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Para expertos en obra pública y transparencia, el de la española OHL es un escándalo de presunta corrupción mucho más grave que el de Grupo Higa, por una sola razón: las posibilidades de que se esclarezca el caso, en su totalidad, son mínimas.

Ciudad de México, 5 de octubre (SinEmbargo).– La mañana del 5 de marzo, hace siete meses, el audio de una llamada entre Apolinar Mena Vargas, entonces Secretario de Comunicaciones del Estado de México, y Pablo Wallentin Crawford, director de Relaciones Institucionales de Obrascón Huarte Lain (OHL) México, dejó entrever una estrecha relación entre la empresa y los funcionarios de la entidad. El asunto no quedó ahí. Después de ese día, a cada nueva llamada filtrada, correspondía el nombre de otro funcionario involucrado, y ya no sólo de la entidad, el Gobierno federal también quedó involucrado en una supuesta red de corrupción que habría beneficiado por lo menos durante 15 años a la empresa española en el país.

Durante estos siete meses, se han anunciado auditorias internas, federales y estatales. OHL España se ha indignado por el comportamiento de sus empleados. Pero durante este periodo, OHL sigue operando ocho proyectos carreteros y de transporte que tienen las más altas afluencias del país que fue forjando a través de quince años de la mano de funcionarios priistas mexiquenses.

De acuerdo con especialistas en el tema, el de OHL puede ser un escándalo que supera la dimensión del de Armando Hinojosa Cantú, dueño de Grupo Higa y que vendió casas a Enrique Peña Nieto y Luis Videgaray Caso, por tratarse de una empresa extranjera y por la opacidad que cada administración estatal le añade al caso.

OHL es uno de los principales operadores del sector privado en materia de infraestructura de transporte en el país, por el número de concesiones asignadas y kilómetros administrados, y la séptima compañía más grande del mundo en el sector de infraestructura del transporte.

Los proyectos que tiene actualmente  OHL  en México le otorgan, anualmente, el 15 por ciento de sus ganancias a nivel mundial (524 millones de euros en 2013). Se trata de seis autopistas de peaje, de las cuales tres se encuentran en operación, dos en construcción y una en fase de pre-construcción, ubicadas en las zonas urbanas con mayor tráfico de vehículos –Distrito Federal, Estado de México y Puebla–, que en conjunto representan el 31 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de México y el 27 por ciento de la población nacional que utiliza 8.6 millones de vehículos.

OHL cimentó sus bases en México desde el año 2000, en un estado controlado por un solo partido político desde hace décadas: el Partido Revolucionario Institucional (PRI). Cada nuevo Gobernador se ha encargado de proteger al anterior y al mismo tiempo, ha creado sus propios lazos.

A la fecha, según los audios publicados, una buena parte de funcionarios clave en los sectores económicos del país, parecen estar coludidos en los escándalos de OHL: Gerardo Ruiz Esparza, Emilio Lozoya Austin y Enrique Ochoa Reza, a nivel federal, y Apolinar Mena Vargas y Eruviel Ávila Villegas, a nivel estatal.

También, por cuestiones de transparencia en la entidad y porque aún no se ha establecido una Ley de archivos, es complicado acceder a documentos de anteriores administraciones.

Según el diario Plana Mayor, el 70 por ciento de los ingresos de OHL México provienen de las concesiones que tiene en el Estado de México, de lo que obtuvo entre las administraciones de Montiel Rojas y Peña Nieto, y de lo que continúa operando con Eruviel Ávila Villegas, el Circuito Exterior Mexiquense, el  Aeropuerto Internacional de Toluca, el Viaducto Bicentenario, el primer tramo del Tren Interurbano México-Toluca y la autopista Atizapán-Atlacomulco.

La información contenida en su Reporte Anual 2014, enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), los ingresos por cuotas de peaje pasaron de 2 mil 566.7 millones de pesos en 2012, a 3 mil 149.4 millones de pesos en 2013, y a 3 mil 728.6 millones de pesos en 2014. En este último año, sus ingresos consolidados ascendieron a 16 mil 911 millones de pesos.

“El tema de OHL es un ejemplo de lo que no está funcionando bien en el país, y por estar involucrada una empresa internacional, se debe llegar hasta las últimas consecuencias para que se vuelva un estudio de caso de lo que no debe de ocurrir, obra pública opaca, funcionarios involucrados, dineros públicos que van y vienen en beneficio de unos cuantos, y que terminan siendo un costo de oportunidad para el desarrollo del país para tener obras públicas eficientes”, dijo al respecto Armando Ríos Piter, Senador por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), y quien no desestimó la posibilidad de llevar el caso ante instancias internacionales.

