A propósito del Mundial de Clavados Barcelona 2013, esta semana traemos a cuatro mexicanos que han dado su mejor esfuerzo en la competencia y sueñan con participar en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.

En busca de medallas

Rommel Pacheco

“Este es mi quinto Mundial, no había conseguido nada en los anteriores. No me quería retirar sin una medalla en este tipo de competencias”, dijo el mexicano Rommel Pacheco al conseguir la presea de bronce en el Mundial de Clavados que se realiza en Barcelona.
Oriundo de Mérida, Yucatán, el clavadista tienen los ojos puestos en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. El pasado martes, la pareja conformada por Jahir Ocampo y Pacheco aseguró la medalla de Bronce en el Trampolín de 3 metros. Ellos apenas tienen un par de campeonatos compitiendo juntos y dos Gran Prix.
“Jahir y yo no aparecíamos en el mapa, somos nuevos, no nos habían visto competir, fue un buen día. Vamos iniciando y esto nos da para seguir cosechando frutos como pareja”, explicó el medallista de oro en la plataforma de 10 metros en los Juegos Panamericanos 2003, donde comenzó su camino a los podios.

Tiene 27 años y según rumores está próximo a casarse con la también clavadista Paola Espinosa, con quien mantiene una relación amorosa desde hace más de diez años. Según la abuelita de Espinosa –dijo en 2012– la pareja ya se comprometió.

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Rinde frutos

Lolita Hernández

Tras pasar a la final de trampolín de 1 metro, la clavadista veracruzana de 16 años quedó en cuarto lugar y no alcanzó el medallero en el Mundial de Barcelona. Sin embargo, Dolores Hernández dijo estar satisfecha con su participación y contenta con el aprendizaje que está adquiriendo.
“Ha sido una gran experiencia y estoy feliz con este resultado. Estuve un poco nerviosa y me sentí bien en general, aunque pude haber tirado mucho mejor”, comentó la promesa mexicana. “Para ser mi primer Mundial y no fallar, el balance es positivo”, agregó.
Lolita –como prefiere que la llamen sus amigos– se convirtió en la deportista veracruzana más joven en ganar el Premio Estatal del Deporte en 2012, y después de conseguir su primer plaza para unos Juegos Olímpicos, los de Londres el año pasado, ahora tiene la meta puesta en Río de Janeiro 2016.
Comenzó en clavados desde que tenía 8 años, practicando con Paco Rueda. Después siguieron las Olimpiadas Nacionales, hasta que tomó sus maletas y se trasladó a la Ciudad de México donde conoció a Ma Jin, entrenadora de Paola Espinosa, y actualmente de ella también.

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Un chico de oro

Kevin Chávez

“Sueño totalmente con una medalla en Río, pero no la cambiaría por una medalla en el Mundial. Quiero las dos cosas”, dijo el clavadista que abrió el medallero para México en el Mundial de Barcelona 2013 el pasado lunes. Kevin Chávez su subió al podio con su presea de bronce.
Con 21 años, Chávez obtuvo la novena medalla en la historia de Mundiales para el país. “Estoy feliz de ofrecer esta primer medalla para México en el Mundial”, dijo el clavadista jalisciense.
Chávez inició desde hace casi 15 años en los clavados y ha sido pupilo desde entonces del entrenador Iván Bautista, quien logró clasificar a Germán Sánchez a los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 con apenas 16 años de edad. “Es el mejor entrenador del mundo. He mejorado mucho con él”, explicó el medallista.
“Hay muchas pasión y muchos sacrificio en los clavados mexicanos. Me puse a hacer deporte para apartarme de la calle y ahora estoy representando a mi país”, dijo el joven que confiesa nunca pensó dedicarse a los clavados, pero con el tiempo fue queriendo este deporte.

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Otra joven promesa

Alejandra Orozco

En Londres 2012, la clavadista ganó junto a Paola Espinosa la medalla de plata en la plataforma de 10 metros. Este año, se coló a la final del Mundial Barcelona 2013 después de un inicio difícil. Alejandra Orozco, de 16 años, busca llegar a sus segundos Juegos Olímpicos en Río de Janeiro.
La oriunda de Guadalajara, Jalisco, es considerada por expertos en la materia como una clavadista valiente y decidida, a pesar de su corta edad. Entre los galardones que ha obtenido Alejandra, se encuentran dos platas en Copas del Mundo, la primera en Tijuana y la segunda en Beijing, ambas en 2012.
La joven medallista olímpica tiene casi cinco años de preparación, de ahí su gran hazaña conseguida en Londres, la cual logró con su formación de alto rendimiento en el Consejo estatal para el fomento deportivo y el apoyo a la juventud de su estado.
“En la final todo puede pasar. Esto no se acaba hasta que se acaba, hasta el último clavado. La que llegue preparada y la que esté lista para hacer los mejores clavados es la que se lleva las medallas”, confía la entusiasmada promesa para el deporte mexicano.