Posts Tagged ‘Los detectives salvajes’

Roberto Bolaño: Su novela póstuma desata alboroto de viudas, albaceas, amantes y demandas

sábado, diciembre 3rd, 2016

La publicación de una última novela póstuma del autor chileno desencadena un nuevo alboroto de recriminaciones entre sus personas más cercanas, incluyendo a Ignacio Echevarría, Jorge Herralde y, por primera vez en 10 años, su viuda y albacea Carolina López.

Foto del escritor chileno Roberto Bolaño, tomada en Barcelona el 13 de septiembre de 2002, durante la presentación de su obra "Amberes". Foto: EFE

Roberto Bolaño, foto tomada en Barcelona el 13 de septiembre de 2002, durante la presentación de su obra “Amberes”. Foto: EFE

Por Marta Peirano

Ciudad de México, 3 de diciembre (SinEmbargo/Vanguardia).– La sexta novela de Roberto Bolaño empieza diciendo: Ésta será una historia de terror. En el caso que nos ocupa, es conveniente advertir al lector que no se trata de una historia literaria, aunque en el centro hay un escritor. Ésta es más bien una telenovela, una historia de desamor, decepciones, oportunismo, una trágica muerte y mucho dinero. Sus protagonistas son cinco: el editor de Bolaño, su viuda, su mejor amigo, su amante y El Chacal.

LA MUERTE DE ROBERTO BOLAÑO

Todo empieza el 15 de julio de 2003, cuando muere Roberto Bolaño en el hospital Vall d’Hebron de Barcelona. Tenía 50 años y una insuficiencia hepática. La persona que le llevó a urgencias no era su mujer.

Bolaño estaba casado con Carolina López, con la que tenía dos hijos, Lautaro y Alejandra. Pero había conocido a Carmen Pérez de Vega en un tren a Barcelona en 1997 y pronto empezaron una relación. Después de años oscilando entre las dos mujeres, Bolaño había abandonado su casa familiar para vivir entre el piso de la rambla de Joaquim Ruyra, en Blanes. Carmen fue quien le llevó a urgencias y también la que, pocas horas más tarde, llamó a su mujer. “Mi responsabilidad era relativa –diría mucho más tarde, en una rara entrevista–. Legalmente, estaba casado con ella y tenía dos hijos. Yo no podía tomar ninguna decisión”.

Bolaño murió 15 días más tarde, esperando un trasplante de hígado. Poco después Carolina, su viuda, heredera y albacea literaria, empezó a trabajar en la edición de sus trabajos con Jorge Herralde, su último editor, y con Ignacio Echevarría, amigo íntimo de Bolaño. Enrolan como agente literaria a Carmen Balcells. Lo único que queda de la otra Carmen es una dedicatoria en uno de los cuentos de El gaucho insufrible, el último libro que le entregará a su editor Jorge Herralde. Dice, lacónicamente, “Para Carmen Pérez de Vega”. Esta dedicatoria desaparecería en ediciones posteriores.

LA VIUDA, EL AMIGO Y EL EDITOR

“Recién fallecido Bolaño – explicaba hace poco Echevarría– tuve la iniciativa de recopilar todos los artículos y charlas de los que tenía noticia y publicarlos bajo el título Entre paréntesis, por supuesto que con la complicidad –además de la autorización– de Carolina, con quien mantenía entonces una relación sin duda afectuosa”.

Asesora también la publicación de 2666, la novela que el autor había trabajado los últimos dos años y dejó pendiente de terminar para “después del trasplante”. En esa primera edición, de 2004, la viuda escribe que Echevarría era el amigo que Bolaño “designó como persona referente para solicitar consejo sobre sus asuntos literarios”. Tras una nueva recopilación de cuentos, titulada El secreto del mal, el afecto entre la viuda, el editor y sus amigo se empieza a desintegrar.

Echevarría asegura que la causa del distanciamiento fue que “durante los preparativos de El secreto del mal, yo había hecho alguna consulta a Carmen Pérez de Vega”. Y que ese mismo año, Carolina se pelea con Herralde por haberle encargado a Echevarría la edición del poemario La Universidad Desconocida, junto con otro amigo íntimo de Bolaño, el poeta chileno Bruno Montané.

