Tan sólo un día después de que la OMS pidiera una moratoria respecto a las vacunas de refuerzo contra COVID, Estados Unidos, Israel, Francia y Alemania asumen una posición en contra de la propuesta. Por su parte, luego de aumentar los precios de sus vacunas contra la COVID, Moderna y Pfizer mantienen que podría ser necesario administrar una tercera dosis ante la variante Delta.
Jerusalén/Nueva York/París/Bruselas, 5 de agosto (EFE/RT/EuropaPress).– El Primer Ministro israelí, Naftali Benet, animó hoy a los mayores de 60 años a recibir la tercera dosis de la vacuna contra la COVID-19 pese al llamamiento a una moratoria que hizo ayer la Organización Mundial de la Salud.
«Quisiera reiterar, quien sea mayor de 60 años y aún no haya recibido la tercera dosis de la vacuna, es seis veces más susceptible a enfermedades graves y, Dios no lo quiera, a la muerte», declaró Benet.
La tercera dosis está siendo administrada desde el domingo a los mayores de 60 años en Israel y hoy superó las 260 mil personas inoculadas con esa inyección adicional.
A mediados de julio, Israel ya comenzó a administrar la tercera dosis también a adultos inmunodeprimidos.
La OMS pidió ayer suspender la administración de esa dosis de refuerzo así como aplazar la vacunación de los adolescentes en países ricos para garantizar suministro en países con menos renta.
El 80 por ciento de las vacunas administradas hasta ahora se ha realizado en países de ingresos altos y medios que representan menos de la mitad de la población mundial.
La decisión del Gobierno israelí de administrar una tercera dosis se produce en medio de un repunte de contagios por la variante Delta, aunque todavía con cifras discretas pero al alza.
«Les pido que durante este periodo, las próximas dos o tres semanas, hasta que vayan a vacunarse y esperen cinco días para que surta efecto la tercera vacuna, se cuiden lo más posible», declaró Benet.
El Ministerio de Sanidad registró más de 3 mil 400 casos en las últimas 24 horas y un aumento en las hospitalizaciones hasta los 241 pacientes, medio centenar conectados a ventiladores.
Benet alentó también a inmunizarse a los que hasta ahora no se han querido vacunar, alrededor de un millón de personas, entre una población de unos nueve millones en el país.
Mientras, la campaña de vacunación en los territorios palestinos apenas avanza. Cerca de medio millón de los casi tres millones de residentes en Cisjordania ocupada ya están vacunados y poco más de 108 mil en Gaza, de los más de dos millones de ciudadanos, según el Ministerio de Sanidad palestino.
El Gobierno palestino sólo ha recibido pequeños lotes de países donantes y del mecanismo gratuito Covax de la OMS.
Israel que lideró una temprana y rápida campaña de vacunación y retomó una casi normalidad, ha vuelto a reimponer restricciones y no descarta un nuevo confinamiento si la morbilidad sigue al alza.
El uso de mascarillas vuelve a ser obligatorio al aire libre en reuniones de más de cien personas, así como en espacios cerrados. Además se ha reducido el trabajo presencial al 50 por ciento en el sector público, y se aconseja a las empresas privadas hacer lo mismo.
Desde el inicio de la pandemia, las fronteras están cerradas para los turistas e impone restricciones de viaje a ciudadanos y residentes.
España, Argentina, México, Brasil, Reino Unido, Turquía o Rusia están entre la lista de países vetados, a los que no se puede viajar desde Israel -penado con una multa de mil 250 euros- ni recibir viajeros de esos lugares, aunque estén vacunados o presenten pruebas negativas de COVID.
ESTADOS UNIDOS RECHAZA MORATORIA DE LA OMS
La Secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, rechazó este miércoles la posibilidad de imponer una moratoria a las dosis de refuerzo de las vacunas contra la COVID-19, tal y como sugiere la Organización Mundial de la Salud, al menos hasta finales de septiembre. «Creemos que es una opción falsa», afirmó la alta funcionaria en rueda de prensa.
Horas antes, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, hizo un llamamiento a retrasar la aplicación de refuerzos anticovid con el objetivo de asegurar que al menos el 10 por ciento de la población de cada país, incluidos las personas de ingresos bajo, sea inmunizado para septiembre y el 30 por ciento para finales de este año.
