La invasión a Ucrania ha puesto bajo los reflectores a varios miembros de la supuesta familia de Vladimir Putin, entre los que se encuentran sus hijas, no del todo reconocidas, su exyerno y hasta a la exgimnasta Alina Kabaeva, de quien se presume fue «amante» del Presidente ruso.
Ciudad de México, 16 de julio (SinEmbargo).- Occidente conoce en términos generales el ascenso del Presidente Vladimir Putin. Su nombre ha dado la vuelta al mundo en un sinfín de ocasiones, ya sea por su primera victoria por la presidencia rusa en el 2000, por su segundo mandato que arrancó en el 2012, por el gusto por los animales que presume o más recientemente por la invasión a Ucrania que inició el pasado mes de febrero.
Sin embargo, poco es lo que se conoce de su círculo más cercano: su familia.
«Nunca lo he hecho [hablar sobre sus hijas] y no lo haré ahora. En general, creo que todas las personas tienen derecho a su propio destino. Nunca han sido estrellas y nunca les ha gustado estar en el candelero. Viven sus vidas y lo hacen correctamente», fueron las palabras de Putin al ser cuestionado por sus hijas en diciembre del 2020.
De su primer matrimonio con Lyudmila Putina, de quien se divorció después de treinta años en el 2013, nacieron Maria Vorontsova y Katerina Tikhonova, de 37 y 35 años respectivamente. En efecto, ninguna de las dos lleva el apellido de Putin, pero sí han tenido una vida un tanto pública.
Maria es una reconocida endocrinóloga pediátrica y una de las mayores expertas rusas en acondroplasia. Sostuvo una relación con el empresario holandés Jorrit Faassen, hijo del pintor Casper Faassen, durante varios años. La pareja se mudó a Holanda y tuvo una hija.
De acuerdo con varios testigos citados por el diario español El Confidencial, Putin llegó a visitar a su familia en diversas ocasiones pues incluso se dejó ver en el supermercado Albert Heijn.
Todo era miel sobre hojuelas hasta que Rusia inició con el ataque a Ucrania en el 2014, cuando un misil ruso derribó el vuelo MH17 de Malaysia Airlines que llevaba 298 pasajeros, en donde la mayoría de ellos eran holandeses.
Según El Confidencial el Presidente envió un avión privado al aeropuerto de Róterdam para resguardar a su hija y a su yerno en un lugar seguro antes de que se desatará la ira pública.
Poco después de lo ocurrido, Maria y Faassen se separaron. La noticia fue portada de diversos medios rusos y desde ese entonces el empresario holandés Jorrit Faassen ha negado en diversas ocasiones ser el yerno de Putin.
Más ahora con la reciente invasión a Ucrania, pues asegura que los múltiples «rumores» sobre su vínculo con el Presidente le han traído bastantes problemas. «Me gustaría borrar esa historia, pero tengo que pensar en cómo quiero hacerlo exactamente».
A diferencia de su hermana, Katerina ha estado más expuesta ante las cámaras gracias a su destacado desarrollo dentro de la disciplina de baile acrobático de rock and roll. En el 2013 la hija menor de Vladimir Putin y su pareja de baile, Ivan Klimov, quedaron en quinto lugar de un campeonato mundial que se realizó en Suiza, mientras que en el 2014 logró el segundo lugar en el campeonato ruso. Además de participar en distintos concursos de baile, ejerció como vicepresidenta de expansión y marketing de la Confederación Mundial de Rock and Roll (WWRC) durante varios años.
Katerina Tikhonova también fungió como líder de Innopraktika, un instituto de investigación dedicado a apoyar y patrocinar a científicos jóvenes financiado en parte por la empresa petrolera estatal Rosneft. Reuters reportó en el 2015 que el instituto contaba con una serie de asesores y socios cercanos a Putin, incluidos Sergei Chemezov y Nikolai Tokarev.
Fue en 2018 cuando Katerina hizo su debut en televisión nacional durante una entrevista sobre neurociencia en la que se le presentó como Directora de Innopraktika y subdirectora del Instituto del Estudio Matemático de Sistemas Complejos en la Universidad Estatal de Moscú. Según señalan diversos medios rusos, la aparición de la hija menor de Putin dejó entrever sus planes de querer forjar un futuro político.
