Pekín, 9 mar (EFE).- El Gobierno chino ha enviado una delegación a Malasia para gestionar la respuesta a la desaparición del vuelo MH370 de las líneas aéreas Malaysia Airlines cuando cubría la ruta Kuala Lumpur-Pekín el sábado pasado con 239 personas a bordo.
La delegación, de 13 personas, incluye funcionarios de los ministerios de Asuntos Exteriores, Seguridad Pública y Transporte, así como de la Administración de Aviación Civil de China (CAAC).
Según declaró el cabeza de la delegación, el director adjunto del Departamento de Asuntos Consulares del Ministerio de Exteriores, Guo Shaochun, citado por la agencia oficial Xinhua, «la cuestión más importante sigue siendo la búsqueda y rescate».
«Pedimos a la parte malaya y el resto de partes implicadas en los trabajos de rescate que colaboren para intensificar los esfuerzos de búsqueda, fortalecer la coordinación y no abandonar mientras exista la más mínima esperanza», agregó Guo.
Entre sus tareas, la delegación se coordinará con Malasia y el resto de países afectados por la desaparición del avión para investigar el incidente.
Según Guo, los familiares de las víctimas chinas llegarán a Kuala Lumpur esta noche, trasladados por Malaysia Airlines.
El vuelo MH370 despegó de Kuala Lumpur a las 00.41 hora local (16.41 GMT del viernes) y tenía previsto llegar a Pekín unas seis horas más tarde, pero se perdió el contacto por radar a las 01.30.
El avión transporta 239 personas: 227 pasajeros, incluidos dos menores, y una tripulación de 12 personas, todas ellas malasias.
La lista ofrecida por Malaysia Airlines incluye a 153 chinos, 38 malasios, 7 indonesios, 6 australianos, 5 indios, 4 franceses, 3 estadounidenses, 2 neozelandeses, 2 ucranianos, 2 canadienses, 1 ruso, 1 italiano, 1 holandés, 1 austríaco y 1 taiwanés.
Australia, China, Estados Unidos, Filipinas, Indonesia, Malasia, Singapur, Tailandia y Vietnam colaboran en el rastreo del aparato en una zona al sur de la isla vietnamita Tho Chu, en la misma área donde se presume que podría haberse estrellado si no cambió de rumbo, según datos de las autoridades de Malasia.
Agencias de inteligencia de varios países participan en una investigación que se centra en aclarar el posible viraje que el avión pudo realizar, sin que el piloto lo comunicara, ni enviara un mensaje de alerta, y en la presencia de al menos dos pasajeros con pasaportes falsos.
Se trata de los pasaportes del italiano Luigi Maraldi y el austríaco Christian Kozel, a quienes les sustrajeron los documentos en 2013 y 2012, respectivamente, en Tailandia, como ha confirmado la Interpol. EFE