros dice que en ese mismo periodo de han cometido más de 150, por lo cual Veracruz actualmente ocupa el primer lugar por ese delito a nivel nacional.
“Jony” fue secuestrado durante 14 días por al banda de “Los Arturines”, cuyos integrantes tienen menos de 25 y que operan en Veracruz. Durante su encierro, relató, le dieron de comer sólo tres veces para evitar que fuera al baño y escapara. Como profesor le era imposible pagar los 4 millones que exigían a su familia para liberarlo.
“Pide que te apoyen con una cooperación, cada alumno tuyo, 50 pesos, y sus papás, 50, y los alumnos de tus amigos y compañeros de clase y así se van juntando una buena feria, como medio millón”, le decían sus plagiarios. Finalmente fue liberado: la familia de “Jony” vendió sus pertenencias y se endeudó y pagó una cifra que en “nada se acercaba” a lo exigido.
El último reporte del Secretariado Ejecutivo para el Sistema Nacional de Seguridad Pública ubica a Veracruz en el segundo lugar en secuestros, en el sur, se cometen al menos la mitad, Jony ya lo sabía.
Por Ignacio Carvajal
Veracruz/Ciudad de México, 8 de abril (Blog/Expediente).– “Jony” burlaba obstáculos en calles y callejones de un municipio del sur de Veracruz.
Faltaba poco para las 8:00 P.M. y Jony regresaba a casa después de tomar el café con amigos, maestros como él.
Cuando se aproximaba a su destino, sintió el golpe de la camioneta que lo proyectó varios metros y lo tiró de la moto. Del impacto, se le dislocó el hombro. El dolor no llegaba. Sentía la adrenalina por ver la cara de quien lo había topado y partírsela a golpes.
“De pronto sentí unas manos sobre mi espalda, “párate, jálale”, me ordenó. Como no podía conmigo, bajaron otros tres y me arrastraron mientras yo gritaba desesperadamente.
Jony no se lo imaginaba. Pensó mil cosas. Una confusión tal vez. Su última opción era el secuestro. ¿De dónde iba a sacar dinero la familia de Jony para un rescate?, se repetía
Jony en esos segundo que duró su “levantón”. Entre los cuatro sujetos no podían subirlo la camioneta, que arrancó su marcha golpeando las banquetas, así durante unas ocho cuadras, “yo iba con la mitad del cuerpo de fuera. No podían conmigo”.
Jony muestra hendiduras en el cráneo que asemejan la superficie promedio de las carreteras del sur de Veracruz. Son cachazos de pistola, “me daban y me daban para doblarme y no podían. Después de diez cachazos, dejé de contar”, dice.
“Como vieron que no podían ni con eso, me metieron la chicharra. Tres cabrones me la ponían, bien pegada, hasta que les dije ya, me doy, me esposaron y lo último que recuerdo es yo entrando, cargado por esos tipos, a una casa de interés social.
“Dentro me amarraron pies y manos, a parte esposas. Me colocaron un vendaje en los ojos y cerraron la puerta de un cuartito en donde me arrojaron. Hacía frío y olía horrible.
No me dijeron mucho. Sólo que era un secuestro y que me dejarían a mi “ángel guardián” para que me cuidara.
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LA PRIMERA NOCHE
Jony estaba en manos de una banda de secuestradores, los temidos “Arturines”, lidereados por Ifgy Arturo Pérez Gómez, de 22 años, alias “Nacho” o “Dory”. Originario de Jáltipan, lejos de seguir el camino del estudio y el talento que caracteriza a los pobladores de este lugar, como muchos, y muchas, Dory se volvió el terror de empresarios, comerciantes, maestros, y todo quien a quien le pudiera quitar algo a cambio de su libertad, vida o tranquilidad.
¿A los 22 años líder de una banda de secuestradores?, eso se pudo constatar con fuentes oficiales. ¿Cómo llegó al mando a tan corta edad?, “los que secuestraban antes, los más viejos, de la primera escuela, o están muertos o tras las rejas. Sólo quedaron los chamacos que se quedaron con las armas y las ganas de ser ellos los jefes”, cuenta un especialista en tema de secuestros en el sur, en anonimato.
Así, la mayoría de los integrantes de la banda de Dory eran menores de 25 años. La primera vez que agarraron a Dory, tenía un secuestrado. La detención estuvo a cargo de la
Unidad Especializada contra el Secuestro (UESC) y elementos de la Procuraduría General de la República (PGR). Pero el juez que recibió a Dory y a algunos de su banda, pensó que sus derechos habían sido violados y los puso en libertad de inmediato. Ni un mes había pasado de su primera detención y liberación y Dory y su banda regresaron a lo mismo. El secuestro, y el 21 de marzo pasado resultó preso de nuevo, otra vez con un secuestrado bajo su custodia. Ese día cayeron ocho de su banda.
