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Gobiernos piden perdón por tragedia de 2011; Samuel García no va, deudos le reclaman

miércoles, agosto 31st, 2022

Al evento acudieron diferentes funcionarios federales, entre ellos, el Subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas. El 25 de agosto se cumplieron 11 años de la tragedia que cobró la vida de 52 civiles.

Ciudad de México, 31 de agosto (SinEmbargo).- Autoridades federales y de Nuevo León, con la ausencia del Gobernador Samuel García Sepúlveda, ofrecieron hoy una disculpa pública a los familiares de las 52 víctimas que dejó un atentado por parte del crimen organizado en el Casino Royale, el cual estaba ubicado en Monterrey.

A nombre del Gobierno federal habló el Subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas. Reconoció que las autoridades les fallaron a las víctimas del ataque ocurrido en el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa.

“El acto cometido hace más de una década se trata de un acto de terror cometido por criminales contra población civil y donde el Estado no fue capaz de garantizar la seguridad”, dijo Encinas al comenzar su discurso.

“El acto que celebramos hoy no es protocolario, no se trata solo de atender una recomendación, sino de atender a las víctimas y que se castiguen a los responsables. Yo vengo en nombre del Gobierno de México no solo a cumplir con la recomendación de la CNDH, sino con la convicción de esta lucha. Queremos ofrecer una disculpa honesta y sincera, sin dobleces y sin ningún tipo de ambigüedades porque en este hecho se cometieron violaciones a los derechos humanos. Yo vengo a ofrecer una disculpa porque la Secretaría de Gobernación y la dirección de Juegos y Sorteos falló y esto derivó en los lamentables hechos”, agregó al mencionar que en este sexenio hay más control en permitir nuevos casinos.

La señora Samara Pérez Muñiz, representante de las familias víctimas del Casino Royale, inició su discurso reclamando la ausencia del Gobernador Samuel García. “Es muy lamentable que no se encuentre el Gobernador porque deberíamos verlo y decirle: ‘¿dónde está nuestro nuevo Nuevo León?'”.

A nombre de las víctimas, Samara Pérez celebró esta disculpa, la cual, dijo, era impensable en otros sexenios debido a temas polñiticos.

“En otros gobiernos esto era un tema político, corrupto e impune, por ello intocable, Casino Royale no era mencionado, ni sus familias, por eso estas disculpas públicas son un parteaguas para la sociedad nuevoleonesa y mexicana”, destacó. “En este camino de 11 años fuimos revictimizados. Ni un solo de los exfuncionarios tuvo una sanción administrativa”.

Recordó que el pasado 25 de agosto, al conmemorarse un año más del ataque, nuevamente fueron revictimizados, pues la persona que se ostenta como propietario del lugar destruyó el memorial que las familias levantaron con su esfuerzo. “Es un memorial modesto, pero para nosotros tiene un gran significado, dejar estas cruces para tenerlos siempre presentes”.

“Por este hecho realizamos varias denuncias a la persona que ha destruido en cinco ocasiones este memorial y hacemos un llamado enérgico para que se les dé el seguimiento a estos hechos, que no solo dañaron las cruces, sino un símbolo de memorial y nadie debe estar por encima de la Ley”, solicitó.

La señora Samara Pérez Muñiz, representante de las familias víctimas del Casino Royale. Foto: Captura de pantalla de video

Al dirigirse a Alejandro Encinas, la señora Samara pidió que la Secretaría de Gobernación verifique mejor los casinos.  “Que cumpla los reglamentos que se encuentran vigentes hoy en día, porque si bien hay un padrón de estos casinos, verdaderamente es simulado porque cuando uno busca no puedes hallar ni los permisionarios ni los permisos. A Protección Civil del Estado y del Municipio les pedimos revisar estos establecimientos”.

Finalmente recordó que no todos los responsables están detenidos y los que están buscan que no se les condene por homicidio calificado.

“El entonces el Presidente Calderón decide comenzar su propia cacería y se llevan a muchos a la entonces PGR, y por otro lado, el Gobernador Rodrigo Medina hizo más de 2 mil 300 detenciones. El resultado: a todos los detenidos jamás se les imputó el delito de homicidio y hoy los que están imputados están peleando que no sea homicidio calificado”, indicó.

El Alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio Riojas, también pidió perdón a las familias porque en su momento “no les dieron la cara a las víctimas” y porque la tragedia se pudo evitar.

“No se les escuchó, no se les dio el abrazo que necesitaban, les pido que perdonen a funcionarios si aún tienen las fuerzas para hacerlo porque el Gobierno no estuvo cuando más lo necesitaban”, señaló.

La cita al evento fue en el antiguo edificio del Palacio Federal-Correos, el cual está ubicado sobre la calle Washington de la ciudad mexicana. Estuvieron presentes el Subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas; un representante de la Secretaría Federal del Trabajo; el Alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio Riojas; Cinthia Lucía Marín Montoya, titular de la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas y la señora Samara Pérez Muñiz, representante de las familias víctimas del Casino Royale.

Este acontecimiento se da seis días después de que se cumplieran 11 años de la tragedia que dejó 52 muertos, ya que el evento que se realizaría el pasado 25 de agosto fue cancelado debido a problemas de agenda del Subsecretario de Derechos Humanos.

EL ATAQUE AL CASINO

El ataque fue atribuido al Cártel de Los Zetas, quienes el 25 de agosto de 2011 habrían atacado la casa de apuestas supuestamente en demanda del pago de extorsiones hacia el dueño del negocio.

Frente al terreno que ocupaba el Casino Royale, familiares instalaron un memorial para recordar a las víctimas del ataque del 25 de agosto de 2011 en Monterrey, México, el viernes 20 de agosto de 2021. Foto: Marcos Martínez Chacón, AP. Archivo.

Aquel día, las llamas provocadas por los presuntos miembros del Cártel atraparon y asfixiaron a decenas de clientes y empleados. La mayoría de las víctimas eran mujeres que jugaban bingo, en máquinas tragamonedas o simplemente almorzaban con amigos.

Cuando se cumplieron 10 años del ataque, Samara Pérez, sobreviviente del ataque y quien ha sido la vocera de familiares de las víctimas desde entonces, aseguró que tanto las autoridades estatales como las federales han tratado a los deudos con desdén a lo largo de estos años.

La principal afrenta, dijo en ese entonces, ha sido la falta de justicia, ya que la mayoría de los detenidos por su presunta participación en el ataque han logrado obstruir la aplicación de sentencias a través de juicios de amparo contra las condenas.

Semanas después del ataque, las autoridades detuvieron a 17 presuntos responsables; sin embargo, sólo cinco han sido condenados, pero ninguno por homicidio.

Luego de once años del ataque al Casino Royale, donde murieron 52 personas; familiares se reúnen en las afueras del lugar para conmemorar a las víctimas. Foto: Gabriela Pérez, Cuartoscuro.

Un funcionario federal, que pidió no ser identificado para hablar del tema, dijo a la AP que la investigación sigue abierta y que los cinco sentenciados recibieron condenas por portación de arma de fuego y cartuchos de uso exclusivo del Ejército.

Pérez dijo que las autoridades tampoco les han permitido a los familiares tener acceso a los documentos de la investigación, en la que quedó en evidencia la falta de protocolos de Protección Civil y de evacuación en el casino, lo que agravó la tragedia.

“Nunca, hasta el día de hoy, hemos visto una justicia palpable”, afirmó la activista. “Todos los detenidos están iniciando los procesos de amparo, es lo grave de la situación, el sistema penal a nivel nacional les permite que todos estos procesos puedan ser reducidos o que puedan salir estas personas”.

Pérez dijo que las víctimas aún esperan que a los acusados se les procese y condene por homicidio.

El pasado 25 de agosto de 2022, familiares de las víctimas se reunieron en el lugar donde se encontraba el casino para conmemorar a los fallecidos, algunos colocaron cruces de madera con los nombres de los muertos y flores para conmemorarlos.

Además de la falta de justicia, los familiares han tenido que sortear el incumplimiento de promesas de apoyo gubernamental, dijo Marisela Ramírez Cano, de 62 años, cuya hija Claudia Castillo Ramírez, de 25 años y madre de dos menores, trabajaba en el casino y falleció en el ataque.

