SinEmbargo MX

Ayer, en el marco del Día del Trabajo, López Obrador anunció: “Quiero informar que hemos tomado la decisión de iniciar los trabajos, esta es una responsabilidad de la Secretaría del Trabajo, vamos a iniciar las excavaciones para rescatar los cuerpos de los 65 mineros que quedaron enterrados en la mina de Pasta de Conchos desde el 2006”.

E informó que “se buscó a German Larrea, aunque ya en otra ocasión yo se lo había planteado, y está fuera del país y nosotros tomamos esta decisión”. Advirtió que el rescate se haría con o sin la ayuda del empresario. Hoy anunció que Larrea ya se puso en contacto y aceptó ayudar.

Ciudad de México, 2 de mayo (SinEmbargo).– Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México, informó esta mañana que German Larrea, dueño de Grupo México y de la mina Pasta de Conchos, aceptó ayudar a su Gobierno en el rescate de los 65 cuerpos de los mineros que murieron ahí durante una explosión en 2006; sin embargo insistió en que ya intentaron el rescate y que no habían podido. Detalló que así se lo hizo saber mediante una carta que le envió ayer, la cual dará a conocer.

El Jefe del Ejecutivo Federal recalcó esta mañana que pidió a la Secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde, que buscara al empresario para pedirle su ayuda en el rescate de los cuerpos de los mineros, pero no lo habían encontrado. Sin embargo ayer él decidió hacer el anuncio de que se comenzarían los trabajos para el rescate, con o sin la ayuda de Larrea.

Destacó que el empresario se puso en contacto, a través de una misiva, ayer mismo y que eso demuestra que “en los hechos hay armonía, hay concordia”.

“Ayer, por ejemplo, hablé del rescate de los mineros y no había tenido oportunidad de comentarle previamente a el dueño de la concesión a German Larrea, no estaba. Consultamos a los familiares porque era un compromiso que hicimos, algo que tiene que ver con la justicia, con el humanismo. No habíamos tenido la oportunidad de hablar con él. Yo le había comentado este asunto cuando tuvimos un encuentro hace unos meses”, recordó.

“Él me había dicho que habían hecho el intento y no habían podido, que había condiciones difíciles, riesgosas. Yo insistí en que teníamos que hacer todo”, agregó.

Detalló que le pidió a la Secretaria del Trabajo que buscara a German Larrea para pedirle que ayudara, pero “no estuvo”.

“Ayer mismo me envió una carta sosteniendo sus puntos de vista de que ellos habían hecho el intento, que no habían podido rescatar los cuerpos pero que aceptaba ayudar y colaborar, que ponía a disposición de este esfuerzo los proyectos que ellos tenían, los elementos que se necesitaran”, informó.

“¿Qué demuestra esto? Que están ayudando. El sindicato minero, lo mismo”, destacó.

Aseguró que pese a que puedan haber diferencias “siempre hay intereses superiores, causas justas que están por encima de intereses particulares, de grupo”.

Ayer, en el marco del Día del Trabajo, López Obrador anunció:

“Quiero informar que hemos tomado la decisión de iniciar los trabajos, esta es una responsabilidad de la Secretaría del Trabajo, vamos a iniciar las excavaciones para rescatar los cuerpos de los 65 mineros que quedaron enterrados en la mina de Pasta de Conchos desde el 2006”, anunció.

“Se habló con los familiares, Luisa María Alcalde habló con los familiares de los mineros y es una petición que vienen haciendo desde hace mucho tiempo”, detalló.

Durante su conferencia mañanera del 1 de mayo, el Jefe del Ejecutivo federal informó que “se buscó a German Larrea, aunque ya en otra ocasión yo se lo había planteado, y está fuera del país y nosotros tomamos esta decisión”.

“Estoy seguro que no va a oponerse porque es una decisión con dimensión humanitaria y es también una decisión del Estado Mexicano. Como Presidente de la República he tomado esta decisión y tengo facultades, podemos hacerlo, y no creo que se oponga”, previó.

Sin embargo advirtió: “si ayuda, bienvenido; si no ayuda, de todas maneras lo vamos a hacer”.

La tragedia de Pasta de Conchos ocurrió la madrugada del domingo 19 de febrero de 2006 en el último año del sexenio del Presidente Vicente Fox Quesada. Ese día se registró una explosión en la Mina 8 pertenece a Industrial Minera México (IMMSA), del Grupo México, propiedad del magnate Germán Larrea Mota Velasco, el segundo hombre más rico de México. Cinco días después del siniestro, las autoridades suspendieron el rescate.

La batalla de las familias por el rescate de los cuerpos se encontraba en instancias internacionales. En abril de 2018, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) admitió la queja presentada por Organización Familia Pasta de Conchos (OFPC) contra del Estado mexicano por su responsabilidad en la violación al derecho a la vida de 65 mineros fallecidos, la integridad de quienes ahí laboraban y el acceso a la justicia para los parientes de las víctimas de esa madrugada de 19 de febrero de 2006.