Fraude: México 2006 es una crónica sobre las elecciones presidenciales más competidas de la historia, en las que Felipe Calderón Hinojosa fue declarado vencedor. Dichas elecciones estuvieron marcadas por las irregularidades en el conteo de las actas y por las protestas registradas durante esa jornada electoral.
Ciudad de México, 24 de noviembre (SinEmbargo).- El documental Fraude: México 2006, del director Luis Mandoki, será exhibido de manera gratuita en el Centro Cultural Los Pinos, la Alameda Central y otras sedes de la capital como parte de del programa “Cine en la ciudad”.
El documental también será exhibido en PILARES Margarita Maza, PILARES Huayatla, PILARES La Conchita, en la explanada Alcaldía Tláhuac, en la explanada Alcaldía Xochimilco, en la explanada Futurama, explanada Alcaldía Iztacalco, en Utopía Aculco y en las Canchas de Futbol Tlalpan.
Exhibirán “Fraude: México 2006”, con el director Luis Mandoki. Una crónica sobre estas polémicas elecciones presidenciales y las fraudulentas prácticas registradas. pic.twitter.com/S0xr7Be0bK
Todas las proyecciones se realizarán en punto de las 18:00 horas. En la función de la Alameda Central, el director Luis Mandoki será el encargado de presentar la cinta.
Fraude: México 2006 es una crónica sobre las elecciones presidenciales realizadas el 2 de julio de 2006, en las que Felipe Calderón Hinojosa fue declarado vencedor. Dichas elecciones estuvieron marcadas por las irregularidades en el conteo de las actas y por las protestas registradas durante esa jornada electoral.
La elección presidencial de 2006 fue la más competida en la historia del país; sin embargo, el excandidato por la Coalición Por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador, quien obtuvo poco más del 35 por ciento de los votos y tan solo 0.7 por ciento menos que el ganador, Felipe Calderón, denunció irregularidades tanto en el periodo de campañas políticas como en la elección. Según López Obrador, dichas irregularidades tuvieron el peso suficiente para influir en el estrecho resultado electoral.
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El documental se estrenó el 17 de noviembre de 2006 y fue producida por Federico Arreola. El documental conjunta tomas grabadas por ciudadanas y ciudadanos durante y después de las elecciones con fragmentos televisivos y entrevistas a personajes de la vida política mexicana.
Los dueños de la cafetería y los inquilinos del edificio Trevi firmaron un convenio para dejar el inmueble que será un espacio de coworking. Banca Mifel, fiduciarios, y por ello casi dueños la icónica construcción junto a la Alameda Central en Ciudad de México, anunciaron el resultado de una larga batalla legal.
Por Arturo Contreras
Ciudad de México, 17 julio (PiedePágina).- “Después de dos años de litigio, decidimos desistir y hacer un convenio por medio de una indemnización, que no nos parece justa y no estamos nada conformes con ella”, dice Julio César Castillo con el codo en la mesa y el puño bien apretado. Desde hace 20 años, él comanda la cafetería Trevi, que ha visto la historia de la Alameda Central desde la construcción del edificio hace más de 60 años.
En 2018 una empresa llamada Público llegó al edificio. Su intención es transformar la icónica construcción Art-Decó en un espacio de coworking, un tipo de oficinas compartidas.
También, en un desarrollo de departamentos que se rentarían a partir de aplicaciones de internet. Público, sin embargo, no es el dueño legal del edificio, sino que el propietario es el Fideicomiso 2476/2017.
Desde entonces, Bancamifel, la fideicomitente, ejerció acciones para echar del edificio a sus inquilinos. Éstos intentaron negociar para comprar los departamentos donde viven, pero fueron orillados a dejar el edificio poco a poco.
“Estos tipos son muy abusivos, y abusan de su poder económico. No les importa que la gente tenga 15 o 30 años en sus casas, o como nosotros, que hemos estado rentando por 65 años”, reconoce Julio César. Menea la cabeza de lado a lado, aprieta los párpados y continúa.
Cafetería Trevi. Foto: Arturo Contreras Camero y Andrei Martínez
“Ganó la gentrificación. Un día va a venir gente con dinero a desplazarte. No te va a dar opción para permanecer sólo por el hecho de que no tienes su potencial económico.”
“Me molesta mucho que quieran transformar esta parte de la Alameda. Esta parte de la ciudad es para el pueblo, ése es el mensaje de Diego Rivera con su mural Un paseo en la alameda”. Julio César se refiere a Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central, mural que se puede ver en un museo en la misma cuadra del edificio Trevi. “Es para todos, pero ya no va a ser así. El proyecto que están haciendo es para hacer una diferencia, es hacer algo clasista, con negocios que no van a estar al alcance de la mayoría de la gente”.
CRISOL DE LUCHAS
A pesar del resultado final, vale la pena numerar las ganancias de una lucha vecinal.
La lucha del Trevi sirvió como un crisol en el que se articularon diversas luchas vecinales, de personas desalojadas, de vecinos organizados, de artistas y activistas. La indemnización obtenida es resultado de esa lucha, en la que un grupo de ciudadanos decidió luchar por sus derechos; también la organización que tejió.
Vecinos se unieron para defender su derecho a la vivienda. Foto: Cafetería Trevi. Foto: Arturo Contreras Camero y Andrei Martínez, Pie de Página
Sus vecinos participaron en la defensa contra la reforma al artículo 60 de la Ley de Derechos Humanos de la Ciudad. La ley obligaba al gobierno a garantizar la vivienda a personas víctimas de desalojos extrajudiciales, o forzados, pero una mala redacción y una campaña mediática en contra hicieron que esa protección se anulara. También formaron parte de la propuesta de cambio a las leyes que regulan las relaciones arrendatarias en la ciudad y que impulsan una Ley Inquilinaria para la Ciudad de México
GENTRIFICADORAS Y JUEGO SUCIO
Muchos de los inquilinos empezaron juicios legales para defender su permanencia en el edificio. Sin embargo, poco a poco fueron desechados en los tribunales bajo sospechas de los demandantes por faltas al debido proceso y corrupción.
