Brian Fernández militó en el Necaxa en la temporada 2018-2019, actualmente jugaba con el Deportivo Madryn de Argentina, sin embargo, recayó en la adicción a las drogas y tuvo que ser hospitalizado.
Por Reinaldo Oliveros
Los Ángeles, 20 de mayo (LaOpinión).- El futbolista Brian Fernández, quien militó con los Rayos del Necaxa durante la temporada 2018-2019 y juega actualmente en el Deportivo Madryn, tuvo que ser hospitalizado tras una recaída en la adicción a las drogas. No es la primera vez que el argentino de 27 años de edad recae en esta situación.
La noticia se conoció luego de que Fernández no asistió por varios días a su entrenamiento con el Deportivo Madryn, equipo donde está en calidad de préstamo del Colón de la Liga Argentina hasta diciembre de 2022 sin opción de compra.
Durante su carrera con el Racing de Avellaneda en Argentina estuvo suspendido varios meses luego de que dio positivo en las pruebas de dopaje. Fernández ha estado con los equipos de Defensa y Justicia, Racing Club, Metz de la Ligue 1, Unión Calera de Chile. Tiene dos hermanos que también son futbolistas: Leandro Miguel Fernández con Independiente y Nicolás Fernández con San Lorenzo.
¡Hola Buenos Aires! ??
La delegación Aurinegra aterrizó ? en el Aeropuerto de Ezeiza. Se hospedará en el Hotel Feir’s Park a la espera del partido de mañana por la noche.
¡Gracias Empresa Ceferino por el traslado en tierra! #VamosAurinegro. pic.twitter.com/LQzuzHBX7z
— Club Social y Deportivo Madryn (@ClubMadryn) May 19, 2022
En México, Brian tuvo una gran etapa como goleador de los Rayos del Necaxa en 2018 y 2019 en el que los metió en la Liguilla. Con el club mexicano anotó 18 goles y dio 5 asistencias en 32 partidos jugados.
De allí dio el salto de calidad con el Portland Timbers de la Major League Soccer, en donde también deslumbró con 15 goles en 23 partidos. Pero durante su etapa en Estados Unidos, el argentino cayó en la adicción e ingresó voluntariamente en el Programa de abusos de sustancias (SABAH, por sus siglas en inglés) para recuperarse y volver a las canchas. Aunque desde allí ha sido cuesta arriba.
“La droga te arruina, te deja sin vida. Atravesé momentos duros, pero ahora quiero jugar al fútbol y ser feliz. Estoy mucho con amigos y familia, la contención es fundamental. La pelota cura heridas”, declaró en febrero de 2019, cuando sus goles en el equipo mexicano lo volvían a poner en el radar.
Su último partido jugado fue el 26 de febrero y apenas ha disputado seis encuentros en la segunda división argentina. Nuevamente pasará por un hospital para su recuperación y se espera que el talento argentino pueda volver sano a las canchas.