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En la víspera navideña pasada México fue el primer país en América Latina en recibir vacunas contra el coronavirus. Fue un lote de 3 mil. A la fecha, han llegado más de 197 millones de dosis y el 88 por ciento de la población adulta ya está vacunada con las dos dosis.

Ciudad de México, 23 de diciembre (SinEmbargo).– Como regalo de Navidad, México recibió la mañana del 23 de diciembre de 2020 el primer cargamento con 3 mil vacunas contra la COVID-19.

Un año después, han arribado 197 millones 008 mil 645 dosis de AstraZeneca, Pfizer, Sinovac, Sputnik V, Cansino, Moderna, J&J y se ha vacunado a 81.9 millones de mexicanos adultos (88 por ciento) con 147 millones 489 mil vacunas, lo que coloca al país en el lugar siete de todo el mundo en cuanto a dosis administradas, muestran datos de la Secretaría de Salud y la Organización Mundial de la Salud (OMS).

“Hoy es el principio del fin de esta pandemia”, aseguró entonces el Canciller Marcelo Ebrard Causabón desde el hangar del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, donde a inicios de la segunda ola de contagios arribó un avión de DHL proveniente de Bélgica con vacunas de Pfizer, las cuales comenzaron a ser suministradas en Nochebuena al personal de salud. “Es la más grande operación de vacunación que haya habido en México en tan corto periodo”.

La Subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos, Martha Delgado Peralta, dijo en entrevista con SinEmbargo que México fue el primer país en América Latina en recibir las vacunas porque “decidió comprar por anticipado” y “el acierto” fue que diversificó las adquisiciones frente a otros gobiernos que sólo apostaron a una o dos marcas.

A un año de aquel momento histórico, Delgado destacó que el papel de la Cancillería fue acercarse a los países y farmacéuticas internacionales para abrir las negociaciones. Ahora que el puente se ha establecido, a menos “que tengan un problema con el acceso”, sólo corresponderá a la Secretaría de Salud decidir cómo distribuir en 2022 el stock de vacunas que hay almacenadas y si renovará los contratos que están culminando.

“La intervención de la Secretaría de Relaciones Exteriores se dio cuando estas negociaciones se hicieron fuera del país con los operativos internacionales de las farmacéuticas. En el caso actual ya no es así, ya el camino está abierto y los canales están conocidos y ya el sector salud está negociando directamente sus contratos”, aseveró.

México contrató por mil 626 millones de dólares 194 millones 493 mil 640 dosis, Estados Unidos donó 10 millones 421 mil dosis y se ha donado a otros países dos millones 480 mil dosis, informó esta semana la Secretaría de Salud.

“Primero nos aproximamos a los países y ellos nos abrieron las puertas de los ensayos clínicos en fase III que estaban más avanzados. México fue uno de los países que firmó más temprano los contratos”, compartió la Subsecretaria de Cancillería Martha Delgado.

Desde el 13 de octubre de 2020 se firmaron los contratos con las farmacéuticas, los cuales están llegando al término y la Secretaría de Salud decidirá si los renueva para 2022 y para qué sector, planteó.

El 28 de julio concluyó la contratación de Sinovac; el 19 de noviembre, la de CanSino; el 20 de diciembre, la de AstraZeneca que envió por último un millón 445 mil dosis y pronto se terminará con Pfizer, que para el viernes habrá mandado un millón 979 mil.

“La Secretaría de Salud ya tiene un cálculo. Han podido darle seguimiento a toda la farmacovigilancia, la efectividad y también a la necesidad de poner o no a niños y las terceras dosis de manera universal, que anunció el Presidente Andrés Manuel López Obrador”, aseguró Delgado. “La decisión de cuándo comprar y qué comprar corresponderá al sector salud que ya tiene todos los contactos y todo el conocimiento de primera mano”.