El caso del Trevi, como el de otros vecinos, por ejemplo, empezó a flaquear porque Banca Mifel metió una demanda en la que alegaban que las firmas en los contratos de arrendamiento que existían eran falsas.
“Fuimos a hacer pruebas con peritos grafólogos”, cuenta Carlos Acuña, quien fue desalojado varias veces del edificio. “José Luis Dávila –el dueño legal de la cafetería Trevi– está muy mal de salud y no pudo ir a la reunión de peritos. Pues fue la asistente del juez a su casa, pero José Luis es una persona de edad muy avanzada, tiene artritis y está semiconsciente, y pues no pudo hacer su firma”.
Esto puso en severos aprietos el caso de los inquilinos y puso las probabilidades en favor de Banca Mifel, como le advirtió la abogada a Julio César, sobrino de José Luis Dávila y quien comanda el Trevi.
“Si no hubiéramos concertado, nos hubieran echado con un desalojo violento y horrible y sin nada del dinero de indemnización”, dice.
Esta indemnización será usada para la liquidación de los 15 empleados de la cafetería. Una cocinera y dos meseros son de la tercera edad y llevan décadas trabajando en el lugar. Junto con el Trevi, los casos del resto de los vecinos también se complican, por lo que muchos también desistirán.
“No queríamos dinero, queríamos que nos vendieran nuestros departamentos. El inicio de la negociación fue porque ellos cedieron, los del Trevi. Nosotros ya no podíamos sostenerlo. Es un acto de solidaridad con ellos. Por supuesto que no es una victoria. Es no dejar que se vaya a la mala, sin poder pagar liquidaciones y arriesgando la vida y la salud del señor José Luis”, dice al respecto Carlos Acuña.
Según el antiguo vecino, en el edificio quedaba una señora de la tercera edad a la que no sabe si le dierona algún tipo de indemnización. “Los fueron a sacar, no fue un desalojo, pero sí los sacaron”.
También quedaba Arturo, otro vecino que tenía un hijo pequeño, quien se vio obligado a dejar su casa hace casi un año, cuando Público empezó a remodelar el interior del Trevi. El estrés de vivir en un lugar en obra constante los hizo irse.
Durante la pandemia de COVID-19, el señor Jaime, adulto mayor que es velador en una escuela pública, sufrió un intento de desalojo. Ahora vive en la Magdalena Mixhuca, después de haber habitado toda su vida en el centro. En el edificio aún quedan dos inquilinos en posesión de sus departamentos, aunque no se sabe si aún lo habitan, pues con los constantes cortes de luz y agua y el ruido de la remodelación vivir ahí es imposible.
“Al parecer las tortas sí se quedan”, dice Carlos de quienes lograron negociar su permanencia. “La rayuela, un bar LGBT, fue desalojado hace meses, y hay otro cafecito que llegó con la intención gentrificadora junto con otro bar, que se van a quedar porque tienen un contrato largo”.
UN ESPACIO DE ENCUENTRO VECINAL
La lucha del Trevi sirvió como un crisol en el que se articularon diversas luchas vecinales, de personas desalojadas, de vecinos organizados, de artistas y activistas. La indemnización obtenida es resultado de esa lucha, en la que un grupo de ciudadanos decidió luchar por sus derechos; también la organización que tejió.
Sus vecinos participaron en luchas como la defensa contra reforma al artículo 60 de la Ley de Derechos Humanos de la Ciudad. La ley obligaba al gobierno a garantizar la vivienda a personas víctimas de desalojos extrajudiciales, o forzados, pero una mala redacción y una campaña mediática en contra hicieron que esa protección se eliminara. También formaron parte de la propuesta de cambio a las leyes que regulan las relaciones arrendatarias en la ciudad y que impulsan una Ley Inquilinaria para la Ciudad de México
Desde el pasado 12 de junio, por la tarde, la policía montada resguardó la reapertura de la Alameda Central, mientras familias paseaban mientras portaban cubrebocas.
Ciudad de México, 13 de junio (SinEmbargo).- Durante la transición al Semáforo Naranja, la Ciudad de México presentó la reapertura de la Alameda Central y otros parques de la capital.
Desde el pasado 12 de junio, por la tarde, la policía montada resguardó la reapertura de la Alameda Central, mientras familias paseaban mientras portaban cubrebocas.
Algunas familias olvidaron la sana distancia y aprovecharon para tomarse fotos en las fuentes o sentarse a comer en las bancas, mientras las parejas optaron por las muestras de cariño en la vía pública. Pese que continuamos en la Fase 3 de la pandemia de coronavirus, pocas son las personas que continúan respetando las medidas de higiene y recomendaciones para evitar el contagio del virus.
Cómo parte del semáforo de la “Nueva Normalidad” en el que se comienzan a reabrir parques, la Alameda Central volvió a permitir el acceso al público desde el día de ayer por la tarde. Foto: Andrea Murcia, Cuartoscuro
Familia pasea en la Alameda Central usando cubrebocas. Foto: Andrea Murcia, Cuartoscuro
Familia aprovecho la apertura de la Alameda Central para ir a las bancas a comer. Foto: Andrea Murcia, Cuartoscuro
Una pareja se da un beso en una banca de la Alameda Central recien reabierta. Foto: Andrea Murcia, Cuartoscuro
Madre e hijo se toman una fotografía en las fuentes de la Alameda Central recien abierta el día de ayer. Foto: Andrea Murcia, Cuartoscuro
Una pareja se da un beso en una banca de la Alameda Central recien reabierta. Foto: Andrea Murcia, Cuartoscuro
La “nueva normalidad” también llegó a Parque México, en donde vecinos de la colonia condesa aprovecharon para sacar a pasear a sus perros o dar un paseo en bicicleta.
