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Un experto de la UNAM indicó los síntomas que se presentan al infectarse con la viruela del mono, así como recomendaciones para evitar el contagio, especialmente entre los menores de 50 años que no han sido vacunados contra la viruela.

Por Carina López

MEXICO, 8 jun (Xinhua) — Los menores de 50 años, así como adolescentes y niños, son más susceptibles a contraer la viruela símica o viruela del mono, debido a la inmadurez de su sistema inmune y a que no fueron vacunados contra la enfermedad, afirmó el académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Francisco Monroy.

«Todas las personas adultas menores de 50 años que no están vacunadas, los niños y los menores de 16 años, tienen mayor posibilidad de enfermarse, lo que facilita la diseminación del virus entre la población humana», explicó a Xinhua el académico mexicano de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM.

El 28 de mayo pasado, las autoridades sanitarias de México confirmaron el primer caso importado de viruela símica, en una persona que reside de manera permanente en la ciudad estadounidense de Nueva York y que probablemente se contagió en Países Bajos.

De acuerdo con Monroy, otro sector de la población que está en riesgo por esta enfermedad corresponde a las personas mayores de 60 años que no han sido vacunadas y que su inmunidad se deteriora con el tiempo.

Esta imagen de microscopio de 2003, proporcionada por los CDC de Estados Unidos, muestra un virión del virus de la viruela símica obtenido de una muestra relacionada con un brote en perros. Foto: Cynthia S. Goldsmith, Russell Regner/CDC vía AP

En 1979, la Organización Mundial de la Salud (OMS) dio por erradicada la viruela y un año después se suprimen los programas de vacunación.

«La viruela del mono se transmite de persona a persona por contacto directo. No se propaga por aire, agua o alimentos», recordó Monroy.

El experto comentó que los síntomas de la viruela comienzan con dolor generalizado del cuerpo, malestar que luego se enfoca en ganglios y articulaciones, así como en la zona de las axilas y las ingles.

«Se presentan fuertes dolores de cabeza y hay un incremento en la temperatura, hay fiebre. Dos o tres días después aparecen los exantemas con pus, y es a partir de que se rompen estas pústulas y caen en la piel de una persona que está muy cerca, que comienza el contagio», detalló el médico veterinario.

El entrevistado recomendó en tal sentido a las personas que ya se encuentran infectadas de viruela del mono entrar en una cuarentena muy estricta y que las autoridades establezcan un cerco sanitario para evitar nuevos contagios.

«La viruela del mono se transmite de persona a persona por contacto directo. No se propaga por aire, agua o alimentos», recordó Monroy. Foto: CDC

Monroy subrayó que la enfermedad sólo es mortal en proporción muy baja, pues el virus es menos agresivo que la viruela que diezmó en otras épocas a poblaciones en todo el mundo.

El experto mexicano sostuvo que frente a este panorama la «sana distancia», el lavado de manos y el uso de mascarilla son fundamentales para evitar nuevos brotes entre la población.

«Tenemos que seguir las mismas medidas que aprendimos de la COVID-19 y la higiene es muy importante.

Tampoco es recomendable no relacionarse con personas de otros países que no conocemos, porque no sabemos a qué países viajaron y si alguno podría ser portador de la viruela símica», agregó.

El académico de la UNAM, la máxima casa de estudios en México, comentó además que aunque se han reportado diferentes casos de la enfermedad en el mundo, no hay indicaciones de que sea un problema epidémico como la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19).

En esta imagen de microscopio de 2003 proporcionada por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos se muestran viriones de la viruela símica. Foto: Cynthia S. Goldsmith, Russell Regner/CDC vía AP

Los casos de viruela del mono, precisó el entrevistado, han sido un problema localizado y el riesgo para la población en general es bajo.

«La viruela del mono es menos contagiosa, su transmisión entre humanos es baja y menos grave que la viruela original», puntualizó.

En adición, Monroy comentó que por el momento no existe un tratamiento específico contra el virus, aunque hay algunos antivirales que se han probado.

Comentó que en caso de que un brote comenzara a tener mayor magnitud, el manejo se tendría que dar a través de las vacunas contra la viruela humana, las cuales tienen una protección del 85 por ciento y existen desde hace décadas, además de que se pueden fabricar de forma masiva.

La OMS mantiene desde hace algunas semanas seguimiento de los casos de esta enfermedad endémica de Africa, que ya se ha expandido a Europa y América.