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Tienditas y fondas enfrentan en México la COVID-19 con medidas de salud y herramientas digitales

miércoles, octubre 14th, 2020

El confinamiento por la pandemia de la COVID-19 afectó el principal valor de las tienditas en México: su cercanía. Gracias al programa “Mi Tienda Segura”, estos negocios pudieron continuar recibiendo clientes con todas las medidas de seguridad necesarias, expuso la IMCC.

Ciudad de México, 14 de octubre (SinEmbargo).– Las tienditas y sus tenderos son parte esencial de nuestra cultura. La Industria Mexicana de Coca-Cola (IMCC) y empresas aliadas han sumado esfuerzos para no dejar solos a estos pequeños empresarios; “en situaciones difíciles, lo mejor es unirse para ayudar y transformar los grandes retos en nuevas oportunidades. Es tiempo que ‘Hablemos de México y sus tienditas’”, dice.

El confinamiento por la pandemia de la COVID-19 afectó el principal valor de las tienditas en México: su cercanía. Gracias al programa “Mi Tienda Segura”, estos negocios pudieron continuar recibiendo clientes con todas las medidas de seguridad necesarias, expuso la IMCC.

Al respecto, Andrés Arias, dueño de la tiendita “Getsemani”, afirma que ha estado manteniéndose “en el hecho de cuidarme, tanto individualmente como a los clientes; cada vez la gente y yo mismo hemos estado más conscientes de que la mayor parte del tiempo debemos de estar seguros”.

Adrián Arias cree que con la pandemia “cada vez la gente y yo mismo hemos estado más conscientes de que la mayor parte del tiempo debemos de estar seguros”. Foto: IMCC

En México, hay más de 700 mil tienditas de abarrotes y seis de cada 10 cuentan con una mujer al frente del negocio; ellas son agentes de cambio para sus familias.

En este sentido, Laura Bejarano Reyes, propietaria de la tienda de abarrotes “2 Hermanos”, dice que ser mamá y ser dueña de un negocio es doble trabajo. “El atender a la gente, a los proveedores y luego a tus hijos. Fundación Coca-Cola y Pro Mujer me dieron un apoyo económico y pues lo ocupé para surtir; de las capacitaciones que nos dan, me gustaría tomar a lo mejor la de cómo administrarse mejor”, comenta.

Por otro lado, en estas crisis sanitaria y económica la cocina mexicana corría graves riesgos, por ello fue necesario tomar acciones para apoyar a estos microempresarios con el “Programa Tu Cocina Local”.

Rocío González Díaz, dueña de la cocina económica “El Volcancito”, comenta su negocio es familiar y de él dependen nueve familias. “Nos empezó a ir muy mal, tenía yo que solventar gastos que a veces no podía ya cubrir. (Tu Cocina Local) me ha apoyado mucho en cuanto a los manteles, en cuanto a las mamparas, eso ha ayudado mucho a que el cliente se sienta seguro para poder comer. Ahora teníamos que sacar esto adelante con la misma calidad y con el mismo amor”, expone.

En estas crisis sanitaria y económica la cocina mexicana corría graves riesgos, por se apoyó a microempresarios con el “Programa Tu Cocina Local”. El negocio de Rocío González es un ejemplo. Foto: IMCC

Con el confinamiento, los dueños de las tienditas se encontraban en un momento crítico al no poder competir con otros gigantes que ya usaban herramientas digitales para sus ventas. Los pequeños negocios comenzaron a utilizar Wabi2You para hacer llegar todos sus productos sin que sus clientes tuvieran que salir de casa y, lo mejor, sin pagar comisiones.

Sobre el uso de esta herramienta, Adrián, dueño una tiendita, comenta que utiliza Wabi2You y le ha ayudado incrementando las ventas. “Llegamos más lejos, a más casas que antes; el incorporar la tecnología ayuda a tener un beneficio extra y es muy fácil interactuar”, explica.

Cada tiendita es el eslabón final de una gran cadena de trabajo, si apoyamos el consumo local estamos apoyando a miles de familias en todo el país.

