La vacuna, ya probada en ratones, se administraría por medio de un parche que produciría «respuestas inmunitarias mejores y más rápidas».
Madrid, 2 de noviembre (Europa Press).- Una vacuna contra la COVID-19 sin agujas podría ser posible, después de que los científicos de la Universidad de Queensland (UQ), en Australia, hayan conseguido proteger a los ratones del virus mediante la administración de un candidato a vacuna desarrollado en Estados Unidos a través de un «parche», según publican en la revista Science Advances.
El candidato a vacuna «Hexapro» de la Universidad de Texas, administrado mediante el parche de microarray de alta densidad (HD-MAP) desarrollado por la UQ y comercializado por Vaxxas, proporcionó protección contra la enfermedad del COVID-19 con un único «clic» indoloro de un aplicador de bolsillo.
El doctor David Muller, de la Facultad de Química y Biociencias Moleculares de la UQ, afirma que el parche de la vacuna produjo fuertes respuestas inmunitarias que se mostraron eficaces cuando los ratones fueron expuestos al SARS-CoV-2, el virus que causa la COVID-19.
«Cuando la vacuna ‘Hexapro’ se administra a través del aplicador HD-MAP en lugar de con una aguja produce respuestas inmunitarias mejores y más rápidas –añade Muller–. También neutraliza múltiples variantes, incluidas las del Reino Unido y Sudáfrica y es mucho más fácil de usar que una aguja: basta con hacer un «clic» en el aplicador sobre la piel y cinco mil proyecciones microscópicas introducen la vacuna en la piel de forma casi imperceptible».
El equipo de la UQ y Vaxxas están buscando oportunidades de financiación para acelerar los ensayos clínicos lo antes posible. «‘Hexapro’, suministrada por el parche de microarrays de alta densidad, podría ayudar de forma espectacular al esfuerzo de implantación de vacunas a nivel mundial, especialmente para miles de millones de personas vulnerables en países de ingresos bajos y medios», aseguran.
«Hemos demostrado que esta vacuna, cuando se recubre en seco en un parche, es estable durante al menos 30 días a 25 grados centígrados y una semana a 40 grados, por lo que no tiene los requisitos de cadena de frío de algunas de las opciones actuales», añaden.