Vecinos de la Colonia Condesa salen con cubrebocas al Parque México como parte de la nueva normalidad en medio de la pandemia de COVID-19. Foto: Andrea Murcia, Cuartoscuro
Vecinos de la Colonia Condesa salen con cubrebocas al Parque México como parte de la nueva normalidad en medio de la pandemia de COVID-19. Foto: Andrea Murcia, Cuartoscuro
Vecinos de la Colonia Condesa salen con cubrebocas al Parque México como parte de la nueva normalidad en medio de la pandemia de COVID-19. Foto: Andrea Murcia, Cuartoscuro
Desde el pasado 1 de junio que los locales de comida pudieron abrirse en el mercado de La Merced se ha reportado que no se han respetado las medidas de seguridad, aunque algunos locatarios continúan ingeniándoselas para protegerse y continuar con la venta.
Luego de que desde el primero de junio se pudieran reabrir los locales de comida en el mercado de la Merced, no se están respetando las recomendaciones sanitarias. Foto: Andrea Murcia, Cuartoscuro
Un locatarío de la tercera edad del Mercado de la Merced implemento como medida preventiva de contagio de COVID-19 una separación de plástico para evitar el contacto directo con los clientes. Foto: Andrea Murcia, Cuartoscuro
Clientes del mercado de la Merced acuden a consumir con cubrebocas, como medida preventiva del virus COVID-19. Foto: Andrea Murcia, Cuartoscuro
LA TRANSICIÓN AL SEMÁFORO NARANJA EN CDMX
La Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, descartó que el programa de transición del semáforo epidemiológico rojo a naranja sea una ocurrencia o esté fuera de sus políticas públicas.
“No es una ocurrencia, no es una medida que esté fuera del programa y de las políticas que el Gobierno esté haciendo”, detalló.
La Jefa de Gobierno puntualizó que el Gobierno capitalino es el único que ha diseñado un programa de detección y seguimiento de casos de COVID-19.
“Si comienzan a subir los casos, pues de nuevo regresamos a una situación de menor movilidad en la ciudad. Este programa que ya presentamos nos permite iniciar esta transición”.
A la par, llamó a la población a continuar con el uso de cubrebocas y mantener la sana distancia, a fin de prevenir una mayor expansión de casos.
Elementos de la SSC, detuvieron en las inmediaciones de la Alameda Central al presunto responsable de dañar el monumento, un joven de 26 años.
Ciudad de México, 28 febrero (SinEmbargo).- La tarde de este domingo fue detenido un sujeto destruyó la cabeza del águila del Hemiciclo a Juárez en la Ciudad de México. De acuerdo con los primeros reportes, el hecho ocurrió alrededor de las 16:50 horas, durante una protesta realizada este domingo por integrantes del movimiento Antorcha Campesina contra el Gobernador de Puebla, Miguel Barbosa. La organización negó tener responsabilidad alguna en el hecho.
El hombre podría alcanzar una pena de 10 años y una multa equivalente al daño provocado al Patrimonio Nacional. El Hemiciclo a Juárez fue construido por Porfirio Díaz en 1910.
A través de sus redes sociales, el Movimiento Antorchista Nacional negó que alguno de sus integrantes haya sido responsable de vandalizar el monumento.
“Antorcha niega rotundamente que integrantes de la Organización hayan vandalizado el Hemiciclo a Juárez como se está difundiendo en algunos medios de comunicación”, publicó en su cuenta de Twitter.
Personal del Gobierno de la CdMx acudió al lugar en espera de las indicaciones del INAH. Foto: Armando Monroy, Cuartoscuro
La cabeza del águila resultó totalmente destruida y sus alas dañadas. Foto: Graciela López, Cuartoscuro
Elementos de la SSC resguardaron el lugar. Foto: Armando Monroy, Cuartoscuro
Elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), detuvieron en las inmediaciones de la Alameda Central a un joven de 26 años, presunto responsable de haber vandalizado el monumento histórico.
El sitio ya fue resguardado por agentes de la SSC quienes colocaron cintas de precaución alrededor del Hemiciclo. De acuerdo a los primeros reportes la cabeza del águila terminó totalmente mutilada, también se señalan daños en sus alas.
Antorcha niega rotundamente que integrantes de la Organización hayan vandalizado el Hemiciclo a Juárez como se está difundiendo en algunos medios de comunicación; realizamos Caravanas Culturales para denunciar amenazas y represión de @MBarbosaMXhttps://t.co/nXxhxJGSuVpic.twitter.com/KruZzUNTgE
— Movimiento Antorchista Nacional (@AntorchaOficial) February 24, 2020
Personal de la CdMx acudió al sitio en espera de las indicaciones del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) quien será el responsable de su restauración.
De acuerdo con el Código Penal Federal, el responsable podría pasar de cinco a diez años en prisión por la afectación a un monumento histórico, mismo que se considera daño a propiedad ajena
En los últimos meses el monumento ha sufrido varios daños a causa de las marchas en la capital del país y ha sido restaurado y rehabilitado por el INAH.
