Si bien el AICM brinda el servicio de renta de los hangares para empresas privadas, este aseguró que son los arrendatarios quienes están a cargo del resguardo y operación de las aeronaves, así como «del personal que contraten».
Ciudad de México, 9 de agosto (SinEmbargo).-El Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) se deslindó del robo de un helicóptero en uno de sus hangares.
EL AICM precisó que los hangares para esa clase de vehículos son rentados a personas morales, anteriormente acreditos por la autoridad aeronática, que busquen resguardo y mantenimiento de ellos.
No obstante a ello, tanto el resguardo como la operación de las aeronaves «está a cargo exclusivo de esas empresas y del personal que contraten», según explicó el AICM en un comunicado difundido en sus redes sociales.
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— @AICM_mx (@AICM_mx) August 9, 2022
Un helicóptero resguardado en uno de los hangares del AICM fue robado a inicios de este mes.
La Fiscalía General de Justicia de Ciudad de México (FGJ-CdMx) reveló que es un helicóptero Bell 206 B3, Jet Ranger, matrícula XB-JSR el que habría sido sustraído el 3 de agosto, por lo que ya investigan los hechos y se abrió una carpeta de investigación.
Sin embargo, todavía no hay noticias sobre su localización o la detención de algún responsable; sólo se sabe que, de acuerdo con los registros oficiales, la aeronave es propiedad de Jesús Silvestre R., un piloto aviador que fue reportado como desaparecido en junio.
De acuerdo con la ficha de búsqueda que compartió la Fiscalía de Morelos, desapareció el 24 de junio en el municipio de Temixco, pero días después regresó a su casa.
La dueña de la aeronave, Guadalupe Leticia R., esposa de Jesús Silvestre R., fue quien denunció que alguien se había llevado el helicóptero del hangar, el cual solía rentarlo para vuelos privados desde el aeropuerto capitalino.
Según una publicación de El Financiero, Jesús Silvestre R. tenía un adeudo por la renta del hangar, la cual saldó un grupo de personas el día de su desaparición; y que los denunciantes mencionaron al piloto José Luis G.M. como presunto responsable de haber pagado el adeudo y llevarse la nave.
La propietaria también acusó al administrador del hangar, Mario Alberto Ch. por negarse a mostrar la bitácora de vuelo con el argumento de que no la encontraba, así como a proporcionar las imágenes de las cámaras de seguridad.
