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El agua, el recurso vital que debe cuidarse y usarse con responsabilidad

martes, marzo 22nd, 2022

Parte del compromiso de la IMCC con México y el planeta es cuidar el agua a través de proyectos e iniciativas que realizan tanto al interior como al exterior de sus operaciones en beneficio de las comunidades.

Ciudad de México, de marzo (SinEmbargo).- Tener acceso al agua potable es un derecho humano básico para vivir dignamente, la importancia del acceso al agua es tal, que dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible plasmados en la Agenda 2030, es prioritario promoverlo, así como también su saneamiento, para lograr el bienestar y desarrollo de la sociedad. Con esto en mente, la Industria Mexicana de Coca-Cola (IMCC) reitera su compromiso de utilizar el agua de forma responsable, además de mejorar la seguridad hídrica donde más se necesita.

Datos de la Universidad Nacional Autónoma de México señalan que entre 12.5 y 15 millones de habitantes en México no tienen acceso a agua potable; de acuerdo con la CONAGUA, el sector agrícola concentra el 76 por ciento de los usos consuntivos del agua, el 14.4 por ciento al uso doméstico, 4.7 por ciento a termoeléctricas y solo 3 por ciento a uso industrial, mientras que el resto se destina a servicios y al sector agroindustrial.

La Industria Mexicana de Coca-Cola se ha planteado la meta de promover el acceso al agua limpia para más de un millón de personas hacia 2030 en México. Para esto y de la mano de Fundación Coca-Cola México (FCC), cuenta con programas de acceso y conservación para el reabastecimiento de cuerpos de agua como manantiales, ríos y lagos.

De 2010 a 2020 de la mano de FCC lograron beneficiar a más de 500 mil personas a través de proyectos como cisternas comunitarias para el lavado de manos y sistemas de filtración, captación de agua de lluvia con techos captadores, ollas captadoras, instalación de filtros purificadores en hogares, concientización sobre la higiene y cuidado del agua, entre muchos otros.

En este sentido, es que ha presentado la iniciativa “El Amor Multiplica”, con el cual busca continuar construyendo alianzas para maximizar el alcance de cada iniciativa en favor de las comunidades y el planeta.

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Además, la IMCC trabaja diariamente para mejorar la calidad y cantidad de agua en el país, a través del manejo responsable del recurso, restableciendo ecosistemas y modernizando infraestructura.

La IMCC trabaja diariamente para mejorar la calidad y cantidad de agua en el país. Foto: Fundación Coca Cola

Parte de su meta global es reducir el uso de este recurso en sus procesos productivos y hasta ahora han conseguido tratar el 100 por ciento de las aguas industriales derivadas de su producción, así como disminuir en un 36 por ciento el consumo de agua en sus plantas embotelladoras y buscan aumentar la eficiencia de sus plantas para seguir aumentando este porcentaje.

TRATAMIENTO DE AGUA URBANA PARA REAPROVECHAMIENTO DE LAS COMUNIDADES

Una de las acciones de la a Industria Mexicana de Coca-Cola es la construcción de 4 humedales basados en la naturaleza con la capacidad de regresar en promedio entre 3 y 5 millones de litros de agua limpia al día cada uno, y para esto se realizó una inversión de 170 millones de pesos. El primero de ellos se inauguró en 2021 en Cihuatlán, en Jalisco de la mano con el gobierno municipal y estatal.

Los humedales usan plantas de ornato para la eliminación de bacterias y olores del agua urbana, promueven un proceso sostenible e integran tecnologías amigables con el medio ambiente. El agua tratada será reaprovechada por las comunidades para su uso en proyectos productivos, los cuales generan a su vez un ingreso importante para las familias mexicanas.

PROGRAMA NACIONAL DE REFORESTACIÓN Y COSECHA DE AGUA

El Programa Nacional de Reforestación y Cosecha de Agua contribuye, a través de la reforestación, a la restauración ecológica de sitios clave para la recarga de mantos acuíferos con el objetivo de devolver más del 100 por ciento del agua usada en los productos de la IMCC, un dato interesante es que además contribuye a la generación de más de 115 mil empleos.

