Los autores del informe hacen notar que los indicadores medios esconden importantes diferencias entre países y dentro de cada nación, con situaciones más degradadas en determinados grupos sociales, como mujeres, jóvenes, población rural, pueblos indígenas y personas con menor nivel educativo.
París, 28 oct (EFE).- Muchas de las mejoras en el bienestar de la población de los países más desarrollados en Latinoamérica, que ya se habían ralentizado desde mediados de la pasada década, corren el riesgo de perderse con la pandemia, indica la OCDE en un informe publicado este jueves.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) se fija en diferentes indicadores del bienestar en Latinoamérica, no solo en el Producto Interno Bruto (PIB), con el objetivo de orientar las políticas públicas hacia una mejora de la vida de los ciudadanos.
En este informe, analiza 11 países (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, la República Dominicana, Ecuador, México, Paraguay, Perú y Uruguay) con condiciones materiales que están en una horquilla «media-alta» de la región.
Su primera conclusión es que entre 2000 y 2019 se observaron «mejoras considerables» en el bienestar.
?La #COVID19 ha tenido un fuerte impacto en América Latina, afectando especialmente al #bienestar de los más vulnerables.
¿Qué pueden hacer los gobiernos para mejorar la calidad de vida de las personas en la región? ?
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El número de personas en pobreza absoluta pasó de un tercio a un quinto, se registró un «descenso sustancial» de la desigualdad en los ingresos y mejoró el acceso al agua potable e Internet, al tiempo que se redujeron los asentamientos irregulares o barrios marginales y la esperanza de vida subió de los 73 a los 77 años.
La tasa de mortalidad en menores de cinco años bajó a la mitad y el de las madres durante el embarazo un 30 por ciento. El porcentaje de población con educación secundaria superior se incrementó del 34 por ciento al 46 por ciento y el de quienes hicieron estudios universitarios del 12 por ciento al 19 por ciento.
PARÓN EN 2010
Este panorama positivo sufrió una ralentización a partir de 2010, cuando el descenso de los precios de las materias primas se tradujo en un freno de la mejora de las condiciones materiales, que en algunos países incluso retrocedieron.
A partir de 2014 empeoraron las estadísticas de la fuerza de trabajo y percepción del nivel de vida personal. Disminuyó igualmente el ritmo de reducción de la desigualdad en los ingresos y la pobreza.
Pesaron algunos problemas estructurales, como el elevado índice de empleo irregular, el alto número de personas que ni estudia ni trabaja o las altas tasas de obesidad.
La región, que presenta una gran riqueza en recursos naturales, es además particularmente vulnerable al cambio climático y a la pérdida de biodiversidad, como pone de manifiesto que en lo que va de siglo XXI la masa forestal intacta ha disminuido un 8 por ciento.
¿Qué impacto ha tenido la pandemia de COVID-19 en el bienestar de las personas en #AméricaLatina?#OCDE "¿Cómo es la vida en América Latina?" El informe analiza e identifica áreas para incluir el bienestar en el centro de la política pública.
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AGRAVACIÓN CON LA PANDEMIA
En líneas generales, la región vivía una situación de vulnerabilidad que vino a agravar la pandemia, lo que se tradujo en un aumento «drástico» del desempleo y de la pobreza absoluta en 2020.
Las malas condiciones de la vivienda dificultaron la lucha contra el virus y la brecha digital obstaculizó tanto la enseñanza como el trabajo a distancia.
«Existe el riesgo de que la pandemia de COVID haga que se malogren muchos de los avances en materia de bienestar alcanzados en las últimas décadas y se agraven los problemas ya existentes», advierte la OCDE.
Para superar esa situación, su recomendación es que serán necesarios enfoques multidisciplinares, que tengan en cuenta diversos elementos del bienestar, y no sólo de riqueza, a la hora de elaborar políticas públicas.
Life satisfaction is more than how much you earn. How has the quality of life in #LatinAmerica changed over 20 years?
??? ??? the?#OECD "How's Life in LAC" report looks at how well-being has evolved & what gaps can be addressed through policy.➡️https://t.co/7CCYs8GPEL pic.twitter.com/9RUnPR5MHb
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«Utilizar prioridades de bienestar social, que cuentan con un amplio apoyo ciudadano, como base del gasto público, es clave tanto para obtener el máximo rendimiento de la inversión en materia de bienestar como para reforzar la rendición de cuentas públicas», subraya la organización.
Esta orientación -añade- puede ser particularmente útil en el contexto de la pandemia, ya que permitiría a los gobiernos «replantear las prioridades, el diseño, la armonización y la conexión» de las políticas por abordar.