Esta no es la primera vez que el águila del Hemiciclo resulta mutilada, ya en 2003 había ocurrido lo mismo cuando un sujeto le quitó la cabeza con un pedazo de piedra de cantera que era utilizada en la remodelación de la banqueta.
Además de imitadores, hubo quienes lo seguían desde hace décadas, como María del Socorro, autodeclarada fanática número uno de José José, lo que ella demostraba al llevar ropa, discos, fotografías y otros recuerdos con la imagen del intérprete.
México, 4 octubre (EFE).- Fanáticos e imitadores de José José recordaron este viernes al cantante con un macrokaraoke, organizado por la Secretaría de Cultura de Ciudad de México en la Alameda Central, mientras en Miami (Florida, EU) se realizaban las primeras exequias del artista, fallecido hace casi una semana.
Admiradores entrevistados por Efe expresaron alivio y alegría tras el acuerdo entre los hijos del cantante José Joel y Marysol con su hermana Sarita, que permitirá la llegada del cuerpo la próxima semana a la capital mexicana, donde también habrá homenajes en el Palacio de Bellas Artes y la Basílica de Guadalupe.
José Alejandro Núñez, quien imita a José José desde hace 15 años, manifestó que el “Príncipe de la canción” es patrimonio cultural de la nación porque es un “ejemplo a seguir” y por la música que marcó a toda una época.
“Son sentimientos encontrados los que yo tengo ahorita. Tristeza, el agobio de que ya no está con nosotros el maestro, pero él siempre va a estar en el corazón de todo su pueblo de México”, indicó el imitador, uno de los más aplaudidos de la tarde.
Durante el karaoke en el jardín público de la Alameda, donde el artista comenzó su carrera en eventos públicos, predominaron fanáticos mayores de 50 años, pero también algunos jóvenes, como Roberto Forte, de 25 años, quien aspira a ser cantante y ve al “Príncipe de la Canción” como uno de sus ídolos. Foto: EFE
José José, que en 2017 anunció que padecía un cáncer de páncreas, llegó a Miami a comienzos de febrero 2018 para recibir tratamiento y permaneció en Florida al cuidado de Sara, su hija menor, hasta su muerte, ocurrida el sábado 28 de septiembre en un hospital.
Tras una serie de desencuentros y la intervención del Consulado de México en Miami, los familiares acordaron enterrar el cuerpo del artista en el Panteón Francés de Ciudad de México junto a los restos de su madre, Margarita Ortiz, y realizar varios homenajes, incluyendo un concierto en el Auditorio Nacional.
Aunque el primer evento oficial ocurrió este viernes en la funeraria Caballero Rivero de Westchester (Florida), los seguidores de José José en la capital mexicana, donde él nació en 1948, se unieron para cantar juntos sus grandes éxitos, como “El triste”, “40 y 20”, “Almohada” y “Gavilán o paloma”.
Durante el karaoke en el jardín público de la Alameda, donde el artista comenzó su carrera en eventos públicos, predominaron fanáticos mayores de 50 años, pero también algunos jóvenes, como Roberto Forte, de 25 años, quien aspira a ser cantante y ve al “Príncipe de la Canción” como uno de sus ídolos.
“Es algo inexplicable. Es una pérdida bastante trágica porque no solamente perdimos a una persona sino a un excelente músico, a un excelente productor, a un excelente intérprete. Y aunque nos deja un vacío, nos deja y nos llena con sus canciones para poder recordarlo”, comentó.
Además de imitadores, hubo quienes lo seguían desde hace décadas, como María del Socorro, autodeclarada fanática número uno de José José, lo que ella demostraba al llevar ropa, discos, fotografías y otros recuerdos con la imagen del intérprete.
“Yo me identifico con todas (sus canciones) por el amor, porque es muy romántico, muy lindo, muy tierno, siempre fue tierno. (Debemos recordarlo) con alegría, no con tristeza. Siempre con alegría y escuchando sus canciones”, compartió.
Entre decenas de personas que deseaban cantar una de sus piezas, también destacaban músicos como Fernando “El Lobo”, quien se inspiró en las canciones de la estrella mexicana para empezar a tocar la trompeta.
“Pido un aplauso para el amor que a mi ha llegado. Mil gracias por tanto y tanto amor. Vivo enamorado Hoy me he enamorado Que feliz estoy, soy feliz”
— Cultura Ciudad de México (@CulturaCiudadMx) October 4, 2019
“Definitivamente, lo vuelvo a reiterar y se lo reitero a todo el mundo: José José tenía una voz que nadie más tiene. Entonces, para mí José José sí ha sido una influencia. Desde niño me hacía llorar cuando él cantaba”, compartió.
¡Lo conoces! ¡Lo conoces! Ya te dije: ¡No! es un relato de Juan Carlos Toriz. SinEmbargo comparte el texto íntegro.
Por Juan Carlos Toriz
Ciudad de México, 13 de julio (SinEmbargo)– Mientras caminamos por el centro de la ciudad, ella me pregunta:
—Oye Juan, ¿te gustan las películas de Lars Von Trier?
—¿De quién?
—¡Lars Von Trier! El director del Anticristo, Nymphomaniac y Los Idiotas, ¿no lo conoces?
—No lo conozco —miento y sigo caminando.
Nos metemos en una cafetería cerca del metro Hidalgo, a un costado de la Alameda. Nos sentamos. Ella saca de su bolsa un libro de Charles Bukowski, entonces me pregunta:
—Oye Juan, ¿te gustan los libros de Charles Bukowski?
—¿De quién?
—¡Charles Bukowski! El escritor de realismo sucio.
—No lo conozco —vuelvo a mentir.