Tanto Maria como Katerina fueron sancionadas por la Unión Europea en abril del 2022 por la invasión de Ucrania. De acuerdo con The Associated Press Bruselas incluyó a las hijas del Mandatario en su lista actualizada de personas que se enfrentan a la congelación de activos y a la denegación de visas.
#Russia's state-owned TV channel, known as part of the #Kremlin's propaganda machine, aired a news report with Katerina Tikhonova, alleged daughter of president #Putin, being interviewed on her business ventures:https://t.co/FFMMsSCCwZ pic.twitter.com/p67PBWEkGG
— Alex Kokcharov (@AlexKokcharov) December 10, 2018
LOS OTROS HIJOS NO RECONOCIDOS DE PUTIN
Luiza Rozova, hija de Svetlana Krivonogikh, una persona que se dedicaba al aseo y que ahora es copropietaria de un importante banco ruso, dio mucho de que hablar por su impresionante parecido físico al del mandatario.
Rozova, quien contaba con casi cien mil seguidores en su cuenta de Instagram, se vio en la necesidad de cerrar la red social luego de que iniciara la invasión a Ucrania pues desafortunadamente su parecido generó la ira de los Internautas quienes comenzaron a enviarle cientos de comentarios de odio como «¡es la hija de ese demonio».
Tiempo después, la joven volvió a la plataforma, sin embargo no logró conservar su alto número de seguidores, que ahora suma poco más de seis mil, y en la mayoría de las publicaciones que conserva, no se le alcanza a percibir el rostro.
«Últimamente he estado recibiendo una gran cantidad de mensajes enojados de diferentes personas que no conozco. Cada uno de ellos no difiere entre sí y se pierde en la masa total. Desde que ya no soy una niña, he aprendido a ignorar los mensajes de gente estúpida, pero en esta situación es masivo y muy difícil de manejar. […] No entiendo sus motivos y creencias. Me parece que en la búsqueda de alguien a quien culpar, lamentablemente han perdido su humanidad. Recuerda: «Un hombre cosecha lo que siembra». Escuchen a su corazón, no se dejen engañar por el odio ciego. Los amo a todos, y a los que me odian, aún más», compartió Rozova en su primera publicación luego de haber cerrado la red social.
En tanto Svetlana Krivonogikh se ha privado de confirmar si Luiza Rozova es verdaderamente hija del Presidente ruso.
Aunque todavía no hay nombres, hay quienes apuntan que Putin es padre de gemelos, producto de su relación con Alina Kabaeva, gimnasta olímpica retirada que logró alzarse con dos medallas. Tras anunciar su retiro del deporte, Alina se dedicó a la política en donde se lanzó como diputada del partido Rusia Unida de Putin.
El extinto diario ruso Korrespondent Moskovsky reportó que ambos personajes iniciaron una relación en el 2018, sin embargo la historia fue negada y «misteriosamente» el periódico cerró. Lo que más llama la atención de este último romance, es que tras las supuestas noticias falsas, Alina desapareció del ojo público.
«Putin es un hombre muy reservado, ha estado escondiendo a sus dos hijas adultas bajo identidades falsas durante años. Si Alina dio a luz a sus hijos, su desaparición podría ser uno de los indicios más fuertes que apuntan a esto. Es obsesivo con la seguridad de su familia», apuntó una fuente a The Sun.
En junio del año en curso Europa Press reportó que la Unión Europea adoptó sanciones contra 65 individuos y 18 entidades implicadas en la invasión rusa de Ucrania, incluida la exgimnasta Alina Kabaeva «a la que muchos señalan como amante del Presidente».
La vida privada de Vladimir Putin es precisamente eso, privada, por lo que al día de hoy se siguen desconociendo datos sobre su familia e hijas, pues a pesar de que Maria Vorontsova y Katerina Tikhonova son las más conocidas, el Presidente nuca ha confirmado su parentesco con ellas y todo queda en simples «rumores» confirmados por algunos investigadores y periodistas.