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Umeno y Koume son las gemelas idénticas vivas más longevas del mundo; tienen 107 años

martes, septiembre 21st, 2021

Las hermanas superaron el récord que ostentaban las famosas “Kin-san” y “Gin-san” en los años 90, recordadas también por su sentido del humor.

Por Mari Yamaguchi

Tokio, 21 de septiembre (AP).— Dos hermanas japonesas han sido certificadas por los Guinness World Records como las gemelas idénticas vivas de mayor edad en el mundo, con 107 años y 300 días de edad el 1 de septiembre, informó el lunes la organización.

El anuncio coincidió con el Día del Respeto a los Mayores, una fiesta nacional en Japón.

Las hermanas Umeno Sumiyama y Koume Kodama nacieron en la isla de Shodoshima, en el oeste de Japón, el 5 de noviembre de 1913, siendo la tercera y la cuarta de 11 hermanos.

A partir del 1 de septiembre, las hermanas superaron el récord anterior de 107 años y 175 días establecido por las famosas gemelas japonesas Kin Narita y Gin Kanie, dijo Guinness World Records en un comunicado.

Alrededor del 29 por ciento de los 125 millones de habitantes de Japón tiene 65 años o más, según el Ministerio de Salud y Asistencia Social.

Unos 86 mil 510 de ellos son centenarios, la mitad de los cuales han cumplido 100 años este año.

Sumiyama y Kodama fueron separadas al terminar la escuela primaria, cuando Kodama fue enviada a trabajar como trabajadora doméstica a Oita, en la isla de Kyushu. Más tarde se casó allí, mientras que Sumiyama permaneció en la isla en la que crecieron y tuvo su propia familia.

Las hermanas recordaron más tarde sus días de juventud más difíciles. Cuando crecían, decían que eran objeto de acoso debido a los prejuicios contra los hijos de partos múltiples en Japón.

Ocupadas en sus propias vidas durante décadas, las hermanas apenas se vieron hasta que cumplieron 70 años, cuando empezaron a participar en peregrinaciones juntas a algunos de los 88 templos budistas de Shikoku y disfrutaron del reencuentro.

Sus familias contaron a los Guinness World Records que las hermanas bromeaban a menudo con la idea de sobrevivir a las anteriores poseedoras del récord, conocidas cariñosamente como “Kin-san, Gin-san”, que alcanzaron el estatus de ídolo a finales de los años 90 tanto por su edad como por su humor.

Debido a las medidas contra el coronavirus, los certificados de su nuevo récord se enviaron por correo a las residencias de ancianos en las que ahora viven, y Sumiyama aceptó el suyo con lágrimas de felicidad, según Guinness.

VIDEO: Con piedra, papel o tijera, hermanas definen ganadora de taekwondo

domingo, junio 20th, 2021

Para no pelear una contra la otra, las gemelas Aia y Saya decidieron a la ganadora de cinta amarilla con un juego de manos; Saya tiró tijeras en una segunda ronda y fue derrotada por la piedra de Aia.

Kazajistán, 20 de junio (RT).- Dos hermanas gemelas se enfrentaron en un torneo infantil de taekwondo el pasado domingo en la ciudad de Aktau, ubicada en Asia central y en vez de luchar, jugaron piedra, papel o tijera.

Las mellizas Aia y Saya decidieron no pelear una contra la otra, por lo que buscaron otra forma de determinar a la ganadora en la final del torneo en el que competían.

En el video se mira a ambas niñas, con su uniforme blanco y su cinta amarilla, iniciar la jugada de piedra, papel o tijera que las lleva a un empate de puños cerrados en la primera ronda.

En la segunda jugada, una de las niñas pone nuevamente su mano en forma de piedra mientras la otra cambió a la posición de tijera, siendo vencida por su hermana.

Aia y Saya tras su enfrentamiento de piedra, papel o tijera. Foto: Instagram Aia y Saya

Aia y Saya volvieron felices y sin rivalidad, a su lugar tras el torneo de tawkwondo que se convirtió en uno de piedra, papel y tijera para no combatir entre ellas.

