Ciudad de México, 6 de abril (SinEmbargo).- El hambre empezó a minar el rostro de Rocío Guerra Peimbert, las ojeras se le marcaron y la ropa le queda más holgada, el motivo: un ayuno que emprendió desde hace 11 días en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) para demandar que se solucione la situación mercantil de Mexicana de Aviación.
La ex trabajadora de la aerolínea vive ahora en una casa de campaña tendida en el área de mostradores de la compañía. Toma suero, café, néctares y leche para aguantar la huelga, que asegura, continuará hasta ver que se realice un foro entre las autoridades y los inversionistas deseosos de rescatar a la empresa.
Rocío tiene 47 años, soltera, sin hijos, de complexión robusta y ocupa el tercer lugar en la lista de los ex trabajadores que han realizado ayunos para protestar por la suerte de Mexicana y exigir sus derechos laborales.
“Mi organismo tiene mucha reserva. Yo no estoy buscando aquí una firma, una fecha un papel, quiero ver un foro. Hasta entonces nos quedaremos”, dice.
La mujer salió de la aerolínea durante la segunda “oleada”, cuenta, después de 25 años trabajo dentro del área administrativa.
Se integró a la compañía cuando tenía 22 años como oficinista y se enfocó a subir en el escalafón.
Llegó a ocuparse de los inventarios y de la Mesa de Facturación Internacional, así como a trabajar en el área de finanzas en Los Ángeles, California.
“Fui la encargada del último filtro del trabajo de mis compañeros. Llegué a determinar si se pagaba o no una factura independientemente del monto”, dice.
Pero cuando la empresa entró a concurso mercantil, los despedidos masivos iniciaron y Rocío pasó a las filas de los 8,500 desempleados de Mexicana.
A los ocho meses de perder su empleo, la mujer perdió el departamento de renta donde vivía y se quedó en la calle.
“Primero me empezaron a quitar luz, luego agua y después me cambiaron las chapas, ya no pude entrar al departamento. Entonces me quedaba en los restaurantes de 24 horas”, narra.
Entonces el Sindicato de Trabajadores de Tierra de la aerolínea le dio alojamiento en una de sus propiedades.
“No es que el sindicato tenga muchas propiedades, pero me habilitó un espacio donde vivo, bueno, donde vivía porque ahora vivo aquí”, dice.
Antier se sumó a la huelga de hambre el ex trabajador Rafael Márquez, quien asegura que estará al lado de Rocío el tiempo necesario.
EL CONFLICTO
Mexicana de Aviación cumplió dos años y siete meses desde su último vuelo y adeuda sueldos a los trabajadores que despidió cuando sus finanzas empezaron a ir mal.
La administración de Gastón Azcárraga dejó a la empresa con una deuda de 16 millones de pesos.
A principios de 2010 la compañía empezó a mostrar signos de debilidad económica y en julio de ese año los sobrecargos y pilotos anunciaron que la empresa decidió cambiar sus contratos colectivos o ponerla en venta a un peso.
Durante la primera semana de agosto Mexicana de Aviación disminuyó vuelos, canceló rutas y despidió a 8,000 trabajadores, para entrar en Concurso Mercantil donde Tenedora K compró el 95% de las acciones de la compañía por mil pesos mexicanos.
La empresa se fijó un periodo de ocho días para informar la posibilidad de rescatar a la aerolínea, pero no logró cubrir el monto de la deuda y el 28 de agosto de 2010 a las 12:00 horas Mexicana de Aviación dejó de operar.
Desde ese momento a la fecha varios grupos de inversionistas han mostrado interés en adquirir a la compañía: PC Capital, TG Group, BMC Financial y American Airlines.
En 2011 el empresario Iván Barona se presentó como el comprador potencial y se comprometió a pagar 400 millones de dólares, monto que alcanzaría para cubrir la deuda de la aerolínea.
En ese momento las expectativas por el rescate de Mexicana de Aviación resurgieron y Barona aseguró que la aerolínea volvería a volar en diciembre.
Sin embargo esta transacción fracasó, pero la empresa siguió siendo atractiva para los inversionistas.
El 10 de enero de este año se lanzó una convocatoria abierta a inversionistas nacionales y extranjeros y actualmente existen alrededor de 32 inversionistas interesados en la aerolínea, entre ellos el Grupo Fides Gestión Financiera.
El Instituto Federal de Especialistas de Concursos Mercantiles (Ifecom) solicita en su convocatoria la acreditación de 100 millones de dólares para ser inversionista.
Actualmente realiza investigaciones a los interesados, pero los trabajadores de la aerolínea consideran que es necesario que el gobierno sea el intermediario para que los inversionistas compartan en un foro y se vea la posibilidad de rescatar cuanto antes a la empresa.
MORENA CON MEXICANA
Ayer, Martí Batres, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) se sumó al llamado de los trabajadores de la aerolínea y encabezó junto con ellos una conferencia de prensa en el AICM.
Batres demandó al gobierno de Enrique Peña Nieto a intervenir para que la compañía se recupere y aquellos que se quedaron sin empleo, lo recuperen.
Ayer, Martí Batres, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) se sumó al llamado de los trabajadores de la aerolínea y encabezó junto con ellos una conferencia de prensa en el AICM.
Batres demandó al gobierno de Enrique Peña Nieto a intervenir para que la compañía se recupere y aquellos que se quedaron sin empleo, lo recuperen.