Miro a la chica por unos segundos. Se nota un poco ofuscada y se arregla el cabello en un chongo. Aparece el mesero. Yo pido una cerveza y ella un café orgánico —mismo que en su compra colabora con la manutención de las comunidades indígenas de Chiapas y Oaxaca—, de pronto, una chispa se enciende en sus bonitos y expresivos ojitos cafés, entonces me pregunta sacando otro libro de su morral:
—Oye Juan, ¿qué opinas de Pierre Bourdieu?
—¿Es un cantante o algo así?
—No —me extiende el libro que trae en sus manos: “Contrafuegos”.
Lo ojeó con pereza y lo pongo en la mesa.
—¿Apoco tampoco conoces a Pierre Bourdieu? ¿No que habías estudiado sociología?
—No, lo siento —miento por tercera ocasión.
Seguimos sentados. Ella bebé café y comienza a leer uno de los relatos de Charles Bukowski. Yo bebo mi cerveza y continúo mirándola fijamente. Es una niña muy bonita: tiene una nariz recta y chiquita, el chongo en su cabeza hace que sus facciones se vean mucho más afiladas y la blusa escotada le da una apariencia, casi, galáctica.
—Oye Antonieta, ¿conoces a Aczino —le preguntó con seriedad—, o al Muelas de Gallo?
—¿A quiénes?
—¡Al Aczino o al Muelas! Un par de raperos mexicanos.
—No —contesta arrugando la nariz— a mí casi no me gusta el rap.
—Entonces, ¿qué música te gusta?
—Arcade Fire, Björk, Nick Caves, Peter Gabriel… —menciona algunas otras bandas— ¿Las conoces, Juan?
—La verdad, no. ¿Tocan Heavy Metal o algo así?
Ignora mi comentario y vuelve a enfocar su mirada en el libro de Bukowski.
Me levanto y hago la finta de entrar al baño, entonces sin que Antonieta lo note, salgo de la cafetería y empiezo a caminar rumbo al metro Juárez.
Estoy aburrido.
Me pongo los audífonos y suena “Despacito” de Luis Fonsi con Daddy Yankee. Entonces, me relajo.
—No hay nada más aburrido que salir con una chica y hablar sobre cultura o de temas académicos—
La Ciudad de México es un punto cultural muy importante y cuenta con 185 museos en los que se puede elegir entre arte, colecciones, arqueología e historia. Aquí te dejamos algunas recomendaciones de lo que se puede hacer durante estas vacaciones a un bajo costo.
Ciudad de México, 27 de julio (SinEmbargo).- Las vacaciones de verano ya están aquí y aunque muchas de las personas que viven en la Ciudad de México aprovechan para conocer algún lugar del país hay quien disfruta de quedarse en la ciudad además de aquellos habitantes de provincia que visitan la capital para divertirse unos día, pero ¿qué se puede hacer durante las vacaciones de verano en la Ciudad de México?
En esta ciudad hay muchas actividades para realizar y qué mejor que aprovechar las vacaciones para conocer algunos puntos de este lugar que a veces por la cotidianidad y la vida ajetreada no se logran apreciar o disfrutar. Aquí te dejamos algunas recomendaciones de lo que se puede hacer durante estas vacaciones a un bajo costo.
MUSEOS
La Ciudad de México es un punto cultural muy importante y cuenta con 185 museos en los que se puede elegir entre arte, colecciones, arqueología e historia.
Uno de ellos es el museo de los Ferrocarrileros donde podrás conocer la historia del gremio ferrocarrilero en México, desde sus huelgas, luchas y conocer a esos personajes que se volvieron sus referentes. Además en el lugar se realizan conferencias, conciertos, obras de teatro, talleres y todos los sábados se exhiben pelíclas relacionadas a los ferrocarriles como parte del cine club. Este museo abre de martes a domingo y lo mejor de todo es que la entrada es libre.
Museo de los Ferrocarrileros. Foto: cdmx.gob.mx
El museo Nacional de la Revolución, presenta los hechos más destacados de dicho periodo histórico además tiene exposiciones temporales y permanentes y galerias interactivas. Una de sus atracciones es el mirador y elevador panorámico que tiene un costo de 60 pesos.
Además tienen una actividad en la que puedes ver el amanecer desde el punto más alto del Monumento a la Revolución y tomar una fotografía, desafortunadamente para este evento tienen fechas especificas que debes consultar con tiempo para adquirir tus boletos.
Monumento a la Revolución. Foto: Mario Jasso, Cuartoscuro
¿Alguna vez te habías imaginado visitar un panteón? pues el museo Panteón de San Fernando ofrece visitas guiadas para conocer las riquezas históricas y artísticas de este recinto emblemático del Centro Histórico; cada tumba tiene su historia entre las que se encuentran las de políticos, militares y personalidades como Vicente Guerrero, Ignacio Comonfort, José Joaquín Herrera, Martín Carrera y Benito Juárez entre otros.
Este panteón cuya arquitectura presenta un estilo romántico es considerado una muestra de arte funerario.
Museo Panteón de San Fernando. Foto: cultura.cdmx.gob.mx
Un lugar emblemático e histórico es el Castillo de Chapultepec, el único castillo monárquico en América Latina fue construido bajo el mandato del virrey Bernardo de Gálvez por los ingenieros Francisco Bambitelli y Manuel Agustín Mascaró. Este castillo fue sede del Colegio Militar en 1833 y en 1847 fue el escenario de la Batalla de Chapultepec.
En sus 19 salas se pueden apreciar óleos de principios del siglo XVIII, la bandera del Primer Imperio, la corona de oro, vestidos, esculturas prehispánicas y mapas de los primeros trazos de la ciudad; además de los carruajes usados por Maximiliano y Carlota.