La Fiscalía General del estado lo pescó con el resto de su banda, entre ella dos mujeres y un bebé de meses de nacido, se sabe, hijo de uno de los integrantes de esa organización criminal.
De nueva cuenta, Los Arturines están en la cárcel, y pasarán ahí un año mientras dura el proceso.
El último reporte del Secretariado Ejecutivo para el Sistema Nacional de Seguridad Pública ubica a Veracruz en el segundo lugar en secuestros, en el sur, se cometen al menos la mitad, Jony ya lo sabía.
“Desde que comenzó la violencia a desbordarse, y por lo mismo de mis clases, me puse a seguir el movimiento de Javier Sicilia, el poeta al que cobardemente le mataron un hijo y consolidó el movimiento por La Paz. Leo todo lo que escribe y conozco todas sus obras.
“En esos momentos de terror para mí, sus frases me ayudaron a superar el horror en el cual estaba.
“Sabía que estaba pasando, que me cuidaban unos perros malditos en sus manos, el coraje me sostenía, pues mi cuerpo estaba quebrado”, dice.
Jony no soportaba el dolor del hombro dislocado, los golpes en la cabeza y otras partes del cuerpo sangrantes.
“Me arrumbaron en el cuarto, no me dejaron bañarme, ni me dieron de comer, me llenaron de insultos y pasé la peor noche de mi vida, pidiendo a Dios por mi vida y por mi familia”, recordó.
En medio de ese cuarto oscuro, relata mientras humedece los labios, conoció el terror por el cual han pasado cientos víctimas en Veracruz. Por fin conocía el lado más oscuro y sórdido del sur de Veracruz. Se encomendó al creador y pidió por su familia.
“Me preguntaba si me iban a ejecutar, si arrojarían mi cuerpo al monte, a la carretera, si pararía en una fosa clandestinas de esas que constantemente salen en las noticias”, dice.
La primera noche no logró jamás pegar los párpados. El dolor del desgarre en el hombro lo mantenía al borde de la vesania. Las manos amarradas, ni si quiera podía rascarse comezón por la sangre escurriendo de la cabeza por el rostro.
Llegó el cuarto día del secuestro. No le habían dado de comer, apenas una pastilla para mitigar el dolor del hombro lastimado y con las cuales pasaba largas horas dormido.
“No te preocupes, una vez que tu familia pague, eso se te quitan con el jalón, hay que echarle ganas para que esto salga bien”, le decía a Jony un sujeto, su cuidador, quien “decía que era su ángel guardián”.
Un día llegó el jefe de la banda, era un niño, lo supe por lo delgado de su mano. Me saludó y con la mía la cubrí completamente. También al resto de sus cómplices.
“Amigo, necesitamos que esto se mueva, tu familia no se está movimiento, no te quieren, eres un pinche perro, al que su familia no quiere ni le importa. Hay que moverse”, recordó que le decían.
Habló el “ángel guardián”:
“Mira, tú no debes nada, me caes bien, por favor, hay que acelerar esto, nosotros no queremos matarte, sólo buscamos dinero. Que paguen y ya”.
“Me decían todo eso para doblarme, para que les rogara y les dijera ‘sí, sí, ya, le llamaré a mi familia para que paguen y logren su dinero pero por favor no me maten’, pero no, pinches perros, no les di ese gusto. Jamás”.
Si me quieren matar -les dije- mátenme a la verga, de una vez. Pero les pido una cosa: dejen mi cuerpo en donde mi familia me pueda encontrar. No me hagan pedazos ni me lancen a una fosa. Quiero que me hagan mi velorio con todos sacramentos.
“No, como te vamos a matar, no es así, sólo queremos el dinero. Mira, eres maestro, manda mensaje que te apoyen con una cooperación, cada alumno tuyo, 50 pesos, y sus papás, 50, y los alumnos de tus amigos y compañeros de clase y así se van juntando una buena feria, como medio millón”, volvían a decir.
LO LIBERARON
“A veces pensaban que por tanto golpe, me habían dejado loco. Me preguntaban mi nombre, que dónde me habían agarrado, y en qué día estábamos. Yo les respondía todo. Me dejaron el coco abollado de tanto cachazo, pero no estoy loco”.
En esos 14 días, Jony apenas comió tres veces… al baño, “me mandaban esposado, gateando, a hacer en una cubeta”.
Los secuestradores reducen la alimentación a las víctimas para evitar llevarlos constantemente a evacuar, “si haces algo, te mato hijo de la chingada, me decía el ‘Ángel guadían’ cuando, con una pistola en la cabeza, me llevaba a orinar”.
