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En 10 meses de 2021 adoptaron a 4 menores en todo México. Más de 2 mil esperan…

viernes, enero 28th, 2022

El escándalo en el que se vieron involucrados el Gobernador de Nuevo León, Samuel García, y su esposa, la influencer Mariana Rodríguez, por sustraer ilegalmente a un menor de un DIF del estado para “adoptarlo por un fin de semana” ha puesto sobre la mesa la realidad en la que viven miles de menores que se encuentran en estas estancias. Los datos muestran que tan sólo en los primeros 10 meses del año pasado se adoptaron a cuatro menores.

Ciudad de México, 28 de enero (SinEmbargo).- Adoptar a un niño, niña o adolescente en México no es un proceso sencillo. En los últimos tres años, —de 2019 a octubre de 2021— el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de las Familias (SNDIF) recibió un total de 117 solicitudes y aprobó únicamente 33 adopciones, cuatro de ellas en los primeros 10 meses del año pasado.

De acuerdo con datos del DIF y de la Procuraduría Federal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes —proporcionados en la solicitud de información con folio 330028821000049—, hasta octubre de 2021 había un total de 2 mil 133 niñas, niños y adolescentes viviendo en 128 centros de asistencia social públicos y privados a nivel nacional, mil 94 niñas y adolescentes y mil 39 varones.

La misma solicitud indica que de las 33 adopciones que se han concretado, seis fueron en 2019; 23, en 2020, y cuatro, en 2021. Otra solicitud —ésta con el folio 1236000010721— refiere que en 2016 se concluyeron seis adopciones; en 2017, siete, y en 2018, 15. Es decir, en los últimos seis años han sido adoptados al menos 56 menores en todo el país.

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El panorama que arrojan estas cifras muestra una parte de la realidad en la que viven menores que son llevados a centros de asistencia social y contrasta con la reciente polémica que protagonizó el Gobernador de Nuevo León, Samuel García y su esposa, la influencer Mariana Rodríguez, quienes sustrajeron ilegalmente a un menor de un DIF del estado para “adoptarlo por un fin de semana”.

El caso llevó a organizaciones a condenar la transgresión a los derechos del menor, mientras que las autoridades del DIF nacional determinaron que Samuel García y su esposa Mariana Rodríguez, “adoptaron” al bebé sin los permisos necesarios y sin fundamentos para poder realizar el resguardo del menor conforme a la Ley.

La Procuraduría de Protección y el Director del Centro de Atención Integral al Menor y la Familia, ambos del estado de Nuevo León, otorgaron el permiso para que el niño quedara bajo resguardo del matrimonio durante un fin de semana, como “medida especial”, indicó la dependencia.

La instancia reveló que no existe un proceso de adopción que involucre al niño, ni tampoco a la familia integrada por el mandatario estatal y su esposa.

EL Gobernador de Nuevo León, Samuel García junto a su esposa, la influencer Mariana Rodríguez. Foto: Facebook Samuel García

En ​​entrevista con SinEmbargo, Oliver Castañeda Correa, Procurador Federal de Protección de Niñas Niños y Adolescentes del Sistema Nacional DIF, explicó que para que una persona o familia puedan acoger a un menor deben de cumplir con una serie de requisitos y trámites que pueden extenderse hasta por tres años y que ante el gran número de requerimientos, suelen provocar que los interesados abandonen el proceso.

“Nosotros hemos visto que los procedimientos, las adopciones, se tardaban de dos a tres años. Ya hemos logrado que en varios casos se reduzcan los plazos incluso hasta 9 meses, pero sí influye en la actividad de los solicitantes, de las condiciones en las que se encuentren los niños que en estos tiempos se puedan dar de manera ininterrumpida cada uno de estos pasos y que el proceso jurisdiccional se lleve sin ningún contratiempo y con la celeridad que puedan darle a estos temas”, explicó.

LOS OBSTÁCULOS A LA HORA DE ADOPTAR

Oliver Castañeda Correa indicó que en México se tiene la creencia de que la adopción es la manera perfecta para cubrir la falta de posibilidades de una pareja de tener un hijo o para cubrir vacíos emocionales, cuestión que es equivocada.

“Uno de los principales obstáculos tiene que ver con sus propias condiciones, en general su contexto psicológico, emocional y también de alguna manera los motivos por los cuales desean adoptar. La mayoría de la gente en nuestro país todavía piensa que la adopción es una manera de cubrir una falta de la posibilidad de tener un hijo o de cubrir en muchas ocasiones vacíos emocionales o alguna otra circunstancia que desafortunadamente en las evoluciones generalmente sale y en muchas de estas circunstancias no se logra la idoneidad de los solicitantes para que puedan obtener un certificado”, dijo el funcionario.

En los últimos tres años, el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de las Familias (DIF) recibió un total de 308 solicitudes y aprobó únicamente 50 adopciones, es decir, solo se concretaron uno de cada seis trámites. Foto ilustrativa: DIF.