Las familias le han pedido al Presidente Andrés Manuel López Obrador que las escuche. “El Gobernador Jaime Rodríguez Calderón no se dignó ni siquiera a recibirnos y al Presidente Andrés Manuel López Obrador le diría que haga una revisión exhaustiva en el Poder Judicial para que vea que en estos casos se aplique la Ley. Nadie está por encima de la Ley”, afirmó Pérez el año pasado.

Miembro de Los Zetas sentenciado por atentado en Casino Royale se suicida en cárcel

miércoles, julio 13th, 2022

De acuerdo con los reportes iniciales, el interno habría intentado quitarse la vida primero al cortarse las venas con vidrio, pero al no lograr su cometido tomó un pedazo de la sábana de su cama y se colgó.

Los Ángeles, 13 de julio (La Opinión).– Uno de los hombres sentenciados por el atentado al Casino Royale en agosto de 2011, en donde murieron 52 personas, se suicidó en la celda donde estaba recluido en el penal de Durango.

Se trata de Jesús Rafael Torres Bautista, alias “El Colitas”, y quien pertenecía al Cártel de Los Zetas, el cual fue encontrado colgado y con heridas en los brazos en el interior de su celda.

De acuerdo con las primeras investigaciones, junto al cuerpo se encontraron los vidrios de sus lentes llenos de sangre, por lo que se cree que los usó para cortarse las venas, pero al no lograr el propósito de quitarse la vida, tomó un pedazo de la sábana de su cama y se colgó.

Además, trascendió que el prisionero consumía medicamento controlado para tratar la depresión y la ansiedad, y que en la celda fue encontrado un mensaje póstumo, aunque no se dio a conocer su contenido.

Familiares de las víctimas del Casino Royale. Foto: Gabriela Pérez Montiel, Cuartoscuro.

Torres Bautista, quien murió a los 29 años, acababa de cumplir la mayoría de edad cuando participó en la masacre del Casino Royale. En su momento, la Procuraduría General de la República informó que “El Colitas” fue el encargado de despojar de sus pertenencias a los clientes de dicho casino.

Posteriormente, los delincuentes le prendieron fuego al lugar provocando la muerte de 52 personas. En total, participaron alrededor de 10 sujetos en el ataque.

El atentado, que fue atribuido al Cártel de Los Zetas, se interpretó como una medida de presión para exigir el pago por extorsión hacia los dueños del lugar.

Dentro de las investigaciones posteriores por las autoridades se detuvieron a 25 hombres, entre ellos Jesús Rafael Torres Bautista, acusado por delitos contra la salud, posesión de cartuchos y portación de armas de fuego sin permiso alguno.

ESTE CONTENIDO ES PUBLICADO POR SINEMBARGO CON AUTORIZACIÓN EXPRESA DE LA OPINIÓN. VER ORIGINAL AQUÍ. PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN.

Casino Royale: Una década de un atentado vil e impune en la era de Felipe Calderón

martes, agosto 24th, 2021

El ataque al Casino Royale, en Monterrey, Nuevo León, fue atribuido a Los Zetas y es  uno de los hechos más sanguinarios y brutales contra civiles que se recuerde durante la “guerra contra el narcotráfico” que lanzó el entonces Presidente Felipe Calderón Hinojosa. Es, además, un crimen que sigue impune luego de una década. La administración del Gobernador priista Rodrigo Medina de la Cruz también fue señalada por no entregar resultados ni justicia a los familiares de las víctimas.

Por Marcos Martínez Chacón 

MONTERREY, México (AP) — Frente al terreno que ocupaba el Casino Royale, en la ciudad mexicana de Monterrey, el único recuerdo que queda de uno de los peores atentados del crimen organizado contra civiles -que dejó 52 muertos– es un memorial instalado por familiares de las víctimas que han luchado por mantener viva su demanda de justicia.

Las decenas de cruces blancas llevan escritos los nombres de los fallecidos y fueron colocadas para que la sociedad de esa ciudad industrial en el estado de Nuevo León, al noreste de México, no olvide la tragedia ocurrida el 25 de agosto de 2011.

Samara Pérez, de 48 años y sobreviviente del ataque, recordó la desesperación que sintió al no encontrar a su hijo Brad Xavier Muraira, de 18 años, quien también estaba en el sitio cuando un grupo de hombres armados irrumpieron y comenzaron a rociar con gasolina el lugar para después prenderlo fuego.