“Una vez me dieron de comer huevo, luego restos de tacos y una mitad de una torta de jamón. No más. Tampoco yo les pedí mucho, quería matarlos, pinches perros. Me pidieron unos datos personales, pruebas de vida para mi familia, ellos ya estaban por pagar el rescate, no eran los 4 millones solicitados, en nada se acercaba, pero lo tomaron sin quejarse. Se vendieron cosas, la familia quedó endeudada, pero el dinero salió”, recuerda.
“Te vamos a quitar las esposa, si haces una pendejada, te mato”, le decían los captores a Jony cuando ya lo iban a subir a una camioneta para sacarlo de ese encierro.
“Salimos de Acayucan en un coche, me di cuenta, me llevaron por las comunidades y por allá le lanzaron a la maleza en una parcela. “Acá te quedas, puto, y si volteas o haces una pendejada, por ahí viene uno en un amito, que te va matar”, fue la última advertencia y se marcharon.
“Me dejaron descalzo, con una camisa hecha jirones, vi la luz, y comencé a correr hacia ella. Llegué a un pueblo, lo conocía. Me encontré a unos amigos, jugaban baraja, yo totalmente ido, un poco aturdido por la reacción. Me dieron un trago de coca y un cigarro. Los dejé y seguí caminando.
“‘Oye, yo te conozco’, me dijo una chica a quien respondí: ‘tú me conoces, pero yo a ti no’, me dijo que no tuviera miedo, me tomó de la mano y me metió en una casa. Era de una tía, ‘hijo, bendito Dios, estás vivo, ven-ven, llama a tu casa’. Eso hice, llamé a mi familia, y ahí si me quebré. Comencé a llorar y a dar gracia a Dios, saqué todo, ese odio se convirtió en lágrimas de agradecimiento. Estaba vivo, había sobrevivido al secuestro. El dolor del hombro ni si quiera los sentía. Jamás olvidaré la imagen de la señora cuando me abrazó y me besó. Me sentí renacido”.
Veracruz registró en enero pasado 79 secuestrados, de esta cifra, el 22 por ciento fueron niñas. En la lista se encuentran tres marinos y siete policías, de los cuales ya fueron localizados sin vida. Este febrero, la primera víctima fue una menor. En un análisis a los registros oficiales de los desaparecidos, en la Fiscalía General del estado (FGE), encabezada por Jorge Wínckler Ortiz, se exhiben cartillas de bebés, niñas, jóvenes y adultos mayores.
Por Arantxa Arcos
Ciudad de México, 12 de febrero (SinEmbargo/BlogExpediente).– Durante su campaña para sustituir al ex mandatario priista, Javier Duarte de Ochoa, Miguel Ángel Yunes Linares prometió cambios, mejoría para los ciudadanos de Veracruz en materia de seguridad, empleo y finanzas.
Entre los compromisos adquiridos se encuentran: atención a personas desaparecidas, situación que para su segundo mes de Gobierno alcanzó poco más de 120 personas que aún no han regresado a su hogar, se esfumaron de camino a casa o el trabajo.
En un análisis que se realizó a lo registros oficiales de los desaparecidos, en la Fiscalía General del estado (FGE), encabezada por Jorge Wínckler Ortiz, se exhiben cartillas de bebés, niñas, jóvenes y adultos mayores.
La lista no aparece actualizada, ya que los tres policías levantados con su patrulla en Las Choapas; Anita Contreras López de 29 años, Álvaro Navarrete Alducín de 29 años y Benjamín Montejo Avalos de 23 años, siguen en calidad de “buscados” por la FGE.
Ahí mismo se señala al puerto de Veracruz, Xalapa, Coatzacoalcos, Poza Rica, Córdoba, Mariano Escobedo, Papantla, Martínez de la Torre y Xico como los municipios con más de tres desaparecidos.
En Agua Dulce, Alto Lucero, Acayucan, Jáltipan, Cosoleacaque, Medellín y Tepetzintla, desaparecieron dos personas respectivamente.
Temapache, Paso de Ovejas, San Andrés, Ixhuacán del Café, Atzalan, Tlapacoyan, Tihuatlán, Tuxpan, Ixhuacán del Sureste, Moloacán, Tierra Blanca, Nautla, Boca del Río, Jamapa, Coatepec, Tecolutla, Jilotepec, Cosamaloapan y Fortín, reportaron a una persona cada uno.
Las edades varían, desde los cuatro hasta los 50 años. Para el caso de menores de edad, las más reportadas a través de Alerta Ámber y en Personas No Localizadas de la FGE, fueron 23 niñas y tres niños.
Dos de los varones son; Jaciel Ramírez Ramírez desaparecido el 5 de enero, en el puerto de Veracruz, cuando los saqueos a tiendas de conveniencia se apoderaron de la costa.