Las hermanas decidieron jugar a piedra, papel o tijera como una solución inusual donde Aia tuvo suerte y resultó ganadora del juego de manos después de asegurar con su estrategia el campeonato. El premio fue una medalla de oro en la categoría de peso de hasta 24 K.

ESTE CONTENIDO ES PUBLICADO POR SINEMBARGO CON AUTORIZACIÓN EXPRESA DE RT. VER ORIGINAL AQUÍ. PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN.

Una joven sorda de EU adivina cómo suenan los objetos; sus VIDEOS se comparten cientos de veces

viernes, febrero 12th, 2021

Estados Unidos, 12 febrero (RT).- Dos hermanas veinteañeras de EU, Ashley Gosset y Jessica Holton, crearon una cuenta en TikTok que se volvió viral debido a una serie de videos en los que Jessica, que es sorda de nacimiento, intenta adivinar qué sonido hacen los objetos cotidianos, y a veces lo consigue de una manera sorprendentemente acertada.

Las hermanas dijeron al portal BuzzFeed que, además de ser divertidos, sus videos dan visibilidad a un colectivo que mucha gente desconoce. Muchos usuarios también comentan que los videos les alegran el día y les hacen pensar en sus hermanos.

En algunos de los videos Jessica también intenta imitar lo que pronuncia Ashley, así como sonidos de animales.

“La gente comenta que le gusta el vínculo que compartimos y que les recordamos a sus propios hermanos. Dicho esto, creo que mucha gente ha tenido que pasar la cuarentena lejos de su familia y amigos y extrañan momentos como éste”, confesó Ashley.

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En grupos de Telegram, usuarios comparten fotos íntimas hasta de sus madres, revela investigación

sábado, agosto 15th, 2020

Desnudos de mujeres que fueron hackeadas, videos de cámaras ocultas en baños públicos, y hasta un apartado para material con incesto, son parte del contenido que circulan en cientos de chats de esta red social.

Ciudad de México, 15 de agosto (SinEmbargo).- En la aplicación de mensajería Telegram existen grupos, conformados por miles de usuarios, en los que se comparten imágenes y videos de mujeres desnudas, sobre todo, de sus propias familiares o conocidas.

De acuerdo con una investigación de Grupo Imagen, desnudos de mujeres que fueron hackeadas, videos de cámaras ocultas en baños públicos, y hasta un apartado para material con incesto, son parte del contenido que circulan en cientos de chats secretos de esta red social.

“Incesto y fantasías”, es uno de los grupos en el que casi 6 mil personas suben fotos de quienes, presumen, son sus hermanas, primas, tías, hijas y hasta sus propias madres.

“¿Alguien con una hija que se quiera comer? O sólo yo”, se lee en una de las pláticas. Sin embargo, la persona que escribió eso no es la única, pues otro responde: “yo también”.

Otros más ofrecen las imágenes de su madre: “Alguien que morbosee a mi mamá? A lo que contestan: “Manda video de tu mamá y le digo qué le hago”.

En otras comunidades, solicitan y envían “packs” de conocidas, hermanas o primas; sin embargo, muchos no sólo piden fotografías de las mujeres, sino datos personales: dirección, número de celular y perfiles de redes sociales.

Este grupo, al igual que muchos, posee sus propios reglamentos y cuentan con varios administradores, quienes sólo emplean alias o seudónimos y cuyo número telefónico no es visible.

No compartir material de otros grupos, que las mujeres sean sólo mayores de 18 años, compartir constantemente material propio o de la Red, y no enviar imágenes de penes son algunas de las reglas que los usuarios deben acatar para no ser expulsados.

Otro grupo es el de “Espidas Voyeur”, con 3 mil miembros, aquí se comparten videos y fotografía de mujeres, sin importar si son mayores de edad o no. En baños públicos, vestidores u hoteles, incluso en las calles, a jóvenes con falda.