OHL, de acuerdo con notas periodísticas de medios nacionales e internacionales, suele figurar como una constructora consentida por los gobiernos, ya que en la mayoría de las ocasiones reciben los contratos de los proyectos más costosos, redituables y de más larga duración –con licitaciones de hasta 99 años desde 2005–. Por otro lado, la constructora también es una figura de control para los gobiernos, ya que es una compañía que en reiteradas ocasiones lleva los conflictos a tribunales en caso de no gozar de los beneficios que requiera.

LOS BRAZOS ABIERTOS DE MONTIEL

La empresa de Miguel Villar Mir lleva en México 15 años. Llegó al Estado de México, donde tuvo un gran recibimiento por parte del entonces Gobernador Arturo Montiel Rojas, que en el año 2000, su administración estaba en el segundo año.

OHL llegó con uno de los empresarios más importantes del país, Valentín Diez Morodo, ex propietario de Grupo Modelo y un personaje importante de la élite de poder mexiquense, según explicó Francisco Cruz Jiménez, periodista y escritor especializado en temas del poder político en el Estado de México y autor de libros como Los Juniors del Poder y Los Golden Boys.

En este sentido y tras la aparición de la figura de José Andrés de Oteyza, quien de 1976 a 1982, formó parte del Gabinete de José López Portillo, como titular de la Secretaría de Patrimonio y Fomento Industrial, y tiempo después fue directivo de OHL, que se consolida la influencia de la firma española.

“OHL encontró en el Estado de México, políticos hispanófilos. Montiel enfocó muchos esfuerzos en buscar en su familia raíces en España […] entonces la llegada de estos empresarios fue una seducción. Montiel es un político muy ambicioso que quería ser presidente de la república y que además tenía ganas de trascender. Se empieza a crear una historia, pero nunca la hicieron pública porque no fue candidato. Y en eso, la llegada del cártel español, les cayó a la medida. Los españoles cayeron en blandito”, comentó Cruz Jiménez en entrevista con SinEmbargo.

En febrero de 2003, OHL ganó la licitación para construir el Circuito Exterior Mexiquense, obra que tuvo un costo total de 24 mil 921 millones de pesos y le otorga a la empresa el 50 por ciento de sus ingresos en México; a 2014, el promedio de vehículos que transitaron por esta vía fue de 283 mil 241 al día, con un costo promedio de 22.8 pesos.

Los 110 kilómetros que atraviesan 20 municipios terminaron de construirse en 2011 con Enrique Peña Nieto, y con Eruviel Ávila Villegas se aprobó la quinta modificación al título de concesión que extiende el contrato hasta el año 2051.

Otra licitación que la administración montielista le otorgó, fue la del Aeropuerto Internacional de Toluca, para su ampliación, mejoramiento y desarrollo; el periodo de tiempo que le otorgó fue de 2005 hasta el año 2055.

Actualmente OHL es propietario del 49 por ciento de dicho aeropuerto, que es el segundo más grande en el área metropolitana de la Ciudad de México.

“En 2002 es cuando formalmente se le ubica a OHL. Arturo Montiel toma posesión el 15 de septiembre de 1999; los primeros acercamientos con OHL y Otezya son de 2001; en 2002 se consolidan; en 2003, le adjudican su primera obra. Como sacado de la manga, se vuelven los principales operadores del sector privado en el Estado de México”, precisó Francisco Cruz.

LA LLEGADA DE PEÑA NIETO

Como Gobernador del Estado de México (2005-2011), Enrique Peña Nieto, señala Cruz Jiménez, no solo se heredó los lazos con OHL a través de José Andrés de Oteyza, sino que también creó los propios, gracias a Luis Videgaray, Emilio Lozoya Austin y Gerardo Ruiz Esparza.

En 2008, en el Foro Económico Mundial de Davos, Suiza, se le otorgó a Peña Nieto, entonces de 40 años, el premio de “Líder Mundial Juvenil”. Videgaray y Esparza formaron parte de la comitiva que acompañó al entonces Gobernador.

“Después de esa visita comenzaron los rumores sobre las verdaderas razones por las que el Secretario de Comunicaciones había viajado a Europa y se dijo que fue para establecer un contacto directo con empresarios españoles. Meses después, OHL ganó la licitación SCEM-CCA-01-07 para la construcción y operación del Viaducto Bicentenario”, dijo el escritor, quien además plantea que el acercamiento oficial con la empresa española fue hasta tres años después entre Luis Videgaray Caso y Emilio Lozoya Austin, quien antes de ser director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), fue parte del Consejo de Administración de OHL y, sin renunciar a la empresa, formó parte del equipo de campaña de Peña Nieto en 2012, como coordinador de Vinculación Internacional.

