Sin rumbo

Fotografía tomada de juandomingofarnos.wordpress.com

Fotografía tomada de juandomingofarnos.wordpress.com

Se dice fácilmente que la sociedad está harta de los políticos y de los partidos que los amamantan. Sabemos que el sistema de partidos —además de caro— está hecho para que el sistema político se reproduzca con la mínima participación de la sociedad. Con el sufragio de un porcentaje reducido de la sociedad, se puede concluir, de manera falsa, que vivimos en una democracia con todo los privilegios que ello conlleva.

Sin embargo, no sabemos —y no estoy seguro de que sea posible— generar cambios profundos y transcendentales para cambiar las reglas del juego. Echemos una breve y superficial revisión de los últimos temas en la agenda: PGR siembra pistola a abogado litigante. PGR descubre, convenientemente, equipo de espionaje en las oficina de Infraiber; los beneficiados: la cuestionada empresa OHL beneficiada por el presidente. Otro aún más grave. El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (GIEI) presenta su informe que derrumba la “verdad histórica” de Jesús Murillo Karam (a quien recientemente sustituyeron en su cargo como procurador general de la República). Las fuerzas federales tuvieron conocimiento de lo que acontecía con los estudiantes. El gobierno y sus medios afines se dedican a deslegitimar el informe en vez de acogerse a sus resultados. La PGR promete nuevas diligencias —sí, esa PGR en la cual nadie cree— que de seguro naufragarán en el olvido. Peor aún, la narrativa oficial es que más de cien personas han sido detenidas, pero ninguna tiene una sentencia o está siendo procesados por delito de desaparición forzada, a pesar de que está bastante documentada la actuación de las autoridades. Pero la nota es la detención, no importa de quién o por qué. Y la cereza del pastel, el Secretario de Gobernación, le da el tiro de gracia a la política de prevención del delito al nombrar a Arturo Escobar como subsecretario. El nombramiento del personaje de impresentable reputación de entrada ha provocado que las organizaciones civiles más respetables que trabajan en esa área se levanten de la mesa de trabajo con el gobierno. Vaya manera de comenzar.

Esos mismos políticos que difícilmente dan acuse de recibo de los graves problemas del país, prácticamente omitieron el duro informe del Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias de Naciones Unidas, en el que señala que en gran parte de México existe un contexto de desapariciones generalizadas, muchas de las cuales podrían calificarse de forzadas. El Grupo hizo eco de lo que hace unos meses dijo el Relator contra la Tortura, Juan Méndez, al afirmar que la tortura en México es generalizada. La respuesta de la cancillería en ambos casos fue señalar que México vive un “sobre escrutinio en materia de derechos humanos por parte de la comunidad internacional”. No siempre la mejor defensa es el ataque, claro está.

El catálogo de escándalos es vasto. Es difícil resolver un tema cuando el alud de agravios es incontenible. Nuestro ejercicio como sociedad, prácticamente, se reduce a ver pasar y dar fe del deterioro de la nación, de la vorágine partidista y del mal gobierno. Pero lo cierto es que la sociedad civil está rebasada para ejercer un contrapeso eficaz. Y es ahora cuando más se siente la ausencia de dos actores importantes: una verdadera oposición política que sirva de contrapeso al poder y medios de comunicación cuyo interés sea el interés público de la información, y no una perversa relación entre empresarios-periodistas y gobiernos.

Los problemas por los que atraviesa México en materia de derechos humanos, impunidad y corrupción no son invento de organizaciones civiles ni de grupos desestabilizadores (léase defensores de derechos humanos o bien, periodistas “conflictivos” que no se ciñen al dogma del dinero y de los meta-intereses del mundo del periodismo), como lo han sugerido algunos funcionarios.

El tema de raíz es que a los servidores públicos pareciera que les han insertado un chip que los obliga a jamás admitir responsabilidad y mucho menos autocrítica. Ante la evidencia contundente —tómese como ejemplo el caso de Ayotzinapa y sus últimos capítulos— el instinto gubernamental es desdeñar, manipular, contra-informar, y una gran cantidad de verbos que, evidentemente, no incluyen resolver el problema. Estamos ante una mala administración de la desgracia. Hay la intención de poner en el imaginario colectivo un falso debate: en México las cosas están bien o están mal, lo cual genera razonamientos inconexos y peligros. No todo está mal, pero hay muchas cosas que afectan gravemente nuestra sociedad. Sin embargo, la atomización de las posturas no resuelve los problemas; por el contrario, logra esconderlos.