CASINO-ROYALE

Los Zetas dejaron cubetas de sangre por donde se hicieron paso. Foto: Saúl López, Cuartoscuro

“Se escuchó una conmoción, volteo y veo a un hombre que le da un golpe a una mujer con un arma. Entran varios, traían botes, y empiezan a rociar y empieza todo mundo a correr y a gritar. No pasó mucho tiempo, no sabíamos que era gasolina hasta que empezó el humo, empecé a buscar a mi hijo y no lo pude encontrar, el caos fue inmediato”, dijo Pérez a The Associated Press con la voz entrecortada. “Muchas horas después me enteré que mi hijo falleció”.

Las autoridades atribuyeron el ataque al sanguinario Cártel de Los Zetas que, de acuerdo con las versiones oficiales, cometieron el atentado en demanda del pago de extorsiones al casino y fue uno de los más brutales desde que en 2006 el gobierno lanzó una ofensiva inédita contra los cárteles de las drogas, los cuales respondieron también con acciones no vistas hasta esos momentos.

Aquel día de 2011 las llamas provocadas por los presuntos miembros del cártel atraparon y asfixiaron a decenas de clientes y empleados. La mayoría de las víctimas eran mujeres que jugaban bingo, en máquinas tragamonedas o simplemente almorzaban con amigos.

A 10 años del ataque Pérez, quien ha sido la vocera de familiares de las víctimas desde entonces, aseguró que tanto las autoridades estatales como las federales han tratado a los deudos con desdén a lo largo de estos años.

Samara Pérez, sobreviviente del ataque del 25 de agosto de 2011 al Casino Royale. Foto: Marcos Martínez Chacón, AP

La principal afrenta, dijo, ha sido la falta de justicia, ya que la mayoría de los detenidos por su presunta participación en el ataque han logrado obstruir la aplicación de sentencias a través de juicios de amparo contra las condenas.

Semanas después del ataque, las autoridades detuvieron a 17 presuntos responsables, sin embargo sólo cinco han sido condenados, pero ninguno por homicidio.

Un funcionario federal, que pidió no ser identificado para hablar del tema, dijo a la AP que la investigación sigue abierta y que los cinco sentenciados recibieron condenas por portación de arma de fuego y cartuchos de uso exclusivo del ejército.

Pérez dijo que las autoridades tampoco les han permitido a los familiares tener acceso a los documentos de la investigación, en la que quedó en evidencia la falta de protocolos de protección civil y de evacuación en el casino, lo que agravó la tragedia.

En el ataque al casino Royale murieron 52 personas. Foto: Cuartoscuro

“Nunca, hasta el día de hoy, hemos visto una justicia palpable”, afirmó la activista. “Todos los detenidos están iniciando los procesos de amparo, es lo grave de la situación, el sistema penal a nivel nacional les permite que todos estos procesos puedan ser reducidos o que puedan salir estas personas”.

Pérez dijo que las víctimas aún esperan que a los acusados se les procese y condene por homicidio.

Fue precisamente para mantener visible su demanda de justicia que desde 2011 los familiares de las víctimas colocaron un primer memorial de cruces de madera con los nombres de los fallecidos frente a las ruinas del casino, aunque desconocidos lo quitaron en dos ocasiones.

Los deudos pusieron entonces cruces metálicas sobre una barda, la cual volvió a ser derribada en abril, ahora por empleados contratados para demoler lo que quedaba del edificio. El gobierno municipal aceptó reconstruir la barda para reinstalar las cruces.

“Ha sido una falta de respeto a las familias que hayan intentado quitar nuestro memorial, esperamos que ahora esté ahí de manera permanente”, dijo Luis Javier Nava Walss, de 31 años, quien perdió en el incendio a su madre, Idalia Walss, una maestra de primaria que murió a los 46 años.

Marisela Ramírez Cano, cuya hija de 25 años murió en el ataque del 25 de agosto de 2011 al Casino Royale. Foto: Marcos Martínez Chacón, AP

Además de la falta de justicia, los familiares han tenido que sortear el incumplimiento de promesas de apoyo gubernamental, dijo Marisela Ramírez Cano, de 62 años, cuya hija Claudia Castillo Ramírez, de 25 años y madre de dos menores, trabajaba en el casino y falleció en el ataque.

