Escribir a mano no es un vestigio cultural destinado a ser aplastado por las pantallas táctiles y ligado al encanto del olor del papel o de la tinta, sino que a la hora de estudiar, aprender o realizar actividades creativas te ofrece múltiples consecuencias positivas para tu cerebro y tu mente.
Ciudad de México, 23 de octubre (Ticbeat).- Son muchas las personas que piensan que redactar con papel y bolígrafo es una actividad condenada a la extinción y solamente mantenida con vida gracias a los últimos románticos. Sin embargo, mientras las generaciones más jóvenes ya son educadas desde edades tempranas en competencias digitales, son numerosos los expertos y científicos que siguen haciendo hincapié en no abandonar la escritura a mano debido a sus múltiples beneficios físicos.
CONSEJOS, TRUCOS Y HERRAMIENTAS PARA MEJORAR TU FORMA DE ESCRIBIR
Los niños que no aprenden a escribir a mano ven ralentizado y modificado su desarrollo cerebral, y los adultos que nunca practican esta modalidad de escritura empuñando lápiz o bolígrafo se pierden los beneficios que aporta está actividad, estimulante para el cerebro y que exige la coordinación de procesos cognitivos, motrices y neuromusculares. En América, son numerosos los colegios estadounidenses que han retomado con ahínco la enseñanza de la escritura a mano para que exista un equilibrio con respecto a los dispositivos tecnológicos.
Sin desanimarte a seguir tomando apuntes en tu tableta, usar tu aplicación favorita a modo de cuaderno de notas o teclear tu próximo artículo de investigación en el PC, en este artículo recopilamos y rescatamos algunas de las ventajas más destacadas de la escritura a mano para que te animes al menos, a hacerlo de vez en cuando y potenciar todas sus virtudes. La escritura digital, por su parte, puede aportarnos rapidez, legibilidad y facilidad para copiar y compartir el contenido generado.
BENEFICIOS DE LA ESCRITURA A MANO
Mejora el aprendizaje y la memoria: Escribir a mano te ayuda a procesar la información y a reestructurarla con tus propias palabras, mientras que a los más pequeños les ayuda a aprender a leer y a escribir. También contribuye a mejorar la comprensión lectora, fijando ideas y conceptos e impulsando una mayor capacidad de síntesis y análisis, fundamental a la hora de estudiar y generar esquemas, resúmenes y mapas conceptuales. Además, se evitan las faltas de ortografía, ya que estas no son señaladas por ningún corrector.
Favorece la creatividad y el pensamiento crítico: Al practicar la escritura manual, la actividad neuronal de tu cerebro se incrementa, aumentando tu capacidad de resolver problemas. La capacidad expresiva, la imaginación y la creatividad se estimulan porque tienes más tiempo previo para pensar, tal y como atestiguan estudios como este.
Combate el deterioro cognitivo: Escribir a mano -junto a otras actividades creativas o que impulsan la psicomotricidad como dibujar o realizar puzzles- son fundamentales para retrasar la aparición de las enfermedades de deterioro cognitivo como la demencia senil o el alzheimer, ya que contribuyen a mantener el cerebro activo y a conservar la destreza motora de las personas mayores.
Lucha contra el estrés: Al igual que muchas personas se relajan coloreando los populares mandalas, escribir a mano es una actividad con efectos relajantes y que pueden combatir la ansiedad. Según grafólogos y expertos en escritura a mano como Marc Seifer, escribir a mano una frase calmante funciona como una suerte de “grafoterapia” muy sencilla de poner en práctica.
Aumenta la concentración: Escribir a mano previene las distracciones y ayuda a mantener el foco en lo que estamos haciendo, lejos de los despistes que muchas veces acompañan a la multitarea tan propia del siglo XXI y su vertiginosa velocidad digital.