10 CLAVES PARA ENTENDER DAÑOS AMBIENTALES EN TIEMPOS DE GUERRA

06/11/2011 - 12:00 am

1. Los motivos:

La Asamblea General de la ONU adoptó esta medida considerando que los daños causados al medio ambiente en tiempos de bélicos continúan afectando los ecosistemas y los recursos naturales aún después de terminado el conflicto, extendiéndose más allá de los límites del territorio nacionales y de la generación en cuestión.

La humanidad cuenta a sus víctimas de guerra en términos de soldados y civiles muertos y heridos, ciudades y medios de vida destruidos, y el medio ambiente siempre es la víctima olvidada. Los pozos de agua se contaminan, los cultivos quemados dejan de tener posibilidad para producir, hay bosques talados, suelos envenenados y  animales sacrificados para obtener una ventaja militar.

 

2. Gracias a Kuwait:

Kuwait pidió que este día fuera incluido en el calendario de la ONU por la propia difícil experiencia que tuvo “nuestra región fue testigo de conflictos militares y de guerras cuyas funestas consecuencias tuvieron repercusiones adversas para su medio ambiente”, declaró en su informe de petición.

En la Guerra del Golfo, en 1991, las tropas iraquíes destruyeron miles de pozos de petróleo en Kuwait, el combustible ardió en el desierto o llegó al mar, acabando con la pesca y destruyendo el ecosistema.

 

3. Desde Mesopotamia hasta la actualidad:

El uso del medio ambiente con fines militares no es nuevo. Hace 5 mil años, en las disputas entre ciudades en Mesopotamia, se demolían los diques y las presas para inundar los campos enemigos como estrategia de guerra.

Sin embargo, es relativamente poco el tiempo que la Organización de las Naciones Unidas ha proporcionado para  valorar los daños ambientales de los conflictos armados, esto tiene mucho que ver la agresividad e intensidad con la que se ha realizado  en el últimos años.

 

4. Casos históricos:

La preocupación por estos daños en el medio ambiente comenzó durante la guerra de Vietnam, entre 1959 y 1975. La intervención de Estados Unidos provocó la destrucción de 20% de la selva de Vietnam del Sur, pues utilizó potentes herbicidas para destruir la selva en la que se escondía el enemigo. Desde entonces miles de niños y niñas des estas zonas afectadas han nacido con terribles deformaciones a causa del producto, llamado “agente naranja”.

Una de las consecuencias del conflicto entre Israel y el Hizbollah fue el vertido de 15 mil toneladas de combustible de la central eléctrica de Jiyyeh, en el sur de Beirut, que afectó a unos 150 kilómetros de costas libanesas y sirias, contaminando las playas y las aguas costeras y dañando a la pesca y las actividades turísticas.

En Sudán, de acuerdo con estudios realizados por el PNUMA, existe una grave y extendida degradación del medio ambiente en gran parte del país, especialmente en relación con la desertificación y la deforestación.

En Darfur, la degradación del medio ambiente, la competencia para hacerse con los recursos y el cambio climático regional constituyen una de las causas principales de la inseguridad alimentaria y el conflicto bélico.

El drenaje de las marismas del Delta del Eufrates/Tigris en los años 80 y 90 ofrece un ejemplo clásico de maniobra deliberada contra un ecosistema para alcanzar fines políticos y militares. Actualmente, el PNUMA está ayudando al gobierno iraquí a restablecer y ordenar las marismas, y a rehabilitar el medio ambiente del país.

 

5. Refugiados, otro factor en los daños al medio ambiente:

Otra causa de daños al medio ambiente son los movimientos de refugiados. Por ejemplo, durante la guerra de Ruanda, miles de refugiados se desplazaron hacia la República Democrática del Congo para huir. Ellos destruyeron en poco tiempo 300 km cuadrados de bosques en su búsqueda de leña y alimento.

En esa misma región, los movimientos guerrilleros que se instalaron en las bosques, destruyen ecosistemas enteros para vender maderas valiosas de los árboles o matando a elefantes por su marfil, para conseguir dinero para armamento.

 

6. México, país en guerra:

De acuerdo con un mapa de Wikipedia, entre  las zonas en guerra se encuentran México, Colombia, Sudán, Somalia, Yemén, Irak, India, Paquistán y Afganistán con más de mil muertes por año, superando a países como Egipto, Arabia Saudita, Irán y Turquía, en los que se reportan de 10 a mil muertes por año, denominados zonas con Guerras y conflictos menores.

Cabe mencionar que el conteo abarca hasta enero de 2010.

 

7. Reporte del PNUMA:

Desde 1999, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente ha realizado más de 20 evaluaciones posteriores a los conflictos mediante métodos científicos más avanzados para determinar los impactos ambientales de los conflictos armados y recomendar los medios adecuados para la recuperación.

El PNUMA señala que en los últimos 60 años al menos 40% de los conflictos internos han tenido alguna relación con la explotación de los recursos naturales, tanto por ser considerados de “mucho valor”, como madera, diamantes, oro, minerales o petróleo, como por ser escasos, por ejemplo, la tierra fértil y el agua.

