Por un margen de apenas 21 votos, el viernes pasado el Sindicato Nacional de Mineros, que encabeza Napoleón Gómez Urrutia, obtuvo la titularidad del Contrato Colectivo de Trabajo de la Sección 201 de San Martín Sombrerete, Zacatecas, mina que está cuya concesión corresponde a Industria Minera México, filial del gigante minero de Germán Larrea Mota Velasco, Grupo México. Según el recuento de votos, el Sindicato Minero obtuvo 225 sufragios, mientras que el sindicato de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos obtuvo 204 votos a favor, “a pesar del aparatoso despliegue de amenazas, violencia, trampas y compra de votos” que emprendió Grupo México.
A través de un comunicado, la organización que encabeza Gómez Urrutia aclaro que la huelga en la mina zacatecana sigue en pie: “Si el membrete de sindicato de la CROC hubiera ganado el recuento de votos del viernes 16 de noviembre, habría tenido la opción de desistirse de la huelga y después la empresa despedir a los mineros que la realizan. Así que el resultado de este recuento mantiene en pie, más firme que nunca, la heroica huelga de la Sección 201, de 5 años y 3 meses de duración”.
El conflicto entre el líder minero y Germán Larrea es bastante añejo y le ha costado a Grupo México varios millones de dólares. En el año 2000, Gómez Urrutia llevó a los tribunales a la empresa minera para exigir el pago de una indemnización por la privatización de la mina de Cananea por 55 millones de dólares. En julio del 2007, a pesar de varios intentos de empresarios y del gobierno, Gómez Urrutia encabezó la huelga en Cananea, el paro minero más prolongado en la historia del país. El Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana encabeza también la huelga en la que desde 2007 participa la sección 17, donde los trabajadores siguen exigiendo a la empresa de Larrea el cumplimiento del contrato colectivo de trabajo.
Las cosas entre Larrea y Grupo Aeroportuario del Pacífico tampoco van bien. La empresa que dirige Fernando Bosque Mohíno insiste en acusar a Grupo México de impedir el reparto de dividendos, ya que, según la empresa aeroportuaria, el gigante minero buscaría apropiarse de los fondos excedentes una vez que obtenga el control de la empresa. Además, GAP asegura que Larrea sigue comprando acciones mediante el Grupo Bursátil Mexicano, de Diego González de Castilla, para aumentar su participación de casi 30 por ciento.
Y por fin se confirmaron los rumores de la posible inversión de Carlos Slim Helú en el futbol español. Desde el viernes pasado, medios españoles dieron a conocer la compra del 35 por ciento de las acciones del club de futbol Real Oviedo, cifra que representa una inversión de dos millones de euros. Así, a través de Inmobiliaria Carso, el hombre más rico del mundo se convertirá en el mayor accionista del club de Segunda División B del futbol español. Esta compra es la tercera inversión conocida del dueño de América Móvil desde septiembre, mes en que anunció la adquisición del 30 por ciento en los clubes mexicanos León y Pachuca.
Sin embargo, no todas las noticias de la semana fueron buenas para Slim. Según un reporte para inversionistas de Alexandre García, analista de Acciones y Valores Banamex, Casa de Bolsa, el gigante de las telecomunicaciones enfrentará nuevos riesgos regulatorios en México en temas de interconexión, por lo que sus ingresos se verán presionados en 2013. Por esa razón, el banco bajó su recomendación de «Comprar» a «Neutro», además de reducir su precio objetivo de 19.40 a 16.10 pesos por título de la firma de Carlos Slim.
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