Greenpeace lanzó una petición en línea dirigida a los directores generales de Mexichem y de Petróleos Mexicanos, Antonio Carrillo Rule y José Antonio González Anaya respectivamente, para exigir transparencia en la información y un sistema de monitoreo claro, abierto y medidas para evitar que catástrofes como ésta se repitan.
Greenpeace acudió al puerto de Coatzacoalcos a tomar muestras de agua y suelo en el ambiente tras explosión. Foto: Greenpeace.
Ciudad de México, 25 de abril (SinEmbargo).- Activistas de la organización internacional Greenpeace acudieron a Coatzacoalcos, Veracruz, para realizar un muestreo de agua y suelo en el ambiente local de la zona, luego de que el pasado 20 de abril ocurriera una explosión en el complejo petroquímico “Pajaritos”, a fin de buscar la presencia de sustancias químicas peligrosas en el ambiente tras el incidente.
El estallido ocurrió a las 15:15 horas en la Planta Colorados 3, la cual es operada por la empresa Mexichem, en copropiedad con Petróleos Mexicanos (Pemex).
En días pasados, la paraestatal aseguró que la nube tóxica se disipó y que no había riesgo para la población, y hoy, de acuerdo con el diario Reforma, Ricardo de la Cruz Musalem, Director General de Protección Civil de Gobernación, rechazó que en la entidad exista algún tipo de contaminación ambiental que ponga en riesgo la salud de los pobladores, derivada de la explosión en “Pajaritos”. No obstante, en entrevista para SinEmbargo, Miguel Alejandro Rivas Soto, campañista de Océanos de la organización, destacó la importancia de que Mexichem aclare cuáles son todos los contaminantes que fueron liberados al ambiente y a que el Gobierno realice los estudios correspondientes con la finalidad de que los habitantes de la periferia no se vean amenazados por estas sustancias.
“Exigimos transparencia, que informen cuáles son los contaminantes que se despidieron al ambiente y qué efecto tienen. Que incluso comparen con las muestras que nosotros hemos tomado, que digan cómo estas sustancias afectan a las personas y al ambiente, que a las familias se les informe como deben cuidarse y que a los familiares de las víctimas se les indemnice en caso de que se compruebe negligencia”, urgió.
Por ello, el activista destacó que en México es urgente renovar la legislación que tiene que ver con manejo de residuos peligrosos.
Las autoridades deben fortalecer la regulación del uso de sustancias químicas peligrosas en el país. Foto: Greenpeace.
Además, explicó que las dioxinas y furanos, compuestos químicos organoclorados presentes en procesos de incineración de deshechos con compuestos aromáticos, han provocado ya en los habitantes, síntomas como vómitos y dolores de cabeza y musculares. Además, alertó que a mediano plazo podrían presentar también problemas en las articulaciones e incluso –si la exposición es crónica– puede desencadenar cáncer hepático.
“Las muestras fueron tomadas en cuatro puntos, dos de ellos ubicados río abajo de la planta ‘Pajaritos’ y dos de ellos, río arriba. Cada muestra se tomó siguiendo estrictos protocolos de bioseguridad y de acuerdo a estándares científicos”, explicó el coordinador del muestreo.
El activista informó que las tomas serán enviadas para su análisis a un laboratorio independiente internacional y los resultados se conocerán aproximadamente en uno o dos meses, cuando se darán a conocer a la población y a las autoridades responsables a fin de que se tomen las medidas necesarias.
“Consideramos que ha habido opacidad en el manejo de la información referente a este siniestro. Hasta ahora no sabemos con exactitud el número de muertos, en qué zona de la planta petroquímica se generó la explosión, qué otros químicos había en las instalaciones en ese momento y tampoco sabemos cómo se ha manejado la emergencia ambiental a fin de controlar los posibles impactos al entorno y a la gente. Por eso estamos aquí buscando la verdad sobre la presencia de tóxicos para dar esta información a la población ya que tiene derecho a saber y a la reparación de los daños”, agregó Rivas.
El doctor Lorenzo Manuel Bozada, consultor ambiental y presidente de la asociación Ambiente y Desarrollo Humano en Coatzacoalcos, Veracruz, dijo a los activistas de Greenpeace México que “el crimen de Mexichem es que con esta explosión nos ha expuesto a los habitantes de Coatzacoalcos a un baño de dioxinas y pedimos a las autoridades que limpien, que hagan una remediación de la zona para que estos contaminantes no se queden aquí y que las personas no nos quedemos expuestas a estas sustancias con las terribles consecuencias que eso puede tener para nuestra salud”.
Asimismo, subrayó que es indispensable que el sistema de salud realice pruebas entre la población para determinar los impactos por la exposición a dioxinas.
La ONG lanzó una petición en línea a Pemex y Mexichem. Foto: Greenpeace.
GREENPEACE EXIGE TRANSPARENCIA EN LA INFORMACIÓN
La organización ambientalista lanzó una petición en línea dirigida a los directores generales de Mexichem y de Petróleos Mexicanos, Antonio Carrillo Rule y José Antonio González Anaya respectivamente, en demanda de transparencia en la información y un sistema de monitoreo claro, abierto y medidas para evitar que catástrofes como ésta se repitan.
Al firmar la petición, los ciudadanos estarán enviando una carta directamente a ambos funcionarios con las siguientes exigencias:
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Información. Necesitamos datos reales y oportunos sobre las causas, los efectos y cómo manejarán esta emergencia.
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Monitoreo. Deben realizarse estudios dentro y fuera de las instalaciones respecto a la persistencia de tóxicos en suelo, agua, y de manera muy importante, en las personas que atendieron el accidente y la población afectada
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Indemnización. Pemex y Mexichem deben financiar estos estudios de monitoreo y asignar recursos suficientes para indemnizar a las familias de los fallecidos y brindar atención médica a los afectados así como resarcir el daño ambiental y las pérdidas económicas a las comunidades por las posibles suspensiones de actividades productivas en la zona, como la pesca, el comercio de alimentos, etcétera.
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Un nuevo modelo de manejo de sustancias tóxicas en el país. La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) debe fortalecer la regulación del uso de sustancias químicas peligrosas en el país ya que en México se permite el manejo de cientos de sustancias prohibidas en otros países del mundo y vigilar el cumplimiento de la normatividad vigente en el manejo de tóxicos.
Greenpeace invita a la sociedad a sumarse a la petición ¡Queremos la verdad! #Coatzacoalcos