DE BALCELLS Y ANAGRAMA A EL CHACAL Y ALFAGUARA 

Se sugiere que la viuda está retirando contacto y favores con todos los “cómplices” de Bolaño que conocen a la otra mujer, como Andrés Braithwaite, que la incluyó en los créditos de agradecimiento de la antología de entrevistas Bolaño por sí mismo, publicada por Ediciones Universidad Diego Portales. El propio Echevarría había incluido a Carmen en el índice onomástico de la primera edición de Entre paréntesis, pero lleva a una página donde ella no está. El 4 de noviembre de 2008 vencen los derechos de Balcells sobre su obra y Carolina firma con Andrew Wylie, más conocido como El Chacal.

Según Wylie, la viuda se le acercó en la Feria de Frankfurt con una propuesta irrechazable: “Una novela completa, mecanografiada y meticulosamente corregida a mano” por el autor, anterior a Los detectives salvajes. Era El Tercer Reich, que estaba acabada pero Bolaño consideraba irregular. Aunque la ruptura con Balcells genera críticas entre los amigos de Bolaño, los derechos volverían a casa, más o menos. Antes de morir Balcells, ella y el Chacal unieron sus catálogos en lo que hoy es una de las agencias literarias más grandes del mundo, Balcells & Wylie.

A partir de aquí, Herralde dice que se acabó el contacto. Anagrama publica siete libros póstumos entre el 2003 y el 2011 pero “solamente a través de agentes y abogados”. En diciembre del año pasado, Carolina vende la obra de Bolaño a Alfaguara, del grupo Penguin Random House.

Herralde asegura que no le dejaron pujar y que “los herederos no nos han retirado sus títulos por una cuestión de dinero, sino porque formábamos parte de aquellos amigos íntimos a quienes nos había presentado a Carmen como su novia, con la que yo mantenía un trato esporádico y cordial”.

Echevarría añade que la viuda elige el sello Alfaguara en lugar de la más apropiada Literatura Random House para esquivar a su editor Claudio López de Lamadrid, amigo de Bolaño y, por tanto, también cómplice de su indiscreción. La explicación de la viuda, que se manifestó por primera vez en una década, es que Herralde les ninguneaba.

“Mi pérdida de confianza en Herralde se inició en 2008, cuando revisé los contratos. Me percaté de que en 2005 Anagrama había formalizado sin mi autorización un pacto por el cual estábamos pagando comisiones mucho más altas de lo habitual”. Dice que Herralde se saltó los acuerdos y los tiempos de su contrato. Sobre Echevarría, que tuvo acceso al disco duro de Bolaño con todos sus contenidos, dice que “había difundido por correo electrónico a terceras personas el manuscrito inédito de dicha obra sin pedir mi autorización y antes de haber firmado contrato alguno” y que fue él mismo quien dimitió. Le recuerda que él fue el origen del falso rumor de que él era el legítimo albacea de Bolaño, cosa que este negaba hace unos días. Pero acaba diciendo que “es falso que Roberto compartiera su vida y los últimos seis años antes de su fallecimiento con Carmen Pérez”.

LA OBSESIÓN POR BORRAR A “LA OTRA” 

Durante los primeros años, Carmen Pérez de Vega se había mantenido en silencio, trabajando como maestra de educación especial, como había hecho antes de conocer al escritor. Diez años después, aceptó la invitación de la Corporación Cultural de Viña del Mar (Chile) como invitada especial del congreso Estrella distante, organizado en homenaje al aniversario de la muerte del escritor.

Allí habló por primera vez de su relación con Bolaño, y fue citada en varios medios de comunicación. Carolina presentó una demanda contra ellos en el Juzgado de Primera Instancia de Barcelona contra los diarios chilenos El Mercurio y La Tercera, exigiendo la desaparición de todo registro donde Carmen figure como pareja de Bolaño, para proteger su “derecho al honor y a la intimidad personal y familiar”.

Entre los demandados está la periodista María Cristina Jurado, por la entrevista que hizo a Carmen Pérez de Vega y por la que recibió el premio de la Asociación Nacional de la Prensa (ANP) en 2012. También se ha querellado contra Jordi Lloret y Darinka Guevara, autores del documental Estrella distante, por la misma razón.

En su libro de entrevistas con algunas de las personas más cercanas a Bolaño, incluyendo a Echevarría, Herralde, Rodrigo Fresán, Jorge Volpi, Ricardo Piglia y a Carmen Pérez de Vega, la periodista Mónica Maristain escribió: “Sin quererlo, se ha convertido en una figura innombrable (…), cuya presencia real algunos ponen en duda merced a la obsesión que ella despierta en la viuda y heredera legal de Bolaño, Carolina López”. Quedan por publicar un libro de cuentos, otro de poesía y el Diario de vida, cuya naturaleza es aún un misterio, igual que el final de este culebrón.

