Todos la recordamos por su excelente papel en esa serie maravillosa llamada Mad Men. Ella hubiera querido que se extendiera dos temporadas más, porque nunca le habían dado un papel tan interesante. Ahora está cargada de trabajo y es co-estrella con Tim Roth en Tin Star. Ya no dice nada a quienes le dicen que está gorda.
Ciudad de México, 22 de noviembre (SinEmbargo).- La actriz de Mad Men, esa Joan Holloway que mandaba a las secretarias en esa oficina demencial, extraña un poco la serie aunque no le faltan proyectos, tal como pudimos verla recientemente en el programa de su antiguo jefe, Matthew Weiner, The Romanoffs.
Allí Christina Hendricks hace un duelo actoral con la actriz francesa Isabelle Huppert (se entiende la emoción de los directores de tener a una criatura semejante, pero habla muy mal el inglés y eso la disminuye), en una metapantalla titulado “House of Special Purpose”, con guión de Weiner y Mary Sweeney.
Isabelle hace de directora, un tanto exótica, un tanto extrema y nuestra querida actriz es un poco la idiota que no entiende nada pero que conserva hasta el final la cuota de cordura. Al final se entienden y tratan de apoyarse, o al menos es lo que cree Olivia (Hendricks).
Dos temporadas de Tin Star, al lado de Tim Roth. Foto: Especial
Graban el último capítulo de The Romanovs, donde los matan (cabe aquí destacar la reciente publicación de Románov, correspondencia de una familia, traducida por Tatiana Shvaiova y Ezra Alcázar, de Páginas de Espuma) y queda toda la familia en el recuerdo y el cambio del mundo.
Hay mucho del universo de las series en el capítulo de The Romanovs, desde el acoso sexual hasta el maltrato de la directora a sus actores y de pronto toco comienza a unirse. El drama de la familia real y la muerte por pánico de la actriz Olivia (Christina Hendricks) resultan doblemente impresionantes.
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LA ACTRIZ DE MAD MEN
Christina se hizo famosa por Mad Men. Mirar la serie era regocijarse en su carácter voluble, en su silueta descomunal y al mismo tiempo la fuerza para ser mujer en esos tiempos. Sin embargo, algunos la criticaron por no ser “exactamente flaca”, tal como se lleva con las actrices en la actualidad.
De hecho, durante el Globo de Oro de 2010, un periodista de moda del New York Times la criticó rudamente: “No hay que poner una chica grande en un vestido grande”.
“Sí, como cualquier mujer, sería más feliz con 10 kilos menos. Pero, después de ver esas fotos de mí misma, lo pensé y creo que me veía hermosa. No me siento mal”, dijo Christina.
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“Debería haber un millón de diferentes tipos de cuerpo en la televisión. Es indignante que no ocurra así”, ha dicho a The Times, en una batalla por ahora perdida pero que indica la necesidad de que haya muchos cuerpos en la pantalla. Christina no es gorda, tiene un físico rotundo, es carnosa y probablemente se parezca mucho más a las mujeres reales que a las que aparecen en el cine o televisión.
Junto a Isabelle Huppert en The Romanoffs. Foto: Amazon
Estuvo con Tim Roth en Tin Star, en una serie policial, llena de misterios e intriga, donde ella hace de dueña de una petrolera.
“Estoy en medio de la filmación de la segunda temporada de Tin Star ahora mismo. La oportunidad de trabajar con Tim Roth, a quien adoro, fue un gran sorteo, y fue un tipo de proyecto diferente con un tono diferente. He estado en Calgary, congelando mi trasero al escalar alrededor de la nieve hasta la cintura durante los últimos meses. Ha sido una alegría”, ha dicho Christina.
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Christina Hendricks nació en Knoxville (Tennessee) hace 42 años. Su madre era psicóloga y su padre, de nacionalidad inglesa, trabajaba para el servicio forestal.
Está casada con el actor Geoffrey Arend, desde 2012 y se lo presentó Vincent Kartheiser, el malvado joven de Mad Men.
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La casa torcida, adaptación de una novela de Agatha Christie en la que comparte cartel con Glenn Close y Gillian Anderson, es una de las películas en la que la veremos. Ha trabajado en Good Girls, donde interpreta a Beth Boland, una ama de casa de los suburbios que, junto con su hermana y su mejor amiga, interpretadas por Mae Whitman y Retta, respectivamente, se encuentra mezclada con pandilleros después de una redada en un supermercado local.
Mucho trabajo para una actriz rotunda y sumamente talentosa.
