Regreso a clases presenciales

@guerrerochipres

Eduardo ingresó a quinto de primaria. En casa perciben su entusiasmo, aunque también lo notan nervioso. Está feliz de poder jugar con niñas y niños de su edad y de aprender con más herramientas que las disponibles en clases virtuales; pero su rendimiento académico ha disminuido, ha perdido habilidades para sociabilizar y eso le genera ansiedad.

Como él, 29 millones 849 mil 046 alumnos regresaron este lunes a las aulas con retos que, con el apoyo de autoridades, profesionales de la salud mental y el núcleo familiar, podrán superar.

En la capital nacional, las escuelas recibieron a los estudiantes con un mensaje de cultura cívica para prevenir el acoso escolar: “Tu amabilidad puede hacer una gran diferencia en la vida de alguien”. La Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, dio el banderazo a esa campaña y desde la Ciudad de México modela un programa de becas para ayudar a regresar a clases a quienes abandonaron sus estudios durante la pandemia.

Como papás y mamás, hay opciones para facilitar que los hijos se sientan felices en esta nueva etapa. Por ejemplo, hacerles saber que es natural estar nerviosos y explicarles los cambios que encontrarán en esta etapa de conexión con lo presencial, en lugar del zoom de los últimos dos años.

También es importante brindarles seguridad sobre su forma de ser, su apariencia y su valía, asegurarles que no están solos y que pueden hablar con un adulto de confianza sobre cualquier tipo de acoso en la escuela o en internet les generará conciencia sobre la posibilidad de reportar situaciones indebidas. Esta conversación también permite aconsejarles, ser empáticos con sus compañeros y rechazar cualquier tipo de burla o discriminación.

Pongamos atención a sus actividades en línea. Internet es su principal fuente de información y de convivencia fuera de la escuela. Monitorear los sitios que visitan y hablar sobre la conveniencia de usar perfiles privados, así como advertirles sobre no compartir información personal con extraños es enseñarles a aprovechar las ventajas de la era digital sin riesgos.

Cierta ansiedad ante los cambios es normal y desaparecerá tras unos días de clases; pero si la o el menor se aísla, tiene problemas para dormir o cambios de conducta por un periodo prolongado, lo ideal es ayudarle a través de especialistas como los del Consejo Ciudadano.

Ahí hay un servicio de apoyo psicológico y jurídico gratuito 24/7, a través de la Línea de Seguridad y Chat de Confianza 55 5533 5533, para estudiantes que requieran orientación ante emociones como temor y ansiedad por el enfrentamiento con un aula presencial o bullying.

Está en manos de la comunidad entera crear condiciones para un ciclo escolar que celebre la reactivación de esa parte vital de nuestra educación en la infancia y adolescencia.