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Evangelina Jiménez, dueña tiendita “La Orquídea”, comparte su experiencia. “Acá hay unos vecinos que se dedican a hacer salsas, tortillas a mano; muchos jóvenes que estaban en la universidad están haciendo que los pays, que los panqués; vienen, lo dejan aquí y así nos apoyamos los unos con los otros”.

En estos tiempos complicados para la salud y la economía de los mexicanos, la IMCC concluye que es hora de seguir apoyándonos para enfrenar juntos los nuevos retos que se presentan a todos niveles.

El sismo dejó en la ruina a pequeños empresarios en la CdMx y decenas de trabajadores fueron despedidos

martes, septiembre 26th, 2017

Aunque se siguen recopilando datos sobre las pérdidas económicas por el sismo del 19 de septiembre, una estimación preliminar señala que el desastre podría recortar entre el 0.1 por ciento y el 0.3 por ciento del PIB de México en el tercer y cuarto trimestre del año.  Por delante quedan meses de trabajos, desde demoliciones a reparaciones y reconstrucción.

Una elegante rotonda rodeada de restaurantes, cafeterías y tiendas es ahora una amplia explanada con lonas para servicios médicos, pilas de alimentos y otros suministros, y de materiales de construcción. 

Sentado en la entrada de su restaurante Guapa Papa, Antonio Luna se lamentaba señalando que su negocio está cerrado por daños estructurales en el edificio. Tuvo que despedir a las tres docenas de empleados del local para no incurrir en más gastos y estaba intentando salvar el mobiliario y los equipos que no sufrieron daños.

Por Christopher Sherman

Ciudad de México, 26 de septiembre (AP) — Funcionarios del gobierno de México siguen contabilizando el martes las pérdidas económicas derivadas del sismo de magnitud 7.1 de hace una semana que provocó destrozos generalizados en la capital, con 500 inmuebles considerados en peligro.

La cifra de muertes se elevó a 331, de las cuales 192 se registraron en la capital. Aunque las autoridades prometieron el regreso a la normalidad, muchas calles seguían bloqueadas por maquinaria de construcción y equipos de rescatistas que buscaban los cuerpos que aún permanecían bajo los escombros.

El gobierno local anunció un plan de préstamos para la reconstrucción y ayuda a los vecinos que han perdido sus viviendas, o aún pueden perderlas a medida que procede la demolición de inmuebles dañados.

Para negocios urbanos como el restaurante Papa Guapa, el resultado ya está perfectamente claro.

Sentado en la entrada de su precintado restaurante el lunes, Antonio Luna se lamentaba señalando que su negocio está cerrado por daños estructurales en el edificio.

Tuvo que despedir a las tres docenas de empleados del local, ambientado en la década de 1950, para no incurrir en más gastos y trata salvar el mobiliario y los equipos que no sufrieron daños.

En la imagen, tomada el 25 de septiembre de 2017, dos autos aplastados tras el sismo de magnitud 7.1 que remeció la capital mexicana el 19 de septiembre, siguen en las inmediaciones de una fábrica téxtil que se vino abajo en la Ciudad de México. Foto: Rebecca Blackwell, AP.

En la imagen, vista de un edificio muy afectado por el sismo en la calle Lázaro Cardenas, en la colonia Narvarte de la Ciudad de México. Los equipos de rescatistas seguían excavando entre peligrosas pilas de escombros con la esperanza de hallar, contra todo pronóstico, sobrevivientes del sismo registrado el 19 de septiembre de 2017. Foto: Moisés Castillo, AP.

El terremoto del 19 de septiembre “tiene el potencial de ser una de las catástrofes naturales más costosas de México”, dijo el Servicio de Inversionistas de la agencia de calificación Moody’s en un reporte el lunes.

Aunque se siguen recopilando datos sobre las pérdidas, una estimación preliminar señala que el desastre podría recortar entre el 0.1 por ciento y el 0.3 por ciento del Producto Interno Bruto de México en el tercer y cuarto trimestre del año, explicó Alfredo Coutiño, director de Moody’s Analytics para América Latina.

