El final y la temporada final en su conjunto, fueron notorias decepciones. Ahora podemos ver que aquel fenómeno era poco profundo… pues a pesar de los grandes preparativos para celebrar lo que HBO ha denominado como “The Iron Anniversary”, los fanáticos siguen molestos por cómo terminaron las cosas en los Siete Reinos.
Por Itzel Roldán
Ciudad de México, 17 abril (Vanguardia).- Muchos programas de televisión son grabados y transmitidos durante años pasando completamente desapercibidos, pero Game of Thrones solo necesitó nueve episodios para convertirse en el gran éxito de todos los tiempos. En «Baelor», episodio 9 de la temporada 1, alrededor de 2.7 millones de personas vieron como el admirable Ned Stark, aparentemente el protagonista de la franquicia, fue decapitado violentamente por Boy-King Joffrey. A menudo se dice que la muerte de Stark entrenó a la audiencia para que no esperara que sus héroes vivieran, por lo menos no en esta serie.
Pero también mostró que la producción de HBO basada en los libros de George R.R. Martin, tendría no solo uno, sino muchos otros momentos que la llevarían a otro nivel. Hablamos de momentos como La boda roja en la temporada 3, la muerte de Jon Snow en la temporada 5 e incluso Hold The Door en la temporada 6. Estas secuencias no solo fueron momentos memorables, fueron momentos memorables para la televisión. Lo sé, porque al comenzar a ver la franquicia en 2019, ya había oído hablar de todos ellos sin siquiera haber visto un solo segundo el programa.
Sin embargo, estos momentos perdurables son solo una parte del legado de “Game of Thrones”. Este sábado 17 de abril, se cumplen diez años desde que salió el primer episodio de la serie, pero no hay una forma adecuada de decirlo: El final y la temporada final en su conjunto, fueron notorias decepciones. Ahora podemos ver que aquel fenómeno era poco profundo… pues a pesar de los grandes preparativos para celebrar lo que HBO ha denominado como “The Iron Anniversary”, los fanáticos siguen molestos por cómo terminaron las cosas en los Siete Reinos. Pero, ¿por qué fue tan malo el final de ‘Game Of Thrones’?
LOS FANÁTICOS HAN HABLADO
Lo extraño del legado de Game of Thrones es lo invisible que ya comienza a sentirse. Dos años después de la transmisión del episodio final, Game of Thrones ha vuelto al armario de fantasía y ha cerrado la puerta detrás de él. ¿A quién culpar? George R.R. Martin puede estar planeando una multitud de spin-offs a través de su contrato de producción con HBO. Sin embargo, hay pocos indicios de que esté cerca de completar los dos últimos libros de A Song Of Ice Of Fire. Y con las esperanzas cada vez menores de que esos volúmenes vean la luz del día, el universo de Game of Thrones se siente inerte: su huella cultural se desvanece ante nuestros ojos.
Pero más allá de HBO, ¿cómo nos sentimos el resto de nosotros acerca de que Game of Thrones cumpla 10 años? ¿Está nuestra nostalgia templada, por ejemplo, por el hecho de que ahora se acepta que las últimas temporadas fueron bastante espantosas?
“Después de años de establecer que la serie era sobre el viaje de los personajes y que estaban dispuestos a tomarse el tiempo para desarrollar su historia, entregando un producto sólido y bien hecho, la última temporada olvidó todo esto; aceleró sus historias, creó giros que nunca justificó y rebajó la calidad de sus personajes y los convirtió en algo que nunca fueron…”
– Mauro Marines.
“La serie se había caracterizado por dar giros inesperados y matar a personajes que uno creía esenciales. Así fue el final, a mí me sorprendió pero no gratamente, porque no esperaba que Bran se quedara con el reino. Luego, Daenerys Targaryen con su idea de liberar a su pueblo, confirmó por qué antes a lo largo de la trama la había llamado la reina loca. Aunque tampoco me gustó que la matara Jon Snow, al que ya una vez habían revivido y al que yo veía como rey”.
– Susana Zepeda.
