Guadalupe Correa-Cabrera
Hace algunos días comenzó, en Brooklyn, Nueva York, lo que muchos han denominado “El Juicio del Siglo”.
Eventos recientes en distintas partes del mundo parecieran contradecir el pensamiento de Francis Fukuyama sobre lo que denominó “el fin de la historia”.
La primera vez que se comunicó públicamente la propuesta de que México firmara un acuerdo de “tercer país seguro” con Estados Unidos para aminorarle a su vecino del norte el problema de la inmigración centroamericana, la opinión pública mexicana reaccionó con un “no” rotundo. Al día de hoy, las cosas parecieran haber cambiado. En tiempos de caravanas migrantes y elecciones intermedias en Estados Unidos, la participación de Mexico en un acuerdo de este tipo podría estar más cerca de lo que suponemos.
En los últimos tiempos se ha hablado relativamente poco de la migración indocumentada de origen mexicano en Estados Unidos.
El robo de hidrocarburos en México es un fenómeno extremadamente preocupante y ampliamente cubierto y visibilizado por la prensa nacional e internacional.
Los días 6 y 7 de septiembre se llevó a cabo en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, la Reunión Nacional de la Red Temática CONACYT en Prevención de Adicciones y Seguridad Ciudadana.
Donald J. Trump ha resultado ser un extraordinario negociador y comunicador eficaz en lo que se refiere a su capacidad para obtener lo que quiere cuando se trata de México. Los resultados de las recientes negociaciones bilaterales entre Estados Unidos y México para firmar eventualmente un nuevo Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN)—que incluiría a Canadá si todo sale bien—le fueron muy favorables al mandatario estadounidense y a su país en general. Asimismo, Trump logró ejercer presión adicional sobre Canadá para que atienda a sus exigencias después de haber convencido en lo fundamental a su dócil aliado del sur de Norteamérica.
Uno de los temas más importantes para México en su relación con Estados Unido es el que se refiere al manejo de sus fronteras, en particular la cooperación en materia de seguridad fronteriza y el control de los flujos migratorios provenientes del sur del continente y principalmente de Centroamérica.