La Industria Mexicana de Coca-Cola desarrolló el Programa Nacional de Reforestación y Cosecha de Agua, junto a Fundación Coca-Cola y su alianza con Pro-Natura, así desde el 2007 se ha logrado plantar más de 80 millones de árboles que contribuyen a la absorción de agua en la tierra, reabasteciendo así los manantiales, ríos y lagos.

A través de la reforestación se contribuye a la restauración ecológica de sitios clave. Foto: Fundación Coca Cola

OLLAS CAPTADORAS DE AGUA Y CISTERNAS

La IMCC ha impulsado la instalación de más de 35 ollas captadoras de agua a través de Fundación Coca-Cola México. Estas ollas captan y acumulan el agua de lluvia para las comunidades, principalmente para ser empleadas en servicios domésticos y actividades productivas como la agricultura y ganadería, así como apoyo en el riego de viveros comunitarios.

Las cisternas de agua son un excelente medio de provisión de agua para uso doméstico, riego de zonas reforestas y huertos de traspatio, así como promotoras de un manejo responsable de agua. Al año pueden almacenar 7 mil 488 m3, que equivale a servir 37.4 millones de vasos de agua. La IMCC ha instalado alrededor de 500 cisternas comunitarias, demostrando el aprovechamiento de este recurso para la comunidad.
Juntos somos Coca-Cola, y contigo, ¡#ElAmorMultiplica!

“El Terrero” cuidó su bosque desde hace años. Hoy la sequía lo trata mucho mejor

lunes, julio 26th, 2021

El bosque de Cerro Grande cuenta con una amplia diversidad forestal que lo convierten en un elemento fundamental para el ciclo del agua, con la que se benefician unos 300 mil habitantes de Colima y algunas comunidades Jalisco.

Por Mariana González-Márquez

Colima (México), 26 jul (EFE).- Los habitantes de la comunidad “El Terrero”, en el occidental estado mexicano de Colima, cuidan con dedicación y paciencia el bosque de Cerro Grande para asegurar su conservación y el abastecimiento de agua de la región, que enfrenta una grave sequía.

Cerro Grande es una pequeña parte de la Reserva de la Biósfera de la Sierra de Manantlán, un área natural protegida federal que genera el 80 por ciento del agua que llega a las ciudades de Colima y Villa Álvarez, dos de las más importantes del estado.

La amplia diversidad forestal de la zona hace a esta área un elemento fundamental en el ciclo del agua, sin ella, unos 300 mil habitantes de Colima y de algunas comunidades del vecino estado de Jalisco se quedarían sin el preciado líquido.

“Los bosques atraen el agua cuando llueve por su composición geomorfológica. La vegetación atrapa el agua, la infiltra al subsuelo y las rocas de la zona facilitan la formación de ríos subterráneos hasta que el agua emerge en los manantiales de las faldas del Cerro Grande”, explicó a Efe Angélica Jiménez, coordinadora de proyectos en Colima para la Fundación Manantlán.

El principal de estos manantiales se encuentra en la comunidad indígena de Zacualpan. De ahí el organismo regulador del agua de Colima la distribuye a las casas para luego volver a recolectarla, sanearla y verterla de nuevo al subsuelo.

EN BUSCA DEL EQUILIBRIO

Mariano Jiménez Duarte, nacido en el ejido “El Terrero” a 220 metros sobre el nivel del mar, se ha dedicado desde joven a cuidar el bosque y se dio cuenta de que esto no es posible sin involucrar a los pobladores que además se benefician de los recursos que brinda este ecosistema.

En su camioneta ha explorado los lugares más recónditos de Cerro Grande y también ha trabajado con la comunidad y los especialistas para saber cómo proteger el bosque.

Ahora forma parte del consejo de vigilancia de la comunidad y desde hace dos décadas es uno de los que ha impulsado y negociado un mecanismo para que algunos usuarios del Organismo intermunicipal de Agua potable de Colima den a la comunidad una compensación por los servicios ambientales que realizan.

Pobladores cuidan el bosque de Cerro Grande, en Colima.