Las novias o exparejas no quedan exentas de ser víctimas de estas prácticas, pues sus fotografías y videos también son compartidas sin autorización.

Según el reportaje de Grupo Imagen, este tipo de grupos no funcionan de manera autónoma. Forman parte de una red de material sexual que se hace llamar “Cadena Olimpo y amigos”, donde se concentran al menos 27 chats, algunos de ellos, ya fueron cerrados.

Hace unos días, la coordinadora de la bancada del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en la Ciudad de México, Alessandra Rojo de la Vega, denunció haber descubierto un chat en esa misma aplicación de mensajería en la que se compartieron, sin su consentimiento, fotografías íntimas de ella.

A través de su cuenta de Twitter, la Diputada reveló que en dicho chat había al menos 20 mil usuarios que comparten imágenes de mujeres, denominadas “packs” o “nudes”.

LA LEY OLIMPIA

El 3 de diciembre de 2019, el Congreso de la Ciudad de México aprobó la “Ley Olimpia”, con 56 votos a favor, cero en contra y cero abstenciones votos a favor en presencia de feministas y de la autora de la iniciativa, Olimpia Coral Melo.

Después de tres años de buscar una respuesta, la violencia digital será sancionada con penas de cuatro a seis años de prisión y una multa de 42 mil 245 a 84 mil 490 pesos.

Eduardo Santillán, presidente de la Comisión de Procuración de Justicia, explicó que estas reformas al Código Penal local y la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia servirán para proteger la intimidad de las personas.

“Comete el delito contra la intimidad sexual, primero quien videograbe, audiograbe, fotografíe, filme o elabore imágenes, audios o videos, reales o simulados de contenido sexual íntimo de una persona sin su consentimiento o mediante engaño”, externó Santillán.

El castigo será expuesto a quién exponga, distribuya, difunda, exhiba, reproduzca, transmita, comercialice, oferte, intercambie o comparta imágenes audios o videos de contenido sexual íntimo de una persona sin consentimiento mediante cualquier medio tecnológico.

CRÓNICA | Es triste y duele, pero como perros hay que seguirlos buscando: familias de Caravana

viernes, mayo 10th, 2019

Restos óseos, elementos balísticos correspondientes a un arma AK47, ropa, calzado y diversa evidencia han sido encontrados en los días de rastreo de fosas clandestinas que realizó la V Caravana Internacional de Familiares en Búsqueda de Personas Desaparecidas en un predio cercano a Caleta de Campos, Michoacán.

Caleta, Michoacán, 10 de mayo (SinEmbargo).– Tranqulina Hernández se inclina de rodillas sobre la tierra removida en un pequeño hoyo de un metro de altura; retira las hojas secas y escarba. Mueve las manos con notoria destreza y mantiene la mirada alerta en la exploración. Su evidente experiencia rinde frutos de inmediato: “Creo que aquí hay un resto […] es una falange”, responde mientras muestra en la palma de su mano un hueso de apenas una pulgada, al parecer la parte de un dedo humano.

Se trata del primer resto óseo encontrado por familiares de personas desaparecidas al auscultar una fosa que minutos antes habían “examinado” peritos de la Fiscalía General de Justicia de Michoacán, quienes después de localizar un zapato, un machete y cinco casquillos percutidos calibre 7.62 x39 —de los que usan las armas de asalto AK47, conocidas como Cuerno de Chivo— habían dado por concluida la búsqueda en ese punto.

Tranquilina Hernández Lagunas es madre de Mireya Montiel Hernández, una joven de 18 años que desapareció cuando salió hacer un mandado en la colonia Antonio Barona en Cuernavaca, Morelos, el 13 de septiembre de 2014. Desde entonces, Tranquilina se ha dedicado por completo a la búsqueda de su hija y en el camino se ha convertido en una reconocida activista y buscadora estrella que ha participado en la exhumación de cadáveres en fosas clandestinas de Tetelcingo y Jojutola, en Morelos.

