El chofer dijo que tuvo un gran afecto por Weinstein, quien lo trataba bien y solía darle bonos frecuentes por su trabajo, además de permitirle tomar cientos de dólares en efectivo a su disposición en la recepción en el Peninsula.

Por Andrew Dalton

LOS ANGELES, 24 de febrero (AP).— Un chofer de limusina testificó el miércoles que dio servicio a Harvey Weinstein en Beverly Hills en 2013 la noche que los fiscales alegan que Weinstein violó a una actriz en un hotel en la zona.

El chofer, Alfred “Freddy” Baroth, dio un testimonio condicional en una corte de Los Ángeles que fue grabado en video para su uso potencial en el juicio del exempresario cinematográfico. El juicio todavía no tiene una fecha fija.

Baroth testificó, basado en su revisión a archivos en la empresa de limusinas de la que es dueño y en la que trabaja como chofer, que llevaba a Weinstein cerca de Beverly Hills a altas horas de la noche el 18 de febrero, cuando de acuerdo con su acusación formal Weinstein violó y abusó sexualmente de la actriz.

El chofer dijo que llevó a Weinstein al hotel donde solía hospedarse, el Peninsula Beverly Hills, alrededor de la 1 a.m.

Harvey Weinstein, de 69 años, usa un cubrebocas detrás de un acrílico protector en la corte durante una audiencia previa a su juicio en Los Ángeles el 29 de julio de 2021. Foto: AP

Agregó que no podía recordar si llevó a Weinstein esa noche a otro hotel de Beverly Hills, el Mr. C, donde los fiscales afirman que ocurrió la violación, pero que llevó a Weinstein ahí unas 15 veces en los años cuando trabajaba para él.

Baroth también testificó que condujo para Weinstein alrededor de Los Angeles en 2010, cuando otros de los 11 cargos de abuso sexual contra Weinstein presentados por un jurado acusador habrían ocurrido. Weinstein se ha declarado inocente.

Baroth, de 74 años, trabajó por años básicamente como el chofer personal de Weinstein en California. Weinstein residía en Nueva York.

El chofer dijo que tuvo un gran afecto por Weinstein, quien lo trataba bien y solía darle bonos frecuentes por su trabajo, además de permitirle tomar cientos de dólares en efectivo a su disposición en la recepción en el Peninsula.

Señaló que fue emotivo despedirse de Weinstein en octubre de 2017, después de que una serie de mujeres denunció a Weinstein por acoso y abuso, convirtiéndolo en la figura central del movimiento #MeToo.

“Entendí que era algo que sentía profundamente, que esa era la última vez que lo iba a ver”, dijo Baroth. “Me estaba despidiendo”.

El vicefiscal de distrito Paul Thompson dio a entender durante su interrogatorio que la relación cercana entre Baroth y Weinstein fue la razón por la que no entregó emails de su empresa con el acusado que estaban siendo investigados.

Baroth dijo que los correos de 2013 surgieron en sus búsquedas, pero los de 2010 no. Señaló que desconocía por qué no aparecieron.

Thompson también presionó a Baroth por un bono de 1.000 dólares que recibió en 2017 después de que surgieron las acusaciones.

“Recibía bonos cada vez que el señor Weinstein venía a la ciudad porque hacía muy buen trabajo para él”, dijo Baroth.

El productor de Hollywood Harvey Weinstein fue condenado a 23 años de prisión. Foto: Seth Wenig, AP

“¿Se habló de un bono de 10 mil dólares de alguien asociado con Weinstein?”, preguntó Thompson.

“Sí del mismo señor Weinstein”, respondió Baroth.

El chofer dijo que sólo recibió mil dólares, su bono regular.

“¿Qué pasó con los 10 mil dólares?”, preguntó Thompson.

Baroth dijo que nunca lo recibió. También dijo durante el interrogatorio que Weinstein pagó por un abogado para que lo represente en el caso.

Weinstein estuvo en la corte el miércoles en una silla de ruedas con su uniforme de prisión, y escuchó el testimonio sin mostrar una reacción visible.

Cumple una sentencia a 23 años de prisión en Nueva York después de que un jurado lo declaró culpable en febrero de 2020 de abuso sexual y de realizar sexo oral por la fuerza a una asistente de producción de cine y televisión en 2006 así como de violación por un ataque contra una aspirante a actriz en 2013.

El mes pasado una corte de apelaciones de Nueva York fustigó a los fiscales en el caso por usar testimonios de mujeres cuyas acusaciones no eran parte de los cargos penales contra Weinstein.

Varios jueces en un panel parecían abiertos a considerar revertir la sentencia de Weinstein y ordenar un nuevo juicio. No se ha tomado una decisión todavía.

Tampoco estaba claro por qué era necesario que Baroth testificara antes del caso. El proceso se suele emplear para testigos de la tercera edad o enfermos que no podrían estar disponibles para testificar en el juicio.

Su testimonio no incluyó declaraciones sobre las mujeres u otra evidencia.