El castillo de Chapultepec fue declarado monumento histórico. Foto: cdmx.gob.mx
Vitrales en el castillo de Chapultepec. Foto: cdmx.gob.mx
También se pueden observar los vitrales emplomados creados por Saturnino Hernán, además de pinturas como “La fusión de dos culturas” de Jorge González Camarena, “Retablo de la Independencia” o “La dictadura” de Juan O’Gorman.
El Palacio de Bellas Artes es otro recinto característico que también cuenta con un museo. Inicialmente fue inaugurado en 1934 con el nombre de Museo de Artes Plásticas, y se convirtió en el primer museo de arte en México. En 1968 las salas de exhibición reciben el nombre de Museo del Palacio de Bellas Artes.
En este espectacular lugar se puede admirar exposiciones temporales pero también exhibe de forma permanente 17 murales pintados entre 1928 y 1963 por siete artistas nacionales como Diego Rivera, José Clemente Orozco, David Alfaro Siqueiros, Jorge González Camarena y Rufino Tamayo.
El costo para entrar a este museo es de 65 pesos para las exposición temporales y la exposición permanente.
El hombre controlador del universo de Diego Rivera. Foto: Facebook museodelpalaciodebellasartes
Otro museo destacadao es el Templo Mayor ubicado en el Centro Histórico de la Ciudad de México cuenta con una zona arqueológica resguardada por un edificio o museo diseñado por Pedro Ramírez Vázquez que cuenta con ocho salas que albergan historia, cultura y objetos prehispánicos como la efigie del dios del fuego (Huehuetéotl-Xiuhtecuhtli), el monumento de Tlaltecuhtli o figuras originales de Tláloc o Mictlantecuhtli.
En la sala 2 se puede observar una reconstrucción computarizada con los colores originales del monolito de la diosa lunar Coyolxauhqui.
Imagen del Templo Mayor. Foto: cdmx.gob.mx
AUDIORAMA Y FUENTE DE TLÁLOC
Chapultepec es un lugar lleno de espacios por descubrir, además de sus museos ya mencionados, existe un espacio llamado Audiorama perfecto para escaparse un rato con la compañía de un libro y música. Este lugar cuenta con 8 bocinas y bancas en las que te puedes sentar y relajar un rato.
El principal elemento de este lugar es la música que cambia de acuerdo a los días de la semana, por ejemplo, los martes podrás escuchar música new age; los miércoles ritmos tradicionales mexicanos pero en versión acústica; los jueves se escuchan melodías del mundo; los viernes hay jazz, los sábados chill out y los domingos música clásica.
Audiorama. Foto: Instagram djferlefant
La Fuente de Tláloc, ubicada en la segunda sección del bosque de Chapultepec, muestra al dios azteca de la lluvia con dos rostros, recostado sobre un charco de agua mirando al cielo y al interior del Cárcamo de Dolores con la boca abierta, su mano izquierda siembre granos de maíz mientras que la izquierda ofrece dos mazorcas.
El Cárcamo de Dolores fue construido por el arquitecto Ricardo Rivas como parte de una obra hidráulica que funcionaría para recibir agua del río Lerma y distribuirlas en la ciudad.
Fuente Tláloc. Foto: Instagram cultura_turismo
PLAZAS PÚBLICAS
Si lo que prefieres es salir a caminar un rato, descubrir locales y comprarte un helado la mejor opción es el centro de Coyoacán, un lugar lleno de vida y sabores por descubrir.
Coyoacán proviene de tres palabras nahuas coyotl (coyote), hua (posesión) y can (lugar) lo que quiere decir lugar de los que poseen coyotes. La plaza de este lugar se forma por el Jardín Hidalgo y el Jardín Centenario rodeados de pintorescos restaurantes, cafeterias, heladerías y negocios que forman parte de la oferta de este bello lugar.
Sus calles están llenas de leyendas e historia y muy cerca de esos jardines se encuentra el mercado uno de los iconos de este mágico lugar que ofrece antojitos, comida corrida, jugos, artesanías y disfraces además de las tradicionales frutas y verduras.
Fuente de los coyotes. Foto: Instagram rodrigoventura_p
Otro lugar obligado de esta ciudad es la Alameda Central, el más antiguo jardín público de nuestro país, que con sus árboles, adoquinado, esculturas y monumentos es uno de los espacios más tradicionales de la Ciudad de México. Existen turistas que acuden a admirar las esculturas restauradas entre ellas Las Américas, las Danaides, Neptuno y las Ninfas 1 y 2, además de su quiosco en el ala norte.
Foto: Instagram rossemary_oa
Sin duda hay más opciones de museos y actividades, porque en esta ciudad sólo basta con caminar un poco y encontrar lugares fuera de lo común, pero estas fueron algunas recomendaciones para pasar las vacaciones de verano.
Ciudad de México, 12 de diciembre (SinEmbargo).– “El After” recorrió el sur y el norte del país. Conoce desde Coatzacoalcos, Veracruz, hasta Tijuana, Baja California. Es fotógrafo. Participó como asistente de producción en series y películas durante años (imágenes lo respaldan). Pero ahora, y en una etapa de su vida que, dice, puede “dejar cuando quiera”, transita por la Alameda Central, en la delegación Cuauhtémoc. Duerme en “colchones” de cartón, inhala pegamento y batalla contra el frío decembrino.
El joven rola las madrugadas entre la plaza vecina del Palacio de Bellas Artes y el Zócalo capitalino. Ahí, asegura, se necesitan sumar chamarras, cobijas y la ropa para contrarrestar a las temperaturas. Hoy, por ejemplo, a las cinco de la mañana en punto, el frío lo despertó en seco.