En este sentido, Psaki enfatizó que su país logró un «importante hito» al donar un total de más de 110 millones de dosis de fármacos anticovid a nivel mundial. «Esto es más de lo que cualquier otro país ha compartido, todos en su conjunto», acentuó la portavoz, agregando que Washington planea repartir, con carácter no reembolsable, 500 millones inyecciones del componente fabricado por Pfizer.
«Así que hemos actuado a nivel global mucho más que cualquier país del mundo. Pedimos a la comunidad mundial que también dé un paso adelante. Hemos visto algunas acciones en el G7; hay que hacer más», dijo la vocera.
El director de la OMS recordó en su llamamiento que los países pobres lograron administrar sólo 1.5 dosis por cada 100 personas, mientras que en los estados de ingresos altos se distribuyeron casi 100 dosis por cada 100 personas.
MODERNA VE NECESARIA DOSIS DE REFUERZO ANTES DE FINALIZAR EL AÑO
La farmacéutica estadounidense Moderna dijo este jueves que será necesaria una tercera dosis de su vacuna contra la COVID-19 antes de final de año debido al probable incremento de contagios provocado por la variante Delta.
En una presentación para inversores relacionada con sus resultados trimestrales, Moderna desgranó sus últimos datos y estrategia respecto a la tercera dosis de refuerzo, sobre la que está estudiando la cantidad de producto más efectiva.
«Creemos que un refuerzo (tercera dosis) probablemente será necesario este otoño (hemisferio norte), particularmente debido a Delta», señaló la empresa, que ha obtenido datos prometedores de protección con una dosis de 50 microgramos y espera los de otra dosis de 100.
Here are key takeaways from the Moderna Phase 3 COVE Study final analysis and real-world evidence. Final analysis of Phase 3 COVE Study demonstrates COVID-19 vaccine efficacy of 93% and emerging real-world evidence demonstrates efficacy against variants of concern. pic.twitter.com/8HJ4OiUcAj
— Moderna (@moderna_tx) August 5, 2021
Moderna opinó que «la fuerza de infección incrementada resultante de Delta», la «fatiga» por las acciones de prevención y los «efectos estacionales», como pasar más tiempo en interiores, «llevarán a un aumento de infecciones irruptivas en personas vacunadas».
Según el documento, la firma tiene expectativas de que la eficacia del 93 por ciento contra infecciones por COVID-19 que se ha comprobado después de la pauta de dos dosis empiece a «decaer» a partir de los seis meses «y eventualmente impacte» esos resultados.
«Dada esta intersección, creemos que una tercera dosis de refuerzo probablemente será necesaria antes del invierno (del hemisferio norte)», insistió.
Moderna tiene aún en estudio esa tercera dosis de refuerzo, que fue ofrecida con una cantidad de producto de 50 microgramos a un grupo de pacientes seis meses después de recibir la segunda dosis.
Según los primeros datos publicados hoy, los niveles de anticuerpos neutralizadores de COVID-19 «habían disminuido de forma significativa antes del refuerzo pasados unos seis meses» en los pacientes.
La tercera dosis «potenció» sus niveles de anticuerpos hasta superar la eficacia obtenida en el ensayo clínico original de la vacuna, y además de forma «similar» entre diferentes grupos de edad, especialmente en adultos mayores de 65 años.
Moderna divulgó hoy unas ganancias de 4 mil millones de dólares hasta junio, con lo que consigue el primer beneficio neto semestral de su historia, gracias a las ventas de su vacuna contra la COVID-19, por las que ingresó 5 mil 900 millones de dólares.
FRANCIA Y ALEMANIA INOCULARÁN TERCERAS DOSIS EN OTOÑO
Francia y Alemania planean realizar vacunaciones de refuerzo contra la COVID-19 a partir de otoño a pesar del llamamiento de la Organización Mundial de Salud (OMS) a detener la administración de terceras dosis hasta que más personas, especialmente en los países de bajos ingresos, puedan ser vacunadas.
La decisión de los gobiernos de ambos países busca proteger a sus ciudadanos de la variante Delta del coronavirus, más contagiosa que las cepas anteriores.