En el conjunto del año, el impacto sobre el PIB debería estar en torno al 0.1 por ciento. “El impacto en el crecimiento del año será pequeño, especialmente considerando que los trabajos de reconstrucción compensarán parte de la pérdida total de actividad durante el cuatro trimestre”, agregó Coutiño.

Se espera que el dinero siga entrando a la economía nacional gracias a los fondos para desastres de la Ciudad de México y del gobierno federal. En junio, el fondo para desastres de la capital contaba con 9 mil 400 millones de pesos (más de 500 millones de dólares), una cantidad ligeramente superior a la del nacional, según el reporte del Servicio de Inversionistas de Moody’s.

El fondo nacional deberá sufragar también la recuperación del sismo registrado el 7 de septiembre, que fue más potente y causó casi un centenar de muertos en su mayoría en los estados sureños de Oaxaca y Chiapas.

Por delante quedan meses de trabajos, desde demoliciones a reparaciones y reconstrucción.

En la Ciudad de México que hay 360 edificios de “nivel rojo” que o serán derribados o recibirán importantes refuerzos estructurales, señaló el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera.

Otros mil 136 inmuebles son reparables y por el momento se han inspeccionado 8 mil 30 que fueron declarados habitables.

Al menos 38 edificaciones, incluyendo apartamentos y edificios de oficinas, colapsaron durante el movimiento telúrico.

Trabajadores limpian escombros del techo de un edificio derrumbado por el sismo de magnitud 7.1 de la semana pasada en la esquina de las calles Gabriel Mancera y Escocia, colonia Del Valle, Ciudad de México, 25 de septiembre de 2017. Foto: Rebecca Blackwell, AP.

En esta imagen, tomada el 25 de septiembre de 2017, padres de los alumnos de la escuela Simón Bolívar se reúnen junto al solar donde colapsó una fábrica téxtil a consecuencia del sismo de magnitud 7.1. Foto: Moisés Castillo, AP.

La Secretaría de Educación dispone además 1.8 millones de pesos para reparar escuelas. En la capital, solo 676 de sus 9 mil centros educativos han sido inspeccionados y recibieron autorización para retomar las clases, dijo el lunes su titular, Aurelio Nuño.

AIR Worldwide, una consultora de simulación de catástrofes con sede en Boston, proporcionó un amplio rango para las pérdidas industriales aseguradas, destacando que son solo una pequeña parte del total de las pérdidas económicas totales. Las pérdidas aseguradas están entre 13 mil y 36 mil 700 millones de pesos (entre 725 y 2 mil millones de dólares).

Una elegante rotonda rodeada de restaurantes, cafeterías y tiendas es ahora una amplia explanada con lonas para servicios médicos, pilas de alimentos y otros suministros, y de materiales de construcción. Aunque en el exterior continuaban las labores de rescate, los hombres se afanaban envolviendo muebles en espuma y plástico en el interior de la tienda Antiguo Arte Europeo el lunes.

Los paneles de piedra de la fachada del edificio parecían agrietados o faltaban. La vendedora Luisa Zúñiga dijo que los propietarios estaban esperando a los inspectores de defensa civil para certificar que no había daños estructurales en el inmueble antes de reabrir.

Mientras tanto, estaban trasladando los muebles que todavía podían venderse a otros establecimientos de la marca.

Edgar Novoa, un monitor de fitness, regresó a sus ocupaciones el lunes tras trabajar como voluntario tras el sismo. En torno al mediodía, detuvo su bicicleta en un solar donde antes había un edificio de varias plantas próximo a su casa.

Se arrodilló y rezó mientras otros depositaban velas y flores en el lugar.

El martes, el coordinador Nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente Espinosa, informó por Twitter que la cifra de fallecidos era de 331 personas, 192 de los cuales estaban en la Ciudad de México; 74 en Morelos; 45 en Puebla; 13 en el Estado de México; 6 en Guerrero y uno en Oaxaca.