La madre de Mireya es integrante de la Quinta Caravana Internacional de Familiares en Búsqueda de Personas Desaparecidas que desde ayer inició con el rastreo de fosas en predios cercanos a Caleta de Campos y Tizuca, Michoacán.

Después de 11 días de pesquisa por cinco municipios michoacanos, la Caravana arribó a Caleta de Campos, desde la tarde del pasado 7 de mayo y fue recibida por integrantes de Familiares Caminando Por Justicia, el colectivo anfitrión. Hasta el próximo 12 de mayo se dedicarán a peinar un terreno previamente designado en busca de fosas y de “tesoros”, como los activistas llaman a los restos humanos.

Don Sirenio se queda pensativo en una silla con la mirada baja. El hombre sostiene en todo momento la fotografía de su hijo. No es un evento público, ni una marcha, ni una actividad de búsqueda: es la cena de bienvenida a Caleta. A Don Sirenio se le ve triste.

Sirenio Ocampo de Jesús tiene 69 años, en septiembre cumplirá los 70, dice. El hombre acudió a la Caravana con su familia: Doña Ernestina Marino Luciano, su esposa de 68 años, y su hija María Elena Ocampo Marino, de 46 años,  quienes lo acompañan porque todos buscan a Adelfo Ocampo, desaparecido el 3 de julio de 2014.

Adelfo fue privado de su libertad cuando trabajaba como albañil en una casa particular y don Sirenio era su chalán. Una mañana, unos hombres llegaron y se llevaron a su hijo en Iguala, Guerrero. El adulto mayor, aunque no vio, estaba cerca cuando le arrebataron a su vástago y nada pudo hacer. Desde entonces ya no volvió a saber de él, y se han dedicado a buscarlo o tener un indicio.

“Es algo muy triste y duro”, cuenta el hombre de ojos pequeños, rasgados y caídos, una noche antes de salir a buscar fosas. El padre de familia que reconoce que tiene miedo de hallar a su hijo en terreno, pero que es más lacerante la incertidumbre. Madres, padreshermanas, hermanos, familiares de todas las edades componen la V Caravana. Las familias buscan a sus familiares, y buscan verdad.

Luego de 11 días de pesquisa por cinco municipios de Michoacán, la Caravana arribó a Caleta de Campos, desde el pasado 7 de mayo y fue recibida por integrantes de Familiares Caminando Por Justicia, el colectivo anfitrión. Hasta el próximo 12 de mayo se dedicarán a peinar un terreno previamente designado en busca de fosas y de “tesoros”, como los activistas llaman a los restos humanos. Fotos: Cri Rodríguez, SinEmbargo

***

El reloj más 7:00 horas. Es martes, el primer día en campo. Los buscadores parten hacía las localidades acobardas que están a más de una hora de camino. Llevan pantalones cómodos, sombreros, pañuelos en la nuca, lentes y botellas de agua, para soportar el sol y los 35 grados de temperatura que más tarde marcará el termómetro.

“Esperamos hallar algo, que podamos encontrar a alguien para dar tranquilidad alguna familia”, expresa Linmara Guadalupe Batres, hermana de Cruz Martín Batres Ramírez, desaparecido el 10 noviembre de 2012, cuando se dirigía a su trabajo en Torreón, Coahuila.

Más de 45 familiares de desaparecidos, 20 voluntarios, entre antropólogos, psicólogos y paramédicos, participan en la Caravana, custodiada ahora por policías municipales y federales.

Al menos 35 peritos de la Fiscalía General de Justicia de Michoacán, un agente del Ministerio Público, tres ministeriales y cinco efectivos de la Secretaría de Marina se suman a la actividad. Entre los peritos de Fiscalía hay criminalistas, odontólogos forenses, arquitectos forenses, químico, y fotógrafos, detalla Pedro Gutiérrez Gutiérrez, coordinador general de Servicios Periciales del estado.