“Peña Nieto, para 2011, ya encaminado a la candidatura presidencial, tiene un grupo poderoso de apoyo a la campaña. OHL era parte de ese grupo en el que también estaba Hinojosa Cantú. Serían el apoyo para presentarlo a la comunidad empresarial grande, finalmente el Estado de México, a pesar de su tamaño e importancia económica, no deja de ser una entidad, y para entrar a las grandes ligas del empresariado, y hay que ir con de otras formas. A eso lo ayudó OHL, se ayudaron mutuamente”, sostuvo Cruz Jiménez.

El Viaducto Bicentenario es la obra que ha sido más cuestionada a partir de los audios. La obra, que tuvo un costo de 10 mil 71 millones de pesos, es en totalidad de OHL hasta el año 2038. Desde finales de 2010 a 2014, las ganancias por cobro de peaje ascienden a los 504 millones 200 mil pesos.

La intensidad media diaria de tráfico aumentó 15.7 por ciento al pasar de 25 mil 702 vehículos en 2012 a 29 mil 749 en 2013. Estos aumentos se deben principalmente a la apertura escalonada de las diferentes fases de la Autopista Urbana Norte, que conecta al Estado de México y al Distrito Federal, y que también es operada por OHL.

En unos de los audios publicados recientemente, se involucra a Lozoya Austin; aparece la voz del presidente del Consejo de Administración de OHL México, José Andrés de Oteyza, invitando al directivo de Pemex al hotel Mayakobá, en la Riviera Maya, que es propiedad de OHL.

Ya entre 2013 y 2014, la empresa española y el Gobierno federal han establecido cinco contratos con un monto total de 2 mil 456 millones 469 mil 577 pesos, de los cuales tres contratos fueron celebrados con Pemex Refinación en 2013, en licitaciones públicas nacionales e internacionales para la construcción de plataformas, poliductos y gasoductos. Estos contratos con la subsidiaria de Petróleos Mexicanos fueron por 2 mil 398 millones 427 mil 277 pesos, y se adjudicaron a grupos de cinco empresas cada uno, en los cuales OHL utilizó dos diferentes filiales (OHL Industrial SL y OLH Industrial México).

¿QUIÉN INVESTIGA?

A raíz de los audios, el Gobierno del Estado de México y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes anunciaron una serie de auditorias sobre las obras otorgadas a OHL. En lo que respecta a las auditorías solicitadas por la SCT, Virgilio Andrade, titular de la Secretaría de la Función Pública (SFP), anunció a finales de mayo, que se investigarían todas las obras de OHL en las que estuviera involucrado dinero federal.

Según la información que OHL publicó a través de la BMV, las auditorías al Viuaducto Bicentenario, verificarían las operaciones llevadas a cabo, las modificaciones de la licitación y que estas hayan estado acorde a la legislación aplicable. Sin embargo, Apolinar Mena Vargas, ex Secretario de Transportes del Estado de México, cambió –apenas en febrero de 2015– una serie de modificaciones al Código Administrativo del Estado, en el apartado de las concesiones de autopistas estatales, con lo que se le permitía a las empresas extender la concesión de las vías a pesar de que se haya recuperado lo invertido en el proyecto. El ahora Secretario Técnico del Gobierno de Eruviel lo calificó como un “incentivo” a los proyectos.

“Conocer todo lo que representa OHL es complicado. Está protegido por toda la estructura estatal, ahora federal y por un grupo de empresarios españoles que radican en Toluca. El gobierno no tiene voluntad; a nivel discursivo sí, pero ya en los hechos es claro que Peña Nieto no va a permitir que se investigue OHL, porque él tendría que ser investigado”, agregó Cruz Jiménez.

Durante la entrevista, el escritor lanzó un cuestionamiento: “¿quién se atreve a pelearse con Peña?”. Descartó a Eruviel Ávila, quien persigue la posibilidad de ser candidato presidencial, además de que él, su gabinete, el dirigente del PRI en el estado y ahora las diputaciones, son gente de Arturo Montiel. También descartó a Ruiz Esparza.

Otro factor que se agrega a la opacidad del tema, es la ausencia de oposición en la entidad que, dice, es controlada por el grupo Atlacomulco, al que pertenecen Arturo Montiel y Enrique Peña Nieto.

Y concluyó: “Hay un cochinero en el Estado de México que difícilmente se va a conocer porque ellos controlan todo a través de la SCT y a través de Eruviel. ¿Quién o quienes lo van a investigar? ¿Virgilio Andrade?”.