ESTE CONTENIDO ES PUBLICADO POR SINEMBARGO CON AUTORIZACIÓN EXPRESA DE ELDIARIO.ES. Ver ORIGINAL aquí. Prohibida su reproducción.

El espíritu de la ciencia-ficción: la CdMx y su magia en una novela inédita de Roberto Bolaño

sábado, octubre 29th, 2016

El espíritu de la ciencia-ficción transcurre en la Ciudad de México en los años 70 del siglo XX y narra la vida de dos escritores jóvenes que intentan vivir de la literatura en una ciudad en la que todo lo importante parece suceder en ese momento mágico y efímero que separa la noche del día. Se trata de una novela que sigue la metodología de trabajo habitual de Bolaño, previa al uso del ordenador: notas de escritura, borrador y redacción en limpio. Fue transcrita luego de su muerte.

Foto del escritor chileno Roberto Bolaño, tomada en Barcelona el 13 de septiembre de 2002, durante la presentación de su obra "Amberes". Foto: EFE

Roberto Bolaño, foto tomada en Barcelona el 13 de septiembre de 2002, durante la presentación de su obra “Amberes”. Foto: EFE

Por Carmen Sigüenza

Madrid, España, 29 de octubre (EFE).– “¿Me permite hacerle una entrevista?. –Sí, pero que sea breve. ¿Ya sabe que es usted el autor más joven que ha ganado un premio?. –¿De verdad?”. Así comienza la novela inédita de Roberto Bolaño, El espíritu de la ciencia-ficción, que se pone a la venta el 3 de noviembre y supone un acontecimiento editorial.

Publicada por Alfaguara –el sello de Penguin Ramdom House que se ha quedado con toda la obra del autor chileno (antes editada por Anagrama), tras llegar a un acuerdo con la Agencia Wylie, que representa los derechos de Bolaño–, ha sido considerada un “probable antecedente” de su gran obra, Los detectives salvajes.

“Acabo de hablar con uno de los organizadores. Me dio la impresión de que estaban conmovidos. -No sé qué decirle… Es un honor… Me siento muy contento. -Todo el mundo parece contento. ¿Qué ha bebido usted?. –Tequila. –Yo, vodka. El vodka es una bebida extraña, ¿no cree?. No son muchas las mujeres que lo tomamos. Vodka puro”, continúa esta primera página.

Y sigue: “No sé qué beben las mujeres. –¿Ah, no? En fin, da igual, la bebida de las mujeres es siempre secreta”.

Esta nueva novela forma parte de la Biblioteca Roberto Bolaño, proyecto que Alfaguara inició el pasado septiembre. Una colección que se abre con sus dos obras más simbólicas, Los detectives salvajes y 2666, y que incluirá también los 21 títulos que conforman el actual corpus literario del autor chileno.

Roberto Bolaño (Santiago de Chile, 1953–Barcelona, 2003), escritor de culto, uno de los últimos malditos del siglo XX y de los autores más influyentes de la Hispanoamérica, vivía para escribir y escribía para vivir, todo un universo creativo que ahora vuelve a ver la luz en un texto que se conservaba en el archivo personal del autor.

El espíritu de la ciencia-ficción, novela inédita de Roberto Bolaño. Foto: Especial

El espíritu de la ciencia-ficción, novela inédita de Roberto Bolaño. Foto: Alfaguara

Escrita a comienzos de la década de los ochenta, El espíritu de la ciencia-ficción transcurre en la Ciudad de México durante los años 70 del siglo XX y narra la vida de dos escritores jóvenes que intentan vivir de la literatura en una ciudad en la que todo lo importante parece suceder en ese momento mágico y efímero que separa la noche del día.

La novela mezcla rasgos propios de la literatura realista con otros fantásticos de carácter onírico en la descripción de los sueños de uno de los protagonistas.

Roberto Bolaño mencionó en varias ocasiones El espíritu de la ciencia-ficción en su correspondencia, desde fechas tan tempranas como 1980.

La novela está fechada en Blanes (Gerona, noreste de España), en 1984. Y se sabe que fue un proyecto que mantuvo durante bastante tiempo, incluso después de ese año.

Corresponde a una etapa en que el autor escribió obras como Monsieur Pain, Consejos de un discípulo de Morrison a un fanático de Joyce -escrita a cuatro manos con A. G. Porta-, el cuento El contorno del ojo y La universidad desconocida, título este último que, de hecho, se incorpora en esta misma ficción como entidad fantasmal y motivo narrativo.

