Ciudad de México, 17 de noviembre (SinEmbargo).– Carlos Navarrete, presidente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), respondió esta tarde a Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano (CCS), quien exigió su renuncia y la del resto del comité, y llamó, en una carta difundida en distintos medios, a formar una dirección temporal.
Cárdenas dijo que el PRD está en riesgo de disolverse y de convertirse en una franquicia que responde al poder. Las afirmaciones del dirigente histórico aluden a la crisis que vive ese partido desde hace tiempo y sobre todo en los últimos años, cuando más se ha acercado al gobierno de Enrique Peña Nieto.
El PRD está, desde hace años, en manos de la corriente autodenominada Nueva Izquierda, mejor conocida como “Los Chuchos”, encabezada por Jesús Zambrano y Jesús Ortega. Este grupo cerró la puerta a la propuesta de René Bejarano, que apoyaba a Cuauhtémoc Cárdenas como líder del PRD.
Con lo anterior se refuerza la fórmula compuesta por Carlos Navarrete y Héctor Bautista para conservar tres años más la dirección del partido; el perredismo modificó sus estatutos, por lo que será a través de la votación indirecta como definirá a su líder.
El líder perredista, Carlos Navarrete, defendió la legitimidad de su mandato: “Los dirigentes actuales, nacionales y locales, fueron elegidos por más de 2 millones y nadie reclamó”. “Es necesario reunirnos con usted [ingeniero Cárdenas] para evaluar juntos su propuesta [de renuncia] el próximo 29 de noviembre”.
Navarrete también reconoció los errores llevados a cabo: “Como partido, vivimos un momento difícil. Decisiones equivocadas, omisiones evidentes, tolerancia con prácticas inaceptables nos han llevado a debilitar nuestra presencia y autoridad ante la sociedad. Todos somos responsables de que esto haya ocurrido y esta situación se da en un marco de crisis nacional”.
“El país atraviesa por una grave situación. El Estado mexicano muestra debilidades evidentes y el gobierno de la República está en el centro de señalamientos severos por el desbordamiento de la violencia que no ha podido frenar y la impunidad que no ha querido perseguir”, expresó, “esta violencia, en el caso de Guerrero, ha llegado a extremos demenciales sin que las explicaciones del gobierno satisfagan a amplios sectores de la sociedad”.
Navarrete dijo que la exigencia más enérgica del PRD debe ser hacia el gobierno federal. “Que dé respuesta a la demanda de justicia, que es el grito que se escucha en muchos lugares del país”, expresó Navarrete en conferencia.
“Usted nos propone renunciar y nombrar una dirigencia provisional que haga precisamente lo que el partido ha hecho en el último año. Sugiere que esa dirección se integre con representación regional y de las corrientes de opinión existentes. Sólo hay que decir que de esa manera se ha integrado la actual dirigencia nacional y las 32 dirigencias estatales”, agregó.
“Por ello es necesario reunirnos con usted para evaluar juntos el momento por el que atravesamos y acordar que en acatamiento a la legalidad partidaria, su propuesta sea valorada por el Consejo Nacional el próximo 29 de noviembre. Allí, en el máximo órgano de dirección del partido, cuando no está reunido el Congreso Nacional al cual usted pertenece, se podrá debatir su propuesta y todos deberemos acatar lo que al final se resuelva”, dijo.
“Todo ello, para no sustituir, como usted lo afirma en su carta, a los cuerpos colegiados por acuerdos de cúpula”, concluyó el dirigente nacional perredista.
LAS DECLARACIONES DE CÁRDENAS Y LAS RESPUESTAS
El pasado domingo Cuauhtémoc Cárdenas, tres veces ex candidato presidencial del PRD y uno de los fundadores del partido, pidió la renuncia de los integrantes del Comité Ejecutivo Nacional, para superar «la peor crisis que ha vivido» el partido. Una crisis que, en palabras de Cárdenas «amenaza con su disolución».
El Gobernador de Morelos, el perredista Graco Ramírez, afirmó que la legitimidad de Carlos Navarrete, líder nacional del PRD está probada. Contradijo así las palabras de Cuauhtémoc Cárdenas, líder moral del partido, que pidió su renuncia.
«Esa postura no sirve para resolver el problema», manifestó Graco Ramírez. “Confundir la situación de lo que ocurre en Iguala y en algunas ciudades donde el crimen organizado ha penetrado, con la legitimidad del partido, me parece un exceso, con todo respeto”, manifestó.
Ramírez aseguró que la infiltración del crimen organizado en la política no es exclusiva de los gobiernos del PRD, sino de todos los partidos, lamentablemente. También expresó que se debe enfrentar la crisis y no buscar responsabilidad en Carlos Navarrete, “porque es el camino más fácil”. El Gobernador de Morelos propuso cambiar los modelos de la Policía y no encontrar responsables en el corto plazo.
También Miguel Barbosa, presidente de la Mesa Directiva del Senado, opinó sobre las declaraciones de Cárdenas. En entrevista con Adela Micha para Grupo Imagen, aseguró que todo tiene que ver con el caso Iguala ya que «los hechos se dieron en territorio perredista».
«Debemos sentarnos todos los perredistas y aceptar que hay una crisis», puntualizó el Senador. «Lo que ha dicho Cárdenas debe ser un punto de inflexión para enfrentar la problemática del PRD».
«Comparto la opinión de que el partido está pasando por una crisis. La propuesta del ingeniero debe ser evaluada no solo por la dirección, sino el partido en su conjunto”, agregó.
Barbosa ha sido un crítico fuerte de Caros Navarrete y del actual Consejo perredista. Les ha pedido, por ejemplo, que ofrezcan a las autoridades información sobre José Luis Abarca, el ex Alcalde de Iguala, quien era cercano a la cúpula cuando participó en la desaparición de los normalistas el pasado 26 de septiembre.
“Hay que deslindar perfectamente el trato que se tuvo con Abarca, de quien vea que tiene que declarar, que ofrezca públicamente su declaración, que se adelante a los hechos ofreciendo la declaración, se va a ver como un acto de honestidad, de valentía y de limpieza”, dijo Barbosa hace unos días.
