Arnoldo Cuellar
La alusión a ese tema público fue respondida por Arroyo Vieyra con una grosera alusión personal al inquirir a Botello por un tema de su vida estrictamente privada que no reproduciré.
Los gobernadores panistas que construyeron la épica historia de industrialización, crecimiento del PIB y auge exportador, mediante una política de inversión pública y subsidios de todo tipo para potenciar al sector empresarial, nunca se plantearon un desarrollo social equitativo.
A final de cuentas, como decía el viejo tango los políticos de hoy parecen vivir a gusto «revolcados en un merengue y en el mismo lodo, todos manoseados».
La procuración de justicia que no se tienta el corazón para castigar hasta provocar un infarto a un hombre en Celaya, elige la inmovilidad para no molestar a un integrante de una de las familias más encumbradas de León.
En esa zona de guerra que es Salamanca, guerra injusta y abusiva porque se ceba en personas indefensas, desarmadas, Israel llegó a cubrir el horror cotidiano que se vive en esas calles
Guanajuato tiene dos años liderando las listas de homicidios en el país: la diaria, la mensual, la anual.
En 2020, la asociación entre SAPAL y la empresa Fypasa, principal accionista de Ecosys III, la planta de tratamiento de aguas residuales (PTAR) de León parece el peor negocio del mundo.
El Gobierno de Guanajuato contrató un espacio de oficinas por el que paga casi 7 millones de pesos de renta al año, además, cada servicio de alimentos para las reuniones que tienen lugar en el edificio es cobrado aparte. POPLab tuvo acceso a contratos que los servicios de alimentos para encuentros con legisladores que han costado miles de pesos.
Lo preocupante es la percepción de que se está jugando al ensayo y error con el Gobierno de Guanajuato.
Los principales dirigentes de corrientes del PRI, los políticos más exitosos para conseguir candidaturas, también se convirtieron en magnates a lo largo de los seis años del sexenio peñanietista, mostrando que por la vena priista no corría otra motivación más que la corrupción.
La pandemia puede estar cambiando muchas cosas en el mundo, lo que no ha cambiado es la mentalidad patrimonialista, prepotente y amante de privilegios de nuestros pequeños políticos. Normal, ¿no?
¿Veremos a Diego pidiendo al Presidente o al Fiscal General de la República que se lleven al «Marro» a un penal federal? Sería lo mejor para todos, aunque quede un tanto cuanto amellado el discurso de pretendida «grandeza».
La ignorancia geográfica de la Fiscalía de Jalisco no es tan reprochable como la intención, a todas luces dolosa y revictimizante, de tratar de enlodar a una persona asesinada suponiendo vinculaciones ilegales.
Por muchas razones, pero sobre todo negligencia, dolo y falta de supervisión, la planta de tratamiento no ha logrado la meta de verter agua de calidad a la cuenca del río Turbio para que pueda ser aprovechada por los agricultores corriente abajo.
En Guanajuato hay un problema grave con la pandemia: en el momento de mayor velocidad de los contagios, la población está absolutamente desconfinada, saliendo a trabajar y departir casi con normalidad.
Es lamentable que un partido de tradición democrática como el PAN haya llegado a este nivel. Sin embargo, su suerte no debe arrastrar a Guanajuato. Este territorio es más grande que la cíclica decadencia de sus políticos, como ya se ha visto en el pasado.