Otro más es Eduardo Hernández Campos, también de 17 años que se esfumó de Acayucan el 27 de enero. Familiares interpusieron denuncia contra elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de la Región XI.
De acuerdo a medios locales, un amigo de los desaparecidos vio cuando detuvieron al joven Eduardo con Cristofer Jareth Alamilla González, en las afueras de un bar, en la calle Melchor Ocampo, en Acayucan.
Los uniformados subieron a los jóvenes a la patrulla número 1973, iniciando así la carpeta de investigación UIPJ/XX/F4/79/2017.
El 2 de febrero del 2017, apareció una camioneta Chevrolet modelo 2006 con placas YHL-84-32 en Nogales, Veracruz, con cadáveres en su interior.
Hasta el momento, la FGE que encabeza Wínckler Ortiz, no ha detallado si los cuerpos corresponden a dos jóvenes desaparecidos, así como también, a los elementos de la Secretaría de Marina Armada de México que levantaron en el puerto de Veracruz, el 31 de enero del 2017.
En la lista de menores, cinco cuentan con 15 años cumplidos, siete con 14 y cuatro con 13 años.
Los nombres siguen incrementando en las estadísticas de la FGE, en los primeros cuatro días de febrero, ya desapareció otra menor de edad, en Fortín.
Fue vista por última vez el 3 de febrero, aproximadamente a las 6 horas cuando salió de su domicilio con rumbo desconocido y sin que hasta el momento se haya comunicado con sus familiares.
La menor responde al nombre de Michell Denisse Benitez Desceano, de 11 años de edad.
Entre los casi 80 desaparecidos del mes de enero, el segundo del gobierno panista, el primero de 2017, también aparecen turistas entre los reportes de desaparición o no localizadas.
Oaxaca reportó a tres varones el 5 de enero en el puerto de Veracruz, uno menor de edad, otro de 29 años y uno más de 30. Mientras otro el 9 de enero con 38 años cumplidos en Tecolutla.
La Ciudad de México señala la no localización de Uriel Delgado Ortiz de 32 años, visto por última vez en Xalapa el pasado 9 de enero.
También da cuenta de un joven de 23 años en Medellín desde el 3 de enero, de nombre Eduardo Lindero Mendoza.
Chiapas a Francisca Sánchez Cruz de 18 años, vista por última vez el 2 de enero en Coatzacoalcos.
Tlaxcala a Ricardo Martínez Sánchez de 40 años, visto por última vez en Martínez de la Torre el 20 de enero y al siguiente día, el 21 de enero, al oriundo de Guerrero, José Luis Pita Matamoros de 35 años visto por última vez en Xalapa.
A continuación, la lista por fecha y lugar de desaparición:
1 de enero
Martin Ramón López Cruz 49 años en Veracruz
Mariana Andrade Romero de 19 años en Veracruz
Agustín Melchor Pedraza de 51 años en Coatepec
2 de enero
Daniel Robles Brito de 19 años en Medellín
Briseyda Tolentino García de 14 años en Poza Rica de Hidalgo
Francisca Sánchez Cruz de 18 años en Coatzacoalcos (de Chiapas)
Melani Daniela Maceda Torres de 14 años en Córdoba
Eva Rossmery Lara López de 16 años en Jamapa
3 de enero
Eduardo Lindero Mendoza de 23 años en Medellín (Distrito Federal)
4 de enero
César Yosimar Rendón Sánchez de 26 años en Veracruz
5 de enero
Diego Jiménez Castillo de 31 años en Coatzacoalcos
Jaciel Ramírez Ramírez de 17 años en Veracruz (Oaxaca)
Rafael Armando Ramírez Bravo de 29 años en Veracruz (Oaxaca)
Levi Ramírez Ramírez de 30 años en Veracruz (Oaxaca)
6 de enero
María Guadalupe Bermúdez Contreras de 14 años en Córdoba
7 de enero
Obet Isaí Cruz Bonilla de 22 años en Coatzacoalcos
Juan Carlos Ceballos Luna de 38 años en Jilotepec
9 de enero
Daffne Selene Isidro Sánchez de 28 años en Poza Rica
Alejandro Alfredo Tepepa Dionicio de 32 años en Córdoba
Uriel Delgado Ortiz de 32 años en Xalapa (Ciudad de México)
Rafael Ruiz Córdoba de 38 años en Tecolutla (Oaxaca)
10 de enero
Luz Itiel Ríos Muñoz de 13 años en Tierra Blanca
001/2017-M, femenino de 14 años en Temapache
11 de enero
José Carlos López Murillo de 23 años en Veracruz
Sotero Maldonado Pérez de 50 años en Papantla
12 de enero
004-2017-M, femenino de 15 años en Tepetzintla
005/2017-M, femenino de 13 años en Tepetzintla