Los agentes de la Fiscalía llevan instrumentos de tecnología, al menos 15 detectores de metales y usan trajes especiales de tela micro porosa color blanco –overoles forenses– para la búsqueda, en tanto que los caravaneros (las familias) alistan su herramienta de trabajo: varillas, picos, palas, guantes, una criba y esperanzas de encontrar indicios.

Julio Sánchez Pasillas, coordinador de la Caravana, explica que eligieron ese terreno —que está hacia adentro, a unos 40 metros de una carretera— porque había indicios que allí mataron a personas.

Al llegar al predio, de inmediato es ubicado el primer punto positivo: abajo de un árbol dentro de una cerca de alambre de púas. Ese punto ya estaba identificado por Evangelina Ceja, activista del colectivo anfitrión y madre de Tania Contreras Ceja, joven privada de la libertad  el 12 de julio 2012.

—¿La cinta para marcar el punto? —grita uno de los integrantes. Los elementos oficiales empiezan a colocar el cordón amarillo con la leyenda Escena del Crimen.

A unos tres metros del primer punto, se localizó otro posible positivo. También fue acordonado. La cara de Evangelina, una mujer de estatura baja, tez blanca, cabello corto, castaño claro y ojos claros, está sudorosa y un poco roja. Aprieta sus dientes. Cierra sus puños. Sus ojos expresan coraje y enojo.

—¡Queremos que hagan bien las cosas y no desaparezcan a los desaparecidos, que sí reporten lo que encuentran! –reprocha al encargado de periciales.

—Señora, yo le garantizo que vamos hacer un trabajo profesional —le responde Pedro Gutiérrez.

Evangelina narra que el predio es una de las tantas tierras que el crimen organizado tomó a la fuerza hace más de cinco años. La parcela fue recuperada por las autodefensas en 2014 y entregada a sus dueños, pero cuando los propietarios regresaron a su propiedad encontraron dos osamentas y ropa; entre las prendas hallaron una pantaleta de mujer.

La activista detalla que los restos humanos y la evidencia localizada fue levantada y llevada al Ministerio Público de Coahuayana, Michoacán.

Evangelina fue alertada en ese momento porque una personas que participó en el levantamiento relacionó el hallazgo con la desaparición, pues uno de los restos al parecer era de una mujer y los indicios localizados tenía algunas características que una de podrían coincidir con su hija Tania. La madre dice que ella acudió al Ministerio Público para preguntar sobre esas osamentas, pero ahí no las tenían y ningún registro de ellas. Tampoco le dieron acceso a la carperta de investigación.

“¡Las autoridades aquí desaparecían a los desaparecidos!”, exclamó. Y añadió: “por eso estoy muy enojada, porque no hacen su trabajo”.

Un equipo de diez peritos se queda en los dos primeros puntos señalados por Evangelina para explorar y la Caravana designa a una comitiva de integrantes para vigilar y documentar.

El resto de los integrantes se adentra al terreno. Los civiles buscadores usan sus varillas que van enterrando mientras caminan, si en algún punto la varilla entra con facilidad, es decir que la tierra está suelta y eso podría ser indicio de algún punto positivo,. Al mismo tiempo, los peritos usan sus detectores de metales que van emitiendo un sonido similar al que hacen los teléfonos cuando dan tono para llamada.

Un fuerte silbido emana del aparato. Un posible metal ha sido detectado. El perito llama a uno de los integrantes de la Caravana. Rápidamente llega con una varilla en mano Indalecio Pedrizco, hermano de Enrique Pedrizco Pacheco, desaparecido el 22 de junio de 2015 en Michoacán.

—¿Dónde era? ¿Por aquí? —pregunta Indalecio.

—Sí, por aquí —responde el criminalista.

Indalecio mete la varilla y ésta se hunde un poco.

—Traigan el pico —grita Indalecio y comienza excavar.

Luego de un rato pasan nuevamente el detector, pero ya no muestra nada.

—No estaba floja la tierra —dicen.

