“La mayoría de ustedes desconoce el efecto que tener la testosterona baja produce en el estado mental. Por ejemplo, en la capacidad de centrarse y pensar con claridad”, dice el anuncio publicitario.
El médico aseguró para una cadena televisiva que no tenía la intención de ofender. Foto: EFE
Miami (EU), 30 sep (EFE).- Un médico de Fort Myers (suroeste de Florida) ofrece a los hombres que vayan a votar por Hillary Clinton para la Presidencia de EU una prueba gratuita para medir sus niveles de testosterona, informó hoy un canal televisivo local.
Dareld Morris, propietario de una clínica de medicina y de control de peso en Fort Myers y partidario del rival de Clinton en la carrera presidencial en EU, Donald Trump, parece dar por sentado en un aviso publicitario que los votantes masculinos de la ex secretaria de Estado andan bajos de la hormona de la virilidad.
“La mayoría de ustedes desconoce el efecto que tener la testosterona baja produce en el estado mental. Por ejemplo, en la capacidad de centrarse y pensar con claridad”, dice un anuncio publicitario de Morris que emiten las radios de la zona y no ha pasado inadvertido.
En unas declaraciones al canal televisivo NBC 2, Morris dijo que no pretende herir a nadie con su publicidad, sino hacer una promoción de su clínica con sentido del humor y vinculada con la actualidad política.
No todos los oyentes se lo han tomado bien, según NBC 2, que recogió en las calles declaraciones de vecinos de Fort Myers acerca de la idea publicitaria de Morris.
A Paul Holz le pareció bastante divertido, pero a Tedazia Vinders en cambio no le hizo ninguna gracia y consideró que el médico ha demostrado ser una persona “con poca cabeza”.
Joseph Tedros, miembro del Partido Demócrata, que lleva a Hillary Clinton como candidata en las elecciones presidenciales del próximo 8 de noviembre, subrayó que después del debate del pasado lunes, el que “probablemente vaya a necesitar testosterona” es Trump, candidato por el Partido Republicano.
Según dijo Morris a NBC 2, ha recibido llamadas tanto de demócratas como republicanos para decirles que el aviso publicitario les había parecido gracioso.
