Río de Janeiro, 29 Jun. (Notimex).- La magia de Brasil y el futbol elegante y preciso de España se medirán este domingo en lo que es considerada la «final soñada» de la Copa Confederaciones 2013, a disputarse este domingo en el estadio Maracaná a las 19:00 hora local.
En lo que será la novena final en la historia del torneo, se enfrentarán el conjunto anfitrión, vigente monarca, y el actual campeón del Mundo, que espera conquistar el título que le falta en sus vitrinas para seguir haciendo historia.
La «verdeamarela» deberá mejorar sustancialmente respecto de sus partidos previos, tanto de la fase de grupos como de la semifinal ante Uruguay, si quiere conquistar su tercer cetro de manera consecutiva, pues enfrente tendrá un rival de mucha jerarquía.
España, o la mejor selección del mundo como la calificó el delantero brasileño y reciente contratación del Barcelona, Neymar, buscará hacerse de ese título que anhela desde su llegada a esta justa y conseguir otro «Maracanazo», como lo hiciera Uruguay en 1950.
Sin embargo, el conjunto que dirige Vicente del Bosque deberá superar el cansancio que le significó su partido de semifinal contra Italia, en el que tuvieron que definir al finalista por la vía de los penaltis luego de empatar sin goles tras 120 minutos de partido.
Pero la también actual bicampeona de Europa sabrá solventar esa situación, pues cuenta con jugadores de probada calidad que en cualquier momento pueden definir el partido si salen inspirados para desarrollar su futbol elegante y preciso en busca de su objetivo.
«Vamos a plantar cara, hay que crear espectáculo, buena publicidad para el futbol. Brasil ha ganado cinco Mundiales y tres Copas Confederaciones. Jugará en el Maracaná ante su público. Para nosotros es un sueño, el domingo comienza una nueva historia, ya veremos quién se lleva la victoria», dijo Del Bosque.
Del lado brasileño se espera que resurja la magia que no se vio, o se mostró muy poco, en los días pasados, sobre todo de la mano de Neymar, quien con su aporte futbolístico, su creatividad y su chispa colaboró para poner a Brasil en la final.
«Ansiaba una final contra España, y no creo que sea el único. Tenemos la oportunidad de medirnos a la mejor selección del mundo, la vigente campeona mundial; sentimos una mezcla de respeto y de admiración por este equipo, pero tenemos que imponernos y jugar nuestro futbol», sentenció Neymar.
Todo está listo para que se dispute esta final de ensueño que hicieron posible tanto brasileños como españoles, un encuentro sublime en un escenario espléndido para su desarrollo, en donde cada equipo impondrá su estilo en busca de la gloria.
El árbitro designado para dirigir esta final histórica en el futbol mundial será el holandés Bjorn Kuipers, de quien se espera una buena actuación para que lleve a buen puerto un partido de este calibre y no influya en el marcador.