Tranquilina Hernández ingresó al hoyo y comenzó a excavar. A los pocos minutos halló los primeros restos humanos y demás objetos. Durante el primer día de rastreo se encontraron en total 65 indicios: 57 localizados por familiares, pese a la fuerte presencia de peritos. Fotos: Cri Rodríguez, SinEmbargo

No hallan mayores indicios para seguir con ese punto, concluyen que quizá eran los metales de una piedra. Colocan un tronco para marcar el lugar como inspeccionado.

Los familiares que se posicionaron adentro del predio no hallaron más indicios de fosas y dieron por concluido el rastreo; mientras tanto, en el primer punto, los peritos localizaron un machete, cinco casquillos percutidos y un zapato. En el segundo, localizaron una camisa marca Dickies  color indeterminado y talla grande; un short de color no determinado talla 36 marca South Pole; una suela de calzado tipo huarache sin correas de caucho y un lazo con un nudo color verde y otro lazo con nudo amarillo.

Los peritos –después de localizar el machete, los casquillos y las prendas– determinan que ya habían concluido su tarea y embalaron la evidencia. Los familiares no quedaron conformes con la inspección y comenzaron a buscar ellos en esa misma fosa.

Tranquilina Hernández ingresó al hoyo y comenzó a excavar. A los pocos minutos halló los primeros restos humanos y demás objetos. Julio Sánchez, coordinador de la Caravana, se acercó al primer punto cuando fue hallado el primero hueso.

–¿No usaron la criba?– cuestionó Julio, otro experimentado buscador.
–Sí– respondió otro de los integrantes.
–Hay que volver a inspeccionar y pasar la tierra por la criba– dijo Julio,

Dos de los caravaneros tomaron la criba, uno de cada extremo, mientras uno de los integrantes colocaba la tierra encima de la “malla de metal”. Los familiares movían rápidamente de un lado a otro la criba para “colar”, después otros tres o dos integrantes de la Caravana movían suavemente la tierra, quitaban la hoja, y auscultaban con atención. La forma en cómo separaban la tierra, fue lo que marcó la diferencia entre el trabajo de los peritos oficiales y los familiares, explica uno de los integrantes.

Durante el primer día de rastreo se encontraron en total 65 indicios: 57 localizados por familiares, pese a la fuerte presencia de peritos.
Julio Sánchez comenta que localizar restos es determinante, pues la evidencia es enviada a laboratorios para su análisis y obtener una muestra de ADN y confrontarla, es por ese motivo, que son llamados tesoros. Las piezas dentales son de las partes del cuerpo más son buscadas por los rastreadores, debido a que guardan una gran carga genética : “Cuando uno encuentra un diente es casi lotería”, explica Sánchez Pasillas.

De los indicios hallados por los civiles durante el primer día, 43 son restos óseos, entre los que se encuentran, al parecer, parte de una vértebra, falanges metatarsos y cóndilos: es decir, huesos que corresponden a dedos de manos y pies.

La Caravana continuará con la búsqueda de fosas en Michoacán hasta el 12 de mayo. “Es un poco difícil andar en la Búsqueda, no es fácil y es doloroso buscarlos en campo, pero nosotros tenemos que seguir, ahora sí que como perros, rascando la tierra para buscar huesitos”, comparte Guillermina Sotelo Castañeda, mamá de César Iván González Castañeda, desaparecido 19 de agosto de 2012 en Guerrero.

Dos mujeres que eran vecinas en Wisconsin, EU, descubren que en realidad son hermanas

sábado, julio 7th, 2018

Ambas vecinas se ignoraban mutuamente, pero por alguna razón, la nueva vecina sintió un vínculo con la hija de 5 años de Hilary, Stella.

Ambas vecinas se ignoraban mutuamente, pero por alguna razón, la nueva vecina sintió un vínculo con la hija de 5 años de Hilary, Stella. Foto: Screenshot Inside Edition, vía La Opinión

Ciudad de México, 7 de julio (LaOpinión).- Una mujer de Wisconsin no podía dar crédito a lo que el destino le había puesto en el camino. Más que en el camino, en el mismo barrio.

