La Cinta se presentó por primera vez en México en el marco del Festival Internacional de Cine de Morelia. Dirigida por Teodora Ana Mihai es una ficción inspirada en la lucha de Miriam Rodríguez por dar con el paradero de su hija Karen, secuestrada en marzo de 2014.
Ciudad de México, 2 de noviembre (SinEmbargo).- «Abro los ojos, ¿qué siento? Ganas de matar o ganas de morirme, es lo que siento yo cada mañana».
Estas fueron las palabras que dijo Miriam Rodríguez, madre y activista que buscó a su hija secuestrada en Tamaulipas hasta el último momento, a la cineasta Teodora Ana Mihai y al escritor Habacuc Antonio de Rosario, cuando se acercaron a ella recopilando testimonios sobre la violencia en México para su nueva película.
Las palabras de Miriam Rodríguez, quien fue asesinada el 10 de mayo de 2017 por el mismo grupo delictivo que ella investigaba por la muerte de su hija, cimbraron a Mihai y a Habacuc, quienes supieron de inmediato que la fuerza de sus palabras los había trastocado y replanteado el objetivo de la cinta:
«Cuando conocimos a Miriam, hay específicamente un momento clave, porque yo estaba tan concentrada en contar el punto de vista de los niños de los adolescentes, que no tenía planeado dar voz a una mamá. […] Estas palabras vieron de una señora, de una mamá, de una ama de casa, o sea el físico y la violencia de las palabras, había un desfase demasiado grande, eso me intrigó mucho, necesitaba saber qué era lo que le había pasado para llegar a tal conclusión», cuenta Teodora en una charla con medios de comunicación en el marco del Festival Internacional de Cine de Morelia.
UNA HISTORIA QUE CIMBRÓ A MÉXICO
La Civil fue inspirada en el caso Miriam Rodríguez, pero en realidad es también el resultado de muchos testimonios más de víctimas de la violencia que arreció en México en los últimos años.
«Soy de Reynosa (Tamaulipas) y me ha tocado vivir cómo desde 2006 cambió el ambiente completamente, no podíamos movernos, salir a carretera era ya muy peligroso y esto me marcó. Me marcó como vi cambiar a la gente, cómo cambió el día a día, cómo la gente se cuidaba para ir al trabajo», cuenta Habacuc Antonio de Rosario, guionista de la cinta.
Habacuc y la cineasta belgorrumana Teodora Ana Mihai se conocieron después de que la directora leyera la novela Sin trincheras (2014) del escritor norteño. Ambos después de mostrar la violencia de sus países en su obra decidieron comenzar a trabajar juntos, en inició su misión era hacer un documental sobre los menores de edad víctimas de la violencia, pero fue tomando otro rumbo.
«Viviendo en México yo me preguntó cómo debe de ser, ser adolescente en México, ser padres en México, donde el ambiente es como es y hay riesgo de salir en la mañana y no regresar en la noche, era algo que me llamaba mucho la atención contar. […] Lo quería contar desde el punto de vista de niños, pero la investigación y la vida nos lo puso de otra manera, nos encontramos a una mamá que nos inspiró».
LAS PROTAGONISTAS
El personaje de Cielo, la protagonista de La Civil e interpretado por Arcelia Ramírez, fue inspirado en la lucha de Miriam Rodríguez después de que la conocieron personalmente.
La actriz reconoció en junio pasado en entrevista para SinEmbargo que el papel ha sido más difícil de su carrera. Ella encarna a una mujer a la que es secuestrada su hija por un grupo del crimen organizado a cambio de un rescate que paga en compañía de su exesposo, pero Laura, su hija, nunca es devuelta.
«Arcelia tenía muy presente lo cuan delicado es el tema, la gran responsabilidad que conlleva dar voz a este peonaje. Es un papel que es muy difícil de cargar. Estaba en ella, como ella está en cada escena y su psicología tan fuerte. Estoy segura que fue un peso grande para su espalda. Me da mucho orgullo que una actriz como Arcelia Ramírez, que tiene la carrera que tiene, diga eso. Yo lo tomo como un gran cumplido, porque fue un reto real y lo hizo con brillo», dice Teodora en respuesta a este diario.
El peregrinar de Cielo apenas comienza, no tiene el apoyo de las autoridades, y de pronto es como si ella abriera los ojos y se diera cuenta que está rodeada de toda esa violencia. Es testigo de toda la red que cubre a la sociedad y del sistema en que se ha convertido y en el que parece no haber justicia.
Ella no se queda con la manos cruzadas, decide tomar la justicia de propia mano hasta dar con los culpables.
«Sobre el arco del personaje sí está muy cercano a lo que nos contó el testimonio de Miriam. Ella entró tratando de tomar acción de sus propias manos, buscando ayuda con las autoridades y yendo con ellas a estas expediciones a buscar criminales, etcétera, pero poco a poco se dio cuenta que estaba convirtiéndose en lo que ella también estaba atacando. Ella decidió tomar el camino del activismo, y cuando nosotros la conocimos recuerdo que nos motivó mucho porque estaba estudiando para ser abogada, le interesaba ayudar a otras víctimas a través de elementos jurídicos, eso fue muy interesante, obviamente ya no cabía en la historia, pero era muy interesante ver cómo una persona reconoce en su testimonio que ha habido un narco ahí, que ha evolucionado con todo el peso y todas las cuotas que tuvo que pagar en el camino», destaca Habacuc.
RECONOCIMIENTO INTERNACIONAL
La Civil fue reconocida en el pasado mes de julio con el premio a la Valentía en Festival de Cannes, el Festival Internacional de Cine de Morelia es el primer evento en México donde se presenta.
«Yo no soy militante, no soy activista, he elegido el arte para comunicarme con el mundo porque creo que el arte puede sanar, por un lado, y puede ayudar a que nos entendamos mejor, es como un espejo que hace un poco más aguantable la realidad. Yo siempre busco contar historias que tocan a la gente y de ahí todo es posible, hay gente que puede hacer en su día a día, cada uno, puede hacer un pequeño esfuerzo para generar cambios, grande a veces, y esa posibilidad así me da mucha esperanza, pero yo conozco mi lugar en el mundo y no tengo la arrogancia para decir que tengo las respuestas, la película realmente sólo hace preguntas, prácticamente, observa, pero da plataforma a un debate que tiene que continuar hasta que no haya mejora, sentencia Teodora.