Hay cientos en fosas clandestinas de NL. Nadie hace por darles nombre, dignidad

Una organización pidió a las autoridades que presenten análisis detallados y públicos sobre cuerpos, osamentas y fragmentos óseos humanos, así como un catálogo de prendas y objetos localizados en al menos cinco lugares de este tipo.

Ciudad de México, 29 de julio (SinEmbargo).– La asociación civil Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Nuevo León urgió a las autoridades de todos los niveles a presentar informes y análisis de los llamados «sitios de exterminio«, de los cuales la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB) confirmó su existencia.

«En Nuevo León, estos sitios son una terrible realidad, que desde las Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Nuevo León hemos denunciado públicamente desde que obtuvimos información de la localización de fragmentos de restos humanos calcinados», señaló la organización en un comunicado esta semana.

«A inicios de este 2021, logramos mediante una vía oficial que la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León mencionara que designó a su personal, a efecto de digitalizar y organizar la información relativa a los objetos y prendas localizadas en los sitios mencionados, sin embargo, este proceso, aún no se realiza», indicó.

Se trata de cinco sitios de exterminio en el estado ubicado en el norte del país: “Grutas de García” en García, Nuevo León, 284 mil 628 fragmentos óseos humanos; “Las Abejas” en Salinas Victoria, Nuevo León, 251 mil 122 fragmentos óseos humanos; “Carboneras” en Sabinas Hidalgo, Nuevo León 75 mil 817 y 10 recuperaciones “incontables”; “Los Arcos” García, Nuevo León, 55 mil 989 fragmentos óseos humanos; y “Vallecillo”, “La Mano” en Juárez, Nuevo León y más sitios.

A pesar del reconocimiento de la CNB, «no hay claridad al respecto», añadió la asociación civil. Ante esta situación, las Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Nuevo León plantearon cuatro exigencias.

Primero, que la CNB y la Fiscalía local presenten «a la brevedad» un informe público y detallado sobre la localización de sitios donde se han localizado cuerpos, osamentas y fragmentos óseos humanos 2010-2021. Incluyendo un catálogo de prendas y objetos localizados.

En segundo lugar, exigieron que las autoridades presenten un análisis de contexto interdisciplinario sobre estos sitios, el cual determine el modus operandi de cada uno de ellos. Además, agregaron en tercer lugar que también deben presentar los Planes de Intervención de cada uno de los sitios donde están interviniendo, mencionando un estimado de tiempo para su conclusión.

Por último, urgieron a todas las autoridades involucradas para que todas las intervenciones en campo de estos sitios se realicen «de manera interdisciplinaria e interinstitucional».

Y es que la búsqueda de desaparecidos se ha complicado aún más en México. Si hasta ahora los familiares de los desaparecidos habían cargado con gran parte de las dificultades y esfuerzos para encontrar a sus personas queridas, más allá de las acciones u omisiones del Estado mexicano, las organizaciones criminales han entrado en la escena.

Apenas hace unos días, Gladys Aranza Ramos Gurrola, integrante del colectivo Madres y Guerreras Buscadoras de Sonora, fue secuestrada y asesinada después de participar en una jornada de búsqueda donde se encontraron “varios crematorios clandestinos, algunos todavía con brasas y humo al momento del hallazgo”, denunciaron colectivos.

Según datos dados a conocer por el Gobierno federal la semana pasada, un total de 68 defensores de los derechos humanos y activistas ambientales han sido asesinados durante el Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador, que comenzó en diciembre de 2018. Ramos Gurrola sería la número 69.