Ramírez Cano, trabajadora de una lavandería, dijo que aunque inicialmente las autoridades locales entregaron alimentos a las familias y el municipio ofreció pagar las fosas en los cementerios de la ciudad donde fueron sepultadas algunas de las víctimas, la ayuda fue reducida y hubo confusión en torno al pago por la utilización de las tumbas.

Por ejemplo, dijo Ramírez Cano, seis años después de la muerte de su hija el panteón municipal en el que había sido sepultada y que había sido pagado por el gobierno le informó que el servicio era temporal y, al expirar el plazo, ella debía pagar por la extensión del servicio.

“A los seis años la tuve que sacar del panteón, fue una falta de respeto. Me dieron una caja chiquita en la que no cupo mi hija, tuve que ir en una carroza con los restos de mi hija hasta que encontramos una caja usada y ahí pusieron los restos, y fuimos a otro panteón”, recordó.

A las 15:45 horas del 25 de agosto de 2011, un grupo de personas llegó al Casino Royale en Monterrey. Foto: Cuartoscuro

Las familias le han pedido al actual presidente mexicano que las escuche. “El Gobernador Jaime Rodríguez Calderón no se dignó ni siquiera a recibirnos y al Presidente Andrés Manuel López Obrador le diría que haga una revisión exhaustiva en el Poder Judicial para que vea que en estos casos se aplique la ley. Nadie está por encima de la ley”, afirmó Pérez.

Una de las cosas que mejor ejemplifican la indiferencia oficial hacia el caso, dijo, es una pequeña fuente construida en 2014 por las autoridades locales frente al edificio del casino que luce abandonada.

Como cada año los familiares de las víctimas acudirán este 25 de agosto al sitio donde operaba el casino para protestar contra la impunidad y proyectarán frente al Palacio de Gobierno estatal un video con un recuento de su lucha.

“El Javo”, ex líder de “Los Zetas” y responsable del incendio en el Casino Royal, es ejecutado en bar de Silao, Gto

miércoles, julio 4th, 2018

Javier Alonso Martínez Morales, mejor conocido como “El Javo” habría sido ejecutado tras salir de un bar en Silao, Guanajuato. El sujeto es señalado como el autor intelectual y material del incendio en el Casino Royal, de Monterrey, asó como de dos revueltas al interior del penal de topo Chico.

El sujeto había permanecido en prisión en Monterrey, pero luego fue trasladado a un penal de Guanajuato. De ahí salió en condiciones extrañas y el pasado 3 de julio fue ejecutado.

Silao, Guanajuato/Ciudad de México, 4 de julio, (ZonaFranca/SinEmbargo).- Después de siete años de la tragedia del Casino Royale en Monterrey, Nuevo León, uno de los líderes “Zetas” y autor material e intelectual del caso, fue abatido en Silao después de salir en circunstancias extrañas de un penal.

Javier Alonso Martínez Morales, mejor conocido entre los líderes “Zetas” bajo el alias de “El Javo” y Jesús Alejandro García González, quien fuese conocido bajo el alias de “El Gato”, fueron los que planearon y ejecutaron la quema del Casino Royale en la ciudad de Monterrey, Nuevo León; la razón: los empresarios dueños del casino se habían negado a pagar derecho de piso a la organización criminal, hasta ese momento más sanguinaria del país.

Aquel 25 de agosto de 2011, “El Javo” y “El Gato”, acompañados de más sicarios, cerraron por fuera las puertas del Casino Royale y comenzaron a impregnar la zona con garrafas llenas de gasolina. Su intención de cumplió: 52 personas murieron calcinadas al interior del casino.

Desde aquella acción, las autoridades mexicanas buscaron a ambos líderes criminales que operaban una de las nueve células de acción del Cártel de “Los Zetas”.

Fue hasta el año 2016, a cinco años de la muerte de los 52 inocentes, que el Gobierno federal anunció, en primera instancia, la captura de “El Javo” junto a otros 17 sicarios de la organización criminal, después de que en 2014 un juez federal les girara orden de aprehensión.

Jesús Alejandro García Morales sería detenido en abril de 2016; ambos líderes fueron encarcelados en el Penal de Topo Chico.

