El día de hoy, el Presidente mexicano ha partido hacia Estados Unidos para llevar a cabo una agenda que incluye una reunión con Joe Biden para tratar temas migratorios, económicos y de seguridad.
Ciudad de México, 12 de julio (SinEmbargo).- Acompañado de su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller, el Presidente Andrés Manuel López Obrador viajó esta mañana rumbo a Estados Unidos para llevar a cabo una gira de tres días que incluye una reunión con el Presidente del país vecino, Joe Biden.
«¡En el avión a Washington! Acompaño a mi Presidente que con orgullo y dignidad representa a nuestro querido México», compartió Gutiérrez Müller en una publicación de Instagram junto a una fotografía de ambos en el avión.
Ésta representa la quinta gira que el gobernante mexicano realiza al extranjero desde el inicio de su mandato. López Obrador ha visitado ya anteriormente los Estados Unidos, además de Centroamérica y el Caribe.
En esta ocasión, el Presidente mexicano se encontrará con la Vicepresidenta Kamala Harris para un desayuno de trabajo, rendirá homenaje a Franklin D. Roosevelt, se reunirá con Biden en Washington para discutir temas que afectan a ambos países y conversará con empresarios mexicanos, contó esta mañana sobre algunas de las actividades que llevará a cabo.
Para su encuentro con Joe Biden, el mandatario mexicano estará acompañado por los secretarios de Relaciones Exteriores, Agricultura, Economía y el titular del Instituto Nacional de Migración.
«TRABAJAR EN BENEFICIO DE NUESTROS PUEBLOS»
El día de mañana, 12 de julio, Andrés Manuel López Obrador y Joe Biden se encontrarán en Washington con la intención de «trabajar juntos en beneficio de nuestros pueblos», dijo el mandatario mexicano en conferencia de prensa.
Además de la migración, los otros ejes sobre los que se basará la reunión presidencial serán la economía y la seguridad, por lo que se busca «trabajar de común acuerdo para controlar la inflación en Estados Unidos y en México, también con medidas bilaterales», explicó López Obrador.
De acuerdo con el Presidente, ambos países cooperan y mantienen una buena relación, «siempre en el marco del respeto a nuestra soberanía», un aspecto que dice reconocer y agradecer a su homólogo estadounidense.
El pasado 6 de julio, López Obrador comentó, también en conferencia de prensa, que cuenta con una propuesta para esta reunión enfocada en el flujo migratorio y la contratación de trabajadores mexicanos que sería «una alternativa para ambos pueblos».
«Vamos a poner orden y vamos a legalizar la contratación de trabajadores mexicanos, que no sea un asunto de particulares, de traficantes de personas, de polleros, sino un asunto de gobiernos», dijo la semana pasada.
En esa ocasión, indicó que prevalece una política injusta en el país vecino en torno a la paga que perciben los trabajadores migrantes, aún cuando la fuerza de trabajo es necesaria para el crecimiento de cualquier nación.
«No se puede crecer sin fuerza de trabajo», recalcó esta mañana. «¿Por qué negar que hace falta fuerza de trabajo?», cuestionó, ligando el problema inflacionario que afecta a ambas naciones. A su vez, señaló que el alza de precios también ocurre en lo estructural por falta de producción.
En cuanto al tema de seguridad, la Administración de Control de Drogas de los Estados Unidos (DEA) seguirá interviniendo, pero bajo un marco legal que se respeta. «Se establece en esa legalidad cuántos agentes pueden estar en México, los informes que deben estar rindiendo a nuestro país», precisó.