La nueva vecina era, ni más ni menos, que su hermana de la que no sabía nada.

Hillary Harris de Eau Claire, no se sentía cómoda con su nueva vecina. Había algo que le causaba rechazo. Las dos propietarias compartían la entrada a la casa, a pesar de no tener buena relación tenían que ser vecinos.

Ambas vecinas se ignoraban mutuamente, pero por alguna razón, la nueva vecina sintió un vínculo con la hija de 5 años de Hilary, Stella.

Poco a poco, el esposo de Hillary, Lance, conoció a los nuevos vecinos. Descubrió que su nombre era Dawn y que venía de Greenwood, Wisconsin.

Hillary, que fue adoptada cuando era bebé, recordaba haber leído en sus documentos de adopción que tenía una hermana llamada Dawn Johnson, de Greenwood. Si bien todas esas similitudes parecían una extraña coincidencia, una última pieza del rompecabezas llegó cuando supo que el apellido de su vecina era Johnson.

No pasó mucho tiempo antes de que las dos mujeres descubrieran que compartían mucho más que un camino común a sus respectivas casas

“Sabía que tenía que ser mi hermana”, dijo Hillary.

Dawn agregó: “No podía creer que mi hermana viviera al lado de mí.”

Desde entonces, las mujeres han estado comparando similitudes como pelo, barbilla y frentes.

Es una lección de ser siempre amable con su vecino, porque nunca se sabe qué clase de vínculo nos puede unir.

ESTE CONTENIDO ES PUBLICADO POR SINEMBARGO CON AUTORIZACIÓN EXPRESA DE LaOpinión. Ver ORIGINAL aquí. Prohibida su reproducción.

Lucía y Cristina sólo se tienen una a la otra. El sismo las separó, pero el rescate volvió a unirlas

jueves, septiembre 28th, 2017

Lucía logró salir ilesa del terremoto, sabiendo que pudo correr una suerte distinta ante esta catástrofe natural que ya se ha cobrado la vida de 342 personas y causado miles de heridos.

Los tres terremotos registrados en las últimas tres semanas en México han ocasionado más de 430 muertos, lo que constituye la mayor cifra de fallecidos desde el trágico sismo de 1985 en Ciudad de México, que se calcula causó alrededor de 20 mil muertos.

Por Zoilo Carrillo

Ciudad de México, 28 de septiembre (EFE).- Lucía y Cristina Zamora son dos hermanas que solo se tienen la una a la otra. Lucía quedó atrapada bajo los escombros del edifico ubicado en Álvaro Obregón 286, tras el sismo que azotó México el pasado 19 de septiembre. De ahí en adelante vivieron 33 horas en las que una no dejó de pensar en la otra.

Cristina asegura a Efe que su hermana sobrevivió gracias a su “carácter” y su voluntad de no dejarla sola, ya que no tienen más parientes consanguíneos. Esa fuerza fraternal fue la que le hizo “no perder la esperanza ni desesperarse” el tiempo que pasó en la oscuridad de las ruinas.

Lucía, por su parte, dice a Efe que ver a Cristina fue culminar el encuentro que visualizó durante las 33 horas que permaneció en cautiverio, en el que su mayor miedo fue no saber cómo estaba su hermana.

“Ella y yo somos lo único, nos tenemos solo la una a la otra”, cuenta emocionada la joven.

La separación de las dos hermanas empezó cuando el sismo de magnitud 7,1 sacudió el edificio donde se encontraba Lucía trabajando.

Ella sintió un movimiento fortísimo “que nunca había sentido” y observó cómo los muebles caían al suelo, lo que le impidió seguir avanzando hacia las escaleras de emergencia.

“Yo creo que la fuerza del movimiento es lo que te paraliza, no hay una reacción predecible”, cuenta la joven, quien argumenta que cuando experimentas algo nuevo como eso “es imposible saber cómo reaccionar”.