Se trata de una novela que sigue la metodología de trabajo habitual de Bolaño, previa al uso del ordenador: notas de escritura, borrador y redacción en limpio. Fue transcrita después de su muerte.

Esta novela póstuma será presentará en la Feria del Libro de Guadalajara (México), que se celebrará del 26 de noviembre al 4 de diciembre y que está dedicada este año a América Latina. EFE

Roberto Bolaño: Entre más detractores, más lectores

sábado, febrero 13th, 2016
Roberto Bolaño nació en Santiago de Chile en 1953 y murió en Blanes, España, en 2003. Foto: Cortesía Grau Serra

Roberto Bolaño nació en Santiago de Chile en 1953 y murió en Blanes, España, en 2003. Foto: Cortesía Grau Serra

El conflicto literario del célebre autor chileno hace mella en los lectores asustadizos, asegura el joven escritor mexicano Franco Félix por medio de la cual pone en el patíbulo a aquellos que le reclaman al creador de Los detectives salvajes, una historia.

Por Franco Félix

Ciudad de México, 13 de febrero (SinEmbargo).- Cada julio, en un nuevo aniversario de la muerte del escritor chileno Roberto Bolaño (1953-2013), las redes sociales se llenan de fotografías, frases, portadas de sus libros, etcétera.

Los lectores que lo consideran una figura literaria lo recuerdan con cariño. Los que no lo conocen caen en el error de cliché y lo confunden con Chespirito; pero también están los otros, los lectores que encuentran en el chileno a un autor sobrevalorado. Y no es extraño que Bolaño no sea apreciado de la misma manera por cada uno de los lectores (es bastante normal la polarización, a unos les agrada, a otros no; pasa con todos los escritores).

Lo curioso es la campaña anti-bolañesca. Ese afán de rebajar los méritos que su propia pluma ha logrado. Y en este ímpetu por revelar un Bolaño sin potencia literaria se origina un impulso mucho mayor al mito de Roberto Bolaño. Entre más detractores, más lectores.

Es muy simple, es una fórmula bastante sencilla: no me gusta un libro, lo cierro, lo hago a un lado. Eso pasa con muchos autores que, en lo particular, me aburren. No me interesa iniciar una empresa para derrocar autores encumbrados. Simplemente, no hablo de ellos, no formo parte de la bola de nieve que rueda. No los leo.

Entonces, ¿cuál es el resentimiento de los detractores?

La mayoría de los “críticos” de la obra (esta mayoría sólo ha leído Los detectives salvajes) de Roberto Bolaño se sube al ring de la discusión con los siguientes adjetivos  y apreciaciones–lejos del oficio de la crítica, por supuesto-: aburrido, largo, elitista, pretencioso, sin historia. Tengo una pregunta para ellos: ¿Qué hora es? ¿El siglo XIX? Que un libro sea sancionado por no tener historia es tan imbécil como exigirle al Ulises que nos cuente algo más que el recorrido que hace Leopold Bloom en Dublín.

Bolaño ha muerto, sus libros no, dice el autor de Kafka en traje de baño. Foto: Cortesía Joel García

Bolaño ha muerto, sus libros no, dice el autor de Kafka en traje de baño. Foto: Cortesía Joel García

Creía, ingenuamente, que habíamos dejado atrás estas nociones anticuadas de la Literatura desde Vida y opiniones del caballero Tristram Shandy de Laurence Sterne, de la cual el crítico literario Samuel Johnson comentó: “Nada extravagante puede perdurar”. Noticias de último momento: Tristram Shandy inaugura la novela moderna que, es verdad, puede resultar aburrida para los lectores que se acomodan de maravilla en el orden decimonónico.

Sí, perduró.

SU PASIÓN POR LA LITERATURA

El rencor de los lectores, podemos decir a quemarropa, se halla en el contenido, la historia que cuenta el escritor, su pasión por la misma literatura. No he advertido ningún opositor que refleje su angustia por la construcción literaria, el estilo, sus licencias, su sintaxis, nada, no hay. Todos transitan por la misma vereda: sus personajes son malditos trasnochados.

El conflicto literario de Bolaño hace mella en los lectores asustadizos. Se escurre entre sus manos la posibilidad de un mundo execrable que no tiene como protagonista a un joven escritor, el gran tema de los escritores jóvenes. Recordemos que Bolaño no fue escritor, sino hasta el final de su vida. A mí me parece mucho más pretencioso el cosmopolitismo en provincia que una novela sobre tres sujetos investigando el paradero de Cesárea Tinajero.