“De dos semanas para acá el frío ya está arreciando. Después de las 6 de mañana, el frío arrecia todavía más cabrón. Ni el sol te calienta. Pues si tienes con qué taparte, si tienes 2, 3 chamarras, y así, pues no la sientes tanto”, narra “El After”, de 33 años de edad.
La mona, otras drogas duras y el alcohol se convierten en una ruta de escape para esa galopante realidad.
“Señoritas, señoritos, hagan valer a la bandita de aquí de la Alameda. No queremos dinero. Hagan un equipo, y lo más viejo de su casa, que sea ropa, calzado y cobijas. Hagan valer aquí a todos nosotros”, pide.
“After” lleva años en los vicios. Le late estar así “como esta pandilla, cotorreando, agrediéndonos verbalmente, pero en buen pedo. Tomando, moneando, fumando mota”.
Pero sí le gustaría pisar la casa de su mamá en Navidad.
Miles de capitalinos experimentan el frío a la intemperie cada año. Combaten las bajas temperaturas de diciembre entre cartones, cobijas, chamarras, hambre, soledad, tristeza; entre drogas, alcohol y sustancias para mitigar y olvidar el dolor.
Entre los cientos de puntos que concentran a gente sin hogar, se halla la Alameda Central. Ahí, en el corazón de la capital, “El After”, Alfredo, Jonathan, Gabriel, Juan y otros jóvenes narran a SinEmbargo lo que es pasar un fin de año, otro más, lejos de sus hogares, lejos del calor, cerca del frío de diciembre.
“El After” insiste que su situación se deriva de decisiones propias (como la mayoría de los jóvenes entrevistados para este texto), pero también conoce gente que no tiene otra opción; personas que han tenido que pasar años deambulando por la zona. Dos de ellos son Jonathan y Alfredo.
“LOS 24 SON CHIDOS”
Jonathan hace artesanías y dibujos para comer, vestir y dormir -lo indispensable-. Tiene 14 años viviendo en la calle y pasa el último mes del año en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
“Las noches a veces son llenas de frío, pero también hay noches llenas de calor, ¿no? Son bonitas. Una cosa es que seas de la calle y otra que la calle sea tuya, cuando la calle es tuya es porque has sabido sobrevivirla también, ¿no? No puedes aparentar”, reflexiona.
El hombre, de 35 años, anda por su gusto así. Se dedica a trabajar, y no le importa si las demás personas los voltean a ver o los ayudan:
“Tienes dos manos, dos pies, y puedes ganar lo que quieras, bueno, no lo que quieras, pero sí lo necesario para sobrevivir”.
Lo único que sí lamenta es que de repente se desaparecen los cobertores y hay que, literalmente, estar “al tiro” para sobrevivir las noches -al interior de espacios cerrados como cajeros de bancos-.
“Los 24 (de diciembre) son muy chidos porque llega la gente, la gente que está cercas de Dios, llegan a darnos de comer, ¿no? A darnos cosas, ropa. Tienen el tiempo para acercarse a las personas que viven en las calles, ¿no?”, expresa.
A Alfredo, otro miembro de la pandilla, al menos dos de sus camaradas lo llamaron “Leyenda” desde que se le vio acercarse entre la vegetación de la Alameda. No explicaron el motivo, pero pusieron mucha atención en las trece navidades que ha pasado en la calle.
Capas y capas de abrigos cubren al hombre, quien recibe una porción del melón que segundos antes fue partido con un cortaúñas.
Desde 2004, Alfredo está en la calle. Tuvo que dejar su casa porque “ya no lo querían”. Extraña a su familia, pero ya no puede “regresar a su rancho”. Fabrica flores con latas y las vende en 20 o 30 pesos (dependiendo del cliente). Es un veterano del dolor. Cada chamarra que trae puesta es una lección.
De acuerdo con el primer Censo de Poblaciones Callejeras 2017, 4 mil 354 personas viven en las calles de la Ciudad de México (87 por ciento son hombres; 13 por ciento, mujeres), y se distribuyen en las 16 delegaciones (con mayor presencia en Venustiano Carranza, Cuauhtémoc y Gustavo A. Madero).
Hombre duerme en una de las calles principales de zona centro. Foto: Cuartoscuro.
“ÉL ES DE CASA”
Juan de Dios pone 15 pesos para “la vaca” y aporta la música que más tarde bailarán sus compañeros. El joven, descrito como “el de casa”, asegura que tuvo que irse de su hogar luego de cometer un homicidio. Ahora le “chinga” durante el día para poder juntar el monto que le piden en un hotel, y es que el frío de diciembre “está bien culero”.
“Junto dinero cantando, haciendo rap, vendo pulseras, artesanías. Todo lo que sea una moneda, charoleo, pido limosna”, detalla.
La casa de Juan se encuentra localizada cerca del Deportivo Oceanía, en San Juan de Aragón, pero no puede ir, prefiere evitar el reclusorio, prefiere combatir el frío junto al grupo que denomina “familia”.
El joven trabajó como traductor bilingüe, pero la vida lo obligó a estar ahí, en la bancas que alcanzan temperaturas infernales durante en esta época del año.
Ahora solicita que no se juzgue a sus camaradas: “No porque está en la calle significa que no tiene una carrera, muchos de los que están ahí pasaron por la Universidad. Los ves bien podridos, bien vale verga, pero tienen carreras”.
“NECESITAMOS QUE NOS AYUDEN”
Gabriel Flores, también conocido como“El Gordo”, tiene unos guantes de box tatuados en el hombro izquierdo. Canta, baila salsa, toca la guitarra y, dice, no tiene con qué pagar todo el apoyo, el cariño que ha recibido y a la gente que ha conocido durante su estancia en las calles de la Ciudad de México.
