Las muertes de Debanhi Escobar, en Nuevo León, y Luz Raquel Padilla, en Jalisco, estados gobernados por Movimiento Ciudadano, generaron gran indignación porque a ambas les falló el Estado: a una no la buscaron exhaustivamente y a la otra no la protegieron. Hoy, ambas mujeres están muertas. Para especialistas, ambos casos ilustran la indolencia de las autoridades y la deficiencia con las que realizan las investigaciones.
Ciudad de México, 21 de julio (SinEmbargo).- La muerte de Debanhi Susana Escobar y el feminicidio de Luz Raquel Padilla Gutiérrez ilustran «la indolencia y las deficiencias en las investigaciones» con las que aún operan las autoridades, donde, a pesar de las Alertas de Violencia de Género (AVG), se siguen minimizando las amenazas y la violencia contra las mujeres, coincidieron activistas y abogadas especialistas en el tema.
Luz María de la Luz Estrada Mendoza, directora del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), y Karla Micheel Salas Ramírez, abogada que coordinó el trabajo jurídico del primer caso de feminicidio ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, “Campo Algodonero vs. México”, coincidieron en que ambos casos representan las deficiencias e irregularidades en las investigaciones de violencia de género en contra de las mujeres, como la falta de peritajes correctos y de aplicación de protocolos para la búsqueda inmediata, lo cual, dijeron, sólo alimenta la impunidad en México.
María de la Luz Estrada destacó que el crimen contra Luz Raquel es muy grave, sobre todo porque Jalisco cuenta con la Alerta de Violencia de Género, que se decretó desde noviembre de 2018:
“Otra vez se minimizó la situación de riesgo en la que ella estaba porque ya había sufrido una agresión, porque denunció, pero no la atendieron. Porque el Estado no te protege, minimiza tu riesgo y eso acabó matándola a ella. Si la autoridad realmente hubiera hecho una investigación y la hubiera protegido, se habría evitado que el agresor pasara a un nivel más alto. A mí me parece algo atroz y una incapacidad de las autoridades por proteger a las mujeres”, dijo la titular del ONCF.
Por su parte, Karla Micheel Salas explicó que no sólo debe existir indignación por las muertes de estas mujeres, sino también por la falta de intervención oportuna de las autoridades.
“El punto es que esta muerte pudo ser absolutamente evitada: Raquel había denunciado las amenazas. Existía evidencia de los actos violentos que había generado su agresor y las autoridades no intervinieron en su momento para frenar esa violencia, para creerle a Raquel, para brindarle protección”, indicó.
La especialista consideró que al final las autoridades también son responsables por la muerte de Raquel Padilla por colocar a la joven madre en una situación de mayor vulnerabilidad y riesgo al no atender su demanda de protección, lo que conllevó su feminicidio.
«Que investiguen ahora que está muerta, pero hubiera sido deseable que lo hubiesen hecho con la debida diligencia y de manera oportuna cuando ella denunció y estaba con vida», agregó.
Raquel Padilla Gutiérrez, de 35 años de edad, madre de un menor en condición de autismo –lo que la llevó al activismo en el tema– falleció este martes, después de permanecer tres días internada en el Hospital Civil de Guadalajara, tras haber sido violentada y quemada viva en un parque en la colonia Arcos, al poniente del Área Metropolitana de Guadalajara.
La joven madre y activista había alertado en múltiples ocasiones que era amenazada con ser quemada viva. Las intimidaciones se volvieron realidad en mayo de este año, cuando ella fue atacada con cloro industrial, lo que le causó quemaduras en el pecho. En ese entonces, Raquel denuncio que las amenazas y el ataque en su contra eran porque sus vecinos no toleraban a su hijo con autismo.
“Ayuda, mi agresor me atacó con cloro industrial y mi seno izquierdo está mal y las amenazas de muerte son a diario porque es mi vecino mi agresor, ya levanté mi denuncia, pero no hacen nada por protegerme, tengo miedo por mi vida y la de mi familia», escribió en mayo pasado.
Además, en otro mensaje en Twitter el pasado 17 de mayo, Raquel escribió: “Hasta cuando voy a tener que vivir con miedo de que me pueda pasar algo y a mi familia y mi agresor sigue campante por la ciudad con el peligro de seguir haciendo daño”.
A pesar de la agresión, cuando ella solicitó ayuda no fue escuchada, ni atendida con la premura que requería su denuncia. El Colectivo YoCuidoMéxico, del que ella era integrante, explicó que Luz solicitó el mecanismo de protección “Pulso de Vida” en la Comisaría de Zapopan, pero se lo negaron bajo el argumento de que su problema eran “chismes vecinales”.
María de Luz Estrada destacó que, aunque los colectivos de madres de niños y niñas con autismo destacan que su asesinato es de odio porque hay una intolerancia social y discriminatoria hacia las personas con esta condición, el crimen contra Raquel sí tiene las características de feminicidio.
“Al final a ella es a la que someten y acaba muriendo por el líquido que le arrojaron y es parte de esta tolerancia de las autoridades a las agresiones. La minimización de las situaciones de riesgo que están enfrentando a las mujeres”, destacó.