Oliver Castañeda aseguró que todas las personas que deseen iniciar con un proceso de adopción deben de tener en cuenta que la prioridad es restituir el derecho de vivir en familia a una niña, niño o adolescente y no el cubrir vacíos personales.

“Sobre todo lo que hay que entender en este proceso es que las adopciones es restituirle un derecho a un niño, que es el derecho a vivir en familia, entonces todo lo que se haga es para apoyar en realidad a una niña, niño o adolescente y no necesariamente, aunque también puede ser compatible, para cubrir una faltante, un vacío que tenemos nosotros como personas o como pareja”.

El funcionario indicó que son tres los principales obstáculos a los que se enfrentan las personas que desean adoptar a un niño, niña o adolescente en México: su contexto psicológico y emocional, el poder encontrar a niños o adolescentes con las características que piden y los tiempos en el proceso jurisdiccional, siendo los dos últimos los que más provocan que los interesados desistan con sus procesos.

“¿Quién no quisiera a una niña, niño o adolescente completamente sano y casi bebé para tenerlo desde muy pequeño, que son muchos de los requerimientos que se tienen? Es más difícil que en la medida que van creciendo los niños, un solicitante se anime por requerir la adopción de uno de ellos. En adolescentes es más difícil que lo soliciten y entonces aquí en encontrar el perfil que ellos están solicitando, también es otro punto”, afirmó.

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LA POLÉMICA DE SAMUEL Y MARIANA

El pasado 16 de enero, el Gobernador de Nuevo León, Samuel García y su esposa, Mariana Rodríguez, se volvieron objeto de criticas al anunciar en redes sociales “la adopción” de un menor por un fin de semana.

La esposa del Gobernador de Nuevo León, quien cuenta con más de 2.2 millones de seguidores en Instagram y tiene monetizadas sus redes sociales, compartió una fotografía en donde aparecía cargando al bebé llamado “Emilio”, mientras Samuel García posaba parado junto a ellos.

Luego de la primera publicación, Mariana Rodríguez compartió más fotografías y videos en donde se le observaba cuidando al bebé.

Redim mostró su “profunda preocupación” debido a “la exposición excesiva e innecesaria de este niño, si en efecto hay un interés legítimo por su vida y por su futuro”. Foto: marianardzcantu, Instagram.

El Gobernador de Nuevo León Samuel García fue criticado junto con su esposa Mariana fueron criticados por “adoptar” a un niño por un fin de semana. Foto: Especial.

La Comisión Estatal de Derecho Humanos (CEDH), la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el DIF, la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) y la organización Save the Children expresaron su preocupación por la exposición que tuvo el menor en redes sociales y aseguraron que fue víctima de diversas violaciones a sus derechos humanos.

El DIF nacional inició una investigación por “el supuesto proceso de adopción por un fin de semana” que realizaron Samuel García y Mariana Rodríguez en el Centro de Asistencia Social Capullos, un centro público de acogida para menores de edad.

Días más tarde, la Procuraduría Federal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes concluyó que Samuel García y su esposa Mariana Rodríguez, “adoptaron” al bebé sin los permisos necesarios y sin fundamentos para poder realizar el resguardo del menor conforme a la Ley.

La Procuraduría reveló que desde hace tres meses el niño “recibe visita diaria por parte de la C. Mariana Rodríguez Cantú”, sin aclarar o justificar las razones de dichas convivencias; y en cuanto a la vulneración del derecho a la intimidad del niño, declaró que el hecho de que su imagen y datos personales hayan sido expuestos de manera masiva no configura una violación al derecho de intimidad.

CRÓNICA | Niños mexicanos pasan años en albergues por falta de ley que homologue la adopción

domingo, enero 19th, 2020

En diciembre de 2014 entró en vigor la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, que establece que se debe contar con un sistema de información que permita conocer qué niños ya son susceptibles de adopción. Hasta ahora, ese registro no existe.

Entre mayo y junio de 2017, de acuerdo con la investigación de organizaciones civiles que incluyó solicitudes de información al DIF, así como a tribunales de justicia, había por lo menos mil 168 niños y adolescentes susceptibles de ser adoptados. Sin embargo, de acuerdo con datos del DIF Nacional, en 2018 de las 28 solicitudes de adopción que recibió, sólo se concretaron 14.

Por Cristina Sánchez Reyes

México, 19 (EFE).– María tiene nueve años. Le gusta el futbol, asiste a la primaria, le gusta leer y jugar con su perrita, Mía. Hace tres años, todavía vivía en la Casa Hogar y Futuro y estaba lejos de imaginar que tendría una madre llamada Ana María Rosas.

Cuando se conocieron, recuerda su ahora mamá legal, María se echó a correr. “Ese es el recuerdo que tengo de ella”, cuenta la madre en entrevista con EFE.

Para entonces, Ana María ya tenía preparado todo para la llegada de su hija. Había modificado su casa, con rejas en el balcón para evitar accidentes, y había decorado la habitación de su pequeña con colores rosas y morados, su cama y una cocinita para que pudiera jugar.