La llegada de ambos personajes, distinguidos por cometer matanzas y ejecuciones y tristemente célebres reconocidos por haber causado la muerte de 52 personas en el Casino Royale de Monterrey, sumó fuerza a la organización de los “Los Zetas” al interior del penal.

No había pasado mucho tiempo de estar en prisión, cuando Javier Alonso Martínez Morales “El Javo” se habría hecho de la organización del penal. La noche del 10 de febrero de 2016 y la madrugada del 11 de febrero, “El Javo” y casi 200 reos más llevaron a cabo una riña en el interior del penal, en esa pelea murieron más de 49 reos que pertenecían a carteles con menor presencia en dicho plugar, el Topo Chico se convirtió en una sucursal más de “Los Zetas”, donde gozaba de la plena protección de la directora de aquél entonces, Gregoria Salazar, de Jesús Fernando Domínguez Jaramillo, quién fungía como subcomisario, y Arturo Bernal como director del mismo, fueron acusados de corrupción y de homicidio.

Las autoridades federales consideraron que mantener al “Javo” en la zona norte del país era evidentemente peligroso pues el cartel de “Los Zetas” era más fuerte en esa zona, decidieron cambiarlo de penal y lo trasladaron hacia el penal de Ocampo, en Guanajuato.

En marzo de 2016, el juez ordenó el traslado a Guanajuato, pues enfrentaba un nuevo proceso ahora por la muerte de 49 reos y lesiones de 12 más.

Su llegada quedó asentada en 2016 en Guanajuato, un juez le dictó 90 años de prisión, sólo por las muertes que ocasionó en el Casino Royale, le hacía falta ser juzgado por las muertes de los reos; la ley solo contempló darle efectivos 60 años de prisión, pues se puede purgar penas más largas.

Sin embargo, después de dos años, Martínez Morales salió libre del penal de Ocampo en Guanajuato, bajo circunstancias que aún se desconocen.

Algunas fuentes mencionan que “El Javo” salió a finales de 2017 del penal, después de interponer apelaciones a la condena.

El pasado 2 de julio, Javier Alonso Martínez Morales decidió entrar a un bar ubicado en la zona centro del municipio de Silao, llegó a bordo de una camioneta tipo Pick Up color arena. Ahí estuvo conviviendo con algunas personas, cuando salió, ya siendo la madrugada del 3 de julio, un comando compuesto por dos hombres, que aparentemente se transportaban en un vehículo sedan en color negro, le dispararon en al menos cinco ocasiones; según algunos testigos, este cayó sin vida a la cinta asfáltica, quedando a un costado de su camioneta.

Hasta el momento ninguna autoridad ha aclarado si era el líder de “Los Zetas”, responsable de la masacre del Casino Royale o si era un homónimo, dicha identidad fue filtrada por algunas autoridades después de encontrarle una credencial de elector.

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Autoridades de NL detienen al último de los responsables del ataque al Casino Royale

jueves, abril 7th, 2016

García González fue internado en el penal de Topo Chico, donde este viernes rendirá su declaración preparatoria.

Foto: Especial

Jesús Alejandro García González. Foto: Especial

Ciudad de  México, 8 abril (SinEmbargo).- Elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones detuvieron al único último prófugo de la justicia que participó en el asesinato de las 52 personas durante el ataque al Casino Royale en 2011 en Monterrey. Se trata de Jesús Alejandro García González , alias “El Gato”, o El Borrado”.

García González fue internado en el penal de Topo Chico, donde este viernes rendirá su declaración preparatoria.

Jesús Alejandro García González era el único implicado que se encontraba en libertad, a pesar de que falta girar ordenes de aprehensión por estos hechos contra tres personas más, las cuales se encuentran en prisión purgando penas por delitos federales.

La tragedia sucedió el pasado 25 de agosto de 2011, cuando un comando armado presuntamente del Cártel de los Zetas arribó al lugar y roció gasolina en el interior del inmueble, provocando un incendio el cual dejó 52 personas muertas y 10 heridos.

El atentado dejó reacciones tanto a la prensa local y de índole internacional, con opiniones de representantes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y un gran desasosiego en la sociedad por el clima de narcotráfico que ahora impera en el estado.