El sistema mexicano sin duda es un gran enigma. Cuando pensamos que ya tocamos fondo, viene la siguiente tragedia o acto infame de corrupción y nunca tocamos fondo. Entonces, la duda es: ¿Cómo hemos logrado desvanecer de manera tan eficaz la rabia, la frustración, el poder ciudadano, la movilización social para poder transitar a otro estadio diferente de política? ¿Qué fuerza y de dónde necesitaríamos abrevar para desterrar el rampante cinismo gubernamental?

El panorama se antoja difícil porque no se está dando el debate correcto. Se avisa que la pobreza ha crecido y la respuesta es contradecir la información diciendo que hay menos pobreza extrema, como si eso hiciera que las cosas estuvieran mejor. Señala el gobierno que la violencia ha disminuido y se comprueba que los homicidios dolosos han aumentado. Se asegura justicia para las víctimas del multihomicidio de la colonia Narvarte y no hay más que explicaciones aisladas que no dan cuenta del móvil por el que se cometió tal atrocidad, pero sí un relato que busca cerrar el caso sin certeza jurídica plena.

Lo cierto es que quienes ostentan el poder no ven la necesidad de cambiar. Nada los alienta para tomar ese camino. La presión social es manejable y a la presión mediática se responde con una aplanadora mediática oficialista. La autocrítica gubernamental para enderezar el rumbo está ausente porque no es necesaria. Y la voluntad gubernamental decide pasarla por alto porque así le conviene. Podemos, románticamente, enarbolar la idea de que la sociedad y su poder intrínseco son el motor de cambio. Hoy por hoy eso es una falacia. Tal vez renazca ese poder, pero los nubarrones son de tal magnitud que no se ve una fuerza capaz de disiparlos y mostrar un camino diferente.

16 Responses to “Sin rumbo”

  1. jesus dice:

    Es verdad, ya lo admitimos sin verguenza, sin pena ( o, si?) no nos molesta la bota en el cuello, hemos decidido que nuestra cobardia permita florecer la impunidad y corrupcion, hemos decidido que los ladrones sean invitados forzosos en todos los actos de nuestra vida y a diario les damos a entender que pueden incluso disponer de ella. Seguimos confusos acerca del significado de la palabra organizacion; que seria de estos parasitos mal llamados politicos frente a una sociedad organizada y decidida a tener y vivir una existencia digna? por el momento: que viva mexico, arriba el chicharito……. por cierto, aun esta en vigencia el beneficio de la duda acerca del sr peña nieto?

    • Coyote joe dice:

      Y así fue, así es,,,,,,,¿ y así sera?,,,¿ o sera que…?, ¿ nos atreveremos ?,¿cómo cuánta dignidad se ocupa?,,¿ cómo cuanta nos quedará?,,¿ tendremos demasiada que podemos aguantar otro rato?,,, haber que se acaba primero, si nuestra dignidad o el país, porque la avaricia de nuestros gobernantes ,! NUNCA¡

      • César dice:

        La delincuencia organizada (muy bien organizada con políticos, militares, policías y paramilitares) han generado un México herido, en pobreza, sin embargo, nuestro país es tan grande, tan rico en recursos naturales y humanos que esa delincuencia organizada lo sabe y calcula que nada pasará, es por ello que no quieren cambiar el rumbo, ya que alcanza “pastel” para todos los que ostentan el poder a costa de la denigración del pueblo, un pueblo lleno de contrastes, de baja escolaridad en su mayoría, de millones de analfabetas y otros millones más en extrema pobreza, etc. situaciones perfectas para que la política neoliberal tenga éxito.

  2. jesus dice:

    Lamento la omision en mi comentario ….. Sr Ramirez , mis sinceros saludos .

