La Nave, inspirada en una historia real, busca conectar con el espectador a través de la empatía. La cinta relata una entrañable historia sobre cómo pequeñas acciones pueden generar un gran cambio.
Ciudad de México, 15 de mayo (SinEmbargo).– Un «golpe de suerte» que lo transportó a un viaje de aprendizaje, así define el actor Pablo Cruz Guerrero la aventura emprendida en La Nave, película sobre la empatía que ahora está disponible en salas de cine.
La cinta, inspirada en una historia real, sigue de cerca a Miguel, un locutor de radio sin fe en la vida que pasa sus días conduciendo el programa «La Nave», un espacio infantil que se sostiene de sus pocos patrocinadores a pesar de no tener audiencia.
La depresión y rutina mantienen sumergido a Miguel en este programa monótono que un día da un vuelco al recibir la inesperada llamada de Gerardo, un niño con cáncer terminal que le pide cumplir su deseo de viajar en «la nave del programa» a la playa.
La ilusión de aquel niño entonces pondrá a prueba la empatía de Miguel y de todo el equipo del programa en esta nueva misión.
«La Nave es un proyectote, una película entrañable que yo estoy realmente emocionado de compartirlo con el resto del mundo. Es una historia que vale la pena compartir con muchos mexicanos y darnos más motivos para ilusionarnos y para ir construyendo juntos», señala Pablo Cruz Guerrero, quien además de protagonizar la historia fue quien la escribió y produjo.
En un esfuerzo en conjunto con el verdadero Miguel Pérez, el locutor que le compartió su historia 10 años atrás a Pablo Cruz, 400 personas dentro del proyecto, 30 millones de pesos entre contribuciones fiscales, inversiones y patrocinios, ahora esta cinta está disponible en 500 salas.
La película muestra como polos apuestos a Miguel y Gerardo. Un locutor sin motivaciones para arrancar su día y un niño en el que cada día representa una lucha pero que ve con la mejor cara. El encuentro entre ellos dos podrá a Miguel a ver su vida en perspectiva.
Batán Silva (Compulsión, 2019), director de la cinta, resalta los valores detrás de ella:
«No, no hay superhéroes en esta película pero sí hay héroes de verdad. Hay humanidad, hay amistad, hay amor, hay lucha, hay dolor, hay risas y creo que se necesitan esas cosas. Darnos cuenta que hay héroes sin capa y sin darnos cuenta nunca sabes dónde va brincar la liebre. Si bien en esta película el niño le pide ayuda al adulto, es el niño que zarandea a todos los adultos, y les da una lección de vida, de madurez, de ‘¡ya deja de andarte quejando!’, en el fondo la vida está bien chida y si estás rodeado de gente que te quiere, gente que conociste en el camino, las circunstancias que sean, ¡pues a darle!».
Otra persona que también hará de las suyas para hacer despertar a Miguel es Leo (Maya Zapata), una entrenadora que lo hará ponerse en forma para cumplir el sueño del pequeño Gerardo, pero que también lo «ejercitará» en espíritu.
«Es un personaje fuerte, poderoso, que le da zapes a Miguel para que deje de victimizarse y se dé cuenta de lo maravillosa persona que es, y lo único que tiene que hacer es explotarlo y regalarnos esa belleza a todos partiendo de ese niñito que le da su primera lección de madurez», comentó la actriz.
Pablo Cruz Guerrero reflexiona y destaca que esta película a diferencia de otras es contada desde la forma más positiva, desde los paisajes y la gente de un México que haga al espectador sentirse orgullosos.
«Somos latinos, somos de sangre cálida, no podemos evitar ser cariñosos, involucrarnos a veces aunque no nos lo pidan en la vida de las otras personas con el objetivo de dejar ahí un impacto positivo. La Nave lo que hace es generar un impacto social positivo, no solo individual sino social. Es una historia como las que necesitamos para seguirnos ilusionando y contagiando. La buena actitud creo que es contagiosa y como decía mi papá: ‘sonreír y ser amable es gratis, no cuesta nada’. Podemos darnos cuenta que esa actitud se puede llevar a unas dimensiones extraordinarias, masivas y La Nave puede ser un vehículo para hacerlo», recalca Pablo.
Además de tener las actuaciones de Pablo Cruz Guerrero y Maya Zapata, la cinta cuenta con un elenco conformado por Lucía Uribe Bracho, Héctor Jiménez, Andrés Almeida, Rodrigo Murray y Santiago Beltrán.
«Algunas veces hacemos buenas acciones buenas de forma egoísta. A mí me hace sentir bien cuando la gente alrededor de mí está feliz, está en paz, está en armonía, entonces a veces ayudar a otras personas es también tratar de nosotros sanar heridas propias y voltearnos a ver y preguntarnos: ¿Qué me está enseñando esta personas con sus experiencias?, ¿qué me está compartiendo?, ¿cómo puedo aprovechar eso para tener una vida más alegre?, la cinta toco eso», finaliza Cruz Guerrero.