006-2017 femenino de 15 años en Martínez de la Torre
14 de enero
Daniel García Pascual de 34 años en Poza Rica de Hidalgo
Venancio Rocha Hernández de 38 años en Papantla
15 de enero
Nayeli Ramírez García de 29 años en Tuxpam
008-A-2017 femenino de 7 años en Xico
009-A-2017 masculino de 4 años en Xico
Anayeli Ruiz Cabrera de 26 años en Xico
16 de enero
Andrea Paz Torres de 15 años en Ixhuatlán del café
Henry Alexander Cristo López de 38 años en Veracruz
Victoria Mote Bautista de 26 años en Papantla
Cynthia Azeneth Benítez Calderón de 22 años en Tihuatlán
17 de enero
Leopoldo Velázquez Triana de 50 años en Cosamaloapan de Carpio
18 de enero
B.J.Z.M. femenino de 14 años en Jáltipan
19 de enero
Jaime Viñas Santos de 18 años en Tuxpam
Luz María Nieves Pérez de 17 años en Xalapa
Andrés García Notario de 45 años en Mariano Escobedo (Policía Municipal)
Marcelino Rosas Márquez de 35 años en Mariano Escobedo (Policía Municipal)
Antonio de Jesús Martínez Mora de 33 años en Mariano Escobedo (Protección Civil Municipal en Mariano Escobedo)
Juan Bernabé Santiago de 36 años en Mariano Escobedo (Policía Municipal)
Miguel Ángel Rodríguez Cruz de 38 años en Coatzacoalcos
Luis Enrique Barrera Cruz de 23 años en Poza Rica de Hidalgo
20 de enero
E.M.G. femenino de 13 años en Alto Lucero de Gutiérrez Barrios
Irene Palacios Zamudio de 16 años en San Andrés Tuxtla
Apolinar Landa Medina de 40 años en Xalapa
Ricardo Martínez Sánchez de 40 años en Martínez de la Torre (Tlaxcala)
21 de enero
José Luis Pita Matamoros de 35 años en Xalapa (Guerrero)
Geremías Córdova López de 30 años en Agua Dulce
Víctor Rubén Rodríguez Ramírez de 23 años en Jaltipan
22 de enero
José Rodolfo Coronado Juárez de 37 años en Coatzacoalcos
Mario Renteral Vivian de 49 años en Veracruz
24 de enero
Hortencia Juárez Martell de 14 años en Atzalan
25 de enero
05-A-2017 femenino de 17 años en Tlapacoyan
Williams Lugo Rodríguez de 25 años en Boca del Río
26 de enero
Andrés Hernández Martínez de 64 años en Córdoba
27 de enero
I.I.J.R. 09 femenino de 15 años en Cosoleacaque
Javier Sánchez Palma de 27 años en Veracruz
Roberto Hernández García de 38 años en Moloacan
A.A.D. 008 femenino de 14 años en Cosoleacaque
S.R.F. femenino de 15 años en Xalapa
Cristofer Jareth Alamilla González de 19 años en Acayucan
Eduardo Hernández Campos de 17 años en Acayucan
Roque Daniel Verastica Mendoza de 32 años en Coatzacoalcos
28 de enero
Yamileth Cruz Santizo de 13 años en Ixhuatlán del Sureste
Víctor Daniel Cruz Murcia de 21 años en Paso de Ovejas
Vanessa Yazmín Lozada Hernández de 15 años en Nautla
29 de enero
Itzel Brillit Candelero Cupil de 19 años en Agua Dulce
Fabián Espinosa Sánchez de 39 años en Fortín
30 de enero
B.G.B.R. femenino de 17 años en Xalapa
31 de enero
A través del comunicado de prensa 007/17 de la Secretaría de Marina-Armada de México informó que tres elementos fueron privados de su libertad en el INFONAVIT Buenavista, en el puerto de Veracruz.
Laisha Abigail Valverde del Ángel de 17 años en Poza Rica de Hidalgo
B.S.S.H._013 femenino de 14 en Martínez de la Torre
Demetria Herrera Rodríguez de 42 años en Alto Lucero de Gutiérrez Barrios
Durante su campaña política, a retirar de Palacio de Gobierno a los priistas, el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares prometió transparencia en sus actos, así como protección y atención para no tener registro de más desaparecidos.
Esta mañana de lunes, en la costa veracruzana, exclamó en su discurso: “No traigo yo, ni traía una varita mágica, lo desearía sinceramente porque las condiciones de Veracruz requieren soluciones inmediatas; sin embargo, esas soluciones no existen, las soluciones de fondo requieren mucho trabajo y esfuerzo” emitió en su discurso
En entrevista con los medios, evadió responder sobre la existencia de cuerpos embolsados en Santiago Tuxtla, remitiendo que ello corresponde a la Fiscalía que dirige Wínckler Ortiz o al titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Jaime Téllez Marie.