  3. México zopiloteado dice:

    México es un campo de rapiña; así ha sido desde tiempos de La Colonia. Los regímenes revolucionario y posrevolucionario renovaron las formas del saqueo, nada más. Pero la expoliación del México contemporáneo es más perversa e intrincada porque está velada por una serie más compleja de mediaciones, y en los intersticios se cuela un montón de alimañas. Nadie se hace responsable e impera “la banalidad del mal” en el ejercicio y en la conciencia de la función pública (Sanjuana Mtz). Y mientras tanto, el mexicano ha ido perdiendo la “casta” (L. Curzio) y se percibe a sí mismo deambulando en un yermo en donde la política no le dice nada, no le habla de lo que verdaderamente le importa, porque en su vida cotidiana, las marcas “América” y “Sabritas” le han dejado una impronta más honda que la memoria y el significado del “Día del Grito” y los “Sentimientos de la Nación”.
    Ellos, los zopilotes, los que nublan el paño de las revelaciones que podrían darnos salud, ellos, los enemigos de la “cosa pública”, han generado una crisis de “la república”, y la siguen aprovechando arteramente.

  4. Héctor Astorga dice:

    ¡Convenzámonos! ¡¡ES TIEMPO DE QUE EL PRI Y SUS CÓMPLICES SE VAYAN!!

    • Juancho Perrera dice:

      por supuesto que tienes TODA la razón. La cosa es que habría que hallar el modo de decírselo a la gente que nunca entra a este espacio

    • fredy dice:

      lamentablemente las narco mafias neoliberales agrupadas en las franquisias politicas estan mas fuertez y unidas que nunca ,LA MAFIA UNIDA JAMAS SERA VENCIDA , todos se alian medios de comunicacion ,tribunales , empresarios unete con nosostros y tendras trato privilegiado ¿o no joaquin vargaz ? que ya recupero sus pertenencias , el narco estado neoliberal nunca se va acabar y ya ven que si hay mal que dure 100 años

  5. antonio Murillo Rivas dice:

    El sin rumbo es porque el PRI esta acostumbrado a gobernar no aplicando la ley sino a discrecion, esa es la razon del “sin rumbo”.

  6. siquilich dice:

    Sr. Ramirez, no haga proselitismo de su sentimiento derrotista.

    • Juancho Perrera dice:

      No es sentimiento solamente, y sobre todo, yo creo ver en el artículo un diagnóstico y muy acertado: NO HAY VERDADERA OPOSICIÒN POlÏTICA en este país.
      >> Veamos: López Obrador candidatea a personajes obscuros -ahora en Tulum-, en lugar de preparar un Programa de Gobierno serio para la que viene. Moraleja: es un aldeano voluntarista, será muy decente pero no tiene ni idea.
      >> Y por su parte, Morena no ofrece un nicho de organización: yo me afilié antes de las elecciones pèro nunca me han convocado a discutir, ni a NADA. Vaya, ni siquiera contestan los correos electrónicos, ni hay cómo comunicarse con ellos [he hecho el intento en el EdoMex/Toluca]. Concluyo que Morena sólo sirve para lamerle las patas al llamado Peje.

      ——-MORALEJA: Necesitamos hacer OTRO partido político, uno que aloje a la izquierda sensata, y hasta a la derecha moderada y honorable (que existe: vean a Corral) Algo que organice la discusión dando cabida a la gente ilustrada, y que realmente haga un esfuerzo de organización, planeación y estrategia ——–

      Por lo pronto: ¡TODOS a la MANIFESTACIÓN este sábado! – 1:30 en el Ángel

  7. siquilich dice:

    “SIN EMBARGO”, ¿ No admiten un comentario que difiera con el escritor?

  8. antonio dice:

    Es cierto……..pero también es momento de tener claro que TENDENCIA NO ES DESTINO

    Si se puede cambiar

  9. Isa dice:

    La crisis de derechos humanos que flagela a nuestro pais es suficiente motivo para remover al que se dice presidente de la república ……por supuesto hay decenas más de razones para removerlo del cargo.Lo impáctante es que con una sola de esas razones es suficiente motivo para quitarlo de la silla presidencial que indebidamente ocupa.

  10. val dice:

    pero como manifestar la indignación de todos si cuando alguien sobresale a la manifestacion hay desenlaces como el de la narvarte, solo vasto con un poco de brillo en ellos para que el gobierno corrupto los apagara? como hacerlo , si tememos por nuestras vidas y sobre todo por a de nuestros hijos o familia, yo por mi haría muchas cosas , pero aun no puedo arrastrar a mi familia. Que hacer???????????????

  11. Juancho Perrera dice:

    Pues hay que hacer otras cosas. Pedir y ayudar a que se haga un partido de verdadera oposoción, donde haya debate y se elabora un programa de gobierno serio, por ejemplo.

Leave a Reply