Silencio radio estará disponible a partir de las 00:00 horas de este 29 de abril, siendo el documental inaugural de Ambulante. Además, habrá una sesión de preguntas con su directora, Juliana Fanjul, ese mismo miércoles a las 21:00 horas en la página de Ambulante.
El documental no sólo es un retrato de la Carmen Aristegui, sino también es una historia de resistencia y de supervivencia frente a la censura y gobiernos corruptos.
Ciudad de México, 28 de abril (SinEmbargo).– Ambulante, gira de documentales, se reinventó ante la contingencia sanitaria para crear una edición virtual. El trabajo que fue elegido para inaugurar este año fue Silencio radio, de la directora Juliana Fanjul, un documental que exhibe la historia de resistencia ante la censura de la periodista Carmen Aristegui y su equipo de investigación.
No quedarse callada ante los hechos violentos que en ese momento ocurrían en México, serle fiel a su profesión de cineasta y como una manera de proteger la integridad y la voz de Carmen Aristegui después de su despido de MVS como «consecuencia» de publicar la investigación La casa blanca de Peña Nieto: La historia que cimbró un gobierno, Juliana Fanjul puso en marcha su documental.
«Había mucho miedo en México. En ese momento estábamos viendo cómo asesinaban a otros compañeros periodistas y me parecía que no nos podíamos permitir perder la voz de Carmen más allá del micrófono», dijo la directora en entrevista con SinEmbargo.
Silencio radio es un trabajo que siguió a la periodista por cuatro años después de su despido de la cadena de televisión en 2015 cuando publicó una investigación realizada por los periodistas Rafael Cabrera, Daniel Lizárraga, Irving Huerta y Sebastián Barragán y que exhibía una lujosa casa ubicada en Lomas de Chapultepec como símbolo de una estrecha relación entre el gobierno el entonces Presidente Enrique Peña Nieto con China, que mostraba jugosos contratos a su beneficio y desbordados de corrupción.
Este filme hace un pequeño recorrido por el regreso del priismo al poder, y la represión hacia los periodistas que terminó con la vida de 47, entre ellos, Javier Valdez.
Para poner en marcha este documental, el primer paso fue ganarse la confianza de Carmen y sus colaboradores. Comprobar que el trabajo que les planteaba era genuino y que no habían segundas intenciones o «gato encerrado», como cuenta Fanjul. Sin embargo, fueron más los obstáculos que se fueron presentando.
«El documental está totalmente financiado por los fondos públicos de la cultura Suiza. Hubiera sido quizá inimaginable pensar en levantar una producción así desde México porque para financiar un proyecto de cualquier película hay que escribir una carpeta en donde se dicen muchísimas cosas sobre los personajes que uno quiere filmar, y de alguna forma mi carpeta se iba a volver un arma en contra de la propia Carmen».
«Imaginarme tener una carpeta en español que circulara entre las manos de la gente aunque fuera del IMCINE o de eventuales inversionistas, pues era algo muy delicado», relata la directora que desde un inicio protegió la realización y, claro, a Carmen y a su equipo.
La misma Juliana Fanjul también estuvo expuesta, pues al regresó del viaje a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en Washington, donde acompañó a la periodista, notó que alguien había intentado entrar en su casa. Y el acoso continuó con personas siguiéndole la pista por lo que tuvo que tomar un curso en Artículo 19 para protegerse y tomar nuevas medidas.
«Cuando el rodaje tomó ya un ritmo más álgido contrataba yo a diferentes choferes que eran choferes de una producción pequeña y normal, e íbamos cambiando de gente para evitar también que la información circulara. Cada uno de ellos invariablemente me dijo que nos estaban siguiendo y esto normalmente venía una vez que habíamos estado en un lugar en público con Carmen».
«Me quedó claro que esto estaba ligado a la figura de ella. Que sí, que de alguna forma, no sé, me querían intimidar o saber lo que estábamos haciendo o lo que ella en aquel momento estaba trabajando y que quizá a través de mí lo podían saber».
Pese al acoso, y a que también estaban en riesgo productores y coproductores del filme, todos se mantuvieron firmes en seguir adelante. «Yo siempre defendí la posición de que la brújula que nos tenía que guiar era la del valor porque si estábamos retratando a alguien tan valiente como Carmen, pues no podíamos más que intentar más o menos estar su nivel y no amedrentarnos», señala.
Silencio radio se pensó desde inicio para llegar a dos públicos: Uno internacional que desconoce el caso, el contexto y los personajes involucrados, y otro que ya está muy familiarizado con todo y que aún así se encontrara con nuevos datos y aspectos. Adentrarse más en un retrato de la periodista en su lado más humano, pero sin dejar de ser una denuncia del peligro que corren los periodistas en México. Una situación que no ha cambiado.
«Yo creo que hay cosas que han cambiado, es una relación distinta la que tiene Andrés Manuel con la prensa sin ninguna duda, más allá de que eso sea bueno o malo. Hay una relación directa, cotidiana. Sin embargo, los números no parecen haber cambiado realmente y eso es lo que debemos leer y en lo que nos debemos detener porque, si siguen asesinando periodistas en las provincias mexicanas, es que el problema no se resolvió claramente con un cambio de Gobierno. Sino que el problema de censura está más allá y está relacionado con el vínculo entre los cárteles, el narcotráfico y los diferentes gobiernos locales. Ése es el cáncer que nos golpea. No creo que sea sólo en que si estamos con Peña Nieto o si estamos con Andrés Manuel, creo que nuestro grave probLema está en esos pequeños gobiernos que están totalmente coludidos y en esa prensa que definitivamente no puede hablar».
«Resistencia» fue la capacidad que Juliana Fanjul quiso reflejar sobre en su documental, que la historia de la periodista Carmen Aristegui sirva como «espejo y eco» a más casos.
«Me concedieron el privilegio de abrir Ambulante con Silencio radio porque necesitamos resistir. Necesitamos resistir a un montón de cosas. Necesitamos decir, levantar la voz. Necesitamos no amedrentarnos, no dormirnos. Necesitamos exigir y participar como sociedad para construir un mejor presente, ya no digas un mejor futuro para estar a gusto con la realidad en la que vivimos. Creo que en fondo esto es lo que dice la película. No es nada más una historia de censura. Es una historia de resistencia y de supervivencia».
Silencio radio estará disponible a partir de las 00:00 horas de este 29 de abril, siendo el documental inaugural de Ambulante. Además, habrá una sesión de preguntas con su directora, Juliana Fanjul, ese mismo miércoles a las 21:00 horas en la página de Ambulante.
Una vez que termine la contingencia sanitaria, se espera que el documental llegue a la gira de Ambulante por varios estados, se presente en otros festivales, e incluso, ya está la propuesta para que llegue a salas de cine del circuito comercial.