Ciudad de México, 28 de septiembre (SinEmbargo).– Durante 2013, el boxeo tuvo una actividad memorable. Un año para el recuerdo de los aficionados mexicanos con dos noches paralizadas con un par de compatriotas en la escena del evento principal de las carteleras. Saúl Canelo Álvarez y Juan Manuel Márquez ambientaron los bares repletos a lo largo del país, aunque al final el resultado no fue el deseado. Junto a ellos, varios latinos combatieron con esa garra de la región tan admirada por otras partes del mundo. El recuento muestra un crecimiento regional, con algunos nuevos nombres que han maravillado.
Danny García
Le dicen “Swift” y está invicto en su carrera de 26 combates con 16 nocauts. El estadounidense de ascendencia puertorriqueña ha confirmado su fortaleza tanto física como mental durante este año. Las victorias frente a Zab Judah, pero sobre todo frente a Lucas Matthysee, lo catapultó como un aspirante a esos grandes lares donde las figuras descansan tras un largo camino. El actual campeón de los súper ligeros, nació en Filadelfia, pero fue su padre boricua quien lo introdujo al boxeo. En su palmarés, está el mexicano Erik Morales.
Sergio Martínez
El argentino es ídolo de multitudes en un país entregado al futbol. El “Maravilla” supo deshacerse de Julio César Chávez Jr. en septiembre de 2012, consolidándose como el mejor latino libra por libra. Aguerrido y con mucha confianza en sí mismo, Sergio peleó en Buenos Aires con el cobijo de su gente, frente al inglés Martin Murray. A sus 38 años termina el curso en lo más alto de la lista regional. Martínez solo ha perdido dos peleas en su carrera, su victoria 51, encumbró su año frente a los que lo hicieron un ídolo.
Guillermo Rigondeaux
El 13 de abril de 2013 fue el día más importante en la carrera del cubano. “El Chacal” llegó frente al filipino Nonito Donaire para disputar los títulos unificados de la OMB y la AMB. Además de los dos cinturones estaba en juego el invicto de Guillermo en 32 peleas. El discípulo de Pacquiao, acostumbrado a derrocar sueños mexicanos, se topó con un caribeño de gran futuro. El ex campeón olímpico tiene dos peleas pactadas con Top Rank, con quienes está a disgusto debido a la falta de promoción que le han dado después de su victoria frente Donaire. A sus 33 años, espera dar el salto a la consolidación.
Saúl Álvarez
Canelo paralizó al país mediante una campaña de promoción pocas veces vista. En pleno festejo por un aniversario más de la Independencia de México, se plantó en Las Vegas para enfrentar al histórico Floyd Mayweather Jr. El estadounidense se mostró confiado e incluso su padre declaró que la pelea sería “demasiado fácil”. Álvarez venía de derrotar a Austin Trout, pero las críticas sobre su rendimiento seguían en el aire. Enfrentar a “Money” era un gran paso para demostrar que no era un producto de una televisora. Al final recibió una cátedra de boxeo, apuntándose su primera derrota en 44 combates. Aún está considerado como un rival a vencer, pero 2014 tendrá que traer una victoria clara.
Miguel Cotto
El puertorriqueño fue consolidando una carrera prestigiosa. A sus 33 años, ha tenido una revalidación profesional después de un 2012 para el olvido. Mucha prensa especializada daban como terminado a un tipo de aspecto duro que supo trabajar hasta alcanzar el lugar que ocupa en la actualidad. De pronto, Cotto se midió frente a Delvin Rodriguez con mucha gente escéptica sobre lo que pudiera hacer “Junito”. El boricua salió al ring y calló bocas. Una contundente victoria lo puso otra vez, sin lugar a dudas, dentro de la élite que muchos le quisieron quitar.
Juan Manuel Márquez
“Dinamita” no quiere volver a pelear en Las Vegas. El mexicano siente que los jueces designados en la ciudad que nunca duerme, lo perjudican constantemente. El último episodio lo protagonizó Timothy Bradley quien lo venció en una pelea apretada decidida por decisión dividida. El revés pudo haberle desprestigiado, pero sin duda el nocaut histórico y memorable que le propino a Manny Pacquiao el año pasado, le ha dado mucho crédito para seguir siendo uno de los rivales a vencer. A sus 40 años, mientras muchos lo quieren retirar, él aspira a pelar frente a Pacman en suelo mexicano.