Por otro lado, están los escritores antipáticos que emulan las viejas prácticas de la genialidad (+genio / +intratable): hacen de su personalidad un puño de malos hábitos y de animadversión. Son malos, son más malditos que los malditos desde el pupitre, desde su MacBook Pro, todo lo detestan, todo está mal. Le reprochan a Bolaño haber perdido la marginalidad por acumular lectores, de institucionalizarse, mientras ellos tienen aspiraciones de grandeza editorial. Ellos son magníficos, van en contra de la corriente. Son únicos.

¡Ah, qué detractores!

Hablemos de otros críticos literarios. Susan Sontag estaba fascinada con la obra de Bolaño. En el New Yorker, dedicó su columna a la revisión de Nocturno en Chile. Su colaboración estaba construida principalmente por elogios. By Night in Chile, traducida así al inglés, resultó una obra muy bien aceptada por el público estadounidense en 2003. Ese mismo año, el 15 de julio, el autor chileno perdería la vida. Meses después, en octubre, al recibir el Premio Príncipe de Asturias de las Letras, ella se referiría a Bolaño de la manera siguiente: “De lo que he leído en los últimos años, me gusta mucho Roberto Bolaño. Es una pena que haya muerto tan joven. Escribió mucho y estaba empezando a ser traducido al inglés, pero le quedaba tanto por escribir”. Y vaya que empezaba a ser traducido.

Estados Unidos descubrió a Bolaño, uno de los escritores latinoamericanos más vendidos en ese país gracias al agente literario Andrew Wylie, el Chacal. La editorial estadounidense New Directions, que fuera fundada en 1936 por James Laughlin, apostó por el chileno y en su catálogo se encuentran todos los títulos de su repertorio, quince libros que van desde La pista de hielo (The Skating Rink en inglés) hasta La universidad desconocida (Unknow University).

El New York Times Review of Books de 2008 lo colocó en los ocho mejores libros escritos. Pero quizá el mayor impacto que elevó las ventas a niveles estratosféricos fue la recomendación de Oprah Winfrey en su revista para mujeres. Nunca antes se había visto a los lectores estadounidenses tan ávidos por un escritor latinoamericano, no desde aquel artificioso Gabo y su último disparo literario Cien años de soledad (1982).

Pero no fue Estados Unidos el primero en reconocer a Bolaño. Antes, Francia había advertido la avalancha mediática. El suplemento Libération dedicó seis páginas y la portada a revisar su obra. Bolaño alcanzó a ver la punta del iceberg. Luego Alemania e Italia empezaron a traducirlo. El mito se inauguraba con la publicación de su obra en otros países. Y esto no es algo que no experimente cualquier escritor que sea traducido a otros idiomas: si tiene fuerza narrativa su trabajo literario será observado, por unos apreciado, por otros vapuleado. Bolaño es como cualquier otro autor, el problema, insisto, está en la recepción de sus contenidos.

Hay algo que no terminan de entender los detractores y quizá convenga recordarlo otra vez: Sus libros no son autobiográficos, sino autoreferenciales. La vida no arde ni encendiendo todas las hojas de todos los libros en sus bibliotecas. Mientras que en algunos párrafos de Bolaño, a pesar de suscribirse a la ficción, hay mucha más vitalidad que cualquiera de nuestras aburridas vidas de biblioteca. Reduzcan su rencor, su campaña, Bolaño está muerto, sus libros no.

Quién es Franco Félix: Hermosillo, 1981. Estudió Literaturas Hispánicas. Ha publicado en revistas como Vice, La Tempestad, Tierra Adentro, Luvina, Pez Banana, Diez4, entre otras. Obtuvo la beca Edmundo Valadés de Apoyo a la Edición de Revistas Independientes en 2009 por la revista Shandy; la beca Jóvenes Creadores en categoría de Novela (2011-2012) con Teoría del Asperger y la beca Residencias Artísticas México-Argentina 2014 con La maldición Naigu, las tres del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes. Fue ganador del Concurso de Libro Sonorense 2014 con Kafka en traje de baño (NitroPress), en género de crónica, obtuvo también el Décimo Premio Nacional Rostros de la Discriminación Conapred 2014 con “El origen del autismo” y el Premio Binacional de Novela Joven Border of Words 2015 por Los gatos de Schrödinger.