Las declaraciones de familiares de los mineros señalan que días antes de la tragedia varios alertaron que uno de los pozos tenía agua. Los trabajadores cumplieron dos días atrapados, por lo que continúan las labores de rescate.
Por Paloma Gatica
Coahuila, 5 de agosto (Vanguardia).– Los mineros atrapados en Sabinas, Coahuila, ya habían comentado que había agua en la mina en los días previos al accidente, revelaron familiares.
Las familias de los 10 mineros que permanecen en el pozo de carbón aseguran que el pasado lunes se regresó a parte de los trabajadores que se encontraban en el Pozo 1 debido a que tenía agua, pero que los trabajos continuaron a pesar de ello.
“Desde entonces ellos sabían que había agua, pero no se tomaron las precauciones necesarias, solo regresaron a algunos y después se vino todo este accidente”, señaló el primo de uno de los mineros.
“Nosotros no trabajamos aquí, pero venimos a apoyar a los compañeros. A nosotros nos pararon estos días para poder venir a ayudar mientras revisan que no haya también situaciones de riesgo que se vaya a filtrar el agua”, señalan.
De acuerdo con las autoridades estatales, la mina “El Pinabete” habría iniciado operaciones a principios de este 2022 y no se tiene registro de denuncias o quejas por irregularidades en este predio.
SOBREVIVIENTES AYUDARÁN A BUZOS
Fernando Pompa, quien logró salir por su propio pie de la mina “El Pinabete” , sería uno de los cinco mineros que lograron salir al momento del siniestro y quien podría guiar al equipo para bajar y ubicar a sus compañeros que permanecen atrapados.
El minero, que cuenta con cerca de 20 años de trabajo en los pozos de carbón, se sumó la mañana de este viernes a los trabajos de rescate que coordina la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y Protección Civil.
Fernando Pompa Maldonado, padre de Fernando, señaló en entrevista con Vanguardia que su hijo podría ser quien, junto a otro de sus compañeros, descienda en compañía de un grupo de buzos y expertos en rescates al interior de la mina, pues conocen a detalle su estructura y operación para mostrarles el lugar.
Respecto al segundo minero, trascendió entre los familiares de los trabajadores, que sería Aureliano Torres Ramírez, el segundo en descender a la mina que por poco los atrapa, esto a petición de las autoridades federales.
No obstante el padre de Fernando se muestró renuente a que su hijo descienda pues asegura que corrió con suerte la primera vez, pero también sostiene que son sus compañeros y no puede abandonarlos.
Sin embargo, subraya que no le parece justa la situación en la que se encuentra su hijo y al menos uno más de sus compañeros (que tenía dos días de haber comenzado a trabajar en la mina), pues hace poco descubrió que no estaba dado de alta ante el IMSS para su atención médica.
«Nosotros como familia no estamos de acuerdo, porque está muy golpeado y tuvo suerte una vez, pero ya le señalamos que la decisión es suya. Además así como el que no tenía seguro hasta hace un mes, hay otros allá abajo que apenas tenían dos días trabajando en la mina y obviamente no tenían seguro», señala el señor Pompa Maldonado.
Detalla que su hijo se percató que no contaba con servicio médico apenas el mes pasado, luego de cinco trabajando en la mina y pensando que sí tenía, porque acudió a una consulta por una infección en la garganta y al no aparecer en el sistema como derechohabiente reclamó a sus patrones y le otorgaron esta prestación.
«Allí abajo hay un chavo que apenas había entrado, no estaba dado de alta y apenas ese día el encargado estuvo buscando para darlo de alta. Si el IMSS aceptó eso, es corrupción, porque aquí así se maneja todo. Lo único que yo le digo a mi hijo es que no firme nada y que le arreglen su situación, porque en su papel de incapacidad solo dice que tenía un mes cotizando ¿y los otros cinco dónde están?», cuestiona.