Precios de gas y petróleo impulsan la inflación en la eurozona; bate un nuevo récord
PorAP
02/02/2022 - 7:58 am
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Los precios del crudo han subido conforme la economía se recupera de las restricciones contra la COVID-19, mientras que los precios del gas natural han subido en Europa ante las bajas reservas para el invierno.
Por David McHugh
Fráncfort, Alemania, 2 de febrero (AP).— La inflación impulsada por los precios del gas y el petróleo batió un récord en la eurozona por tercer mes consecutivo, aumentando las penurias para los consumidores y provocando dudas sobre las próximas medidas del Banco Central Europeo.
El precio de los bienes de consumo en los 19 países que utilizan el euro subió en enero un 5.1 por ciento interanual, según reportó el miércoles la agencia de estadísticas de la Unión Europea, Eurostat. La cifra batió un récord del cinco por ciento en diciembre y del 4.9 por ciento en noviembre, la cifra más alta desde que comenzaron los registros en 1997.
Una vez más, el auge de los precios de la energía jugó un papel clave. Los precios del crudo han subido conforme la economía se recupera de las restricciones más duras contra la COVID-19, mientras que los precios del gas natural han subido en Europa debido a las bajas reservas para el invierno, una reducción de las entregas rusas y el temor a una nueva acción militar de Moscú contra Ucrania.
La alta inflación ha aumentado el interés en la reunión del jueves del Banco Central Europeo. La presidenta del banco, Christine Lagarde, ha dicho que buena parte de la inflación está asociada a cuestiones temporales que deberían ir mitigándose.
Por lo tanto, ha descrito como “muy improbable” que el banco suba las tasas de interés este año, el antídoto habitual empleado por los bancos centrales contra la inflación excesiva. Los analistas dicen que los mercados vigilarán si hay algún cambio en las previsiones del banco.
El BCE espera que la inflación caiga de forma brusca este año y caiga al 1.8 por ciento en 2023 y 2024.
Hay factores temporales como cuellos de botella en las entregas de piezas y materias primas que limitan los suministros de mercancías y suben los precios, así como comparaciones con precios extremadamente bajos de la energía durante la peor parte de la parálisis económica provocada por la pandemia. Esas comparaciones saldrán de las estadísticas de inflación con el paso del tiempo.
La postura del banco choca de frente con la estrategia de la Reserva Federal de Estados Unidos, que ha indicado que empezará a subir las tasas de forma gradual a partir de marzo ante una inflación en máximos de 40 años.