Durante el sexenio priista de Javier Duarte, familiares de desaparecidos se mantuvieron atentos a estos incidentes, rezando no encontrar en bolsas a sus familiares buscados y prometidos proteger en campaña electoral del “cambio”.
Coatzacoalcos, Orizaba, Acayucan, Medellín de Bravo, Martínez de la Torre, Córdoba, Fortín, Tierra Blanca, el puerto de Veracruz, Perote, Cosoleacaque y Xalapa son los municipios con personas extraviadas.
Por Arantxa Arcos
Ciudad de México, 17 de diciembre (SinEmbargo/BlogExpediente).– En los primeros 15 días del gobierno del cambio que prometió el mandatario estatal, Miguel Ángel Yunes Linares, han desaparecido 19 personas.
De acuerdo al registro de la página oficial de la Fiscalía General del Estado (FGE), el 11 de diciembre, previo a la celebración de la Virgen de Guadalupe, seis personas no volvieron a tener comunicación con sus familiares.
Coatzacoalcos, Orizaba, Acayucan, Medellín de Bravo, Martínez de la Torre, Córdoba, Fortín, Tierra Blanca, el puerto de Veracruz, Perote, Cosoleacaque y Xalapa son los municipios con personas extraviadas.
Aún con la declaratoria de Alerta de Violencia de Género, decretada por la Secretaría de Gobernación, diez mujeres, algunas menores de edad, siguen sin ser vistas por sus parientes.
Medellín de Bravo y Coatzacoalcos se convirtieron en los municipios más inseguros para habitar en los primeros días de un gobierno azul, del prometido cambio ante un sangriento y crítico sexenio priista.
Karla Ivonne Leyton Flores, de 14 años de edad, desapareció el 10 de diciembre, en Coatzacoalcos. Ella mide un metro con 69 centímetros, tiene piel clara, cabello castaño y ojos color miel.
La seña particular se exhibe en un lugar en la mejilla derecha, mechón rubio al frente de su cabello y ocho meses de embarazo.
Fue vista por última vez con una blusa de algodón blanca, pantalón de mezclilla azul, suéter gris y tenis tipo bota blanca, ajeno a su uniforme de secundaria.
Luz María Pio Gómez de 17 años dejó incompleto el bachillerato el pasado 11 de diciembre, cuando los feligreses se daban cita en las iglesias para festejar a la morenita, a la Virgen de Guadalupe.
Midiendo un metro con 55 centímetros, se perdió portando una playera roja, pantalón de mezclilla azul y zapatos negros del número 24.
Su rostro de ojos café claro resaltan en su piel morena clara con cabello negro lacio y mediano a los hombros, sus labios son gruesos y pequeños, cejas pobladas y escaso vello facial. De seña particular le resalta un lugar pequeño debajo del labio lado derecho.
El tercer desaparecido en Coatzacoalcos es un varón de 54 años, Santos Amos Méndez, originario de Villa Juanita que se extravió el 12 de diciembre.
Complexión delgada, ojos negros, cabello entrecano corto y lacio se combinan con sus escasas cejas, pequeño bigote y ojos negros.
Se le vio por última vez con un pantalón de mezclilla azul, playera café y zapatos azules.
Kilómetros al norte de Coatzacoalcos, considerado uno de los puertos más importantes del sur de México, en Medellín de Bravo, otros dos varones y una mujer son buscados.
El 11 de diciembre; Felipe Diego Piña Martínez de 23 años, Mario Reyes Martínez de 37 años y Maribel Valdivia Hernández de 32 años desaparecieron de Medellín de Bravo, municipio integrante de la zona metropolitana de Veracruz.
Diego Piña cursó el bachillerato midiendo un metro con 75 centímetros, ojos claro, piel morena clara y complexión robusta. De señas particulares le resalta una cicatriz traumática en la parte trasera de la cabeza, así como también estrías en el abdomen y espalda baja.
Mario Reyes sólo estudió hasta la secundaria, mide un metro 75 centímetros, igual que Diego, con la diferencia que es de complexión mediana, ojos café oscuro, piel morena oscura y cabello negro lacio rapado.
Sus señas particulares se concretan en una cicatriz detrás del cuello tipo queloide, manchas en la espalda y estrías en los glúteos. Se fue con un pantalón de mezclilla azul, camisa de algodón a rayas blanco con rojo y unos tenis gris con blanco.