Tras respirar un segundo y recuperar el equilibrio, Lucía trató de seguir adelante, pero de pronto el techo del edificio se le vino encima.

“Fue cuestión de segundos” lo que tardó el edificio en llenarse de polvo y tierra, y la joven instintivamente se cubrió la cara con las manos.

“Se escuchó un ruido muy fuerte y al segundo siguiente yo ya estaba cubierta de escombros”, relata.

En ese momento se escucharon gritos en medio de “una oscuridad aterradora” y Lucía necesitó un poco de tiempo para ubicarse en el espacio.

Logró adivinar que “tenía más movilidad en el tronco y en los brazos” que en las piernas y que estaba cubierta de escombros, entre inclinada y acostada, boca arriba y sin heridas graves.

Lo peor fue percibir una losa de piedra a escasos centímetros de su cara que hacía que “cualquier movimiento en falso” pudiera quitarle la vida.

A su lado izquierdo, “hombro con hombro”, tenía a Isaac y a unos 30 metros a Paulina, una chica que cayó de la planta de arriba y con quien se comunicó a gritos.

Durante las horas que pasó allí, la joven solo miró el celular para ver si volvía la señal, pero la mayor utilidad del dispositivo fue la linterna.

Cuando miraba el celular, Lucía cubría con sus dedos la hora pues conocer el tiempo que llevaba atrapada la hacía consciente de cuánto estaban tardando las autoridades en llegar hasta ella.

En la oscuridad escuchaba el rumor de piedras diminutas desprendiéndose de las paredes y una maquinaria lejana que acompañaba la respiración de sus compañeros.

Los momentos de silencio fueron “terribles”, ya que le hacían pensar “que la esperanza se alejaba”.

La joven cuenta que “no percibió ningún olor”, pero era “evidente que había muerte”. Lo sabía “porque alguien murió muy cerca de nosotros. Era tan evidente que mi mente lo bloqueó”, asegura.

Hacia la hora 28, “se escuchó una voz”, la de un rescatista. Y los jóvenes gritaron sus nombres con mucha fuerza.

Las autoridades tardaron 5 horas en rescatarlos y cuando Lucía se elevó con un arnés hacia el cielo de la colonia Roma, sintió una tímida lluvia golpear contra ella.

Cristina vivió el temblor de manera muy distinta y su primera reacción fue comunicarse con su hermana. Por la noche recibió la noticia de una de las amigas de Lucía.

“Perdón que yo te dé la noticia, pero tu hermana se encuentra ahí”, le informó, en referencia al edificio colapsado de Álvaro Obregón, lo que provocó que Cristina entrara en pánico.

“Empecé a temblar, empecé a sudar frío. No quise llorar, nada más dije: esto no me puede pasar a mí”, recuerda.

Al día siguiente acudieron al edificio derruido. Todo era un caos, listas con nombres de desaparecidos en los perímetros de seguridad del inmueble.

“Las listas estaban confusas, alguien apuntó a mi hermana en rescatada, pero no estaba rescatada”, asegura.

Para Cristina, la peor parte fue la impotencia de estar tan cerca y no poder hacer nada, por lo que decidió ocupar su cabeza en acciones como retirar escombros y llevar víveres a los centros de acopio.

Cuando rescataron a Lucía, las hermanas se volvieron a ver en un hospital de la Cruz Roja, donde ambas se abrazaron con ansia, saciando 33 horas de incertidumbre y angustia.

Cristina, la hermana mayor, palpó el rostro y el cuerpo de Lucía con celeridad, por la necesidad de sentirla viva.

“Pensé que me ibas a dejar sola, pensé que no te iba a volver a ver”, le susurró a su hermana mientras lloraban abrazadas.

Lucía logró salir ilesa del terremoto, sabiendo que pudo correr una suerte distinta ante esta catástrofe natural que ya se ha cobrado la vida de 342 personas y causado miles de heridos.