“A mí me dejó a medias, en realidad creo que todos esperaban un final más impactante, pero creo que nadie lo entendió. El mal triunfó, gobernó el cuervo de los tres ojos que estaba dentro de Bran, y quién también era Brayden, uno de los bastardos Targaryen. Si la gente se pone analizar, en realidad ganó esa casa y el mal, no los Stark. Eso independiente de que sí fue decepcionante la forma en como lo hicieron todo, nos hicieron permanecer esperando mil temporadas a que llegara el invierno para que en un episodio acabarán con los caminantes, esa fue una mala jugada. Las luchas, los guiones, actuaciones, la fotografía y la producción siempre fue increíble, de las mejores que te visto. Pero la narrativa y las ganas de HBO por vender y no esperar el final escrito por George R. R. Martín, acabaron por desilusionar a toda una gran ola de seguidores”.
– Alejandra Luévanos.
“Un desenlace que queda mucho a deber. Primero que nada la poca cantidad de episodios invertidos para una última temporada nos hace pensar que la serie, o por lo menos la recta final, acabó demasiado rápido. Una de las cosas que considero y hablaría por varios seguidores, es que el desarrollo de personajes se echó a la basura de manera inadvertida. Otra de las sensaciones que deja es que a los guionistas les tembló la mano para acabar con alguna figura importante, esperaba una muerte impactante como la de Ned Stark para que se respetara la esencia que tuvo en sus 8 temporadas”.
– Gerardo Hernández.
“’Game of Thrones’ tiene la maldición de muchas historias de la cultura popular: premisa interesante, un desarrollo prometedor y un final de mierda. Y terminó tan mal porque el guión se traicionó a sí mismo echando por la borda los buenos personajes que había construido; dando reversa a la evolución de la historia; y cayendo en todos los clichés de los cuales se había mantenido a raya. Los arcos que se encontraban abiertos y que año tras año se tejieron con argucia cayeron apresurados con giros extrañísimos que no alcanzaron la sorpresa, sino el absurdo. ¿Que la obra nunca fue perfecta? Es cierto. Ninguna lo es. Pero las incongruencias que empezaron a notarse desde la temporada 7, inundaron el argumento en la temporada 8. Los fans pusimos demasiadas expectativas en cada episodio, pero carajo, es lo menos que podemos pedirle a la ficción, que nos arrastre como una ola violenta en un mar agitado. Sin embargo, cuando esas obras se ríen de nosotros en nuestra cara esperando la gloria, bueno, la cosa no termina bien. Mis buenos recuerdos terminan en la temporada 6. Pudo hacer historia como una de mejores series contemporáneas, pero quedó como es: la promesa de un héroe que vivió lo suficiente para convertirse en su propio villano”.
– César Gaytán.
AL NIVEL DE HOLLYWOOD
Game Of Thrones pudo romper el corazón de sus fanáticos con su desenlace, pero sin duda hizo historia al convertirse en una producción al nivel de las grandes sagas cinematográficas de fantasía y ciencia-ficción, tanto en recursos como en número de seguidores en todo el mundo, y que por años obtuvo el aplauso unánime de la crítica. El mundo imaginado por el escritor George R. R. Martin, autor de la saga literaria A Song of Ice and Fire, cobró una nueva dimensión de la mano de David Benioff y Daniel B. Weiss, responsables de adaptar las novelas de Martin.
Pronto los apellidos Stark, Lannister o Targaryen fueron familiares hasta para quienes no seguían Game of Thrones, así como la simbología de una serie que también ganó adeptos gracias a sus múltiples ubicaciones de rodaje, convertidas en lugares icónicos para los seguidores de la producción televisiva. Aunque los estudios están en Belfast y en Irlanda del Norte se pueden visitar una veintena de localizaciones. La producción pasó por otros países para recrear los continentes de Westeros y Essos, como Islanda, Croacia, Malta, Marruecos y España, el país en el que los productores de la serie utilizaron más espacios para el rodaje. Con información de EFE y The Irish Times.
LOS DATOS
Los datos de HBO avalan la repercusión de Game of Thrones:
· Es la serie de la plataforma con más licencias de emisión en todo el mundo contabilizando más de 100.
· De los 9.3 millones de espectadores de la primera temporada, pasó a 44.2 en la octava y última, con récord incluido en la emisión del episodio final en Estados Unidos, el 19 de mayo de 2019, con 19.3 millones de espectadores.