Maribel Valdivia mide un metro con 57 centímetros, delgada, café oscuro, piel morena clara y cabello castaño oscuro ondulado largo. En la muñeca derecha se tatuó la letra “M” y “J”, pintó sus uñas en color melón y se puso un vestido largo blanco estampado floreado en rosa y azul, pañoleta azul rey y sandalias plateadas.
NIÑOS DESAPARECIDOS EN LAS MONTAÑAS
En Xalapa y Orizaba se perdió la pista de cuatro personas; tres mujeres menores de edad y un bebé de tres meses.
En el segundo día del gobierno panista, León Brandon Pérez Velázquez, de 15 años, y Yaneth Yamileth Pérez Velázquez, de 16, no dejaron rastro alguno en la capital del estado.
León Pérez truncó la primaria midiendo un metro con 70 centímetros, cafés claros, piel blanca, cabello corto y lacio. Mientras Yamileth Pérez alcanzó el metro con 60 centímetros y la secundaria incompleta.
Yamileth es delgada, con piel blanca, ojos café claro, cabello castaño claro lacio y corto.
Metros más cercanos al Citlaltépetl o Pico de Orizaba, un volcán durmiente cercano a los límites de Puebla con Veracruz, Vania Idai Royo González de 14 años y Eduardo Royo González de tres meses desaparecieron el 11 de diciembre.
Vania estudia la secundaria, mide un metro con 50 centímetros, ojos café oscuro, piel morena clara, cabello negro lacio y corto, así como una nariz pequeña chata, cejas pobladas y depiladas.
Tiene una cicatriz en la ceja derecha de aproximadamente uno o dos centímetros. Se fue con una blusa negra de encaje de licra, pantalón de mezclilla azul y botas cortas negras.
El bebé no pasa de los 60 centímetros, delgado, ojos negros, piel morena clara y cabello negro lacio corto, una nariz pequeña chata y labios delgados. Se extravió con su mameluco azul.
El sitio de personas desaparecidas en el estado de Veracruz, sólo cuenta con los datos sin que tenga fotos de las víctimas. Foto: Especial
MÁS NIÑAS Y HOMBRES DESAPARECIDOS
En las inmediaciones del río Nautla, en Martínez de la Torre, dos menores se anexaron a las cartas de búsqueda que la Fiscalía General del Estado (FGE) exhibe en su página web.
Con las iniciales M. de J.L. 201, una chica de 17 años se extravió el 6 de diciembre del año en curso, fue vista por última vez midiendo un metro con 68 centímetros, delgada, ojos café oscuros, piel morena clara, cabello oscuro lacio largo y labios delgados. Sus piernas poseen granitos y su muñeca izquierda cicatriz de rasguños.
Al siguiente día, 7 de diciembre, A.C.R.A. 202, mujer de 14 años de complexión robusta desapareció con la secundaria incompleta, midiendo un metro con 52 centímetros, ojos café oscuros y piel apiñonada.
De seña particular, sus familiares mencionaron cicatrices en las piernas por granitos y portaba un pantalón de mezclilla entubado, blusa negra, sudadera roja con gorro y zapato de ante negro.
La zona sur sigue caliente. En el primer día del gobierno yunista, en Cosoleacaque, Francisco Mosqueda Solorzano de 71 años no volvió a ser visto por su familia. Se extravió con un pantalón de vestir negro, camisa manga larga verde agua, zapatos negros de charol de agujeta y gorra roja con la letra “G” al frente.
Su mano izquierda exhibe una cicatriz, no tan evidente como los clavos en ambas extremidades superiores. Mide un metro con 76 centímetros, es robusto, piel morena clara y cabello negro.
Al norte, muy al norte de la costa veracruzana, en Fortín de las Flores, Mauro Porfirio Cabal Cuacua de 61 años fue visto por última vez en el quinto día del gobierno yunista, el 5 de diciembre del 2016.
Estudió hasta la primaria, mide un metro con 57 centímetros, es delgado, ojos café claros, piel morena clara, cabello lacio entrecano y bigote poblado. Tiene una cicatriz que va del hombro al codo derecho y padece parkinson, y esquizofrenia.
Portaba una camisa de manga larga amarilla, pantalón de gabardina azul marino, calcetines blancos, una mochila azul claro y botín negro.
Ludivina Zurita es originaria de Yanga pero desapareció en Córdoba. Foto: FGE
Transitando unas cuantas comunidades de Fortín hacia la costa, se llega a Córdoba, donde Blanca Ludivina Zurita Carrera de 49 años se reportó como extraviada el 5 de diciembre, mismo día que desapareció Mauro Cabal.
Ludivina Zurita es originaria de Yanga pero desapareció en Córdoba, ambos municipios de Veracruz. Mide un metro con 65 centímetros, cursó la secundaria, es de complexión robusta, ojos negros, piel morena oscura y cabello negro.