“Nos regalan comida, una moneda. No robamos. Cantamos, hacemos poemas, malabares, lo que tú quieras, pero nada de maldad”, cuenta y bebé el cuarto caballito de Tonayan de la mañana, el cual funciona para quemar el cuerpo por dentro y no sentir el frío afuera.
“La vida de la calle te enseña de la soledad, la tristeza, la nostalgia, pero también hay alegrías, placeres. Yo como músico, la gente aquí nos presta su guitarra, canta, nos apoya, ¿verdad, hermano? Convivimos”, narra.
El hombre, el mayor del grupo que se concentra junto a las fuentes de la Alameda, insta a la gente a que vayan a ayudar a los niños de la calle, pues están padeciendo: “Que nos traigan ropa, comida, dinero, lo que puedan apoyar. Siempre nos han apoyado y estamos esperando su ayuda. Que Dios los Bendiga”.
Leer en la Alameda, una iniciativa de la Brigada para Leer en Libertad, se hace en contraposición a Reforma, la avenida que está en plena construcción por el Metrobús. Hay poco presupuesto, pero libros de todas las especies a mitad (o menos) de lo que sale en las librerías.
Ciudad de México, 8 de abril (SinEmbargo).- La Alameda Central se ha puesto como territorio improvisado para hacer la feria de todos los años que la Brigada para leer en Libertad organiza en la avenida Reforma.
Sin nada de presupuesto, pero con el mismo amor por los libros, el escritor Paco Ignacio Taibo II se comanda a vivir dos semanas de letras junto a autores mexicanos, para lo cual incluso llevará a cabo una lectura de sus textos con acompañamiento de Horacio Franco (el flautista) y el cantautor Fernando Rivera Calderón.
“Esta ciudad son muchas en varias ciudades y para nosotros hemos capturado este espacio espectacular”, dice Paco.
La feria empezó ayer con una conferencia de Benito Taibo titulada “Leer para vivir” y continúa hoy con la presentación del cómic de Augusto Mora, En busca de una voz.
Hay un debate político, a las 7 de la tarde, con la presentación de Claudia Sheinbaum y Alejandro Encinas.
Mañana, domingo, a las 12 hay un concierto de Salario Mínimo, una charla con Oscar de la Borbolla y la presentación del libro Esta es mi pinche Biblia, con Lorena Amkie y Ricardo Farias.
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Aquí va, el resto de las actividades:
Lunes 10
5:00 Ritmos cubanos con Radio Cafetal.
6:00 Presentación del libro “Epigmenio González: Circunstancias” de Jesús Reyes Bustos.
7:00 Presentación y regalo del libro “Corresponsal de guerra” de Guillermo Zamora.
Martes 11
4:00 Música con Brass Street Boys.
5:00 Presentación de la colección “Ediciones de autor” con Gabriela Ballesteros, Juan Luis Nute y Eduardo Osorio
6:00 Presentación y regalo del libro “Una latinoamericana manera de morir” con Eduardo Antonio Parra, Eduardo Monteverde y Paco Ignacio Taibo II.
Miércoles 12
4:00 Música con Calle 4.
5:00 Conferencia “La guerra sucia” con Fritz Glockner, Nicomedes Fuentes.
6:00 Mano a mano “Desaparecidos en México” con Jorge Moch y Arturo Cano.
7:00 Palomazo literario musical con Horacio Franco y Paco Ignacio Taibo II.
Jueves 13
4:00 Música con Las Swing Sisters.
5:00 Presentación del libro “El mapa rojo del pecado” de Gabriela Pulido presenta Pedro Salmerón.
6:00 Presentación del libro “Por los viejos tiempos” de Julia Rodríguez, presenta Jorge Belarmino Fernández.
7:00 La historia a debate: Antonio López de Santa Anna con Pedro Salmerón y Luis Fernando Granados.
Viernes 14
4:00 Música con Calaveras de Azúcar.
5:00 Presentación del cómic “Torbellino” con Santiago Flores, Armando Bartra y Juan Manuel Aurrecoechea.
6:00 “Ciudad y crónica” con Héctor de Mauleón.
7:00 Presentación del libro “No manden flores” de Martín Solares presenta Jose Ramón Calvo
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Sábado 15
1:00 Música con Calacas Jazz Band.
2:00 Lectura de poesía con Enrique González Rojo.
3:00 “Ciudad y cine” con Beatriz Novaro y Victor Ugalde.
4:00 Presentación del libro “Contra la desesperanza” de Rebeca Solnit.
5:00 Tertulia “H.P. Lovecraft” con Gerardo H. Porcayo y Luisa Iglesias.
6:00 Conferencia “El rock cambió la Historia” con Lutz Keferstein.
7:00 Presentación y regalo del libro “Una antología levemente odiosa” poemas de Roque Dalton presenta Eduardo Castillo y Oscar de Pablo
Domingo 16
1:00 Música con “La granja del Tío Bob”.
2:00 Presentación y regalo del libro “Pesadilla de último minuto” de Aaron Álvarez presenta Alicia Rodríguez
3:00 Presentación de la revista CARIATIDE (especial Magonismo) con Daniel Aguilar.
4:00 Presentación del libro “Adiós a Dylan” de Alejandro Carrillo presenta Eduardo Penagos
5:00 Debate “Periodismo narrativo” con Emiliano Ruiz Parra, Alejandro Almazán, Daniela Rea, Alberto Arce, Fabrizio Mejía Madrid y Paco Ignacio Taibo II.
6:30 Presentación y regalo del libro “Mas Revueltas” con Humberto Musacchio y Fabrizio Mejía Madrid.
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