Ciudad de México, 18 de febrero (SinEmbargo).– El Banco de México (Banxico) anunció esta tarde una reducción en su estimado de crecimiento de la economía del país para 2015, el primer ajuste de esta institución en 49 días (menos de dos meses) de este año.
En su informe trimestral, Banxico indicó que para 2015 el intervalo de pronóstico para el crecimiento del PIB se ajusta de uno de 3.0 a 4.0 a 2.5 a 3.5 por ciento.
Para 2016, informó que el intervalo se revisa de entre 3.2 y 4.2 por ciento, a uno de 2.9 a 3.9 por ciento.
«Aunque sigue siendo a la alza [el rango de crecimiento esperado para 2015 y 2016] es menor a lo que se estimaba anteriormente», dijo el gobernador de Banxico, Agustin Carstens Carstens, al presentar el informe.
Los pronósticos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para el crecimiento económico de 2014 se ubican en un rango de 2.1 a 2.6 por ciento, mientras que para 2015 es de 3.2 a 4.2 por ciento.
El próximo viernes 20 de febrero, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) dará a conocer los resultados del Producto Interno Bruto (PIB) al cuarto trimestre de 2014.
Carstens dijo que la caída de los precios del petróleo y de la producción petrolera mexicana podrían limitar el dinamismo de la actividad productiva, además de que el consumo interno muestra una reactivación todavía lenta.
«Durante el cuarto trimestre de 2014 el entorno internacional presentó un deterioro importante ante el precio internacional del petróleo. Registró una caída significativa y se anticipa que se mantenga en niveles bajos por un tiempo prolongado», dijo Carstens.
Indicó que es predecible que continúe una situación de sobre oferta de crudo. «Lo más probable es que esa sobre oferta se vaya diluyendo a manera que pase el tiempo y eso se dé a futuro, pero definitivamente tomando como indicador de precios futuros no parece viable que el precio del petróleo en los próximos años regrese a los niveles que existían antes, a mediados del año pasado», comentó.
Carstens dijo que la decisión del Gobierno federal de disminuir el gasto publico para 2015 con el objeto de mantener sanas las fianzas públicas «cumple con las metas fiscales». Dijo que incluso corresponde con la intención de suavizar el impacto de los precios del petróleo en el 2016.
«Hace todo el sentido del mundo, se depende menos de deuda publica y es lo adecuado ante una circunstancia en la que se esperan condiciones mas astringentes en los mercados internacionales y donde también las fuentes de ingreso se han visto afectadas a la baja al caer el precio del petróleo. Ayuda a que la depreciación del peso se dé de manera más ordenada y reduce las presiones a las tasas de interés. Preservar la congruencia en el marco macroeconómico para aspirar mayores tasas de crecimiento con una inflación baja», afirmó.