Como seña particular exhibe una leve cicatriz en ambos pies por quemaduras de tiempo atrás, padece de sus facultades mentales y portaba una blusa poliéster blanca, chanclas de plástico, y falda poliéster guinda.
Siguiendo la montaña, Óscar Antonio Ureña Guzmán de 87 años desapareció el 5 diciembre en Perote. Mide un metro con 70 centímetros, delgado, piel blanca, cabello teñido de negro corto y lacio con calvicie coronal.
Se extravió portando un pantalón café claro, camisa con el logo del IMSS, chaleco gris, suéter gris con cuello rojo y zapatos negros. Cuenta con un implante de dedo pulgar en la mano izquierda, le falta el dedo índice y su dedo gordo del pie es un injerto.
Avanzando hacia la costa, Julissa Vera López de 18 años no volvió a entablar comunicación con sus padres en Tierra Blanca, desde el 10 de diciembre.
Se fue, se perdió o se la llevaron portando un perforación en el ombligo, un lunar tipo mancha en la parte trasera de su pierna izquierda, una blusa de licra blanca, pantalón de mezclilla azul cielo, playera tipo polo blanca, ropa interior blanca, calcetas rojas con blanco y tenis converse del número 25.
Mide un metro con 62 centímetros, es delgada, con ojos café oscuro, piel morena clara y su cabello teñido como chocolate, lacio que reposa sobre sus hombros.
Ya en la costa veracruzana, Miguel Ángel Rosas Castillo de 38 años desapareció del puerto de Veracruz el primero de diciembre con aspecto atlético, nariz chata, labios gruesos y midiendo un metro con 69 centímetros.
En su espalda alta tatuó un anel, en el brazo derecho cara interna el nombre de “alessandro” y en la cara externa una catrina, dos rombos, en el otro brazo la leyenda “virgo” y en la cara interna “leo”.
A cuatro horas del puerto de Veracruz, Cristino Anota Méndez de 49 años, originario de Villa Juanita se extravió en Acayucan el pasado 12 de diciembre.
Sus familiares lo describieron con complexión robusta, ojos negros, piel morena clara, cabello negro y nariz ancha afilada, escaso vello facial y portando un pantalón de mezclilla azul, playera gris y zapatos cafés.
Todos los mencionados en éste texto, pueden ser consultados a detalle en la página oficial de la FGE con el siguiente link
Sin embargo, al consultar la página con los datos de las personas desaparecidas se puede observar que tal no cuenta con las fotografías de éstas, sólo se puede acceder a los datos de cada una de las víctimas pero sin imágenes para lograr su posible ubicación.
Siete presuntos plagiarios y un policías murieron en dos operativos de rescate en Uxpanapa y Coatzacoalcos, Veracruz. Apenas el fin de semana fueron asesinadas ocho personas que había sido secuestradas por un numeroso comando en tres comunidades de Alto Lucero.
Ciudad de México, 23 de agosto (SinEmbargo).– Siete personas presuntamente involucradas en dos secuestros y un policías murieron este día en operativos de rescate en Veracruz.
Seis presuntos secuestradores murieron este día en un operativo de rescate de una bebé y su madre en el municipio de Uxpanapa.
De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz (SSP) elementos de Fuerza Civil de la Policía Estatal y Naval emprendieron un operativo de búsqueda luego de recibir el reporte de que las víctimas fueron trasladadas en contra de su voluntad en un vehículo marca Toyota, tipo Corolla, y una camioneta marca Chevrolet tipo Trail Blazer
Las unidades fueron ubicadas en la localidad de Ojochapa, de este municipio, y al momento de ordenarles que se detuvieran, los efectivos de seguridad fueron agredidos con disparos, por lo que se desató una balacera que derivó en la muerte de la media docena de presuntos criminales, informó la dependencia.
El segundo hecho fue reportado en Coatzacoalcos, Veracruz.
Y de acuerdo con un comunicado de la Fiscalía General del Estado de Veracruz, un uniformado y un supuesto plagiario perdieron la vida durante un enfrentamiento.
Los probables secuestradores mantenían privada de su libertad a una víctima en el interior de un inmueble y se implementó para liberar a la víctima.
Ante ello se desató una balacera en la que fueron privadas de la vida las dos personas y un presunto delincuente fue detenido y puesto a disposición del Fiscal Investigador, quien en las próximas horas definirá su situación jurídica.
He atendido algunas investigaciones recientes en las que las personas han sufrido daños patrimoniales al verse afectados en sus cuentas financieras, incluso con el cambio…
Las escuelas pueden y deben brindar alimentos adquiridos a los productores locales, fortaleciendo las economías de sus comunidades, pueden y deben contribuir activamente a restaurar…