Hasta cuando voy a tener que vivir con miedo ? de que me pueda pasar algo y a mi familia y mi agresor sigue campante por la ciudad con el peligro de seguir haciendo daño #justicia #nomasviolencia #noquieromorir #auxilio @AlertaGDL @FiscaliaJal @GobiernoJalisco @CJMJalisco pic.twitter.com/ZwBm1oAEOB
— Luz Raquel Padilla Gutirrez (@GutirrezPadilla) May 17, 2022
La colectiva #YoCuido México, a la cual pertenecía Raquel, lanzó un posicionamiento en el que exigió al Gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, y al Presidente Municipal de Zapopan, Jesús Pablo Lemus Navarro, actuar con todo el peso de la Ley en contra de los victimarios, así como resguardar de manera inmediata la seguridad e integridad del hijo de Raquel, así como a sus familiares. Además, el grupo organizado convocó a la sociedad a unirse en una manifestación que realizarán este jueves 21 de julio para demandar justicia.
A DEBANHI TAMBIÉN LE FALLARON
A la indignación de feminicidio de Raquel se suma también la generada por Debanhi Susana Escobar, quien a cuatro meses de que fue hallado su cuerpo y luego de que se dio a conocer una nueva autopsia, aun no hay claridad de cómo fue que ella falleció.
Los resultados de la nueva necropsia dados a conocer este lunes revelaron que ella murió “entre tres y cinco días” anteriores a su localización, es decir, estuvo con vida entre siete y nueve días y luego falleció, o fue asesinada.
“El caso de Debanhi también es representativo de las deficiencias que continúan en la mayor parte de las investigaciones de muertes violentas de mujeres. Resulta lamentable que en un caso digamos que recibió tanta atención, que llevó a una movilización social y una ‘movilización’ de las propias autoridades y que a pesar de toda esta atención y presión, hasta internacional, que se estaba recibiendo, pues se cometen este tipo de deficiencias”, expresó Micheel Salas.
Por su parte, la directora del Observatorio Ciudadano Nacional de Feminicidio destacó que estos nuevos resultados no dan claridad de lo que ocurrió y han arrojado más preguntas en un caso, en el que desde un principio se cuestionó el actuar de las autoridades, quienes en un primer momento determinaron que la muerte había sido “un accidente”. Cuatro meses después, la Fiscalía de Nuevo León sigue sin aclarar lo sucedido.
“Ahorita seguimos sin saber qué pasó con el caso de Debahi. ¿Y qué pasa? Pues que hay malas investigaciones, que hay una falta de debida diligencia en las investigaciones, donde la familia no tenía por qué verse obligada a hacer una exhumación para una nueva autopsia, si se hubiera tenido claridad de la causa de muerte, porque ni siquiera hoy saber que la causa de muerte fue de sofocación por asfixia es suficiente. Eso no nos aclara, porque asfixia por sofocación también puede ser accidental o feminicida”, destacó María de la Luz Estrada.
Para la joven activista, Clever, de la Colectiva Morras Feministas Monterrey, faltó voluntad, faltó aplicar protocolos, y faltó falló buscar.
“Las autoridades estaban más concentradas en tapar una desaparición que buscar”, dijo en entrevista con SinEmbargo.
La muerte de Debanhi Escobar ha significado un reclamo a las autoridades de Nuevo León por conocer qué fue lo que pasó debido a la opacidad, irregularidades y contradicciones de las autoridades, que incluso incurrieron en filtraciones a los medios de comunicación, lo cual llevó a la familia a exigir que parara esta situación.
Debanhi Susana desapareció la madrugada (y casi hasta el amanecer) del sábado 9 de abril de 2022. El 21 de abril por la noche su cuerpo fue localizado en una cisterna de cuatro metros de profundidad, en el motel Nueva Castilla, adonde las autoridades locales habían acudido a buscarla incluso con binomios caninos.
En un primer dictamen, por ejemplo, la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León determinó que la causa de muerte de la joven fue a causa de un fuerte golpe en la cabeza, presumiblemente al caer a la cisterna del motel. Sin embargo, su padre y diversos colectivos manifestaron su rechazo a la teoría del “accidente”.
Por su parte, Mario Escobar, padre de Debanhi Susana, insistió en que su hija fue asesinada y exigió que se castigue a los funcionarios, peritos y demás personas responsables de las labores de búsqueda por las negligencias cometidas.
“Con todo lo que vivimos ayer nos vamos a tener que regresar a carpeta de desaparecidos, a todas las negligencias que hubo dentro de ese proceso de la Fiscalía de desaparecidos al proceso que hizo Rodolfo Salinas (exfiscal de Búsqueda de Personas) que fue destituido pero que no se la ha abierto carpeta, hay que abrir una carpeta de investigación para ver qué fue lo que hizo en esos cuatro cateos, donde él estuvo como encargado y que el Gobierno estatal le puso 200 elementos y que él no tuvo la capacidad junto con el Licenciado (Javier) Caballero (García, quien estuvo a cargo de la Fiscalía Especializada en Antisecuestros), no tuvieron la capacidad de realizar bien su labor”, dijo Mario Escobar en entrevista con Álvaro Delgado y Alejandro Páez en el programa de Los Periodistas que se transmite por YouTube a través del canal de SinEmbargo Al Aire.
El padre de la joven dijo no entender el accionar de las autoridades, quienes en primera instancia afirmaron que Debanhi había caído en la cisterna por accidente y muerto por un golpe en la cabeza, y aseguró que es necesario regresar las investigaciones al momento de la desaparición de su hija, pues indicó, aún existen muchas interrogantes por aclarar.