En Francia se ofrecerá esta opción de refuerzo a las personas vulnerables y mayores desde septiembre. «Es probable que una tercera dosis sea necesaria, no para todos inmediatamente, sino en cualquier caso, para los más vulnerables y las personas mayores», afirmó el Presidente francés, Emmanuel Macron, en su cuenta de Instagram.
Alemania, mientras tanto, planea ofrecer una tercera dosis de refuerzo a las personas inmunodeprimidas, a quienes vivan en residencias de ancianos y a personas mayores.
Por su parte, la OMS criticó que los países ricos sigan acaparando gran parte de las existencias mundiales de vacunas mientras las naciones pobres apenas tienen la posibilidad de inmunizar a sus ciudadanos.
«No podemos aceptar que los países que ya han utilizado la mayor parte del suministro mundial de vacunas utilicen aún más», dijo el director general de la organización, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Alemania rechazó estas acusaciones y prometió que donará al menos 30 millones de dosis a naciones de bajos ingresos. A su vez, el Presidente de Francia también anunció en su cuenta de Twitter que su país suministrará tres millones de dosis a Indonesia y 200 mil dosis a Armenia.
BRUSELAS: ADMINISTRAR TERCERAS DOSIS ES DECISIÓN DE ESTADOS MIEMBROS
La Comisión Europea ha recordado este jueves que la decisión de administrar una tercera dosis para reforzar la inmunidad frente a la COVID-19 es una decisión que deben tomar los Estados miembros, a los que ha pedido que al valorarlo sigan las evidencias científicas y en concreto las recomendaciones de la Autoridad Europea del Medicamento (EMA).
The @ECDC_EU just published its weekly map.
It classifies regions based on the local epidemiological situation.
See the latest updates below and find out more: https://t.co/cg6xndems2
????⚪ #StrongerTogether pic.twitter.com/HWxVZEGxl1
— European Commission ?? (@EU_Commission) August 5, 2021
«La decisión sobre administrar una dosis de refuerzo corresponde a los Estados miembros. Como siempre, animamos a que estas decisiones estén basadas en las evidencias científicas y en línea con las recomendaciones de la EMA», ha expresado en una rueda de prensa la portavoz del Ejecutivo comunitaria Arianna Podesta.
En esta línea, la portavoz ha recordado que la recomendación actual de la EMA es que la pauta completa se consigue con dos inyecciones de las vacunas desarrolladas por Pfizer/BioNTech, Moderna y AstraZeneca y con una en el caso del suero de Janssen.
En cualquier caso, Podesta ha defendido que la UE esté firmando nuevos contratos con diversos laboratorios para asegurarse el suministro de dosis adicionales que puedan ser necesarias ante una posible vacunación de refuerzo o para hacer frente a nuevas variantes del virus.
Además, ha recordado, los países del bloque comunitario siempre podrán decidir donar una parte de dichas dosis a terceros países que se encuentren retrasados en sus campañas de vacunación.
«Hemos aprendido lecciones de la primera fase de la pandemia. Tenemos que seguir garantizando la disponibilidad de vacunas para los próximos años, teniendo en cuenta la posible necesidad de dosis de refuerzo si así lo confirman las evidencias científicas y la aparición de nuevas variantes»; ha explicado Podesta.
As variants are spreading, we need to stay vigilant.
We approved a new contract with @Novavax for 200 million doses of its vaccine, which is already being tested successfully against variants.
With our broad vaccine portfolio we protect Europeans and help vaccinate the world. pic.twitter.com/3IQ2692CAz
— Ursula von der Leyen (@vonderleyen) August 4, 2021
Más allá del debate sobre la tercera inyección, el Ejecutivo comunitario ha asegurado que es «crucial» que todos los Estados miembros sigan trabajando para alcanzar el objetivo de haber vacunado al 70 por ciento de la población adulta europea antes de que finalice el verano.
Así, ha recordado que la EMA ha enfatizado en un comunicado reciente que la vacunación completa es «la mejor protección posible» contra el virus y sus variantes, reducir los contagios y evitar que la enfermedad sea desarrollada de forma grave.