Estanque de agua en la zona boscosa de Cerro Grande, en Minatitlán. Foto: Francisco Guasco, EFE

“El mecanismo ayuda a que Cerro Grande se conserve como se ha hecho por muchos años. El cerro tiene muchas áreas con encino y pino y donde más hay agua es en las partes donde hay más encino”, asegura.

Al no haber nacimientos de agua en Cerro Grande los pobladores recolectan el agua de lluvia en albercas naturales, pero en tiempo de estiaje se quedan sin agua y deben solicitar que la suban en pipas (cisternas).

RETRIBUIR EL TRABAJO DE CONSERVACIÓN

El trabajo de los pobladores de “El Terrero” y otras comunidades cercanas a Cerro Grande fue tomado por la revista científica Nature como ejemplo de servicios ambientales que involucran a todos los ámbitos de la sociedad.

Angélica Jiménez ha acompañado a la comunidad desde el año 2000 y gracias a la iniciativa y la insistencia de los pobladores lograron modificaciones a tres diferentes leyes estatales para tener el “Mecanismo compensatorio por servicios ambientales hidrológicos”.

Con este esquema de carácter voluntario los usuarios del agua aportan recursos económicos que, junto a los de organismos públicos y privados, se destinan a proyectos de conservación en cinco comunidades de Colima y dos de Jalisco, además de asegurar su bienestar en materia de vivienda, empleo y salud.

Cuando Cerro Grande fue incluida en el polígono protegido de la Sierra de Manantlán hace poco más de tres décadas las comunidades aceptaron limitar algunas de sus actividades productivas como el aprovechamiento de la madera, la agricultura y ganadería intensiva a cambio de participar en proyectos de conservación, turismo y educación ambiental.

Pobladores cuidan el bosque de Cerro Grande, en Colima.

El ejido “El Terrero” se encuentra en la zona boscosa de Cerro Grande ubicado en la localidad de Minatitlán.
Foto: Francisco Guasco, EFE

“Las comunidades asumen costos por la conservación sin que se genere una compensación (económica). Han aceptado tener un área natural protegida y asumieron la tarea de ser los conservadores de la zona, (…) porque son piezas claves en el manejo de los ecosistemas para que sigan funcionales y sanos”, indicó.

Tanto los pobladores como organizaciones ambientales locales, junto con la Universidad de Colima y la Universidad de Guadalajara, buscan nuevas modificaciones para que el mecanismo obligue a los usuarios del agua potable a dar esta compensación para financiar proyectos sociales.

“Nos interesa mucho conservar porque el Cerro es una parte de nosotros, de la gente que ha vivido aquí desde nuestros abuelos. Lo que reciben las comunidades son servicios ambientales, con eso hacemos guardarrayas para el fuego, arreglamos los caminos o las zonas destinadas al turismo”, concluyó Mariano Jiménez.

Iberoamérica, la región con mayor disponibilidad de agua pero con más inequidad en su distribución

jueves, noviembre 1st, 2018

De acuerdo con el Tribunal Latinoamericano del Agua, hoy en día alrededor de 77 millones de personas aún no cuentan con acceso al agua potable en la región.

 Madrid, 1 de noviembre (EuropaPress).-  Iberoamérica es la región con una mayor disponibilidad de agua de todo el mundo. Dispone del 33 por ciento del total de recursos hídricos del planeta, lo que supone una dotación per cápita de 22 mil 929 metros cúbicos al año.

Sin embargo, esta abundancia de agua no es sinónimo de que su distribución sea equitativa. De hecho, en los países de la región que tienen unas mayores reservas de agua, como Colombia, Nicaragua o Guatemala, tan solo el 60 por ciento de la población tiene acceso directo al agua potable.

De acuerdo con el Tribunal Latinoamericano del Agua, hoy en día alrededor de 77 millones de personas aún no cuentan con acceso al agua potable en la región, de los cuales 51 millones habitan en zonas rurales y los 26 restantes en zonas urbanas.

La brecha de acceso entre las zonas rurales y urbanas es, por tanto, más que evidente. Esto hace que todavía 100 millones de personas en Iberoamérica no cuenten con ningún tipo de cobertura de servicios sanitarios.