La Secretaría de la Defensa Nacional, Marina y la Guardia Nacional, por su parte, se han encargado este año de la seguridad y logística en la distribución de las vacunas a los estados vía aérea y terrestre, así como del almacenamiento de lotes en Birmex y otros institutos de salud. Incluso en diciembre del año pasado realizaron un simulacro para la estrategia de hipercongelación.

A la par, el Conacyt se encuentra en la fase dos del estudio clínico de la vacuna Patria para evaluar su uso como refuerzo de otras. La Subsecretaria Martha Delgado comentó que el rol inicial de Relaciones Exteriores fue enlazar a los científicos locales que estaban desarrollando vacunas, una de ellas Patria, con investigadores a nivel internacional.

“Los apoyamos para orientarlos y también para conseguir fondos para algunos de esos proyectos. Esta vacuna en particular, que está siendo desarrollada por una empresa privada mexicana junto con la UNAM, también se financió inicialmente por Relaciones Exteriores y posteriormente el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt ) identificó un potencial importante de éxito y la siguió desarrollando”, detalló.

La Subsecretaria agregó que para 2022 las vacunas ya pasarán a su fase cuatro, con lo cual podrán ser comercializadas. Sin embargo, como el sistema nacional de vacunación es diferente al de Estados Unidos, no se comprarán en farmacias sino que, como sucede con la de la influenza, sarampión y otras, podrán ser adquiridas por hospitales, clínicas o instituciones privadas para su aplicación.

“La fase cuatro es el establecimiento de todas los autorizaciones para su comercialización y muy seguramente las vacunas en un futuro se podrán aplicar por quienes tengan los permisos adecuados para ello”, estimó. 

Aunque, agregó: “todas las vacunas están en proceso de ajuste por las variantes, por las cantidades, las edades, la farmacovigilancia. Es muy normal en cualquier vacuna y por supuesto la COVID no es la excepción”.

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EL LARGO PROCESO

El Subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, informó esta semana que el 70 por ciento de los 23 casos que han sido identificados con la variante ómicron no habían sido vacunados, lo que “lleva a recordar que la medida de prevención fundamental para la epidemia de COVID es vacunarse”.

Luego de esperar la aprobación de las agencias internacionales regulatorias y de la Cofepris, así como la realización de jornadas de vacunación, el 88 por ciento de mexicanos adultos (72 millones 44 mil) ya tiene el esquema completo de vacunación y el 12 por ciento restante (9.4 millones) está en espera de completar el calendario para su segunda dosis, detalló López-Gatell Ramírez.

Pero Veracruz, Guerrero, Chiapas y Oaxaca son las entidades que tienen coberturas menores al 80 por ciento en contraste con la Ciudad de México que ya la completó y se encuentra en la etapa de refuerzo a adultos mayores.

Además, a lo largo de mil 600 jornadas se han dado 347 mil 434 dosis de vacunas a los connacionales que viven y trabajan en los Estados Unidos, informó el Canciller Marcelo Ebrard.

El 24 de diciembre de 2020 se comenzó a aplicar las primeras dosis al personal de salud, la primera línea de batalla contra el coronavirus. Posteriormente se continuó con los adultos mayores y con comorbilidades, así como personal educativo para arrancar las clases presenciales, sector poblacional que ahora es el objetivo para recibir la vacuna de refuerzo.

Ya en el marco de la tercera ola de contagios en el verano, las primeras dosis se suministraron a los jóvenes y adultos de 64 a 18 años. Los menores de edad sin comorbilidad, por su menor grado de vulnerabilidad, han sido los últimos en recibir la vacuna gratuita y universal.

“Si está recomendado, nosotros lo vamos a hacer [vacunar a niños]. Lo que no queremos es llevar a cabo algo que no sea conveniente e innecesario. Yo pienso que la próxima semana, el martes, los especialistas de salud ya podrían dar una respuesta”, adelantó este miércoles el Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Lejos quedó aquel cálculo que el expresidente Felipe Calderón Hinojosa tuiteó en febrero. El 70 por ciento de la población estaría vacunada con las dosis en casi 50 mil días. “Nada más faltan 134 años”, dijo.