El programa resalta que cuando se trata de conflictos relativos a los recursos naturales se duplica el riesgo de recaer en una guerra.

En la actualidad, un equipo de este programa evalúa las repercusiones ambientales del conflicto en Líbano, y otros colaboran estrechamente con los Gobiernos del Sudán e Iraq.

 

8. Resolución 56/4:

En la Declaración del Milenio de las Naciones Unidas se había destacado la necesidad de proteger nuestro entorno común, fue así que el 5 de noviembre de 2001 se acordó la Resolución 56/4, en la que se contempla decretar un día dedicado a los efectos que la guerra causa en el Medio Ambiente.

De acuerdo con el párrafo 4 del Artículo 2 de la Carta de las Naciones Unidas, que dispone que todos los Estados Miembros, en sus relaciones internacionales, que se abstengan de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza contra la integridad territorial de cualquier Estado, incluyeron tres nuevos apartados:

1. Se declara el 6 de noviembre de cada año Día Internacional para la prevención de la explotación del medio ambiente en la guerra y los conflictos armados;

2. Se invita a los Estados Miembros, las organizaciones del sistema de las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales y regionales a que celebren el 6 de noviembre de cada año el Día Internacional para la prevención de la explotación del medio ambiente en la guerra y los conflictos armados;

3. Y se pide al Secretario General que vele por la aplicación de la presente resolución y la impulse en el ámbito de la comunidad internacional.

 

9. Mensaje de Ban Ki-moon:

En el marco de esta celebración, el secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, envío un mensaje en el que resalta las acciones que la Organización realiza para la comprensión de la relación que existe entre la guerra y el medio ambiente, así como la función que desempeñan los recursos naturales en la excitación y financiación de la estabilidad de la violencia.

Desde la declaración, hace 10 años, del Día Internacional para la Prevención de la Explotación del Medio Ambiente en la Guerra y los conflictos armados, la familia de las Naciones Unidas ha realizado importantes avances en la comprensión de la compleja relación existente entre la guerra y el medio ambiente y la función que desempeñan los recursos naturales en la excitación y financiación de la estabilidad de la violencia.

De Sierra Leona y Timor-Leste los países han recibido ayuda para mitigar los riesgos ambientales, a consolidar la paz y a aprovechar el potencial económico que entraña la utilización sostenible de esos recursos naturales. Sin embargo, sigue habiendo graves causas de preocupación. El medio ambiente sigue siendo una de las víctimas de las acciones bélicas. Al mismo tiempo, sigue creciendo la demanda de recursos naturales para satisfacer las necesidades de una población mundial cada vez mayor. En los decenios venideros, es posible que las naciones que se encuentran en una posición difícil, entre ellas los países que acaban de sufrir conflictos, deban hacer frente a una considerable competencia en materia de recursos. Ello solo será exacerbado por las predicciones de la consecuencias que habrá de tener el cambio climático sobre la disponibilidad de agua, la seguridad alimentaria, la elevación del nivel del mar y la distribución de la población.

El fortalecimiento de la capacidad nacional para gestionar los recursos naturales de forma transparente, equitativa y sostenible seguirá siendo una parte importante del mantenimiento y la consolidad de la paz, así como del apoyo general para el desarrollo que la organización presta a los Estados Miembros. Habida cuenta de la importancia crítica que cumplen en la prestación de apoyo los países que han sufrido conflictos, las operaciones de las Naciones Unidas para el Mantenimiento de la Paz se encuentran en una situación considerablemente adecuada para influir de manera positiva en la forma en que se protege al medio ambiente y se gestionan los recursos naturales. Una primera medida a este respecto puede ser la reducción al mínimo de los efectos negativos de nuestras propias operaciones sobre el medio ambiente.

Con ocasión de este Día Internacional, reconozcamos las consecuencias de amplio alcance y a largo plazo de inflingir daños en el medio ambiente, tanto en tiempos de paz como de guerra. Y reafirmemos nuestro firme compromiso con la gestión sostenible de los recursos naturales como un elemento crítico de una paz y una seguridad duraderas.

 

10. Documental sobre el Día Internacional  para la Prevención de la Explotación del Medio Ambiente en la Guerra y Conflictos Armados:

El documental realizado por un grupo independiente para la ONU y con información del PNUMA, “Scarred Lands and Wounded Lives: The Environmental Footprint of War”, detalla el deterioro que ha tenido el medio ambiente como víctima silenciosa de la guerra.

Se ha demostrado que los impactos de la guerra en el último medio siglo han ido aumentando en todas sus dimensiones. Ya que, en todas las etapas de un conflicto bélico se daña al ecosistema, desde la producción de armas hasta los preparativos para la guerra y combate.

El medio ambiente se daña directamente por las bombas y la destrucción asociada, indirectamente por los saqueos y las estrategias de los afectados para enfrentarlos, o de la desintegración y deterioro de las instituciones y la falta de administración para remediar esta situación.

Los impactos ambientales amenazan la salud humana, los medios de subsistencia y la seguridad, también disminuyen la posibilidad de consolidar la paz después de los conflictos.

en Sinembargo al Aire

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