CONSECUENCIA

Los sistemas de manipulación y extracción del agua siguen siendo muy precarios y, consecuentemente, su adecuado tratamiento se vuelve imposible provocando infinidad de enfermedades. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 85 por ciento de las causas de enfermedades y de muertes en el mundo se asocian con el agua contaminada y la falta de acceso a la misma.

En este sentido Iberoamérica no es una excepción debido a que anualmente se registran 150 mil muertes por enfermedades cuyo origen es la contaminación hídrica, y de estas el 85 por ciento se dan en niños menores de 5 años.

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Industria alimentaria usa el 70 por ciento del agua disponible para consumo: Greenpeace

lunes, abril 4th, 2016

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Ciudad de México, 4 de abril (SinEmbargo).- En México existen 11 millones de personas que no cuentan con acceso al agua en sus hogares, se sabe que el vital líquido es esencial para los humanos y los seres vivos en general, pero ¿se han preguntado cuánta agua se necesita para la producción de los alimentos que con frecuencia consumen? Greenpeace México responde.

La organización internacional señala que desde sus inicios, la agricultura industrializada ha considerado al agua como un recurso ilimitado y de muy bajo costo por lo que la utiliza de manera indiscriminada y sin contemplar los costos ambientales de su extracción.

Daniel Bravo, chef y activista en la ONG internacional, destaca que la agricultura industrial utiliza alrededor del 70 por ciento del total del agua disponible para consumo; por lo que se drenan ríos y lagos que desvían –en algunos casos– su cauce y sobreexplotan los mantos acuíferos con la finalidad de mantener la producción de monocultivos, lo cual resulta una práctica insostenible que afecta directamente a los pequeños productores y al medio ambiente.

Por si fuera poco, señaló Bravo en el texto Cuántos litros de agua se usan en nuestros alimentos, este modelo de agricultura extrae alrededor del 90 por ciento del agua del subsuelo a una velocidad que hace casi imposible que se recupere naturalmente. Las consecuencias de la sobreexplotación han causado impactos devastadores en el medio ambiente, tales como pérdidas de suelo y hundimientos como en el estado de California en Estados Unidos, donde el terreno se ha deprimido hasta seis metros.

En diversos sitios, la escasez de agua implica una reducción en la producción alimentaria y por lo mismo un incremento en el precio final. La sequía que enfrentan muchos productores implica una amenaza en el suministro de alimentos.

Sin embargo, la ONG acusa que el problema del agua no es la insuficiencia del líquido sino su correcta distribución y utilización. En el mundo, hay millones de personas con severos problemas de acceso al agua. Alrededor del 50 por ciento son pequeños agricultores y el 20 por ciento trabajadores del campo.

“Las personas que producen nuestros alimentos, no tienen acceso al agua potable y son dependientes de las temporadas de lluvias, que, como bien sabemos, debido al cambio climático, se han alterado. Resulta pues obvio, que cada día que pasa, la realidad de millones de pequeños agricultores se vuelva más alarmante”, continuó el también chef profesional.

Quizá pudiera parecer imposible cambiar su realidad y la del planeta, sería impensable considerar que estamos conectados intrínsecamente, no obstante Bravo afirma que las acciones de cada persona podrían tener un impacto directo con ellos y el mundo. “Estas acciones son mucho más sencillas de lo que creemos”, asegura.

La mayor cantidad de la producción agrícola en el mundo es destinada para alimentar a los animales que se convertirán en comida para los seres humanos; de igual manera, la mayor cantidad del agua utilizada para la agricultura es destinada a esta obtención.

Foto: Greenpeace.

Foto: Greenpeace.

Así pues, reduciendo el consumo de carne drásticamente, se ahorraría casi la mitad del agua utilizada para la agricultura. Greenpeace comparte algunos datos sobre el agua que se gasta en producir los alimentos:

15 mil 400 litros de agua para 1 kilo de carne de res.
Mil 200 litros de agua para 1 kilo de frijoles.
214 litros de agua para 1 kilo de tomate.
37 litros de agua para 1 kilo de brócoli.
7.5 litros de agua para 1 kilo de hongos.

A través de la alimentación, de la comida que cada día se consume, es posible realizar un cambio. Con el poder de los consumidores es que se puede lograr un cambio en la forma en la que se producen los alimentos, concluyó la ONG.