La directora de Adopción de la Procuraduría Federal de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF), Juana Brenda Pérez Salazar, habla el pasado viernes 17 de enero durante una entrevista con Efe, en Ciudad de México (México). Foto: José Méndez, EFE

LA ODISEA DE ADOPTAR EN MÉXICO

Hacía ya tiempo que Ana María había decidido ser madre, aunque sabía que biológicamente era imposible, pues había atravesado por una histerectomía.

Entonces supo que su única opción era la adopción aunque nunca imaginó que en el proceso tendría que superar barreras y no claudicar ante su objetivo de tener un hijo.

Ana María trabaja como editora en un periódico y no tiene pareja, pero además, en aquel entonces rebasaba ya la cuarta década de vida.

“La primera vez que llegué a una oficina del DIF (Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia) lo primero que me dijo una mujer es que yo no iba a tener éxito. Primero porque era soltera y luego porque ya pasaba de los 40 años”, confesó a EFE la también comunicadora.

De acuerdo con Juana Brenda Pérez Salazar, directora de adopción de la Procuraduría Federal de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes del Sistema Nacional DIF, “en el tema de adopciones no existe discriminación de ningún tipo, por raza, género, si son familias homoparentales, solteros, heterosexuales, homosexuales”, afirma.

Niños y niñas dentro de un albergue. Foto: Elizabeth Ruiz, Cuartoscuro

E incluso, asegura que el trámite para quienes tienen que adoptar es relativamente sencillo.

Ana María confiesa que aunque ese primer encuentro la derrumbó, estaba decidida a ser madre. “Lo primero que tienes que hacer es ir a cursos de inducción donde explican todo lo que implica una adopción”, relata.

Y es ahí, en donde muchas parejas desisten de la adopción. No obstante, quienes deciden seguir el proceso deben, según Ana María, “contar con mucha paciencia y hasta valentía para enfrentar los procesos burocráticos que pueden llevar más de tres años”.

Tras los cursos, invirtió meses en la entrega de una enorme cantidad de papeles, comprobantes de ingresos, fotografías de su familia, visitas en su casa, pasó por entrevistas, siguió todo el proceso y pagó aproximadamente 20 mil pesos (unos mil 71 dólares)… y esperó.

UN MARCO LEGAL INSUFICIENTE

Ricardo Bucio, secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Protección Integral a Niñas, Niños y Adolescentes, dice a EFE que quienes quieren adoptar se enfrentan a un marco legal y normas locales complejas.

Muchos de los niños que están en albergues o casas hogar, están a la espera de que las autoridades ubiquen a sus padres o algún familiar -abuelos, tíos- que puedan hacerse cargo de ellos.

Algunos otros, tienen que esperar a que sus padres biológicos entiendan que no pueden hacerse cargo de ellos y cedan sus derechos para que los pequeños sean jurídicamente susceptibles de ser adoptados. Este proceso puede tardar años.

“Es un mito que todos los pequeños que están en este tipo de centros están a la espera de una adopción”, aclara Pérez Salazar.

Pero aunado a ello, los criterios de adopción en los diferentes estados del país no están homologados: “No exista una ley nacional que establece y homologa los procesos de adopción”, lamenta.

En diciembre de 2014 entró en vigor la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, que establece que se debe contar con un sistema de información que permita conocer qué niños ya son susceptibles de adopción. Hasta ahora, ese registro no existe.

Entre mayo y junio de 2017, de acuerdo con la investigación de organizaciones civiles que incluyó solicitudes de información al DIF, así como a tribunales de justicia, había por lo menos mil 168 niños y adolescentes susceptibles de ser adoptados.

Sin embargo, de acuerdo con datos del DIF Nacional, en 2018 de las 28 solicitudes de adopción que recibió, sólo se concretaron 14.

UN CASO DE ÉXITO

Ana María logró la adopción de María, quien ya lleva sus apellidos, tres años después de que comenzó su proceso y ese día lo recuerda como uno de los más felices de su vida. Aunque todavía la pequeña no la llama mamá, asume que Ana María ejerce ese rol.

Hasta la fecha consideran que no han tenido problema con que la gente sepa que es adoptada. “No lo mencionamos si no es necesario”, cuenta. Son mejores amigas e, incluso, hasta tienen cierto parecido físico.

La foto de María está montada en un portarretrato con forma de árbol, donde está su mamá y abuelos. Y cuando se le pregunta si es feliz con su mamá, asiente con una gran sonrisa.

Ricardo Bucio acepta que todavía existe un gran estigma sobre el tema.

“La televisión privada se ha dedicado por décadas a distinguir y prejuiciar a personas que viven situaciones de adopción y a poner en situación errónea de que los padres tienen derecho a adoptar, pero la perspectiva es contraria: son los niños quienes tienen derecho a ser adoptados”, manifiesta.

Sin embargo, Bucio considera que falta voluntad política para que se aprueben reformas constitucionales y leyes que faciliten los procesos de adopción. “La cuestión es que haya compromiso político”, finaliza.