Author image

Tomás Calvillo Unna

05/01/2022 - 12:05 am

El desprendimiento es una metamorfosis

El receptáculo del tiempo es el cuerpo, la mente tiene aún la posibilidad de filtrarlo.

Océano Metafórico Pintura Tomás Calvillo Unna

Cada imagen
es el parpadeo de una historia;
el elixir del sueño las rescata
del mundanal ruido,
y las vierte en sus góticos trazos.

El receptáculo del tiempo es el cuerpo,
la mente tiene aún la posibilidad de filtrarlo,
en ese potencial se encuentra el propio destino
y la escritura que registra el testimonio y diseña hipótesis;
tacha, borra e insiste en el umbral de su abstracción
que le permite ser alfabeto y números:
los cálculos poéticos de lo insondable.

El cuerpo está adherido a su sustancia terrena;
esculpido en el microscópico taller de líquidos y minerales,
en las minúsculas, casi invisibles órbitas de sus átomos,
que gravitan y despliegan sus dimensiones.

La fricción permanente de lo visible e invisible,
de la luz y la oscuridad
donde la mente en su inicial bruma
reconoce el universo
encapsulado en las células,
de sus ya etéreos pensamientos,
y en los intrincados sueños que afloran
en su química celeste.

El océano metafórico de la mente;
su libertad esencial de respirar los cielos,
que anida en el corazón
cada promesa de infinitud,
hoy se pretende esclavizar
al oírnos y vernos
a nosotros mismos,
en el descalabro de la ansiedad,
cuyo vértigo alimenta
el hartazgo civilizatorio:
esa tormenta
permanente e implacable
de datos, información,
imágenes, gestos;
que erosiona y secuestra
la antiquísima profecía
al buscar dominar
el soplo de su propio fuego:

Identidad
grabada en montañas y planicies
y en múltiples lenguas.
Aliento que sostiene
su emblema de humanidad:
la interioridad
del milagroso despertar del ser
en la ciencia de su devoción:
el presagio de un camino
cuyo origen milenario
aún palpita.

en Sinembargo al Aire

Opinión

más leídas

más leídas